El cáncer es una enfermedad de la que todos hemos escuchado alguna vez. Todos hemos tenido a alguien cercano o conocido que lo haya padecido o padezca. Eso lo sabe muy bien Luis Barreto, pues su padre murió de cáncer de estómago. Recientemente a su hermano mayor, Rafael, le diagnosticaron cáncer de pulmón, afortunadamente en la primera etapa.
Esos antecedentes han provocado en Luis cierta obsesión con este tema y hoy, a sus 33 años, cuida más que nunca lo que come y hace ejercicios físicos a diario. Además, al menos dos veces por semana realiza algún tipo de terapia de relajación, pues hay estudios que afirman que el estrés y el mal humor podrían ser elementos determinantes para sufrir la enfermedad.
Como Luis, millones de personas en el mundo tratan de evitar al máximo exponerse a elementos o situaciones que provoquen esta o cualquier otra enfermedad. Siguiendo los consejos de varios compañeros de trabajo, Luis decidió a participar en el Reto #Yo Puedo.
El cáncer: ¿Un mal de nunca acabar?
A pesar que cada día los avances científicos asociados a la medicina dan más opciones de curación, escuchar la palabra cáncer como diagnóstico sigue resultando aterrador. Cuando en términos médicos se habla de cáncer, es para referirse en un término genérico a un amplio grupo de enfermedades que pueden afectar a cualquier parte del organismo.
También se denomina cáncer cuando se habla de tumores malignos o neoplasias malignas. Una característica definitoria de la enfermedad es que algunas de las células del cuerpo empiezan a dividirse sin detenerse y se extienden, invadiendo los tejidos en derredor. Este proceso se llama metástasis, lo que es la principal causa de muerte por cáncer.
En un ser humano sano, las células que lo conforman (el cuerpo está formado por trillones de células) crecen y se dividen, formando nuevas células, a medida que el organismo lo requiera. Es un proceso cíclico en el que las células envejecen, mueren, y son reemplazadas por nuevas. Se trata de un proceso ordenado que, si pierde su estructura, llega a convertirse en cáncer.
La afección se genera al momento en que las células viejas sobreviven cuando deberían morir. Y se siguen formando células nuevas, aunque no son necesarias. Estas células adicionales pueden dividirse y forman masas que se llaman tumores. Estos tumores malignos se pueden extender a los tejidos cercanos o los pueden invadir.
Los tumores suelen crecer. Asimismo, algunas células cancerosas pueden moverse a otros lugares del cuerpo, a través del sistema circulatorio o del sistema linfático y formar nuevos tumores, lejos del tumor original.
El cáncer en cifras
El cáncer afecta a millones de vidas en todo el mundo. Las cifras internacionales estiman que cada día 38.356 personas son diagnosticadas con cáncer y fallecen más de 22.000 a consecuencia de algún tipo de tumor maligno. Sin dudas, son cifras aterradoras.
Las estadísticas son de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Sociedad Estadounidense de Cáncer (American Cancer Society). Según estas organizaciones, el cáncer es una de las enfermedades más frecuentes y la segunda causa de muerte en el mundo.
Aunque hay más de 100 tipos de cáncer, el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, informó que los siete tipos más comunes en el mundo representan 53,7% de los casos diagnosticados cada año. Estos son los siguientes:
- Pulmón
- Mama
- Colorrectal
- Próstata
- Estómago
- Hígado
- Cervicouterino
Ante esta cruda realidad, la prevención es nuestra mejor arma. Por eso hoy quiero contarte sobre 6 causantes de cáncer en tu hogar de los que debes deshacerte cuanto antes.
Causantes de cáncer en tu hogar
Constantemente se están estudiando en la investigación del cáncer los riesgos de la exposición a agentes carcinógenos.
Como Luis, muchas personas buscan reducir los factores de riesgo asociados al estilo de vida. Estos riesgos están asociados a temas como:
- Consumo de tabaco
- Baja ingesta de frutas y hortalizas
- Consumo excesivo del alcohol
- Falta de actividad física
Reducir estos factores de riesgo puede llegar a prevenir entre el 30% y el 50% de los tipos cáncer. Sin embargo, casi todos tenemos en nuestro propio hogar artículos que, está demostrado, son causantes de cáncer. Entre ellos:
1. Velas
Las velas, esas que son tan relajantes y románticas, pueden ser un causante de cáncer en tu hogar. Un estudio realizado por la Comisión de Productos de Consumo de Estados Unidos (CPSC), reveló que el 40% de las velas del mercado tienen plomo en sus mechas. El plomo es tan peligroso para tu salud que podría causar cáncer.
Una vela con una mecha de plomo-núcleo libera cinco veces la cantidad de plomo estimado como peligroso para los niños. Además, supera los estándares de contaminación establecidos por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) para el aire exterior.
Una opción para reducir el riesgo de sufrir cáncer por la exposición al plomo que contienen las velas, es utilizar siempre velas de cera con mechas de algodón.
2. Ambientadores
Muchos productos ambientadores contienen sustancias que son cancerígenas. También compuestos orgánicos volátiles y toxinas tales como ésteres de ftalato. Esto ha quedado demostrado en un estudio realizado por el Consejo de Defensa Natural. Estas sustancias también pueden agravar otros problemas respiratorios como el asma.
Para reemplazar los ambientadores, te recomiendo utilizar fragancias naturales de aceites esenciales. Al probarlos, verás que son muy eficientes. Además eliminas un agente contaminante en tu hogar.
3. Material de bellas artes
Tal vez ni lo imagines, pero algunos materiales de arte pueden causar cáncer y otros peligros desconocidos hasta ahora. Muchos de estos materiales contienen productos químicos vinculados a las alergias, daños en órganos y cáncer. Entre ellos te puedo mencionar:
- Pegamentos epoxi y cemento de caucho
- Pinturas acrílicas
- Solventes
Es importante tener un cuidado especial con los productos que utilizan con frecuencia nuestros niños. Esto debido a que ellos son particularmente vulnerables a las toxinas, pues tienen metabolismos más altos, y los sistemas inmunes inmaduros.
4. Antitranspirantes
Los desodorantes y antitranspirantes están formulados para permanecer en nuestros cuerpos durante horas. Esto permite que el potencial de absorción de productos químicos nocivo, a través de la piel, sea mayor. Pues es bueno saber que la mayoría de los desodorantes y antitranspirantes convencionales contienen ingredientes vinculados al cáncer.
5. Shampoo
Aunque todavía se están investigando sus efectos, los shampoo convencionales tienen demasiados ingredientes tóxicos. Aunque en este tema todavía no hay consenso científico, es mejor prevenir. Como opción te recomiendo utilizar un shampoo artesanal que no contenga los químicos que se agregan en el proceso industrial.
6. Cortinas de plástico de ducha
Es innumerable en número de hogares en los que se utilizan las cortinas para la ducha hechas con plástico. Éstas liberan sustancias tóxicas llamadas químicos orgánicos volátiles o COV. Estas sustancias no sólo se quedan en tu baño, sino también van al medio ambiente y tu organismo.
Ante cualquier cosa que pueda afectar nuestra vida y la de nuestros seres queridos, debemos tomar previsiones. Es nuestro deber garantizar un ambiente saludable al reducir el contacto con estos 6 causantes de cáncer en el hogar de los que debes deshacerte de una vez por todas.
10 claves para prevenir el cáncer
Además de evitar el uso de algunos productos en nuestro hogar, existen otras formas de minimizar el riesgo de cáncer. Es difícil hacer todo, pero cada cambio puede ayudar.
Tenemos que hacerlo de manera gradual y consciente para que podamos mantenerlo en el tiempo. Te invito a probar con estas 10 claves para prevenir el cáncer:
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Mantén un peso saludable
Mantener un peso corporal acorde a tu estatura es una de las formas más importantes de protegerse del cáncer. Evita subir de peso con el paso del tiempo, especialmente alrededor de la cintura.
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Realiza actividad física
Haz al menos 30 minutos de actividad física todos los días. No tienes que desfallecer en el gimnasio. Una caminata a paso ligero, andar en bicicleta o hasta trabajar en el jardín puede ser suficiente. Es muy importante que antes de aumentar tu nivel de actividad consultes a tu médico.
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Evita las bebidas azucaradas y las comidas chatarra
El ritmo de vida de muchas personas los lleva a consumir alimentos con alto contenido de grasas trans. La comida rápida y bebidas azucaradas aumentan tus probabilidades de subir de peso. Esfuérzate por consumir una dieta balanceada.
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Come más alimentos de origen vegetal
Los granos integrales, frutas, verduras y legumbres deben pasar a formar parte de tu dieta diaria. Estos alimentos contienen pocas calorías, pero aportan muchos nutrientes y fibras.
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Restringe las carnes rojas y procesadas
Disminuye el consumo de carnes de res, cerdo, cordero o cabra. Especialmente las carnes curadas, ahumadas, saladas o con conservantes. Elije cortes magros. La carne de ave y el pescado son opciones más saludables.
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Limita el consumo de alcohol
Si puedes evitarlo totalmente mejor. Pero si eres los que se autodenominan “bebedor social”, lo recomendable es que no tomes más de dos bebidas por día, si eres hombre, y una si eres mujer.
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Disminuye el consumo de sal
La mayoría de la sal que consumimos proviene de los alimentos procesados. Aunque necesitamos algo de sal (sodio) para estar sanos, la mayoría de las personas consume demasiado. Lee las etiquetas y comienza a medir tu consumo de sal.
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No dependas de los suplementos
Mantén una dieta que te permita obtener las vitaminas y minerales que necesitas de los alimentos. Evita a toda costa los suplementos a base de píldoras. Solo tu médico puede decirte si necesita tomar vitaminas o minerales.
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Amamanta a tu bebé
Si tienes un bebé, trata de darle de mamar, por lo menos durante 6 meses. Amamantar a tu bebé puede protegerte de desarrollar cáncer de seno. Además, es beneficioso para tu bebé, ya que le ayudará a prevenir el sobrepeso ahora y en el futuro.
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Aléjate del cigarrillo y el tabaco
El consumo de tabaco está vinculado con al menos 15 tipos de cáncer. También es responsable de aproximadamente el 30% de las muertes por cáncer. Si fumas, deja de hacerlo. Si vives con una persona que fuma, evita estar cerca, pues puedes ser un fumador pasivo.
A menos que tu médico indique otra cosa, estos consejos también pueden servirte si eres sobreviviente del cáncer. Además, estas recomendaciones no solo pueden protegerte de tener cáncer en el futuro, sino también dificulta que contraigas otras enfermedades crónicas.
Todos tenemos que parecernos más a Luis, quien se toma en serio el cuidado de la salud. Con ello evita formar parte de las terribles estadísticas que han tocado a dos miembros de su familia. Tú también puedes hacerlo, cuídate porque nadie lo hará mejor que tú.
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