Remedios Naturales Para El Dolor Articular

Existen algunas patologías crónicas capaces de ocasionar dolor articular muy intenso. sos. Una de estas enfermedades es la artritis, que según las estadísticas recientes afecta casi al 25% de la población estadounidense.

En la actualidad existen algunas alternativas farmacológicas para su tratamiento. Sin embargo, dado sus elevados costos y efectos secundarios, es preferible emplear alternativas naturales.

De este tema, que afecta a un porcentaje significativo de la población, voy a hablar a solicitud de Clara, una seguidora de Vermont. Para ella, no alcanza el día para realizar todas las tareas del hogar, incluyendo además el cuidado de su nieta. Clara me comentó que, aunque posee estudios universitarios, nunca quiso dejar a sus hijos a cargo de otras personas.

Por esta razón, pasaron los años y ella decidió junto con su esposo convertirse en la administradora de su hogar. Clara me comentó, que esta actividad le produjo muchas satisfacciones a nivel personal y familiar.

Clara me dijo, que debido a todas sus actividades experimentaba siempre mucho apetito y descansaba lo más que podía. Esto con el tiempo, fue provocándole un incremento de peso, que nunca controló y luego sobrevino una osteoartritis.

Ella estuvo empleando fármacos durante un tiempo, para controlar el dolor. Sin embargo, notó que al tomarlos su presión arterial se elevaba.

Por esta razón decidió contactarme, a fin de solicitarme información sobre algunas alternativas naturales para aliviar el dolor. Rápidamente, le hice llegar información acerca de algunas alternativas naturales comprobadas.

Asimismo le sugerí, que desintoxicara su hígado y controlara la obesidad. Incluso le alerté, que el sobrepeso incide sobre la inflamación y dolor en las articulaciones.

Para ello le recomendé realizar cuanto antes, EL RETO YO PUEDO. Dado lo relevante de este tema para la salud, decidí compartirlo en mi página.

Hablando acerca de los dolores en las articulaciones

De acuerdo a los expertos, las molestias a nivel de las articulaciones se presentan con mucha frecuencia. Según las estadísticas, la artrosis es el trastorno que ocurre más comúnmente .  Esos dolores se pueden ubicar en la columna vertebral, espalda, caderas, rodillas, manos y pies.

Vale destacar, que aún no existe absoluta claridad de como el exceso de peso, influye en la osteoartritis. Sin embargo, en ciertas articulaciones como las de la rodilla se ha estimado, que al caminar se ejerce una fuerza de entre tres y seis veces el peso corporal.

Este enorme esfuerzo implicaría un incremento sustancial de la tensión, ocasionando que se produzca una degradación precipitada del cartílago. Vale destacar, que ciertos estudios han permitido establecer que el sobrepeso también está asociado con la una mayor presencia de osteoartritis a nivel de la mano.

Según los investigadores, ello sugiere que existe un factor sistémico circulante implicado en la presencia de esta dolencia. Así, el dolor puede presentarse de forma constante, o bien aparecer y desaparecer. Ocasionalmente, la articulación puede tornarse rígida, doler e irritarse.

De hecho, algunas personas que padecen esta dolencia, mencionan sobre ciertas molestias como sensación de latido, quemazón, pulsación o crujido. Incluso, la articulación, aunque se encuentre rígida por la mañana, a lo largo del día logra “aflojarse”.

Ello permite que la persona pueda experimentar cierta mejoría mediante el movimiento y la actividad. No obstante, ello debe ser muy bien comedido, porque un exceso de actividad puede empeorar el dolor.

Cabe destacar, que el dolor articular podría afectar el desempeño de la articulación, disminuyendo su capacidad para realizar tareas básicas (movimiento y estabilidad).

¿Cuáles son las causas más comunes del dolor articular?

Estas son las cinco causas más comunes de dolor articular y los factores de riesgo:

Osteoartritis

Se considera, que la osteoartritis es una de las causas más frecuentes de dolor a nivel de las articulaciones. Según las estadísticas, cerca del 80% de los adultos mayores de 55 años sufren este tipo de molestias.

Como se mencionó anteriormente, la artrosis afecta una gran cantidad de articulaciones, en especial las de la rodilla, columna vertebral, caderas y dedos.

De acuerdo a los especialistas, existen algunos factores predisponentes al padecimiento de artrosis. Entre ellos destacan, el estilo de vida y factores genéticos. Ello incluye, los esfuerzos repetidos de las articulaciones, trastornos articulares y lesiones deportivas.

Vale destacar, que las mujeres posmenopáusicas presentan alta propensión para desarrollar artrosis, especialmente a nivel de las rodillas. Incluso, las personas obesas, diabéticas o con colesterol alto, también presentan un mayor riesgo.

La artrosis no solo es una artritis por “desgaste”, por ello es importante implementar un estilo de vida saludable. De esta forma, se podría prevenir el desarrollo de este tipo de dolor que afecta las articulaciones.

Dentro de los factores de riesgo modificables, se incluyen una sana alimentación y ejercicio responsable (ello incluye la consulta médica y la planificación del deporte a realizar).

Bursitis

De acuerdo a los especialistas de la Clínica Mayo, la bursitis hace referencia al trastorno doloroso de las bolsas sinoviales. Estas pequeñas estructuras de tejido conectivo, que semejan un saco en miniatura, se encuentran rellenas de líquido.

Su función es la de proporcionar amortiguación a los huesos, tendones y músculos que concurren en una articulación. Cuando estas bolsas de líquido articular o sinovial se inflaman ocasionan el dolor denominado bursitis. Se presenta además, enrojecimiento, hinchazón y rigidez.

Según los expertos, esta dolencia se presenta con mayor frecuencia, a nivel de cadera, codo y hombro. Sin embargo, puede presentarse en la base del dedo gordo del pie, el talón y en la rodilla. Su presencia está muy asociada con la realización de ejercicios repetitivos o esfuerzos que presionan las articulaciones.

Dentro de los factores de riesgo de la bursitis destacan, edad, tipo de profesión (jardineros, albañiles, pintores, instaladores de alfombras y músicos entre otros). Además, ciertas patologías como la gota, diabetes y artritis reumatoide, incrementan el riesgo de padecer bursitis. De hecho, el sobrepeso incrementa el riesgo de sufrir bursitis a nivel de cadera y rodilla.

Gota

Según la ciencia, la gota se considera una forma de artritis inflamatoria muy dolorosa, causada por un exceso de ácido úrico.

Ello provoca la formación de cristales en las articulaciones, especialmente en el dedo gordo del pie. En ciertos momentos, los síntomas empeoran (se denomina brote) y en otros momentos, no se presentan síntomas (se conoce como remisión).

Según los especialistas, cuando los brotes se repiten frecuentemente se puede generar una afección artrítica que tiende a empeorar. Esta es denominada artritis gotosa.

Se sabe, que la gota es ocasionada por una enfermedad denominada hiperuricemia, caracterizada por niveles muy elevados de ácido úrico en nuestro organismo. El cuerpo humano tiende a producir ácido úrico, cuando descompone las purinas (bases nitrogenadas), también a partir de los alimentos ingeridos.

De acuerdo a los estudios, cuando nuestro organismo presenta niveles muy elevados de ácido úrico, sus cristales tienden a acumularse en los líquidos corporales, tejidos y articulaciones. Vale destacar, que la hiperuricemia no siempre ocasiona gota, de hecho, si la hiperuricemia no manifiesta síntomas, no necesita tratarse.

Existen algunos factores que incrementan la factibilidad de padecer hiperuricemia, la causante de la gota. dentro de ellos destacan:

• Ser hombre
• Padecer obesidad
• Presentar ciertas patologías, tales como: insuficiencia cardíaca congestiva, diabetes, disfunción renal, hipertensión, resistencia a la insulina y síndrome metabólico
• Emplear algunos medicamentos como los diuréticos
• Ingerir altos niveles de alcohol
• Ingerir alimentos (sólidos o líquidos) con elevadas concentraciones de fructosa
• Incluir en la dieta alimentos con elevados niveles de purinas. a saber: carnes rojas, vísceras, ciertos mariscos (mejillones y vieiras) y algunos pescados como la sardina, anchoas, trucha y atún.

Tendinitis

Según los especialistas, los tendones son cuerdas resistentes de tejido conectivo fibroso, que unen los músculos con los huesos. Cuando este tejido se lesiona, se produce una inflamación severa denominada tendinitis.

Son bastante recurrentes, las lesiones a nivel de las articulaciones del tobillo y la muñeca. Sin embargo, algunos deportes como el tenis ocasionan un tipo de lesión muy conocida denominada “codo de tenista”. También, se presenta tendinitis a nivel de los hombros, cadera, tendón de Aquiles, base del dedo pulgar y la rodilla.

Artritis reumatoide

De acuerdo a los CDC, la artritis reumatoide es una enfermedad autoinmune e inflamatoria.

Esta enfermedad lesiona principalmente a las articulaciones, incluso puede atacar a más de una a la vez. Suele presentarse frecuentemente a nivel de las rodillas, muñecas y manos, ocasionando una inflamación en el revestimiento de la articulación.

A consecuencia de este daño, se puede producir un dolor crónico, deformidad en las extremidades y pérdida del equilibrio. Se cree, que esta enfermedad es ocasionada por factores genéticos, ambientales, hormonales y desequilibrios del sistema inmune. Es importante señalar, que uno de los principales factores de riesgo de esta enfermedad es el tabaquismo.

Esta enfermedad se caracteriza por afectar las articulaciones de ambos lados del cuerpo. Esta característica de afección simétrica es lo que favorece su diagnóstico, al compararla con otros tipos de artritis.

¿Quiénes presentan mayor propensión de sufrir dolor articular?

Según los expertos, el dolor afecta mayormente a quienes:

• Han presentado lesiones previas a nivel de alguna articulación
• Realizan trabajos repetitivos y/o sobrecargan ciertos músculos
• Presentan artritis u otras enfermedades crónicas
• Padecen depresión, ansiedad y/o estrés
• Poseen sobrepeso
• Tienen problemas de salud subyacentes
• Son adultos mayores.

Propuestas naturales para combatir el dolor en las articulaciones

Boswellia

También conocida como incienso indio o Salai guggul, esta planta milenaria es denominada botánicamente Boswellia serrata. Los extractos de goma-resina de esta planta se han utilizado durante siglos en la medicina Ayurvédica. Desde hace unos años despertó el interés de la ciencia, y esto ha generado interesantes investigaciones.

Se ha empleado principalmente para tratar diversas enfermedades inflamatorias crónicas. El extracto resinoso contiene diversos principios bioactivos. Dentro de ellos podemos resaltar: monoterpenos, diterpenos, triterpenos, ácidos triterpénicos tetracíclicos y cuatro ácidos triterpénicos pentacíclicos.

Asimismo, puede inhibir la síntesis de otros compuestos inflamatorios, tales como los leucotrienos. Estas hormonas se derivan del ácido araquidónico y son producidas por los glóbulos blancos. Incluso, se ha demostrado su efecto reductor sobre diversas citocinas inflamatorias. Se sabe además, que posee potentes efectos analgésicos.

Dentro de los beneficios reportados de Boswellia sobre las articulaciones, destacan:

• Controla la hinchazón
• Disminuye el desgaste articular
• Incrementa la movilidad de quienes padecen artritis u osteoartritis
• Reduce el dolor articular
• Optimiza la circulación sanguínea
• Incrementa la fuerza muscular
• Incide sobre la cicatrización de heridas.

Cúrcuma

Esta planta, cuyo nombre botánico es Curcuma longa pertenece a la familia Zingiberácea, al igual que el jengibre. La mayoría de los principios activos de esta planta se encuentran en el rizoma.

La cúrcuma ha sido ampliamente empleada en países asiáticos desde hace siglos, debido a sus múltiples propiedades. A saber, anticancerígenas antiinflamatorias, antimicrobianas, antioxidantes y antimutagénicas.

El principal compuesto bioactivo presente en el rizoma de esta planta es un polifenol denominado curcumina. De acuerdo a un estudio publicado el 2019, en Biomedcentral, se mostró un hallazgo muy interesante.

Este estudio, comparó la eficacia y seguridad de la curcumina con las del diclofenaco, para tratar la osteoartritis de rodilla (OA). En el mismo, participaron 139 personas que presentaban esta patología. Ellos fueron tratados aleatoriamente durante 28 días consecutivos.

Durante ese tiempo, recibieron una cápsula de 500 mg de curcumina tres veces al día o un comprimido de diclofenaco de 50 mg dos veces al día.

Los participantes fueron evaluados al inicio del estudio, y también a los siete, catorce y veintiocho días. Básicamente se cuantificó la intensidad del dolor mediante la puntuación de la escala analógica visual, los días 14 y 28.

De acuerdo a los resultados se logró verificar que la curcumina posee una eficacia similar a la del diclofenaco. Sin embargo, demostró una mejor tolerancia entre los participantes del estudio.

De acuerdo a los investigadores, la curcumina puede ser una opción de tratamiento alternativa para los pacientes con OA que no toleran los efectos secundarios de los antiinflamatorios no esteroideos. Incluso, se han reportado sus efectos sobre diversos síntomas de artritis, incluyendo la artritis reumatoide.

Estudios anteriores han demostrado, que la cúrcuma es beneficiosa para el tratamiento de patologías inflamatorias, incluyendo enfermedades oculares degenerativas. Además de ello, puede combatir el dolor, enfermedades inflamatorias y el síndrome metabólico.

Ashwagandha

Según los especialistas, los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) son los medicamentos más empleados para tratar el dolor por osteoartritis. Vale destacar, que desde hace tiempo se conoce que estos fármacos ocasionan ciertos efectos adversos gastrointestinales graves. Esta condición negativa limita su empleo en muchos pacientes.

Desde hace tiempo se estudia la utilidad de las plantas medicinales en la osteoartritis. Una de ellas, la Ashwagandha, cuyo nombre botánico es Withania somnifera, ha sido empleada desde hace siglos en la India.

Esta planta forma parte de muchas formulaciones indicadas para el tratamiento de diversas afecciones musculoesqueléticas (entre ellas, reumatismo y artritis). Además de ello, se ha empleado como tónico para mejorar la salud en general.

Según las investigaciones, esta planta posee propiedades inmunomoduladoras, antioxidantes, antitumorales, antiinflamatorias, rejuvenecedoras, antiestrés y hematopoyéticas (generación de células sanguíneas).

La ciencia ha recolectado pruebas acerca de la eficacia de Ashwagandha en diversas afecciones reumatológicas debido a sus propiedades antiinflamatorias. Según un estudio realizado en personas con OA, el tratamiento con esta planta logró disminuir significativamente la gravedad del dolor.

Incluso se observó un decremento de la puntuación de discapacidad. Esta planta, también posee una elevada capacidad analgésica, logrando calmar la respuesta del sistema nervioso al dolor.

El principal componente activo de la cúrcuma, la curcumina, es lo que da a la especia su color amarillo. La curcumina tiene propiedades antiinflamatorias, lo que la convierte en un tratamiento potencial para una serie de afecciones, como la reducción del dolor y el aumento de la facilidad de movimiento en personas con osteoartritis.

Molecular Curcumin  una opción para mejorar el dolor articular 

La fórmula MOLECULAR CURCUMIN ha sido elaborada para mejorar los dolores en las articulaciones, así mismo los dolores causados por la inflamación crónica de bajo grado.

• Promueve la salud de las articulaciones, su movilidad y flexibilidad
• Provee la máxima bio-disponibilidad con una absorción hasta 185 veces mayor que otras marcas.
• Los beneficios de la curcumina (extracto de la raíz de cúrcuma) están directamente vinculados a su capacidad de absorción
• Los curcumonoides son agentes terapéuticos que ayudan a regular los estados diabéticos y lipedemias, jugando un rol esencial en la prevención de la pre-diabetes y diabetes
• Puede contribuir a mejorar la dislipidemias en el organismo
• Tiene un efecto superior a cualquier antiinflamatorio sin los efectos secundarios

Concluyendo

De acuerdo a lo presentado se pudo apreciar, que la artrosis constituye el trastorno más frecuente a nivel articular. Muchas veces, los dolores a nivel de diversas articulaciones como las de la columna vertebral, espalda, caderas, rodillas, manos y pies, afectan la calidad de vida.

Por ello es importante, que el tratamiento considere además de la remisión del dolor, las funciones básicas afectadas. Hoy en día existen diversos fármacos que poseen efecto analgésico que se emplean comúnmente para el alivio del dolor.

No obstante, los estudios han logrado detectar que poseen una serie de efectos adversos a nivel gastrointestinal, cardiovascular, hepático y renal. Además de ello, afectan el sistema nervioso central y estimulan la hipersensibilidad. Este efecto negativo podría generar rubefacción (enrojecimiento), rinitis vasomotora, asma, urticaria, hipotensión y shock.

Afortunadamente existen algunas alternativas naturales de empleo milenario, que han sido bien estudiadas y pueden emplearse para aliviar los dolores. Dentro de ellas señalamos, Boswellia, Cúrcuma y Ashwagandha. Todas ellas, poseen diversas propiedades, entre las que destacan antiinflamatorias, analgésicas, antioxidantes, antitumorales y antiestrés.

Para Clara la información recibida, la cual comparto en el post, fue altamente beneficiosa. De hecho, me comentó que una vez transcurridas las tres semanas del Reto Yo Puedo, comenzó a sentirse más ágil, menos cansada y con menos apetito.

De hecho, desde ese momento comenzó a disminuir el dolor, pero ella decidió combatirlo empleando la mi fórmula especial de MOLECULAR CURCUMIN.

“La curcumina tiene una eficacia similar a la del diclofenaco, pero ha demostrado una mejor tolerancia entre los pacientes con osteoartritis (OA) de rodilla. La curcumina puede ser una opción terapéutica alternativa en los pacientes con OA de rodilla que no toleran los efectos secundarios de los antiinflamatorios no esteroideos”

Dr. Dhaneshwar Shep

Satara, Maharashtra, India

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