Estudios adelantados hasta la fecha han demostrado, que la principal causa subyacente de la congestión nasal es la inflamación. Ello suele manifestarse como congestión venosa, incremento de las secreciones nasales y edema de los tejidos.
En última instancia, todo ello provoca una alteración del flujo de aire y obstrucción nasal. Afortunadamente, existen algunas propuestas naturales que permiten combatir este problema, evitando así los efectos desagradables de algunos fármacos.
De este tema, que preocupa a muchas personas, hablaré a solicitud de Elaine, una seguidora de Nevada. Ella trabaja en una empresa distribuidora de alimentos desde hace unos años. Ella me comentaba, que muchas veces existen algunos cambios de temperatura en algunas áreas de almacenamiento que tienden a afectarla.
Me decía, que generalmente esto le afectaba principalmente las vías respiratorias. Elaine lograba solventar la congestión nasal empleando ciertos medicamentos pero le causaban somnolencia, y en ocasiones episodios de ansiedad. Esto por supuesto, era una situación muy preocupante para ella, dado la naturaleza de su trabajo.
Por ello, decidió solicitarme algunas alternativas naturales para combatir la congestión nasal. A fin de honrar la solicitud de Elaine, preparé para ella un dossier con algunos remedios naturales. Le destaque sus propiedades y beneficios y la forma de utilizarlos.
Los procesos de congestión nasal usualmente son tratados con fármacos convencionales. Así, a fin de mostrar alternativas que permitan su tratamiento sin efectos adversos, decidí compartir esta información en mi página.
Causas más frecuentes de la congestión nasal
La congestión nasal hace referencia a una dificultad para respirar, que en numerosas ocasiones puede ocasionar síntomas molestos a quienes la padecen. En muchos casos es ocasionada por la inflamación de la mucosa nasal, a causa de procesos alérgicos o víricos.
Cuando los virus invaden las fosas nasales ocasionan procesos de dilatación de los vasos sanguíneos. Además de ello, la tumefacción (inflamación) que la acompaña origina procesos de congestión. Se ha observado, que este síntoma se intensifica cuando ocurre la presencia de abundante mucosidad.
Dentro de las causas potenciales de la congestión nasal destacan:
Rinitis no alérgica o vasomotora
La rinitis no alérgica presenta ciertos síntomas, como estornudos crónicos o nariz congestionada y goteante, sin causa aparente. Sus síntomas son similares a los de la fiebre del heno (rinitis alérgica), pero sin mostrar las evidencias habituales de una reacción alérgica.
Según los expertos, la rinitis no alérgica afecta a niños y adultos. Sin embargo, se presenta con más frecuencia a partir de los veinte años. Se ha observado, que existen diversos factores que favorecen el desencadenamiento de los síntomas de la rinitis no alérgica.
Dentro de ellos destacan ciertos olores o irritantes (humo de tabaco y de vehículos) presentes en el aire, y el empleo de ciertos medicamentos. Influyen también los cambios climáticos (humedad y temperatura, entre otros), consumo de ciertos alimentos y condiciones de salud crónicas.
Rinitis alérgica
Esta patología es ocasionada por reacciones alérgicas a ciertos factores. Por lo general, sus síntomas son similares a los de un resfriado. Dentro de ellos podemos mencionar:
- Escozor a nivel de la nariz
- Picor, enrojecimiento y lagrimeo de los ojos
- Estornudos frecuentes
- Picor en el paladar
- Accesos de tos
- Goteo u obstrucción nasal.
Según los especialistas, estas reacciones ocurren a los pocos minutos de exponerse al agente al que se es alérgico. Dentro de los desencadenantes más comunes de alergias destacan el polen de diversas plantas, hongos y sustancias químicas empleadas en fábricas, incluyendo látex, polvo de madera o de harina.
Se incluyen además, los ácaros del polvo y epitelios de animales (también denominada caspa). La caspa está formada por células de la piel del animal con secreciones de glándulas, pudiendo flotar en el aire. Su inhalación ocasiona reacciones alérgicas en ciertas personas.
Por lo general, las probabilidades de padecer alergias son mayores si existen personas en la familia que también las sufren.
Rinosinusitis
Esta patología se refiere a una inflamación sintomática de los senos paranasales y la cavidad nasal. Dentro de la sintomatología que se presenta destaca:
- Inflamación de las fosas nasales y senos paranasales
- Pólipos nasales y/o secreción mucopurulenta
- Obstrucción y congestión nasal
- Secreción nasal o rinorrea
- Sensación de presión facial
- Pérdida parcial (hiposmia) o total (anosmia) del olfato.
Otras causas de congestión nasal
- Ingesta de alcohol
- Síndrome de Churg-Strauss (afecta los pequeños vasos sanguíneos del sistema respiratorio)
- Resfriado común
- Empleo excesivo de atomizadores nasales
- Presencia de tabique nasal desviado
- Cuerpos extraños en las fosas nasales
- Crecimiento excesivo de las adenoides (tejido linfático ubicado en las vías respiratorias altas entre la nariz y la parte posterior de la garganta)
- Ingesta de alimentos muy picantes
- Modificaciones hormonales
- Empleo de ciertos medicamentos (antihipertensivos, anticonvulsivos, antidepresivos y para la disfunción eréctil)
- Apnea del sueño
- Asma ocupacional (obstrucción reversible de las vías respiratorias ocasionada por la exposición laboral a ciertos gases, vapores, humo y polvos orgánicos e inorgánicos
- Embarazo
- Estrés
- Trastornos tiroideos.
Terapias farmacológicas empleadas para tratar la congestión nasal
De acuerdo a los especialistas, el tratamiento de la congestión nasal es básicamente sintomático. Por medio de él, se busca mejorar la permeabilidad de las fosas nasales. Usualmente para ello se utilizan algunos medicamentos con efecto vasoconstrictores, administrados por vía tópica o sistémica.
Se ha observado, que los descongestionantes nasales tópicos realizan su efecto mediante ciertos receptores. Los mismos se encuentran en las fibras lisas de la pared vascular, ocasionando así la vasoconstricción.
Este efecto logra reducir el flujo sanguíneo, lo cual ocasiona una rápida reducción del volumen de la mucosa. Dicha reducción facilita la circulación del aire a través de las fosas nasales, favoreciendo además su drenaje.
Según estudios realizados, el empleo de descongestionantes sistémicos se asocia con la presencia de ciertos efectos secundarios. Entre ellos resaltan agitación, palpitaciones, insomnio y nerviosismo.
Es también importante respetar la posología y dosificación, porque al emplearlos por mayor tiempo del aconsejado, puede ocasionar diversos inconvenientes. Entre ellos, el «efecto rebote», ocasionando un incremento de la congestión de la mucosa nasal.
Por esta razón, deben emplearse con precaución y bajo supervisión médica. En especial quienes padecen hipertiroidismo, afecciones cardíacas, hipertensión, diabetes y glaucoma. De acuerdo a los expertos, las personas con congestión crónica caben considerar el empleo de ciertas alternativas naturales descongestionantes a los fines de evitar estos riesgos.
Remedios caseros para descongestionar la nariz
El empleo de remedios caseros cobra cada día más importancia, no solo en países en vía de desarrollo sino también en los desarrollados. De hecho, podemos destacar un estudio realizado el 2014 y publicado en BMC Family Practice. En este estudio se observó, que un 42% de los participantes mencionaron que empleaban con regularidad los remedios caseros.
De hecho, esta práctica en un alto porcentaje era producto de ciertas tradiciones familiares utilizadas para tratar afecciones respiratorias, entre ellas la congestión ocasionada por el resfriado. De hecho, los remedios caseros que consideran la nutrición fueron los más citados.
Incluso, la gran mayoría de los participantes prefería comenzar empleando remedios caseros para aliviar dolencias comunes. Generalmente lo hacen para evitar el empleo de medicamentos. Argumentando también, sus buenas experiencias al utilizar remedios caseros, incluyendo el alivio de los síntomas.
Lavado nasal
De acuerdo a los expertos, los lavados de agua salada ayudan a mantener las fosas nasales abiertas. Esto se logra mediante la limpieza y eliminación de la mucosidad que se encuentra taponando la fosa nasal.
Incluso, de acuerdo a los especialistas, el lavado ayuda a mejorar el funcionamiento de los cilios que ayudan a destapar los senos paranasales. Como debéis recordar, los senos paranasales son espacios situados entre los huesos de la cabeza, comunicados con la cavidad nasal.
Los senos paranasales producen mucosidad que drena hacia la nariz, así logran mantenerla húmeda y limpia (de polvo y microbios). Esto lo realizan mediante unas estructuras denominadas cilios. Para que esto ocurra los senos paranasales deben estar sanos, y así el aire circule libremente entre ellos.
No obstante, el drenaje puede detenerse o bloquearse si ocurre una inflamación o espesamiento de la mucosidad. Cuando esto sucede, pueden ocurrir procesos infecciosos a otros senos paranasales.
De acuerdo a diversos estudios se ha observado, que un lavado con solución salina ayuda a desbloquear el moco atrapado.
¿Cómo realizarlo?
- Verter una taza de agua destilada en un recipiente mediano que se encuentre bien limpio (en caso de utilizar agua filtrada del grifo se debe hervir primero para esterilizarla y dejar que se enfríe)
- Agregar media cucharadita de sal no yodada y media cucharadita de bicarbonato de sodio al agua
- Mezclar muy bien hasta lograr disolver las sales
- Esta solución puede ser utilizada empleando una jeringa plástica nueva, un recipiente blando con rociador o un neti pot o rinocornio
- Inclínarse hacia adelante sobre el lavabo en un ángulo aproximado de 45°
- Inclinar la cabeza hacia un lado (nunca hacia atrás), procurando que una de las fosas nasales apunte directamente al lavabo
- Colocar la boquilla del neti pot o la punta de la jeringa o el recipiente exprimible dentro de la nariz (no debe introducirse más allá del equivalente al ancho de un dedo)
- Mantener la boca abierta (respira solo por la boca y no por la nariz) y apretar la jeringa o el recipiente exprimible o inclinar el neti pot en la fosa nasal
- Verter la solución salina en la fosa nasal que está en la parte superior, y dejar que escurra por las fosas nasales. Se puede escurrir un poco también por la boca, procurar escupirla y no tragarla.
- Soplar suavemente la nariz para despejar la solución restante
- Repetir este procedimiento con la otra fosa nasal
- Al finalizar limpiar muy bien los utensilios, dejarlos secar al aire y guardarlos en un sitio que esté limpio y seco
- Desechar la solución restante.
Nota
En caso de sentir que la solución quema o pica en la boca, disminuir la cantidad de sal a emplear en el próximo lavado. Es importante que la solución a emplear esté tibia y no caliente. No se recomienda realizar el lavado más de una vez al día.
De acuerdo a las observaciones, este procedimiento realizado tres veces a la semana en personas con sinusitis, ayuda a mantener las vías despejadas, mejorando sustancialmente la calidad de vida. Es importante, no realizar este procedimiento en personas con una fosa nasal totalmente obstruida o que presente infección de oído.
Inhalación de vapor
De acuerdo a los expertos, la inhalación de vapor es uno de los remedios naturales más frecuentemente empleado. Se ha observado, que el uso de este procedimiento logra calmar la inflamación y despeja las fosas nasales. Es denominada también, terapia de vapor y logra aliviar los síntomas de resfriado o de infecciones de los senos paranasales.
Se ha establecido, que el aire caliente y húmedo que fluye del agua caliente logra aflojar la mucosidad. Asimismo, desinflama los vasos sanguíneos presentes en la mucosa de las fosas nasales.
Se debe resaltar, que la inhalación de vapor per se no es capaz de curar una infección viral respiratoria. Sin embargo, podría ser un factor importante para lograr mejoría mientras se combate la gripe o el resfriado.
La inhalación de vapor, además de favorecer la descongestión de las vías respiratorias, favorece el combate de otros procesos. Entre ellos destacan:
- Ronquera
- Garganta reseca
- Mucosidad espesa
- Tos persistente
¿Cómo realizarlo?
- En caso de no tener un vaporizador eléctrico, se puede emplear un recipiente con agua filtrada recién hervida
- Colocar la cara cercana al recipiente con una toalla sobre tu cabeza, cerrar los ojos y respirar normalmente por la nariz y boca, mientras el vapor penetra en ello
- Realizar este procedimiento al menos unos diez minutos
- Para evitar que se enfríe vuelve a rellenar con agua caliente para mantener la presencia de vapor.
Nota
Esta técnica realmente es excelente por sus resultados en el corto plazo. De hecho no es usual, que produzca incomodidad y puede ser incluso empleada por los niños. Eso sí, es importante supervisarlos durante el procedimiento para evitar que derramen el agua caliente y sufran quemaduras.
Aceites esenciales
Diversos estudios han determinado, que ciertos aceites esenciales empleados como aromaterapia funcionan adecuadamente para el alivio de la congestión de los senos paranasales y desbloqueo de la nariz tapada.
Hasta ahora, de acuerdo a los estudios, los aceites esenciales que han mostrado los mayores beneficios son el de eucalipto y menta.
De acuerdo a las investigaciones, estos aceites esenciales poseen la capacidad de aliviar el dolor, promover la desinflamación y eliminar las bacterias. Todos estos factores podrían favorecer el alivio de los efectos negativos ocasionados por la congestión.
Mediante la inhalación de aceite de menta (bien añadiendo unas gotas al agua de vaporización o a un difusor) podría lograrse la apertura de las vías respiratorias, y ayudar a eliminar el exceso de mucosidad. Este efecto se debe a la presencia de mentol, un alcohol secundario saturado presente en el aceite esencial de menta.
También es posible aliviar la congestión empleando aceite esencial de eucalipto. Se ha empleado de forma muy eficiente en el alivio de la sinusitis y congestión.
De hecho, algunos productos descongestionantes comerciales muy conocidos contienen aceite de eucalipto. Un compuesto denominado 1,8 cineol (eucaliptol) presente en este aceite, mejora diversos síntomas de la rinosinusitis (dolor de cabeza, secreción y obstrucción nasal)
Este aceite contiene además terpenos y sesquiterpenos. Una forma sencilla e emplear el aceite de eucalipto es colocando tres gotas en medo litro de agua hirviendo. El procedimiento es igual al empleado con el vapor de agua. Sin embargo, se recomienda realizarlo por 5 minutos, manteniendo las restricciones antes mencionadas.
Concluyendo
Los virus y alergias producen en muchas ocasiones procesos de congestión nasal. Este efecto negativo genera una serie de problemas, que alteran el normal desenvolvimiento de las actividades cotidianas. Muchas personas acuden a muchos medicamentos, que en su gran mayoría acarrean diversos efectos negativos.
Afortunadamente existen una serie de alternativas, que han sido empleadas desde antaño con excelentes resultados. Mediante ellas se logra reactivar el funcionamiento de los cilios paranasales, evitando la acumulación de mucosidad y la consecuente obstrucción nasal.
El uso de estas alternativas evita el peligroso daño ocasionado por los fármacos descongestionantes, entre ellos el efecto rebote. Dentro de las alternativas mostradas destacan el empleo de lavados nasales, vapor y aromaterapia utilizando ciertos aceites esenciales.
Para Elaine la información recibida, que comparto con vosotros en el post, fue realmente alentadora. Ella me dijo, que logró estabilizar su respiración en muy poco tiempo. Y realmente quedó fascinada con el empleo del aceite esencial de eucalipto acompañando el vapor.
“El cineol es un óxido terpenoide presente en los aceites de eucalipto, entre otros. Se ha demostrado que el eucalipto tiene propiedades antiinflamatorias, antisépticas y descongestionantes y se utiliza tradicionalmente para tratar el asma, la congestión nasal, el goteo nasal, la tos, el dolor de garganta y la sinusitis”
Dr. Desiderio Passali, PhD
Universidad de Siena, Italia
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