Mitos y Verdades Sobre El Consumo De Ajo

A lo largo de los siglos se ha creído, que el ajo posee más cualidades de las que realmente tiene. Afortunadamente la ciencia ha logrado profundizar sobre los verdaderos beneficios de este apreciado alimento con propiedades medicinales.

De este tema, que en ocasiones resulta controversial, voy a hablar a solicitud de Karen, una seguidora de Maryland. Ella es una mujer de mediana edad fanática de la medicina natural y una defensora a ultranza de remedios alternativos.

Ella recuerda, que su abuela era aficionada al empleo de muchas hierbas para tratar diversas afecciones. Para Karen esto fue una huella imborrable que ella quiso preservar.

Ella se comunicó conmigo para comentarme, que mi fórmula de extracto de ajo envejecido ODORLESS GARLIC le ha funcionado muy bien. Para ella esta formulación única significó un cambio sustancial frente a sus frecuentes eventos de rinitis alérgica.

No obstante, ella me mencionó que una amiga le había comentado que el ajo crudo podría favorecer la acción de medicamentos para la hipertensión.

Por ello, a fin de entregarle mayor cantidad de puntos educativos, elaboré para ella un informe contentivo de las generalidades acerca del ajo. Le incluí además, las propiedades y beneficios que han sido estudiadas. Y por supuesto, mencioné también sobre las creencias acerca de él que no han sido comprobadas.

Al considerar la gran cantidad de creencias erróneas que existen acerca del ajo, estimé importante compartir esta información en mi página.

Generalidades acerca del ajo

Según los historiadores y naturalistas, el ajo se ha utilizado a lo largo de muchos siglos como medicina. Su nombre botánico es Allium sativum, perteneciente a la familia Aliácea al igual que la cebolla y puerro.

Desde siempre se han formado diversas historias y leyendas en torno al uso del mismo. Existen registros, que fechan el empleo del ajo con fines medicinales desde el 1550 a.C. De hecho, existen dibujos del ajo encontrados en tumbas egipcias, que datan de unos 3.700 años antes de Cristo.

Su empleo era frecuente en funerales y ceremonias para coadyuvar en la momificación de los cuerpos. De hecho era utilizado como un valioso recurso de intercambio, es decir presentaba un valor comercial.

Según los registros, durante la época del imperio romano los soldados masticaban ajo antes de ir al combate. Incluso se sabe, que los esclavos lo empleaban a fin de protegerse de las mordeduras de serpientes. A su vez, los pescadores africanos se untan el cuerpo con extracto de ajo para protegerse de los cocodrilos.

Es importante señalar, que en la antigüedad, en muchos países europeos se creía que el ajo podía alejar a los vampiros. Además,  existían esas creencias que poseía propiedades mágicas capaces de alejar los malos espíritus.

Vale destacar, que los griegos utilizaban comúnmente el ajo para combatir el envejecimiento y ciertas enfermedades. Igualmente, los atletas griegos masticaban ajo en las olimpiadas a fin de mejorar su resistencia y desempeño.

De acuerdo a los registros, el ajo se empleó de forma generalizada como un antiséptico durante la Primera Guerra Mundial. Su empleo ayudó a prevenir la gangrena de muchos combatientes.

Compuestos bioactivos presentes en el ajo

Actualmente el ajo figura dentro de las veinte hortalizas más relevantes a nivel mundial. Sus usos son muy amplios y puede ser empleado de forma cruda en diversas gastronomías.

El ajo se considera una de las veinte hortalizas más importantes con diversos usos a nivel mundial. Bien, utilizada como verdura cruda con fines gastronómicos o como parte de la medicina tradicional y moderna.

Las propiedades del ajo se deben a la presencia de ciertos compuestos presentes en mayor proporción a nivel del bulbo. De hecho, los niveles de estos compuestos dependen en gran medida de las prácticas y condiciones del cultivo. Incluso, juegan un papel importante sobre la calidad final la práctica de fertilización y propiedades del suelo.

Esto factores inciden sobre la proporción de compuestos minerales, contenido de proteína, materia seca y sólidos solubles totales.

De hecho, muchos de los beneficios del ajo están relacionados con la cantidad de compuestos bioactivos presentes. Se sabe, que los mismos difieren entre una variedad y otra, así como entre las zonas geográficas donde se cultiva.

El ajo fresco posee un 63% de agua, 28% de carbohidratos, 2% de compuestos organosulfurados, 2% de proteínas, 1,2% de aminoácidos libres (especialmente arginina) y 1,5% de fibra (especialmente fructanos).

En el ajo se han llegado a determinar unos diecisiete aminoácidos. Dentro de los compuestos destacados del ajo se encuentran ciertos polisacáridos con diversos efectos farmacológicos, principalmente hepaprotectores y antioxidantes.

Uno de ellos es la inulina, un polisacárido de elevado peso molecular caracterizado por su baja toxicidad. Éste representa entre el 26 y 30% del peso fresco del ajo.

Propiedades del ajo

De acuerdo a los estudios realizados hasta ahora se ha descubierto, que el ajo y sus derivados presentan diversas propiedades beneficiosas para la salud. Generalmente, los compuestos bioactivos están presentes en el ajo intacto. Sin embargo, cuando se corta o tritura se produce un mayor número de compuestos.

Entre ellos destacan ditiinas, ajoeno, alicina, disulfuro de dialilo y sulfuro de dialilo. Dichos compuestos le confieren propiedades antioxidantes, antimicrobianas e inmunomoduladoras.

Asimismo, también estimulan la actividad hipolipemiante, antiaterogénica (disminución del riesgo de aterosclerosis), antitrombótica, hipotensora, antifúngica, anticarcinogénica y antitumorogénica.

La alicina es un compuesto muy inestable por lo que tiende a transformarse en otras sustancias químicas. Además de ello, su concentración está muy relacionada con el tipo de procesamiento.

Diversos estudios han logrado establecer, que cuando el ajo añejo se administra oralmente sus compuestos se absorben de forma inmediata en el tracto gastrointestinal. Igualmente, la semivida de dichos compuestos (tiempo que tarda en perder la mitad de su efectividad) supera las diez horas.

Se ha estimado, que el aclaramiento renal es superior a treinta horas. Por lo que para los investigadores, estos compuestos son seguros y eficaces para el cuerpo humano.

Beneficios comprobados del ajo

Gracias a sus diversos compuestos bioactivos, el ajo puede mejorar la salud del corazón y el cerebro. Además de ello, es capaz de potenciar la inmunidad y estabilizar los niveles de glucosa sanguínea.

Dentro de los efectos positivos que han sido estudiados destacan:

Mejora el desempeño del sistema inmunológico

Un estudio publicado el 2020 en Antioxidants mostró, que la ingesta de cinco gramos de ajo crudo triturado durante diez días puede activar ciertos genes. Los mismos están asociados al metabolismo de los xenobióticos. Es decir, compuestos químicos extraños al organismo (fármacos, aditivos alimentarios, contaminantes ambientales).

A su vez, diversos estudios realizados empleando el ajo añejo han determinado, que posee excelentes cualidades antioxidantes. Esto permite tratar diversas enfermedades autoinmunes y aliviar diversas infecciones, dado su comprobado poder bactericida.

Asimismo, se ha observado que el ajo añejo incide sobre el equilibrio de las bacterias benéficas intestinales. Como se sabe, esto potencia el sistema inmunológico.

Diversos estudios han permitido establecer, que el ajo añejo coadyuva también en la prevención de enfermedades crónicas. Además de ello, sus efectos antioxidantes logran mejorar el desempeño del sistema inmunitario.

Se ha observado, que esto es posible gracias a la reducción de los procesos inflamatorios y prevención el daño oxidativo. Muchos de estos efectos se logran al eliminar los radicales libres, favoreciendo incluso el combate de ciertos tipos de cáncer.

Algunos estudios han establecido, que la ingesta de suplementos de ajo reducen el número de resfriados en un 63%. Ello se debe entre otras cosas, a ciertas vitaminas y minerales presentes en el ajo. Entre ellas, las vitaminas del complejo B y vitamina C, así como del selenio, potasio y manganeso.

Cabe destacar, que se han atribuido ciertos efectos antibióticos a la alicina. De hecho, se han realizado estudios de laboratorio, que demuestran su efectividad contra diversas bacterias patogénicas.

Entre ellas destacan Candida albicans, Escherichia coli, Salmonella, Shigella dysenterica, Staphylococcus aureus, Vibrio cholerae y ciertas especies de Trichomonas.

Optimiza la salud cardiovascular

De acuerdo a los estudios se ha observado, que el ajo exhibe elevadas propiedades antioxidantes. Ello se debe primordialmente a la presencia de diversos compuestos nutricionales y fenólicos.

Vale destacar, que ciertos estudios han permitido establecer que el extracto de ajo añejo disminuye las especies reactivas del oxígeno. Ellas son producidas por efecto del incremento del metabolismo o la inflamación crónica.

Esto permite prevenir la disfunción endotelial, considerado por los expertos como un marcador temprano de la aterosclerosis.

Cabe destacar que, muchos investigadores creen que la alicina posee fuertes efectos positivos sobre el equilibrio de la tensión arterial. Incluso puede incrementar la producción de óxido nítrico, favoreciendo la desobstrucción arterial y la reducción de procesos hipertensivos.

De acuerdo a un estudio múltiple de doce investigaciones donde participaron 553 pacientes hipertensos se determinó, que el ajo puede reducir la tensión arterial.

Los resultados mostraron, que los niveles alcanzados eran similares al efecto de los medicamentos antihipertensivos empleados comúnmente. De hecho, se cuantificó una reducción potencial de entre el 16 y 40% de personas propensas a problemas cardiovasculares.

De igual forma ciertas investigaciones han logrado demostrar, que el consumo de ajo añejo puede coadyuvar en la reducción de los niveles de apolipoproteína B. Este compuesto es la principal proteína que conforma el LDL o colesterol malo. Si el LDL se mantiene en bajas proporciones, se minimiza el riesgo cardíaco.

Previene la diabetes

Muchos ensayos clínicos han logrado establecer, que el ajo contribuye a equilibrar los niveles de glucosa en la sangre. Ello puede potencialmente disminuir los efectos, que puedan ser inducidos por ciertas complicaciones diabéticas.

Incluso, algunos ensayos de laboratorio lograron demostrar que el ajo puede reducir las complicaciones asociadas a la ateroesclerosis.

Estudios actuales han demostrado, que la exposición prolongada a la hiperglucemia en personas diabéticas es un factor relevante en la patogenia de la aterosclerosis.

Un metaanálisis de nueve estudios con 768 pacientes diabéticos demostró los beneficios de la ingesta de suplementos de ajo. Los participantes consumieron dosis diarias de alicina en cantidades desde 0,05 g a 1,5 g.

Mediante este estudio ampliado se observó una reducción significativa de las concentraciones de glucosa sanguínea en ayunas. Este efecto quedó demostrado en breve tiempo (una a dos semanas). Las respuestas positivas incluyeron además de las reducciones de glucosa, la disminución de las concentraciones de colesterol y triglicéridos.

De hecho, en ensayos realizados en pacientes con diabetes tipo2 se observaron incrementos de los niveles de colesterol bueno (HDL) y reducciones del colesterol malo (LDL).

Incluso se cree, que puede coadyuvar a disminuir los niveles de homocisteína. De esta forma se reduce de forma indirecta la presencia de enfermedades cardiovasculares.

Mejora el desempeño cerebral

Una publicación aparecida el 2020 en Experimental and Therapeutic Medicine mostró hallazgos interesantes con respecto al ajo. Según los investigadores, los componentes bioactivos del ajo logran incrementar la resiliencia cerebral frente a la neuroinflamación y la neurodegeneración.

Los diversos compuestos presentes en el extracto de ajo añejo (AGE) han sido bien estudiados. Como se mencionó anteriormente, la SAC es soluble en agua y se encuentra en altas proporciones en el AGE.

Según diversos estudios se ha demostrado, que dichos compuestos del extracto de ajo de añejo (AGE) presentan efectos neuroprotectores contra la neuroinflamación y la neurodegeneración.

De acuerdo a este estudio se logró determinar que el extracto de ajo presenta efectos neuroprotectores. De acuerdo a los investigadores responsables, posee la capacidad de minimizar las respuestas neuroinflamatorias.

Se observó también, que esto es realizado mediante vías que estimulan la resistencia microglial frente a la neuroinflamación y neurodegeneración.

Para los científicos responsables de este estudio, estos resultados permiten profundizar sobre los efectos neuroprotectores de los componentes del ajo. En especial, sobre el fomento de la resistencia cerebral para una adecuada salud.

Beneficios del ajo no demostrados hasta la fecha (categorizados como mitos)

Algunas creencias y rumores acerca del ajo han hecho, que algunas personas no se tomen en serio todos sus beneficios. Dentro de los que se mencionan con mayor frecuencia, que pueden ser considerados como mitos, destacan:

• Puede erradicar el cáncer: si bien se han logrado comprobar los efectos del ajo añejo en procesos de quimioterapia, esto no es indicativo de que el consumo de ajo sea anticancerígeno
• Complementa el efecto de los antihipertensivos: de acuerdo a estudios fiables no se ha logrado comprobar hasta ahora, que el ajo proporcione una ventaja terapéutica en cuanto a la reducción del riesgo de mortalidad y morbilidad cardiovascular en personas hipertensas. De hecho está contraindicado en personas que ingieren medicamentos antihipertensivos porque puede ocasionar interacciones peligrosas
• El ajo puede proteger contra el catarro y el resfriado común: de acuerdo a los estudios efectuados hasta ahora sobre el resfriado común, las pruebas no son concluyentes.
• El ajo puede favorecer el tratamiento de la diabetes: de acuerdo a los estudios el ajo posee la capacidad de disminuir los niveles sanguíneos. Por ello, incluir ajo o suplementos de ajo en personas que están tratadas para la diabetes podría disminuir abruptamente los niveles de glucosa, causando una hipoglucemia.

ODORLESS GARLIC (extracto de ajo añejado)

Cómo parte de mi contribución a transformar vidas a través de la salud, he formulado mi ODORLESS GARLIC, el cual es un extracto de ajo sin olor,  con compuestos naturales de azufre, aminoácidos y oligoelementos, que ha sido envejecido naturalmente durante 18 meses, manteniendo todo su valor nutricional y terapéutico.

Mi ODORLESS GARLIC tiene un efecto  antibacteriano que ayuda al organismo a protegerlo de infecciones, así como efecto cardioprotector, antimicrobiano,  debido a sus actividades antiinflamatorias, antioxidantes. Su acción poderosa se debe a la Alicina, es una potente sustancia con una óptima acción defensora del organismo.

 Concluyendo

De acuerdo a lo presentado se pudo apreciar, que el ajo posee muchos efectos benéficos sobre diversos sistemas corporales. Sin embargo, no posee todas las virtudes que desde hace miles de años se le han pretendido atribuir. Entre ellas sus efectos sobrenaturales contra espíritus y vampiros.

Aparte de estos mitos, la ciencia afortunadamente ha logrado separar la ficción de la realidad. Eso simplemente se logra al emplear el tradicional método científico, logrando mostrar objetivamente los beneficios del ajo.

Por ello podría decirse, que el ajo no erradica el cáncer, ni complementa la acción de los antihipertensivos. Además de ello, tampoco coadyuva en el tratamiento de la quimioterapia, ni favorece el tratamiento de  los resfriados. Y por supuesto no complementa el tratamiento de diabetes, sino que es un preventivo.

En cambio si se ha logrado comprobar el efecto del ajo sobre el desempeño del sistema inmunulógico, la salud cardiovascular, prevención de la diabetes (no complementando el tratamiento). Así como sus sus efectos sobre la optimización del desempeño cerebral.

Para Karen la información recibida, la cual comparto en el post, significó una gran ayuda. De hecho logró comprobar la importancia de no hacerse eco de cualquier información que se reciba.  En especial de aquella que no posea una adecuada base científica que la sustente.

Cuando se comunicó conmigo estaba muy contenta. Ella me dijo, que emplea ajo en sus comidas con mucha frecuencia. Asimismo, pudo observar con mayor detenimiento la importancia terapéutica de emplear el ajo añejo (ODORLESS GARLIC).

“El ajo (Allium sativum) ha adquirido un lugar bien ganado, debido a sus múltiples propiedades. No solo las propiedades como medicina o tratamiento farmacéutico, sino además como factor biológico activo. Si ya el ajo crudo, ha sido utilizado por centurias con buenos resultados, agradezcamos esta maravilla potenciada, llamada ajo añejo”

Dra. Cocó March, NMD

Salud natural y nutrición familiar

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