La tecnología actual, ha permitido que la pandemia de COVID-19, posea la mayor cantidad de registros nunca antes obtenidos. En este orden de ideas, dos pequeños estudios fueron publicados recientemente. Allí plantean que la mayoría de los hombres que fueron hospitalizados con COVID-19 son calvos. Todo esto generó titulares en todas partes del mundo. Ahora bien, la ciencia ha ofrecido una explicación al respecto, entre ellas que la calvicie se asocia con altos niveles andrógenos, que son hormonas sexuales masculinas. Estos andrógenos parecieran tener un papel primordial en el virus que causa el COVID-19 en las células.
Este es un tema poco asociado al COVID-19, sin embargo Germania una joven de Delaware me escribió para comentarme que su esposo hace unos tres meses comenzó a perder cabello, situación que le ha causado gran preocupación, en virtud de que últimamente ha visto en diferentes medios la relación de la calvicie con el covid-19.
A principios de junio 2020, se publicó un estudio, acerca de pacientes oncológicos infectados por el nuevo coronavirus. El mismo se basó en los datos provenientes de 9.280 pacientes, entre ellos 4.532 hombres. Esto fue realizado en Véneto, Italia y se encontró que los hombres con cáncer, mostraban casi el doble de riesgo frente al COVID-19. Se logró observar, que cuatro de ellos, que recibían terapia de privación de andrógenos, a pesar de haber sido infectados no murieron. Esto hace pensar a los investigadores, en una vinculación muy estrecha entre los andrógenos y la enfermedad de COVID-19. De esto versará este artículo, donde se logra recoger la experiencia científica actual que asocia los andrógenos con la mayor susceptibilidad al COVID-19. Pensando, que algunas personas puedan presentar la misma inquietud, decidí compartirlo aquí en mi página.
Profundizando un poco acerca de los andrógenos
Como algunas personas saben, los andrógenos (testosterona y dihidrotestosterona (DHT)), representan las hormonas sexuales masculinas. Ellas son indispensables para el desarrollo del sistema reproductor del hombre y sus características sexuales secundarias. La testosterona, es capaz de convertirse en DHT su forma más activa biológicamente, debido a la participación de ciertas enzimas como la 5-alfa reductasa.
Los Institutos Nacionales de Salud, consideran que esta es la hormona masculina más importante. Vale destacar, que la misma, es producida por las mujeres, pero en proporción mucho menor que los hombres. Dentro de las características masculinas secundarias, se incluyen: cambios a nivel del tono de voz, desarrollo musculoesquelético y el patrón de cabello, entre otros.
Relación de los andrógenos con susceptibilidad a COVID-19
De acuerdo a la Academia Española de Dermatología y Venerología (AEDV), los altos niveles de testosterona, producen alopecia androgenética. Este es el tipo de calvicie más frecuente. Puede ocurrir, hasta en un 50% de los hombres y en el 5-10% de las mujeres. Este trastorno, produce un adelgazamiento o afinamiento progresivo del cabello. Dicho proceso, ocurre de forma gradual y va presentándose en ciertos sectores del cuero cabelludo.
De acuerdo a los expertos, se presenta con un patrón específico de pérdida de cabello, que incluye la zona frontotemporal y los vértices. Esta anomalía, afecta a los folículos capilares y también a las glándulas sebáceas.
Analizando las estadísticas, se ha notado que los hombres tienden a sufrir mas de COVID-19 que las mujeres. Y apoyándose en las observaciones acerca de la incidencia y riesgo de muerte por dicha enfermedad, surge una hipótesis. Así, se sabe que la calvicie de patrón masculino, está condicionada por la presencia de andrógenos. Dicha hormona, puede desempeñar un rol fundamental, en el ingreso del nuevo coronavirus a nuestro cuerpo.
Los científicos, al plantear esta hipótesis, buscan identificar a las personas en riesgo, además de establecer nuevas posibilidades de tratamiento para COVID-19. De esta forma, se lograría proteger un poco más a los hombres, que como se sabe, presentan mayores riesgos de padecer enfermedades crónicas. Además de ello, su sistema inmunológico es más fuerte, de hecho, en observaciones realizadas en hospitales chinos, revelan datos interesantes. Mientras la tasa de mortalidad frente al COVID-19, de los hombres, es del 2,8%, en las mujeres, es del 1,7%.
Correlación entre calvicie y COVID-19
Estudios realizados hasta ahora que correlacionan calvicie y COVID-19
Se ha establecido científicamente, que el nuevo coronavirus, penetra las células pulmonares mediante un mecanismo parecido a llave y cerradura. Esto ocurre mediante la interacción entre la proteína espiga del virus y los receptores de proteínas (receptores ACE2). Estos se encuentran en la superficie de las células de ciertos órganos clave como los pulmones y el hígado.
Estudios realizados hasta ahora que correlacionan calvicie y COVID-19
Se ha establecido científicamente, que el nuevo coronavirus, penetra las células pulmonares mediante un mecanismo parecido a llave y cerradura. Esto ocurre mediante la interacción entre la proteína espiga del virus y los receptores de proteínas (receptores ACE2). Estos se encuentran en la superficie de las células de ciertos órganos clave como los pulmones y el hígado.
De acuerdo a los investigadores, una enzima, es la responsable de permitir que esto ocurra. Y se sabe actualmente que el gen que permite que se active dicha enzima es activado por las hormonas masculinas. Por ello, mientras más cantidad de hormona masculina se encuentre presente, más fácilmente ingresará el virus.
De acuerdo a un estudio, realizado en 122 pacientes varones con COVID-19, ingresados en hospitales de Madrid, se pudo determinar que el 79% de ellos, eran calvos. Otro estudio, también realizado en España, detectó que el nuevo coronavirus, infecta mayor cantidad de hombres, que mujeres. De acuerdo a los científicos, se ha determinado que la calvicie de patrón masculino se asocia, con un mayor nivel de dihidrotestosterona (DHT).
Considerando un estudio preliminar muy reciente, aún no revisado por pares científicos, se pudo corroborar esta hipótesis. El estudio se realizó en el Reino Unido. Y mediante él, se lograron medir los niveles de andrógenos en cientos de personas que presentaban casos graves de COVID-19. Los niveles más altos de esta hormona, se asoció con la susceptibilidad y la gravedad de esta enfermedad, en hombres.
Esto no ocurrió, en el caso de las mujeres, las cuales presentan niveles de andrógenos mucho más bajos. Sin embargo, se sabe, que las mujeres también producen DHT y testosterona, aunque en menor proporción. Sin embargo, ciertas enfermedades, como el Síndrome de Ovario Poliquístico o los adenomas, favorecerían un incremento de la hormona masculina.
Otras pruebas abren las puertas a posibles alternativas terapéuticas
Los investigadores de Reino Unido, realizaron adicionalmente, pruebas de laboratorio, empleando células madre, logrando demostrar algo interesante. Se trata, de la posibilidad de reducir la capacidad del virus para unirse a las células humanas. Esto se puede lograr, utilizando inhibidores de los receptores de la hormona masculina o andrógenos. Los científicos sugieren, que es de vital importancia, confirmar este hallazgo. Para ello sugieren, la realización de investigaciones clínicas empleando muestras grandes, controlando muchos factores, incluyendo la edad. Teniendo en cuenta que niveles elevados de la hormona masculina DHT, sería un factor de riesgo grave a considerar para COVID-19.
Se ha observado también, que ciertas alteraciones androgénicas, se correlacionan con diferentes enfermedades. Así, la producción excesiva, además de una producción insuficiente de andrógenos, podría desencadenar ciertas afecciones, en hombres y en mujeres.
Vale destacar, que los hombres con agrandamiento prostático benigno, producen una alta cantidad de andrógeno corporal. Y a su vez, este incremento de andrógenos, también se expresa en mujeres con síndrome de ovario poliquístico. En la actualidad, algunas de estas patologías, son tratadas con terapia de privación de andrógenos (ADT). Por medio de ella, se logra la inhibición de la producción o la reducción del efecto de los andrógenos. Un claro ejemplo, lo constituye el cáncer de próstata, pues se ha establecido, que dichas células cancerosas, se estimulan por la presencia de andrógenos.
Implicaciones de las hormonas masculinas en la gravedad de COVID-19
Por lo general el nuevo coronavirus infecta las células que forman los alveolos pulmonares, conocidas como neumocitos. Dichas células, permiten el intercambio de gases (oxígeno y dióxido de carbono), entre el pulmón y la sangre. Dicha enzima, es conocida como proteasa transmembrana. Se ha logrado observar, en laboratorio, que cuando esta enzima, es bloqueada, se reduce la capacidad del coronavirus causante del SARS. Incluso, su bloqueo, reduce la capacidad infectiva de los virus causantes de la gripe A y B, en vías respiratorias.
Existe un gen que responde a los andrógenos. Se sabe, que el desarrollo de la alopecia androgenética (AGA) está mediado por estas hormonas. Y depende, de variaciones genéticas presentes en el gen del receptor de andrógenos, el cual se ubica en el cromosoma X. Esto hace presumir a los científicos, que los hombres con AGA, serían más propensos a la enfermedad grave de COVID-19.
Para ello, ciertos investigadores realizaron un estudio preliminar de observación de pacientes hospitalizados con COVID-19. Se consideraron, dos hospitales terciarios españoles, en el lapso del 23 de marzo al 6 de abril de 2020 para probar esta teoría. Los científicos, analizaron un total de 41 hombres caucásicos ingresados en los hospitales, cuyo diagnóstico arrojaba neumonía bilateral por COVID-19.
Se observó que la edad promedio de los pacientes fue de 58 años (las edades abarcaban de 23 a 79). Al analizarlos, se encontró que el 71%, presentaba AGA, de los cuales el 39% fue clasificado como AGA grave y un 12% no presentó signos clínicos de AGA. Este diagnóstico, fue realizado por un dermatólogo, sin embargo, no se conoce con exactitud la prevalencia exacta de AGA en hombres caucásicos españoles. Sin embargo, se estima entre el 31 al 53%.
¿Qué propone la ciencia?
Conociendo muchos detalles científicos acerca del comportamiento de los andrógenos, los investigadores proponen probar un antiandrógeno como tratamiento para pacientes recientemente diagnosticados con COVID-19. Hasta ahora, muchos hallazgos muestran, que los andrógenos, estimulan la agresividad del virus y ello, hace que esta enfermedad, sea de mayor gravedad en los hombres.
Existen una serie de factores genéticos que también influyen en la distribución geográfica de COVID-19. Existe un gen que predispone a la presencia de alopecia androgénica. De acuerdo al Proyecto 1000 Genomas España, posee una alta prevalencia de este gen. Por ello, es la alopecia androgénica como condicionante de COVID-19, fue reportada por la ciencia, inicialmente en España.
La realización de este estudio conllevaría a verificar una posible función protectora de estos fármacos, sobre la infección ocasionada por el nuevo coronavirus. Los resultados de este estudio, que inició a principios de julio de 2020, se esperan tener listos a finales de enero de 2021.
Se debe destacar, que al profundizar en el conocimiento de las manifestaciones cutáneas de COVID‐19, se puede ayudar en el diagnóstico precoz, clasificación de los pacientes y estratificación del riesgo. Conocer de antemano un predictor de riesgo, como la calvicie, que algunos investigadores denominan “Signo de Gabrin”, podría marcar la diferencia en la atención de pacientes. Este indicador, toma el nombre del primer médico estadounidense fallecido a causa de COVID-19, Dr. Frank Gabrin, quien era calvo.
Concluyendo
Se ha podido observar, posiblemente con asombro, que a veces, hay “pistas”, que se encuentran a la vista. Una de ellas y que posiblemente ha causado un asombro a nivel mundial, ha sido el de la calvicie. Y no se trata, de ninguna especulación de índole dermatológica o cosmética.
Es tan cierto lo encontrado. Los científicos han sugerido que un predictor de riesgo frente al COVID-19, sea llamado “Signo de Gabrin”, en honor al primer médico estadounidense fallecido por efecto del nuevo coronavirus. Al prestar atención a algo que puede parecer intrascendente, pueden marcar una gran diferencia. Esta puede incluir el tiempo de recuperación y el evitar el deceso.
De acuerdo a ciertos investigadores, el exceso de activación de hormonas masculinas, en especial, la testosterona, podría estar muy correlacionada con la vulnerabilidad de ciertas personas frente al nuevo coronavirus. De esta forma, el profesor asistente de dermatología de la Facultad de Medicina Warren Alpert de la Universidad de Brown, envió una comunicación a la revista Dermatologic Therapy.
En dicha comunicación, explicaba, que se está estudiando una nueva hipótesis. Esta es, que las hormonas responsables de la caída del cabello, están relacionadas con la vulnerabilidad y gravedad de los pacientes infectados con el nuevo coronavirus. Esto, fue afirmado por el Dr. Carlos Wambier, quien lideriza un equipo de investigadores de la Universidad de Brown y Applied Biology, Inc. Acompañado, además, por las universidades de España, India e Italia.
Mi seguidora Germania de Delaware, agradeció sobremanera la información que le consigné, que es la misma que comparto en el post. Ella me informó, que la caída del cabello de su esposo, se debió a una psoriasis y afortunadamente ya se ha recuperado. Sin embargo, me comenta, que esta información, es importante compartirla con las personas que padecen de alopecia androgénica.
“Realmente creemos que la calvicie es un predictor perfecto de la gravedad. Creemos que los andrógenos u hormonas masculinas son definitivamente la puerta de entrada para que el virus ingrese a nuestras células”
Dr. Carlos Wambier
Si te ha gustado este artículo y tienes un interés sincero en aprender cómo puedes vivir más sano, me gustaría regalarte una copia de mi último libro #Yo Puedo con la Dra. Cocó.
Sí la página te da un mensaje de error es porque no has entrado la dirección bien. Vuélvelo a intentar, asegurando no haber dejado ningún espacio antes, después o entre las letras de tu dirección.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7273098/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7373684/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4810760/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32446821/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32301221/
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32333494/