Cuando hablamos de perder peso y eliminar esos gorditos que nos hacen sentir inseguros de nuestra figura, inmediatamente pensamos en dietas rigurosas, ejercicios agotadores y máquinas que parecen instrumentos de tortura medieval.
Estamos seguros de que queremos bajar de peso y buscamos lo más fácil. Nos sentimos tentados por alguna píldora milagrosa, un tratamiento de hipnosis o un brebaje que sabe a rayos.
Pero la verdad es que en el fondo sabemos bien que nada de eso nos dará los resultados que deseamos. Así que lo primero que debes hacer para bajar de peso es estar consciente en esto: perder peso es cuestión de salud, la obesidad te afecta en muchos sentidos, desde el fisiológico hasta el emocional. Tener un peso acorde a tu estatura, edad y sexo es importante.
Luego de internalizar esto, podemos pensar en la parte estética. Olvida los mitos y creencias que existen en torno al peso. Si bien debes tener fuerza de voluntad, también es importante que asumas la meta con basamento científico.
Esto no quiere decir que necesitas tener una maestría en química, física o biología. Lo que trato de decir con esto es que debe existir algo de sentido común para investigar cuál es la mejor forma de perder peso.
Lo que dicen las investigaciones acerca de perder peso
Recientemente estuve leyendo un estudio que revela las mejores técnicas para perder peso. Esta investigación fue realizada por especialistas del American College Of Sports Medicine. Los resultados arrojan que los entrenamientos de alto impacto queman hasta 15% más de calorías.
A esta rutina de ejercicios, es importante sumarle ayunos intermitentes y una dieta balanceada. Esto, para que el cuerpo comience el proceso de quemar grasa, en lugar de azúcar como principal combustible.
El ejercicio es muy importante, no puedes comenzar una rutina de actividad física si tu alimentación es deficiente o mala. Eso te traería problemas de salud porque estarías forzando a tu cuerpo y no lo estarías fortaleciendo con los nutrientes necesarios.
No se trata de quemar calorías excesivas. El ejercicio también debe ser controlado. Además, olvídate de calcular las calorías por cada alimento que consumes, por ejemplo, comes una barra de Snickers y tienes que caminar alrededor de cinco millas para quemar esas calorías. Ese es un error que cometemos cuando creemos que con ejercicios o dietas temporales, eliminamos el peso ganado por comer o beber alimentos saturados de grasas, azúcares y harinas refinadas.
Solemos decir “no importa, mañana corro un par de kilómetros”. La verdad es que nos estamos engañando a nosotros mismos.
Pero no te preocupes, pues no es necesario someterte a tratamientos agotadores, ni dejar de comer alimentos sabrosos. Tampoco tienes que pasar hambre a causa de dietas extremas, puedes bajar de peso, ganar una salud optima, verte y sentirte bien siguiendo estos sencillos pasos:
1. Consume alimentos de calidad
Cuando hablo de alimentos de calidad no quiero decir que vayas al supermercado a comprar todos los vegetales que se vean más grandes y sean más costosos. Tampoco quiere decir que debas convertirte en un comprador compulsivo de productos orgánicos. Cuando hablo de alimentación de calidad, me refiero a saber elegir los alimentos que te proporcionarán los nutrientes necesarios para una vida sana.
Aunque los productos orgánicos son buenos para nuestro organismo, no todo lo que tiene una etiqueta de orgánico es realmente saludable. Por eso es muy importante aprender lo que es una alimentación de calidad.
Una excelente guía para ello la encontrarás Descargando Aquí Gratuitamente tu e-book #Yo Puedo, en el que te enseño el mejor método para lograr una alimentación verdaderamente saludable. Un adelanto de ello:
- Opta siempre por alimentos frescos
- Consume vegetales provenientes de granjas orgánicas
- Vigila que la carne y lácteos que comes provengan de animales criados con pastura
- Cerciórate de que los huevos sean de granjas locales
- Bebe agua pura y zumos de frutas sin añadir azúcar (si es necesario endulzar, hazlo con Stevia)
2. Plantéate una rutina de ejercicios
Realiza diariamente una rutina de ejercicios de al menos de 15 minutos. Mantente en movimiento continuamente para evitar el sedentarismo. Los ejercicios de alta intensidad son los más efectivos para eliminar el exceso de grasa y moldear la figura. Además, te ayudarán a sentirte lleno de energía y prevenir enfermedades.
El hombre evolucionó haciendo mucha actividad física. Esta actividad siempre fue intensa y rápida, necesaria para su supervivencia. El hombre primitivo debía buscar su alimento y comerlo más rápido que sus rivales. Cuando comenzó a cazar el esfuerzo aumentó, tenía que enfrentar animales de mayor tamaño y fuerza que él, debía destazarlo y cargarlo hasta su refugio. Tal actividad exigía un enorme desgaste físico.
De manera que, su consumo de calorías era intenso. Esas calorías debían reponerse continuamente, sus movimientos eran rápidos, constantes y forzados. Eso está grabado en nuestra genética, y eso es ejercicio de alta intensidad.
Claro, hoy no necesitamos armarnos de lanzas, arcos y flechas para salir a cazar un mamut. Pero podemos recrear ese ejercicio con rutinas ordenadas y echar mano a herramientas con las que no contaron nuestros ancestros.
Puedo sugerirte ejercitarte con una caminadora elíptica, una bicicleta estática, levantar pesas. Corre aumentando progresivamente la distancia, nada, practica fit combat, tae box, incluso algún tipo de baile movido. Bailar te ayuda a quema bastantes calorías.
3. Programa tus comidas
Al programar tus comidas diarias, regularizas tu metabolismo y lo acondicionas para quemar calorías. De igual manera, se prepara para absorber correctamente los nutrientes y eliminar los desechos tóxicos.
4. Realiza ayunos intermitentes
El ayuno estimula al organismo, le da descanso a tu sistema digestivo y te ayuda a eliminar toxinas. El ayuno intermitente debe ir acompañado del consumo de agua, infusiones o zumos de frutas naturales, sin añadir azúcar o endulzantes artificiales.
5. Aléjate de los medicamentos para adelgazar
El mercado está lleno de productos elaborados con sustancias químicas vendidas como fórmulas mágicas para bajar de peso. Éstas, quizás te ayuden a eliminar líquido, pero pueden tener efectos secundarios dañinos. Así que olvídate de buscar en ellos una forma fácil de perder peso porque pueden empeorar el problema.
6. Bebe mucha agua
Mantenerte hidratado es vital, no sólo para bajar de peso sino para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Además, beber agua te ayudará a eliminar toxinas a través de la orina, el sudor y las heces. Opta por el agua pura, zumos de frutas naturales e infusiones de hierbas.
7. Disminuye tus calorías con sabiduría
Ten cuidado con las dietas bajas en grasa. Este tipo de dietas promueven la resistencia a la insulina y a las enfermedades relacionadas con ella. Esto ocurre porque, por lo general, son altas en azúcares. Si consumes más grasas saludables y menos carbohidratos no vegetales, como azúcares añadidos, granos procesados y fructuosa procesada, pierdes peso más fácil.
8. Cuidado con estos alimentos
La alimentación es la base de cualquier sistema para perder peso, así que debes estar atento a lo que comes. Eliminar o disminuir el consumo de estos productos que te harán aumentar de peso y afectarán tu salud.
- Alimentos procesados
Cualquier alimento procesado, animal o vegetal, es dañino. Contienen exceso de sodio, grasas trans, harinas y azúcares refinados, además de sustancias químicas que afectarán tu salud y te engordarán sin nutrirte. Entre los más comunes destacan:
- Las sopas enlatadas y las deshidratadas
- Cubos de caldo
- Harinas refinadas de trigo y maíz
- Azúcar refinada
- Endulzantes artificiales
- Sodas
- Jugos de fruta envasados
- Golosinas
- Productos cárnicos envasados
- Bebidas lácteas
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Carnes de animales alimentados con transgénicos
Las carnes de animales criados con granos transgénicos y tratados con antibióticos y medicamentos para acelerar su crecimiento y engorde ponen en riesgo tu salud. Lo mejor es evitarlas y consumir carnes de animales criados con pastura y en granjas locales.
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Peces de piscifactorías
Los peces criados en piscifactorías son alimentados con productos procesados, lo que minimiza su poder nutricional, así como su sabor y calidad.
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Granos procesados
Los granos procesados se descomponen como azúcar en tu organismo. Lo mismo pasa con los granos orgánicos, pero éstos están libres de contaminantes químicos. Consúmelos con mucha moderación.
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Grasas trans
Las grasas trans se encuentran en los aceites vegetales hidrogenados como la canola, soja y maíz. La margarina también es rica en estas grasas.
Los alimentos que debes eliminar de tu dieta, puedes sustituirlos por productos saludables. Por ejemplo, la grasa animal y la manteca son buenas para cocinar, ya que no se oxidan al calentarse, pero debes consumirlas con moderación.
El aceite de coco es otra opción. Es muy saludable y te aporta muchos nutrientes y beneficios. Incluye en tu dieta aguacate, nueces, pulpa de coco y almendras. Estos alimentos contienen grasas sanas que tu organismo necesita.
Otra buena fuente de grasas buenas son los pescados azules como la sardina, el arenque, el bacalao y el salmón, que no sean criados en piscifactorías.
9. Programa tus comidas
Establece un programa para tus comidas. El horario, la cantidad y la frecuencia son tan importantes como lo que consumes. Evita saltarte las comidas y recuerda que es un grave error no desayunar, esta comida es la que te provee de combustible para iniciar el día.
Lo mejor es hacer tres comidas fuertes y dos ligeras al día, salvo cuando te sometas a un ayuno líquido. Comer entre comidas altera tu metabolismo y no te sacia, al contrario, los estudios indican que te aumentan el hambre, promoviendo la obesidad y otras dolencias como indigestión, acidez y úlceras gástricas.
Las comidas fuertes son el desayuno, el almuerzo y la cena. Las ligeras, una a media mañana y otra a media tarde tipo merienda. Cena ligero y al menos tres horas antes de irte a la cama, la cena es delicada porque al dormir no quemas calorías.
Al dormir, el cuerpo usa una mínima cantidad de calorías y el exceso de combustible puede generar radicales libres que dañarán tus tejidos acelerando el envejecimiento y promoviendo la aparición de enfermedades crónicas.
Si no puedes dormir porque sientes hambre, bebe una infusión caliente o toma una taza de caldo desgrasado y bajo en sal. La comida caliente aporta saciedad.
10. Aumenta el consumo de vegetales
Los vegetales aportan un sinnúmero de nutrientes son los vegetales y muchos tienen propiedades que ayudan a perder peso. Te recomiendo incluir estos en tu dieta diaria:
- Escarola
- Espárragos
- Aguacate
- Hinojo
- Col verde y morada
- Hojas de remolacha
- Col rizada
- Brócoli
- Lechugas
- Col de Bruselas
- Coliflor
- Mostaza castaña
- Apio
- Cebollas
- Perejil
- Achicoria
- Nabos
- Pepinos silvestres
- Tomates
- Cebolla de verdeo
- Pimientos
- Espinaca
- Diente de león
Por su alto contenido en carbohidratos, los siguientes es mejor consumirlos con moderación, dos veces por semana puede ser:
- Jícama
- Remolacha
- Calabaza de invierno
- Zanahorias
- Berenjena
- La mayoría de las frutas salvo los limones
No puedo terminar de hablar sobre las mejores técnicas para bajar de peso sin hacer mención del método que he creado especialmente para que puedas no sólo bajar de peso sino mantener un cuerpo saludable. Me refiero al reto #Yo Puedo, el cual te permite eliminar unas cuantas libras en tan sólo 21 días. Pero además de eso te ayuda a combatir enfermedades como la diabetes, hipertensión y problemas de la tiroides.
Haz la prueba, te aseguro que no te arrepentirás. Y lo mejor es que te dará las bases que necesitas para aprender a comer saludable.
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