La enfermedad causada por el nuevo coronavirus, es uno de los mayores retos que haya enfrentado la ciencia, a lo largo del siglo 21. Muchos mecanismos de investigación, mediante equipos interdisciplinarios, apoyados muchas veces por diversos organismos internacionales.
Muchas de las búsquedas realizadas, están muy asociadas con compuestos sencillos, que poseen actividad bioactiva comprobada. Uno de estos compuestos, es el zinc, un elemento catalogado como esencial. El mismo, avalado por la OMS, ha venido siendo empleado en muchos países deprimidos, como tratamiento antidiarreico en niños. Como respuesta al efecto del consumo del zinc, se encuentra la mejora en el proceso de absorción de agua y electrolitos.
No obstante, la solicitud que he recibido acerca del uso del zinc, proviene de una seguidora de Tennessee. Ella leyó una publicación electrónica, a inicios de marzo, realizada por el Dr. James Robb, patólogo del Instituto Nacional de Cancer, y asesor científico de los laboratorios Cloudslims. Esta publicación la llenó de curiosidad. Yo pude leerla y corroborar, que se basó en un correo electrónico realizado por este reconocido virólogo.
En dicho correo, proporcionaba una serie de recomendaciones, una de las cuales era el consumo de pastillas de zinc. Planteaba, que existían efectos comprobados de las pastillas de zinc, para evitar el coronavirus. También planteaba, que servían para evitar muchos otros virus y su multiplicación en la garganta.
Habiendo trabajado desde hace años con el equilibrio natural del organismo, conozco bien los efectos positivos del zinc. De esta forma, recopilé para esta seguidora, información relevante acerca del zinc. Le ahondé, acerca de sus propiedades y beneficios. Además de ello, le hice hincapié en los estudios más recientes acerca de sus efectos positivos en el tratamiento del COVID-19. Dado, el interés por este novedoso tema, elaboré un sencillo artículo, para compartirlo con vosotros.
Hablando un poco acerca del zinc
Este elemento forma parte integral de muchos compuestos naturales. Se llegó a considerar esencial para las plantas a partir del año 1869. Posteriormente en 1934, se observó su esencialidad en animales.
El año 1961, se descubrió su importancia para la salud en humanos. Ello ocurrió, a partir de unos estudios realizados en un agricultor iraní de 21 años. Dicho agricultor, fue encontrado con síndrome de anemia, enanismo e hipogonadismo (poca producción de hormonas sexuales). Se observó, que su dieta era estrictamente pan, papas y leche cruda.
Un síndrome muy parecido, fue detectado un tiempo después en un grupo de adolescentes egipcios, su dieta era muy similar. Este síndrome, se corrigió mediante la ingesta de alimentos adecuados, a su vez la anemia con suplementos de hierro.
Estudios realizados posteriormente, permitieron confirmar con exactitud que se trataba de una deficiencia de zinc. Desde entonces, su carencia a nivel de la dieta, es considerada un problema de salud pública.
En un informe realizado por la OMS, el año 2002, mostraba que la deficiencia de zinc, afecta casi un tercio de población mundial. Se sabe, que su deficiencia severa, no es muy frecuente. Sin embargo, las mismas, pueden alcanzar entre el 4 y el 70%, dependiendo de la región.
¿Cuáles beneficios aporta el zinc a la salud?
El zinc es un oligoelemento que es necesario para un sistema inmunológico saludable. La falta de zinc puede hacer que una persona sea más susceptible a enfermedades y dolencias.
Se sabe además, que este elemento es responsable de apoyar a no menos de 300 enzimas de nuestro organismo. Y esto se puede alcanzar con bajas cantidades.
Actualmente, la Ingesta Diaria Requerida (IDR) del zinc es de ocho miligramos al día para mujeres y once miligramos para hombres. El mismo está contenido de forma natural en muchos alimentos, encontrándose disponible en suplementos dietéticos como ZINC PICOLINATE 50 mg., mi formula disponible en la Vita-tienda.
1. Favorece el desempeño del sistema inmunológico
Este versátil elemento, posee un rol destacado en la regulación del funcionamiento de las células del sistema inmunológico, tanto las innatas como las adaptativas.
Ciertos estudios, han permitido establecer que, en personas de edad avanzada, se presentan deficiencias en el sistema inmunitario adaptativo. Aparte de ello, se ha observado una disminución en la activación de las células T, incluyendo las respuestas a vacunas.
Sin embargo, se ha logrado determinar, que la suplencia de zinc logra corregir tales deficiencias. Esto permite afirmar, que este elemento, posee una vital importancia para una reacción inmune equilibrada. Este equilibrio, permitiría una adecuada defensa contra el ataque de los patógenos, incluyendo un sistema inmunitario demasiado reactivo. Que muchas veces es capaz de causar problemas autoinmunes, procesos alérgicos o procesos inflamatorios crónicos.
Según lo que se ha logrado esclarecer acerca del zinc, podría decirse que funciona como una especie de centinela del sistema inmunitario. Incluso, vale resaltar, que la enorme capacidad del zinc para prevenir lesiones, proviene de su elevada condición antioxidante.
De acuerdo al European Journal of Immunology, el zinc logra controlar las células infecciosas y cancerígenas. Esto lo obtiene, apoyado en el control y la regulación de la función inmune, pudiendo reducir además, el riesgo de enfermedades inflamatorias.
2. Impulsa la mejoría de afecciones diarreicas
De acuerdo a la OMS, el número de niños fallecidos anualmente por enfermedades, alcanza la asombrosa cifra de 1,6 millones al año. La mayoría de los fallecidos, según las estadísticas son niños menores de cinco años, sobre todo de países en vía de desarrollo.
En este caso, la administración de píldoras de zinc, pueden marcar la diferencia, ayudando a reducir esta afección. Estudios efectuados en Bangladesh, permitieron verificar los efectos positivos de tabletas de zinc, administradas durante diez días. Incluso, se encontró que ayuda a prevenir procesos diarreicos posteriores.
3. Fortalece el aprendizaje y la memoria
Se ha logrado establecer que el zinc, posee efectos directos sobre el proceso cognitivo. Es decir, está relacionado, con un papel clave desempeñado sobre la región del cerebro vinculada al aprendizaje y la memoria denominado hipocampo.
Un estudio permitió, observar que alumnos de séptimo grado con suplementación de zinc, mostraron una notable mejoría. Ellos recibieron, 20 mg de zinc, cinco días a la semana, durante 12 semanas. Al final de este tiempo, se observó en ellos, un incremento en el rendimiento cognitivo. De esta forma lograban responder con mayor rapidez y precisión en diversos ejercicios de memoria, mejorando además su atención. Esto en comparación, con otros alumnos que recibieron solo 10 mg al día, quienes no mejoraron su rendimiento.
En estudios realizados con anterioridad, se ha logrado asociar, la suplencia de zinc con ciertos parámetros. Entre ellos, se destaca la función cognitiva, psicosocial y motora. Solo que dichos estudios, se habían realizado en infantes y en adultos. En cambio, el estudio descrito en primer lugar fue realizado en población adolescente.
2. Coadyuva en el tratamiento del resfriado común
Muchos investigadores, han estado estudiando los rinovirus, agentes causantes del resfriado común. Ellos, han llegado a plantear, que el zinc, podría ser un aliado en la reducción de su magnitud. Esto, debido a la disminución de los síntomas, ocurre, debido al bloqueo del crecimiento del virus a nivel de la mucosa nasal. Además de ello, se incluye la disminución de la inflamación. De hecho, muchos estudios señalan que el zinc es un efectivo antiviral, bajo ciertas circunstancias.
Cabe destacar, un estudio, donde se utilizó un universo de cincuenta personas. En dicho ensayo clínico, se administró una pastilla de acetato de zinc, veinticuatro horas después de haberse desarrollado el resfriado. La misma continuó administrándose cada tres horas y a la mitad de los participantes se les dio un placebo.
A quienes se les administró el zinc, experimentaron una reducción significativa de los síntomas del resfriado, en comparación con quienes tomaron solo un placebo. Esto incluyó la disminución de la tos, además de los dolores musculares y la disminución apreciable de la secreción nasal.
3. Acelera el proceso de cicatrización de heridas
A nivel mundial, los costos hospitalarios por el cuidado de heridas causadas por accidentes o por cirugías, son altos. Se ha logrado establecer, que el zinc es esencial en las fases del proceso de restauración de heridas. Ello incluye, restablecimiento y reparación de las membranas celulares, la coagulación, e incluso la formación de tejido en las cicatrices.
Se ha establecido, que el zinc es un cofactor imprescindible en muchas enzimas. Muchas de ellas, participan en la reparación de la membrana celular, multiplicación de células, el crecimiento y la función del sistema inmune. Es por esto, que una deficiencia de zinc, produce lesiones cutáneas, retraso del crecimiento, decaimiento de la función inmune y defectuoso proceso de curación.
De acuerdo a un estudio realizado en Suecia, se destacó el empleo del zinc aplicado externamente. Esto, permitió corroborar sus beneficios sobre la cicatrización de úlceras en las piernas, la inflamación y el crecimiento de bacterias. Demostrando que el zinc, además de subsanar los problemas localizados, se comporta como un fármaco.
¿Puede el zinc ser beneficioso en el tratamiento de COVID-19?
De acuerdo a lo visto hasta ahora, se puede decir que el zinc, podría catalogarse como un héroe desconocido en el cuerpo humano. En la actualidad, considerando todos los beneficios descritos acerca del zinc, se están realizando algunas pruebas. Ellas, aún no son concluyentes al 100%. Sin embargo, existen ciertas iniciativas prometedoras, que pueden abrir la puerta a otras investigaciones con potencial para tratar el COVID-19.
Dentro de ellas destacan principalmente dos, de las cuales hablaré un poco:
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Uso del zinc intravenoso
En Australia, un grupo de investigadores de Austin Health y la Universidad de Melbourne, Australia, están por iniciar un importante estudio. El mismo, estará dirigido por el Dr. Joseph Ischia y el Dr. Oneel Patel. Estos investigadores, posen muchos años de experiencia en el empleo de la terapia de cloruro de zinc intravenoso. Ellos, lo han empleado exitosamente, en el tratamiento del daño causado a los órganos por la falta de oxígeno.
Cabe resaltar, que de acuerdo a estudios realizados en China, se comprobó que el nuevo coronavirus, deteriora la hemoglobina. Esto causa una disminución del suministro de oxígeno a los diferentes tejidos. La consecuencia inmediata de este efecto, es un estrés a nivel pulmonar y en todos los órganos que requieren energía, lo cual trae como consecuencias, procesos hiperinflamatorios, además de la presencia de síndrome de dificultad respiratoria aguda.
Los científicos australianos detrás del nuevo estudio, también están familiarizados con el hecho de que la falta de suministro de oxígeno a las células puede ser mortal. Dicen que grandes cantidades de zinc intravenoso pueden ayudar a contrarrestar el daño grave a los tejidos y órganos vitales causado por la falta de oxígeno.
Estos investigadores, han logrado conocer en profundidad, los efectos del zinc intravenoso, en pacientes con deterioro e hiperinflamación a nivel celular. Incluyendo también sus efectos sobre el sistema inmune.
Ellos, han logrado observar, que las deficiencias de zinc son bastante frecuentes entre las personas de edad avanzada y personas con enfermedades crónicas. Habiendo observado, además, que los diuréticos, antiácidos y ciertos medicamentos empleados para la hipertensión, agotan los niveles de zinc corporal. Al no contarse en la actualidad, con tratamientos efectivos para el COVID-19, los resultados de este estudio, mostrarían una salida positiva.
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Empleo del zinc con otros medicamentos
Ciertos estudios, adelantados en la Facultad de Medicina Grossman de la Universidad de Nueva York, han permitido encontrar respuestas positivas. De esta forma, algunos médicos han planteado el empleo de sulfato de zinc, junto a la hidroxicloroquina y la azitromicina. Esta combinación, comenzó a emplearse, cuando la ciudad de Nueva York, se constituyó en una de las ciudades más afectadas por la pandemia.
Esta afirmación, cambia un poco el panorama surgido hace unos meses acerca del empleo de hidroxicloroquina para COVID-19. De acuerdo a los resultados, el equipo médico observó que el uso de esta mezcla lograba muchos avances positivos. Entre ellos, la disminución de casos mortales, así como la disminución de la necesidad de ventilación.
Aparte de ello, ayudó a disminuir el incremento del número de ingresos a unidades de cuidados intensivos. Incluso se observó, una mayor frecuencia de alta hospitalaria.
Este estudio, proporciona la primera evidencia clínica que comprueba que el sulfato de zinc combinado, desempeña un rol importante en el tratamiento de COVID-19. Este estudio, ya fue publicado en bases de datos de investigación y está a la espera para la revisión por parte de otros investigadores.
Estos resultados, podrían ser de mucha utilidad en la India. Considerando que, los expertos del Consejo Indio de Investigación Médica, han venido empleando dicha combinación en el tratamiento del Covid-19. Incluso, de acuerdo a estudios de laboratorio, el zinc posee la capacidad de interrumpir la capacidad genética del nuevo coronavirus. De esta forma, impide su multiplicación.
Concluyendo
Según los expertos, el zinc, es un elemento que posee un alto potencial de poder convertirse en una opción viable y accesible para el tratamiento del nuevo coronavirus. Muchos de los descubrimientos encontrados hasta ahora permiten comprender, que aún existen muchos elementos, que faltan por ser profundizados por la ciencia.
Sin embargo, dado su enorme importancia en el desencadenamiento de muchos procesos importantes del cuerpo, se considera el héroe desconocido. Muchas pruebas, se han venido ajustando. En ellas se ha considerado, el comportamiento positivo del zinc, frente a otros virus, incluyendo otros coronavirus como el SARS y el resfriado común.
Cabe destacar, que no existen dudas, acerca de su enorme capacidad de potenciar el sistema inmunológico, a cualquier edad. Además de fungir, como un escudo protector frente a diversas patologías que causan enfermedades que diezman anualmente mucha población infantil. Por ello, son importantes iniciativas como el empleo de zinc intravenoso, uno de los estudios clínicos más recientes.
El éxito de este estudio, permitiría salvar muchas vidas a nivel mundial. En especial, las personas de avanzada edad y los grupos más vulnerables. Por otra parte, el empleo del zinc, en conjunto con otros fármacos, se ha venido probando en diversos ensayos clínicos. Hasta ahora sus efectos han sido mayores, que los obtenidos por el empleo de los medicamentos individuales sin el zinc.
La seguidora de Tennessee, realmente ahora posee mayores esperanzas con relación a los efectos positivos del zinc. Me dice, que ahora comprende el entusiasmo con el que el Dr. James Robb, invita a utilizar el zinc en los procesos de resfriados y como protección para el COVID-19.
“Nadie sabe exactamente cómo funciona esta combinación. Se sugiere que el zinc puede influir en la replicación de los coronavirus y que la hidroxicloroquina podría ayudar a que el zinc ingrese a las células más rápido y retarde la replicación del virus”
Profesor Adrian Gombart
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https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3724376/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC7247509/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2277319/
https://www.cnet.com/health/zinc-supplements-wont-protect-you-from-the-coronavirus/
https://www.drugs.com/medical-answers/zinc-protect-you-covid-19-boost-immune-system-3535446/