☑️ La Vitamina D Disminuye La Cantidad De Muertes Por Cáncer

Los niveles de vitamina D, exhiben algunas diferencias a nivel de las personas. Se ha observado que existe una correlación entre la latitud (distancia desde un punto de la tierra al ecuador) y los niveles de vitamina D. De esta forma quienes viven en la zona noreste de los Estados Unidos, poseen mayores deficiencias. Además de ello, las personas con mayor pigmentación en la piel, también presentan menores niveles de esta vitamina.

Por lo general, la vitamina D, se ha asociado con el metabolismo del calcio a nivel del sistema óseo. Sin embargo, los últimos años, se han hecho algunas investigaciones clave que han mostrado otros atributos interesantes acerca de ella. Entre ellos, ciertos efectos protectores sobre el padecimiento de algunos tipos de cáncer.

Este tema se aborda debido a la solicitud de Emma, una seguidora de Kentucky. Ella a finales de otoño del 2020, al palpar rutinariamente sus senos, sintió algo fuera de lo común. Sin perder tiempo, fue donde su médico de confianza quien le recomendó realizar una actualización mamográfica. Esta prueba arrojó que Emma, presentaba un fibroadenoma a nivel del seno izquierdo.

Ella inicialmente se angustió muchísimo y se calmó cuando el especialista le informó que se trataba de un tumor benigno. De hecho el médico tratante le informó que es bastante común en mujeres jóvenes. Emma, se considera una persona muy precavida. Por ello, se comunicó conmigo para solicitar asesoría acerca de alguna alternativa natural para la prevención de tumores.

Tomé en cuenta diversas investigaciones interesantes realizadas acerca de la vitamina D. Con ello elaboré para Emma, cierta información relevante. En ella se plantearon generalidades acerca de la vitamina D y su importancia en la prevención del cáncer. Al considerar, que esta información puede ilustrar acerca de cambios de vida importantes, decidí compartirlo en mi página.

Algunas generalidades acerca de la vitamina D

En otras ocasiones se ha mencionado, siendo importante recordar que la vitamina D, es conocida como la “vitamina del sol”. Esta vitamina es realmente una hormona, la cual se obtiene a través del consumo alimenticio y por su producción a nivel de la piel. Esto se logra, mediante un proceso entre la radiación ultravioleta B (UVB) y el 7-dehidrocolesterol.

Este compuesto es una enzima presente en la piel, que se convierte en vitamina D3. Tanto la vitamina D procedente de la piel y la de la dieta se metabolizan a nivel del hígado. Allí se transforma en 25-hidroxivitamina D o calcidiol. La vitamina D procedente de la dieta se denomina vitamina D2 o ergocalciferol.

Se ha observado que ambos tipos de vitaminas, tanto la D2 como la D3, logran aumentar los niveles de calcidiol. Para poder actuar a nivel de nuestro organismo, el calcidiol, es transformado en calcitriol, la forma biológicamente activa de la vitamina D. Se ha logrado demostrar, que la forma D3 es 1,7 veces más eficiente que la D2 para convertirse en forma activa.

Como se mencionó en otras ocasiones la forma D2, se obtiene de fuentes vegetales. Entre ellas, destacan los champiñones Morel y Chanterelle.

A su vez, las fuentes dietéticas de vitamina D3, son de origen animal. Dentro de ellas resaltan: el salmón, arenque, sardinas, el atún enlatado, la leche y los huevos.

Cabe destacar que, con el apoyo de mi equipo científico, desarrollé en mi laboratorio la formula ORGANIC MOLECULAR VITAMINA D. Este compuesto natural, aporta los requerimientos diarios de vitamina D3(colecalciferol).

Importancia de la vitamina D

Según organismos con competencia, ocurre una deficiencia de vitamina D cuando los niveles de calcidiol son menores a 30 nanogramos/mililitro. Dentro de estos organismos destacan: La Sociedad Endocrina, Fundación Nacional e Internacional de Osteoporosis y Sociedad Americana de Geriatría.

A fin de mantener niveles adecuados de vitamina D a nivel sanguíneo, la Sociedad Endocrina, realiza ciertas recomendaciones. Entre ellas, una ingesta de 400 a 1.000 Unidades Internacionales (UI) diarias para los bebés (menos de un año). De 600 a 1.000 UI para niños y adolescentes y 1.500 a 2.000 UI para adultos.

Se ha observado que una deficiencia de vitamina D, durante la infancia provoca raquitismo. Esto impide que los niños alcancen su masa ósea máxima, además de la estatura determinada de forma genética. A su vez, valores insuficientes de esta vitamina en los adultos, ocasiona osteomalacia. Es decir, la mineralización inadecuada de la matriz de colágeno del hueso.

Este inadecuado soporte incrementa el riesgo de fractura. Además, origina una presión sobre el periostio, propiciando dolores a nivel de huesos y músculos. Esta es una membrana que recubre todo el hueso, excepto en las zonas articuladas. Durante el desarrollo, genera el crecimiento en grosor de los huesos y cuando hay fracturas, ayuda a formar el callo óseo.

A nivel mundial existe deficiencia (nivel menor a 30 ng/mL) y también insuficiencia de vitamina D (nivel entre 20 y 30 ng/mL). Las poblaciones más propensas a sufrir deficiencias de vitamina D son los afroamericanos, hispanos, niños, mujeres embarazadas y adultos obesos. En Estados Unidos, 50% de los niños entre 1 y 5 años y el 70% de 6 a 11 años tienen carencia de vitamina D.

Relación entre la vitamina D y las tumoraciones

Uno de los roles más estudiados de la vitamina D, es el mantenimiento de la concentración de calcio sanguíneo. Es decir, garantizar un rango adecuado de calcio para la adecuada salud el sistema musculoesquelético. Cabe destacar que la ciencia ha logrado establecer que, quienes poseen niveles más altos de vitamina D, presentan mayores niveles de células T.

Estas células corresponden con cierto tipo de glóbulos blancos y presentan una gran importancia para el sistema inmunológico. Hasta donde se sabe, ellas pueden mantener bajo control, una gran diversidad de patógenos e incluso células tumorales.

Según los investigadores, el sistema inmunológico puede actuar de forma independiente en la lucha contra las células tumorales. Ello favorece la ubicación y eliminación de tumoraciones malignas o cáncer. De hecho, se ha observado mediante ciertas pruebas clínicas, que la vitamina D puede inducir la muerte de células cancerígenas. De esta forma impide que ellas sigan reproduciéndose.

Algunos estudios han permitido corroborar hechos interesantes

A finales de noviembre de 2020, se presentaron los resultados de un interesante ensayo clínico, realizado en los Estados Unidos. En el mismo participaron hombres de 50 años o más y mujeres de 55 años o más. Ninguno de ellos tenía cáncer al inicio del estudio. Ellos tomaron a diario vitamina D3 (colecalciferol), 2.000 UI al día y ácidos grasos marinos omega-3, un gramo al día

Los datos de los ensayos aleatorizados, sugirieron un mayor beneficio de la vitamina D sobre la mortalidad y la supervivencia del cáncer que sobre la incidencia del mismo. Esto indica que la vitamina D, puede tener un desempeño muy importante en la reducción de ciertos tipos de cáncer más avanzados o mortales. Esta interrogante no se había abordado con antelación en ensayos aleatorizados.

Los datos se analizaron a partir del 1 de noviembre de 2011 hasta el 31 de diciembre de 2017. De acuerdo a los investigadores el tamaño de la muestra del ensayo tenía una potencia superior al 85%. Esto permitió detectar de forma significativa el cáncer y las enfermedades cardiovasculares.

Mediante este análisis secundario, de un ensayo clínico aleatorizado con 25.871 pacientes, se observaron resultados interesantes. De esta forma se pudo demostrar, que la administración de suplementos de vitamina D3 produce una disminución de cáncer avanzado. Sin embargo, este efecto se manifiesta con fuerza solo en individuos que no presentan obesidad.

Para los investigadores este resultado indica que, la vitamina D3 puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer avanzado en adultos. Siempre y cuando las personas no posean un diagnóstico de cáncer previo. Además de ello, este efecto protector fue muy evidente en pacientes con índices de masa corporal normal. Se observaron, reducciones de riesgo de cáncer metastásico y muerte en un 38%.

Otras pruebas sugieren que la vitamina D disminuye la mortalidad por cáncer

Estudios de laboratorio, han permitido corroborar que la vitamina D, inhibe la carcinogénesis y desacelera la progresión tumoral. Ello implica que la vitamina D, juega un papel destacado impulsando la diferenciación celular.

Además de ello, logra frenar el desarrollo de las células cancerosas y potenciar los efectos antiangiogénicos, antiinflamatorios, inmunomoduladores y proapoptóticos. Visto de forma general, la vitamina D posee la capacidad de disminuir la invasión de las células tumorales. También logra disminuir en gran medida los procesos que tienden a generar metástasis, reduciendo de esta forma la mortalidad.

De acuerdo a un estudio efectuado el año 2019, se detectó una reducción del 16% de mortalidad en cáncer. Este estudio, se basó en el análisis de 52 ensayos de carácter aleatorio, con el empleo de la vitamina D. El total de participantes, totalizó unas 75 mil personas.

Muchos estudios han encontrado una relación protectora sobre el padecimiento de cáncer, cuando el nivel de vitamina D corporal es suficiente. Se ha sugerido que, el empleo de suplementos de vitamina D podrían reducir la incidencia y la mortalidad por cáncer. Esto permitiría manejar esta patología a costos menores, y de bajos a ningún efecto secundario sobre la salud.

Cabe destacar que algunos investigadores, han mencionado que muchos pacientes que presentan diversos tipos de cáncer, coinciden en sus bajos niveles de vitamina D corporal. Este descubrimiento permite establecer que, una ingesta adecuada de vitamina D podría minimizar el riesgo de cáncer. Incluso, ellos achacan la muerte prematura por cáncer a esta deficiencia. Entre ellos destacan el cáncer de colon, próstata, mama y ovarios.

Revisiones de estudios sobre cáncer de ovario, mostraron importantes descubrimientos. El primero fue una mayor mortalidad asociada con una menor cantidad de luz solar regional. Y el segundo, una mayor mortalidad asociada a una baja ingesta de vitamina D.

Concluyendo

La ciencia, ha estudiado a profundidad la naturaleza hormonal de la vitamina D. Es una de las pocas vitaminas de nuestro cuerpo que requiere tantos pasos para hacerse biológicamente activa. Como dijimos, cuando la luz ultravioleta B (UVB) impacta nuestra piel, un compuesto presente en ella se transforma en vitamina D3.

La vitamina D3 también puede provenir de ciertos compuestos de origen animal presentes en nuestra dieta. Además de ello, los alimentos de origen vegetal también aportan ciertas cantidades de vitamina D2. Las formas D3 y D2 viajan al hígado para transformarse en calcidiol y finalmente a nivel renal se transforman en la forma activa denominada calcitriol.

Muchos estudios habían encontrado una alta correlación de la vitamina D con el metabolismo del calcio y el sistema musculoesquelético. Sin embargo, estudios observacionales y experimentales más recientes, han detectado un papel fundamental de la vitamina D sobre el cáncer. Nuevamente la ciencia hace gala de su perseverancia.

Muchos investigadores han estudiado los efectos de la ubicación geográfica y la luz solar sobre la incidencia de cáncer por déficit de vitamina D. Además de ello, se han correlacionado ciertos hallazgos entre la ingesta de vitamina D y la incidencia de cáncer. Ente estos tipos de cáncer destacan cáncer de colon, mama, próstata y ovario. De hecho, quienes padecen estos tipos de cáncer presentan bajos niveles de vitamina D en sangre.

Estilo de vida, necesario para una buena salud

Cuando Emma, mi seguidora, recibió la información se sintió aliviada. Sobre todo, al comprobar que la vitamina D3, puede incorporarse de forma sencilla en la alimentación cotidiana..  Todo esto soportado por un estilo de vida basado en un buen régimen alimenticio con los nutrientes que el organismo requiere. Además la realización de actividades físicas que acompañan ese buen estilo de vida.   Me informó además que ha notado que su fibroadenoma se ha reducido un poco.  Asi mismo, Emma decidió adoptar diversas fuentes de vitamina D en su dieta, incorporando además mi formula orgánica molecular como suplemento.

“Se encontró que el riesgo de cáncer de mama se reduce sustancialmente en las mujeres del grupo de edad menopáusica, cuando poseen niveles óptimos de vitamina D en el cuerpo. ”

Dra. Akshima Sahi

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