Posiblemente, en ocasiones, algunas personas hayan sido testigos de la presencia de moho negro en determinados lugares de las casas. Sobre todo, en aquellos donde es frecuente encontrar condiciones de humedad. Para los expertos, muchas de esas personas no manejan los hongos, con un adecuado criterio.
De allí la importancia de conocer acerca de los peligros que conlleva la presencia de este hongo en el entorno y las formas de combatirlo.
De este tema, que afecta a muchos hogares, voy a hablar a solicitud de Katie, una seguidora de Indiana. Ella es una madre de familia, que vive en una casa heredada de sus abuelos paternos. Para ella y su familia, esta casa representa un mundo de recuerdos para ella, sus padres y sus hijos.
No obstante, en algunos lugares suele haber un olor característico, y en ocasiones se presentan manchas negruzcas en algunas paredes.
Ella y su esposo, por lo general optan por pintar sobre la mancha hasta que ella desaparece. Sin embargo, en muchos momentos, sus hijos presentan síntomas similares al resfriado. Y es por esta razón que ella decide hacer contacto conmigo.
Su principal inquietud consistía en determinar si había alguna probabilidad de que, aunque ellos habían eliminado aparentemente el moho, este pudiera afectar las vías respiratorias.
El moho es peligroso en función de los niveles de tolerancia de las personas. Por ello, lo ideal no es maquillar las manchas ocasionadas por el moho negro, sino eliminar su presencia.
Probablemente no todas las personas consideren que es importante cuidarse de los hongos. Por ello consideré necesario dar a conocer información acerca de el moho negro, así como los síntomas que ocasiona su presencia, De igual manera, sus efectos sobre la salud y algunas estrategias para mantenerlo alejado,.
Generalidades acerca del moho negro
Para los expertos, el moho negro es clasificado como un tipo de hongo que presenta tonalidades negras o verde oscuro. Existen diferentes tipos de moho con coloraciones negruzcas; sin embargo, el moho negro común se denomina técnicamente Stachybotrys chartarum.
Por lo general, este tipo de hongo crece y se reproduce en materiales con elevados contenidos de celulosa. Entre ellos destacan productos elaborados con papel, madera o paneles de yeso. Vale destacar, que la celulosa es un carbohidrato complejo (polisacárido) presente en las plantas, incluyendo sus tallos, raíces, hojas y frutos.
De hecho, forma parte de la pared celular, precisamente por ello, es que este hongo es tan versátil en la naturaleza. Por lo general, el moho negro requiere temperaturas cálidas, además de humedad para crecer y extenderse.
Es muy común encontrarlo en zonas húmedas o deterioradas por el agua. Por ello es frecuente en ciertas áreas como ventanas, duchas y sótanos.
Según los expertos, las micotoxinas y otros compuestos biológicamente activos generados por S. chartarum ocasionan diversos problemas sobre la salud. Dentro de las principales micotoxinas producidas por este hongo destaca una familia denominada tricotecenos.
Vale destacar, que la ciencia denomina a la intoxicación por micotoxinas producidas por este hongo como estaquibotriotoxicosis.
Los estudios realizados hasta la fecha indican que estas toxinas son producidas en todas las estructuras que lo conforman. Los estudios amplios sobre esta micotoxina no se han realizado por los inconvenientes que presenta su obtención, identificación y purificación.
Estudios recientes han logrado adelantar algunas metodologías analíticas que coadyuvarán a profundizar acerca de la actividad biológica de dichas micotoxinas. Hasta donde se sabe, los tricotecenos son altamente tóxicos.
No obstante, algunos estudios muestran que dichos compuestos poseen una elevada capacidad para inhibir la síntesis de proteínas. Esto se ha corroborado empleando mamíferos de laboratorio y células humanas.
Síntomas más frecuentes ocasionados por la presencia de moho negro
Estos son algunos síntomas que origina la presencia del moho negro en las casas:
Congestión nasal Dificultad para respirar
Dolor de cabeza Dolor de pecho
Fatiga Fiebre
Náuseas y vómitos Ojos llorosos
Sarpullido Tos
Según los especialistas, cuando se inhalan esporas de moho negro se produce una reacción alérgica, en quienes poseen alergia al moho. Ello implica que, el cuerpo responde al primer contacto con las esporas de moho negro, generando inmunoglobulina E (IgE).
De hecho, la histamina es lo que ocasiona los síntomas inmediatos de la alergia. Efectivamente los síntomas se desarrollan velozmente, por lo general ocurre en pocos segundos o minutos. Incluso, las otras sustancias pueden ocasionar una inflamación continua.
Otros efectos negativos ocasionados por el moho negro incluyen síntomas congestivos, tos, irritación ocular, estornudos, goteo posnasal y piel seca.
Incluso, el funcionamiento inadecuado del sistema inmunológico, ocasiona que el moho negro produzca micosis pulmonar y de otros tipos. En raras ocasiones puede ocasionar la muerte, sin embargo, este hongo empeora los síntomas del asma.
La alergia al moho negro no puede curarse, pero mediante un adecuado diagnóstico y tratamiento, se pueden minimizar sus síntomas. Cabe destacar, que el moho negro puede afectar a cualquiera, incluyendo a las que no padecen alergia al moho. Pero los síntomas suelen agudizarse en ciertas personas, como:
- Las que presentan antecedentes familiares personales o biológicos de alergias
- Las que frecuentan muy seguidos lugares con presencia de moho negro (bien sea en su trabajo o en casa por efectos de mala ventilación y humedad elevada)
- Las que poseen afecciones respiratorias, como asma o enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
- Las que padecen de inmunodeficiencia o poseen el sistema inmunitario debilitado.
¿Cómo ingresa el moho negro en la casa?
De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental (EPA), el moho necesita humedad y alimento para crecer en el interior de las casas. De hecho, se ha verificado que la humedad constituye el factor de mayor relevancia para su crecimiento.
Por esta razón, cuando se controla la humedad presente en el interior, se está combatiendo el crecimiento del moho.
El moho solo requiere pequeñas cantidades de agua para reproducirse. Entre los sitios donde se encuentra con frecuencia destacan los azulejos del baño, el sótano, las ventanas y las fuentes de agua con fugas. Se incluyen además las goteras del tejado, las ventanas, las zonas de condensación en zonas frías, los sistemas de aspersión y los humidificadores.
Según la Universidad Estatal de Dakota del Norte, las esporas del moho negro se encuentran en el suelo. Luego, se introducen junto con las aguas de inundación o el polvo y la suciedad. Incluso, los materiales empleados en el momento de construir pueden contener partículas de polvo o suciedad con esporas.
Asimismo, el moho que se encuentra en el aire exterior se adhiere a la ropa, los zapatos y las mascotas. Así logra ingresar en los ambientes interiores.
De acuerdo con los expertos, es necesario que existan condiciones de humedad para iniciar y mantener el crecimiento del moho. Se reproduce también en las placas de techo de celulosa, las alfombras de fibras naturales y los paneles de madera.
Este hongo puede pasar desapercibido en el techo, las paredes o los pisos. Incluso sus esporas (equivalentes a las semillas de las plantas). Pueden contaminar el interior de la casa a través de ranuras y artefactos de aire acondicionado o calefacción defectuosos.
Algunas recomendaciones que deben seguirse para deshacerse del moho
Dado que el moho negro puede ocasionar algunos problemas sobre la salud es importante deshacerse de el de forma rápida y segura. Sin embargo, para realizarlo adecuadamente, es necesario tomar ciertas precauciones y emplear diversos instrumentos de protección.
A saber, guantes para proteger las manos, gafas sin orificios para proteger tus ojos, ropa desechable para no contaminar tu cuerpo y una mascarilla N-95 para proteger las vías respiratorias. Una vez protegido, se deberá realizar lo siguiente:
- Identificar la fuente de humedad y reparar cualquier fuga o daño causado por el agua que pueda estar ocasionando el crecimiento del moho
- Aislar la zona con moho del resto de la casa sellando puertas, ventanas y rejillas de ventilación con láminas de plástico y cinta adhesiva
- Utilizar un filtro de aire HEPA o un ventilador para ventilar la zona con moho y evitar que las esporas se propaguen a otras habitaciones. El término filtro de aire HEPA proviene del inglés “High Efficiency Particle Arresting”. En español, equivaldría a “recogedor de partículas de alta eficiencia”
- Se puede emplear un limpiador natural o químico para exterminar el moho. Algunas alternativas naturales son el vinagre, aceite de árbol de té, peróxido de hidrógeno, bicarbonato de sodio y el bórax. Dentro de las opciones químicas se emplean con frecuencia la lejía, amoniaco y ciertos productos comerciales que actúan eliminando el moho
- Seguir las instrucciones que aparecen en la etiqueta y aplicar el producto sobre la superficie mohosa empleando un pulverizador, esponja o paño
- Frotar la superficie llena de moho con un cepillo de cerdas duras o un estropajo hasta que el moho desaparezca
- Enjuagar con agua limpia y seca muy bien empleando una toalla o un ventilador.
Consideraciones
- Es importante deshacerse apropiadamente de los materiales afectados por el moho. Por ejemplo, alfombras, paneles de yeso, aislantes o muebles, los cuales deben depositarse en bolsas de plástico selladas. Es recomendable, desechar también los utensilios de limpieza que hayan estado en contacto con el moho.
- Asimismo, el proceso de limpieza debe repetirse las veces que sea necesario, a fin de eliminar por completo el rastro del moho.
- Es relevante recalcar, que los objetos que no se sequen rápidamente y muestran signos de daños por moho o por agua, deben también ser desechados.
- No se deben pintar ni enmasillar superficies mohosas, porque el moho ocasiona que la pintura se descascarille. Por ello, es muy importante secar adecuadamente las superficies antes de pintar.
- Si el moho afectó un objeto costoso o un recuerdo de familia, es preferible consultar con un especialista.
- Si se decide emplear lejía para deshacerte del moho, se debe tomar en cuenta lo siguiente:
- No mezclar bajo ninguna circunstancia lejía con algún otro limpiador doméstico, sobre todo si éste contiene amoniaco. De acuerdo a los expertos, cuando se mezcla el amoniaco con la lejía, se genera un gas venenoso denominado cloramina.
- Este gas, cuando entra en contacto con las mucosas, se descompone y produce ácido clorhídrico, una sustancia tóxica y altamente corrosiva.
- Se recomienda leer muy bien las instrucciones del fabricante de la lejía o de cualquier otro producto de limpieza.
Es importante mantener la humedad bajo control
Según los expertos, un adecuado control de la humedad, impide el crecimiento del moho en la casa. Vale destacar, que existen ciertas estrategias que evitarán que el moho afecte a la persona y a la familia. Dentro de ellas se puede mencionar:
- Mantener la humedad en la casa en bajos niveles.
- De acuerdo a la EPA, los niveles de humedad en el hogar no deberían exceder el 60%. Este consejo es muy importante, porque el moho doméstico, acarrea ciertos procesos alérgicos y puede afectar no solo a las personas sino también a las mascotas.
- El moho negro produce esporas y ciertos compuestos orgánicos volátiles microbianos (COVm). Ellos se dispersan en el aire, creando un desagradable olor a “moho” o humedad.
- En quienes presentan alergias, estos compuestos pueden exacerbar los síntomas de alergia. Por lo general, dichos síntomas se producen cuando su sistema inmunitario es hipersensible a estas esporas. Esto ocasiona, que el sistema inmunitario produzca ciertas sustancias que provocan inflamación a nivel de la nariz, ojos y pulmones.
- Se ha observado incluso, que aunque alguien no sea alérgico, los COVm pueden inducir procesos irritativos.
- Según los expertos, si el sistema inmunológico no se encuentra funcionando inadecuadamente, bien por efectos de trastornos o a causa de ciertos medicamentos, la exposición al moho negro podría ocasionar una micosis. Este efecto negativo podría afectar además de las vías respiratorias, otras partes del cuerpo.
¿Cómo evitar el moho negro en la casa?
Según los expertos, la mejor forma de evitar el moho negro es mediante la prevención de la humedad. Dentro de las medidas sugeridas por los expertos destacan:
- Mantener la casa seca: es importante evitar que la humedad se acumule. Por ejemplo, ventilar las habitaciones húmedas y limpiar adecuadamente las paredes y puertas de las duchas luego de utilizarlas
- Evitar que la ropa mojada permanezca mucho tiempo en la lavadora, a fin de evitar el crecimiento del moho
- Las cortinas o puertas de la ducha, deben lavarse con regularidad al igual que los azulejos del baño, empleando productos antimoho
- Procurar mantener pocas plantas dentro de la casa, especialmente dentro del dormitorio. El moho crece muy fácilmente en la tierra de jardín utilizada en las macetas
- Las fugas y filtraciones que se encuentran dentro o fuera de la casa, deben ser reparadas
- Es importante utilizar extractores de aire en la cocina y en los baños
- Se debe prestar atención a la presencia de condensación de agua en las ventanas. Cuando ello ocurra, se deben apagar los humidificadores
- Emplear deshumidificadores y acondicionadores de aire en sótanos y otros lugares de la casa donde el moho crece frecuentemente. Este efecto es más marcado en climas cálidos con condiciones de mayor humedad relativa
- Limpiar los deshumidificadores y humidificadores por lo menos una vez a la semana
- En los pisos de hormigón deben retirarse las moquetas y emplear alfombras sueltas que permitan su limpieza y secado. Incluso, algunos expertos sugieren emplear barreras de vapor de polietileno sobre el hormigón. De hecho, en lugares donde la humedad del subsuelo está muy cercana al sótano, se sugiere emplear barreras de vapor debajo del hormigón.
Concluyendo
Según lo planteado, existen algunos microorganismos que, aunque no sean catalogados de extremadamente peligrosos, es mejor mantenerlos a raya. Un ejemplo de ello es el moho negro, que habita en la naturaleza, donde se multiplica aprovechando ciertas condiciones.
Básicamente, requiere elevados niveles de humedad y de ciertos sustratos como la celulosa para alimentarse. Sin embargo, cuando las condiciones de humedad y de “alimento” dentro de las casas son las adecuadas, ellos se tornan riesgosos.
Es decir, cuando dichas condiciones de humedad son superiores al 60% y encuentran sustratos con alto contenido de celulosa. Entre ellos destacan madera, papel, cartón y sus derivados.
Lamentablemente, la proliferación de este hongo en nuestro hogar o en los lugares de trabajo ocasiona ciertas reacciones alérgicas.
Se incluyen además síntomas congestivos, tos, irritación ocular, estornudos, goteo posnasal y piel seca. De hecho, según los CDC, las esporas del moho negro pueden ocasionar síntomas semejantes a los del resfriado o la gripe.
Afortunadamente, este hongo puede combatirse empleando productos naturales o químicos y sobre todo combatiendo los focos de humedad en nuestro hogar.
Por esta razón, es que normalmente este moho se multiplica alrededor de las zonas dañadas por el agua, afectadas por problemas de fontanería como inundaciones o fugas en las tuberías.
De hecho, cuando ocurran daños en materiales derivados de celulosa, incluyendo maderas, alfombras y papel, deberán desecharse apropiadamente.
Para Katie la información recibida, la cual comparto en el post, fue de gran utilidad. De hecho, me comentó que su esposo tomó muchas ideas y revisó exhaustivamente cada rincón de la casa. Ello le permitió proceder de una forma más adecuada al descubrir algunas fugas de agua a nivel del sótano y el tejado del ático.
Después de algunas semanas de realizadas las correcciones, sus hijos mejoraron sustancialmente y ya no presentaban procesos alérgicos.
“Uno de los 10 hongos más peligrosos del mundo (moho negro) debe su notoriedad a los metabolitos secundarios que libera en el entorno del hospedador. La interacción de estos metabolitos con las mucosas del tracto respiratorio o digestivo y con la piel puede inducir cambios necróticos e incluso hemorragias pulmonares o gastrointestinales potencialmente mortales.”
Dr. Mariusz Dyląg
Universidad de Breslavia, Polonia
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