☑️ ¿Es Suficiente La Vitamina D Para Prevenir Las Fracturas Óseas?

Muchas personas en la actualidad toman vitamina D, una opción altamente recomendada por su importancia a nivel corporal. Se ha logrado establecer que, es capaz de contribuir en el metabolismo del calcio y mejorar el desempeño inmunitario. Posee un alto reconocimiento como factor importante sobre el desarrollo y funcionamiento del sistema óseo.

Tracy, una joven abuela de Colorado fue diagnosticada con osteopenia a mediados de febrero e inmediatamente se comunicó conmigo a fin de recibir ciertas orientaciones. Ella cumplió en enero 65 años, por ello su esposo e hijos le recomendaron practicarse una densitometría ósea. Era la primera vez que se realizaba esta prueba y nunca imaginó presentar osteopenia.

Tracy destacó, que ella siempre ha sido una persona bastante activa y que no había sentido ningún síntoma. A raíz del resultado decidió incluir un suplemento de vitamina D y quiso saber si su empleo le ayudaría realmente. Desde hace algunos años elaboro en mi laboratorio ciertos productos, incluyendo vitamina D (Vitamin D3 + K2 10000 IU – Immune Support). Ello me permite permanecer actualizada en muchos hallazgos científicos.

Esta vitamina tiene un amplio nivel de protección frente a una cantidad importante de patologías. Sin embargo, estudios amplios realizados hasta ahora, muestran resultados que contradicen algunos supuestos anteriormente aceptados.  De hecho, estudios recientes han permitido establecer que esta vitamina por sí sola, no logra prevenir el riesgo de fracturas.

Esto quiere decir que la vitamina D por sí sola no funciona adecuadamente. Así, a fin de apoyar a Tracy, le envié información acerca de la vitamina D soportada en estudios. En ella le expresé sus propiedades, beneficios y consideraciones a seguir para su adecuado empleo. Dada la importancia de esta información para una adecuada salud, decidí compartirlo en mi página.

Destacando algunos elementos acerca del sistema óseo

Los huesos son considerados tejido vivo que se desgasta y reemplaza constantemente, a lo largo de la vida el cuerpo equilibra esta pérdida, creando tejido nuevo. La mayor masa ósea en cuanto a tamaño y fuerza se alcanza aproximadamente a los 30 años de edad. Después de esta edad, se comienza a disminuir la densidad de la misma.

La densidad ósea, depende de diversos factores que involucran la participación de ciertos minerales como el calcio y el fósforo. Además de ello, la intervención de la conocida vitamina D.  De acuerdo a los estudios, se ha establecido que el calcio es el mineral más abundante en el sistema esquelético.

Ello representa el 99% del calcio del cuerpo y el 80% del fósforo. Se ha establecido que ambos minerales poseen un rol primordial en la resistencia de los huesos y poseen una importancia primordial en la prevención de la osteoporosis. Vale destacar, que el calcio es un componente celular imprescindible para el mantenimiento de diferentes funciones especializadas de prácticamente todas las células del organismo.

Por ello, su presencia es fundamental para el adecuado funcionamiento de diversos procesos fisiológicos del organismo. De allí la importancia de mantener una concentración mínima de calcio a nivel sanguíneo y en distintos tejidos del organismo. Constituyéndose los huesos como el principal sitio de reserva de calcio.

A nivel esquelético el calcio mantiene la integridad estructural y regula la función metabólica. Esta última tiene que ver con la constante remodelación del tejido óseo. Este proceso permite una adecuada mineralización del hueso. Una disminución de la masa ósea produce osteopenia, cuya agudización podría desencadenar en osteoporosis.

Recordando algunos elementos de la vitamina D

La vitamina D desde el punto de vista fisiológico es considerada una prohormona. Esto lo menciono porque las vitaminas son consideradas nutrientes esenciales que deben ser incorporados desde los alimentos. Como sabemos, la vitamina D denominada por muchos como la vitamina del sol, es sintetizada por nuestro cuerpo. Por ello, no es considerada técnicamente una vitamina.

De acuerdo a la ciencia, la vitamina D muestra mucha similitud con las hormonas suprarrenales y sexuales. Muy cerca de la superficie de nuestra piel es transformada en vitamina D2, con la participación de la radiación ultravioleta B presente en la luz solar.

Luego, mediante un proceso enzimático producido mayormente en el hígado, se transforma en vitamina D3 o colecalciferol. Finalmente a nivel de los riñones, es transformada en su forma más activa denominada calcitriol o vitamina D4.

Una de las funciones más destacadas de la vitamina D es la absorción y utilización del calcio y fósforo en los huesos. Este mecanismo ha sido bien descifrado y su efecto se realiza al regular la secreción de la hormona paratiroidea (PTH). Este proceso permite regular los niveles de calcio a nivel sanguíneo, además de su absorción a nivel intestinal y óseo. La vitamina D, de hecho, se considera el principal regulador de la absorción activa.

Controversias acerca de la capacidad protectora de la vitamina D

Por mucho tiempo se mencionó que, la suplencia inadecuada de vitamina D producía propensión a las fracturas. Esto llevó a preocupaciones de gran escala, que llevaron a la salud pública, a recomendar el empleo de suplementos. Es de destacar, que este comportamiento hacía énfasis en países ubicados a 40º de latitud norte o sur. Esto se relaciona con los inadecuados niveles de luz solar que se presentan, sobre todo en la época de invierno.

Aparte de la estacionalidad, la edad es un factor que incide en la síntesis de la vitamina D. Se ha determinado que, a partir de los 50 años la capacidad para sintetizar disminuye en un 50% con respecto a la capacidad que se tiene a los 20 años.

Luego, a partir de los 70 años se realiza una disminución adicional de 25% menos en la capacidad de síntesis. Se estima que más del 70% de los ancianos que se encuentran en instituciones u hospitalizados, poseen valores deficientes de vitamina D.

Por muchos años se han realizado recomendaciones de suplementos, sin embargo, esto conlleva un alto riesgo de medicalización. Es decir, centrar excesivamente la atención de la solución de ciertas patologías en soluciones farmacológicas. ​Además de ello, en el caso de la vitamina D esto puede implicar otros daños, si no se toma en consideración el tiempo de exposición solar.

El papel de la vitamina D ha venido siendo estudiado sistemáticamente. Según algunas revisiones iniciales se encontró una disminución de las fracturas entre mujeres mayores recluidas en instituciones. Sin embargo, en las revisiones realizadas más recientemente, este efecto se ha cuestionado.

¿Cuáles son los efectos encontrados de la vitamina D sobre las fracturas?

Una revisión publicada el año 2018, incluyó 81 ensayos controlados aleatorios y 53.537 participantes adultos. En ellos, se informó acerca del riesgo de fracturas, caídas o densidad mineral ósea. La mayoría de los estudios evaluados, empleó la vitamina D como terapia única, en mujeres de la población general. Se emplearon dosis diarias de más de 800 UI y con una duración de un año.

De acuerdo a los resultados observados de los análisis agrupados, se observó que la vitamina D no disminuyó el riesgo de fractura total, el riesgo relativo de fractura de cadera o por caídas. A su vez, se detectaron resultados similares en los ensayos controlados aleatorios de dosis altas (más de 800 UI). Ello en comparación con el empleo de dosis bajas de vitamina D, además de análisis efectuados en ensayos controlados.

Los estudios considerados presentaron alta consistencia, precisión y aplicabilidad. Por ello los investigadores corroboran, que la calidad de la evidencia posee un alto nivel. Esto lleva a los investigadores a concluir que no se justifica el empleo de la vitamina D por si sola, con el fin de reducir las fracturas. Incluso destacan que la excepción, serían las personas de alto riesgo como las que presentan raquitismo y osteomalacia.

Otros estudios confirman la inefectividad de la vitamina D por sí sola

De acuerdo a un metaanálisis realizado el 2019 por investigadores del Reino Unido y de China, se encontraron resultados negativos en un suplemento solo de vitamina D. Esto permitió establecer que, ni la dosificación intermitente ni diaria con dosis estándar de vitamina D por sí solas, se asociaron con una reducción del riesgo de fractura. Sin embargo, la suplementación diaria con vitamina D y calcio fue una estrategia más prometedora.

El metaanálisis incluyó un total de once ensayos clínicos aleatorios, con la participación de 34.243 personas. No mostró ninguna asociación significativa con el riesgo de cualquier fractura o de fractura de cadera. Por el contrario, la suplementación diaria con vitamina D y calcio se asoció con una reducción del 16% del riesgo de fractura de cadera.

A su vez, un metaanálisis realizado el año 2020 por la Universidad de Mahidol en Tailandia, mostró resultados interesantes. El mismo, incluyó 47 estudios aleatorizados, para un total de 58.424 participantes, quienes informaron sobre el resultado de las caídas.

Este metaanálisis incluyo mayormente mujeres de edad avanzada pero menores de 80 años. Se observó que, en forma general los suplementos de vitamina D demostraron un efecto significativo sobre la reducción de las caídas. Sin embargo, en análisis realizados en subgrupos, la incidencia de caídas se redujo significativamente cuando la vitamina D se empleó en conjunto con el calcio.

Además de ello, el suplemento de vitamina D por sí solo, no demostró efectos favorables sobre la reducción de fracturas. Sin embargo, el empleo de la vitamina D con el calcio podría tener un efecto sobre la reducción de fracturas.

¿Cuál es la posición asumida por los organismos con competencia?

Según los análisis efectuados hasta ahora, se ha observado una cierta variabilidad en cuanto a la postura asumida por los organismos de mayor relevancia. No obstante, existe una gran probabilidad que ello obedezca a las diferencias obtenidas en los resultados de los metaanálisis. Es decir, en la compilación cuantitativa de la evidencia acumulada hasta ahora sobre los efectos de la vitamina D.

Aún así, recientemente algunas organizaciones de mucho rigor y prestigio como U.S. Preventive Services Task Force (USPSTF), comienzan a pronunciarse acerca de la recomendación individual suplementaria de la vitamina D. La USPSTF está conformada por un equipo independiente de expertos nacionales en prevención y medicina basada en la evidencia.

Esta organización, tiene como objetivo el mejoramiento de la salud de todos los estadounidenses. Esto lo realizan mediante recomendaciones basadas en la evidencia sobre servicios clínicos preventivos, pruebas de detección, servicios de asesoramiento y el empleo de medicamentos preventivos.

A su vez, en España, el Programa de Actividades Preventivas y de Promoción de la Salud (PAPPS), sugieren emplear los suplementos de calcio y vitamina D en mujeres que se encuentren recluidas en instituciones.

De la misma manera, sugiere que se valore la indicación de vitamina D, en personas mayores de 70 años. Sobre todo, los que presenten déficit nutricional, deben ingerir menos de 500 mg de calcio diario y realizar una escasa exposición al sol.

Implicaciones prácticas para evitar fracturas

De acuerdo a ciertas organizaciones con competencia, entre ellas la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, emiten recomendaciones como estas:

• Tener un buen estilo de vida, el cual incluye un  régimen alimenticio sano.
• Es importante realizar ejercicio regularmente, evitar el tabaquismo y tomar el sol al menos diez minutos diarios, siendo muy importante exponer cara y manos.  Asimismo, el ejercicio favorece la disminución del riesgo de fracturas.
• En mujeres premenopáusicas, el ejercicio ayuda a optimizar la cantidad de masa ósea.  Se ha observado que en las posmenopáusicas favorece el mantenimiento de la densidad ósea.

• De igual forma, el ejercicio permite el fortalecimiento de los músculos y mejora el equilibrio, previniendo caídas riesgosas.  Algunos tipos de ejercicio, deben ser realizados en función de la capacidad física y la edad. Por ello, es posible considerando dichos elementos, realizar unos treinta minutos de entrenamiento con bandas, caminatas, footing y tai-chi.
• Las mujeres posmenopáusicas y los hombres mayores de 70 años deberían consumir 800 UI (20 microgramos) de vitamina D diariamente. Se debe destacar que, para que la vitamina D surta efecto se debe acompañar al menos con 1.000 a 1.500 mg de calcio al día.
• Consumir magnesio para la síntesis de vitamina D.
• Según las estadísticas, entre el 50 y el 60% de las caídas de adultos mayores se producen en el hogar. Es importante por ello realizar algunas modificaciones estratégicas para brindar mayor seguridad. Ello incluye entre otras cosas, pasamanos en bañeras o duchas, adecuada iluminación y emparejamiento de desniveles en pisos.

Concluyendo

Todo lo que ha sido mencionado acerca de la vitamina D, no desdice en absoluto su importancia. Sencillamente es un llamado a emplear estrategias integrales, que permitan un adecuado aprovechamiento de la misma en diversas funciones corporales. Gracias nuevamente a la ciencia, se ha podido profundizar sobre la importancia de la suplencia de vitamina D.

Sin embargo, sus beneficios solo se aprovecharán de forma adecuada e integral si va acompañada de ciertas estrategias. Lo que se mencionó está respaldado por una serie de estudios recientes, que recomiendan no tomar suplementos de vitamina D como una medida individual para prevenir fracturas. Por ello, la suplencia de esta importante vitamina, debe estar acompañada de niveles adecuados de calcio y magnesio

De hecho, existe una correlación interesante entre el calcio, magnesio, vitamina K2 y la vitamina D. Según los estudios realizados entre científicos chinos y británicos, se encontraron disminuciones del riesgo de fractura en adultos mayores al tomarlos conjuntamente.

Existen variables muy importantes a considerar.  Entre ellas, la realización de ejercicio, exposición solar adecuada, evitar el tabaco y mantener un ambiente libre de riesgos de caídas.

Tracy recibió con mucho agrado la información que el envié, la cual comparto aquí en el post. Ella comprendió muy bien la importancia de la vitamina D para la salud ósea, por ello la emplea como suplemento, acompañada de una dieta que incluye alimentos con alto contenido de calcio y magnesio.

Adicionalmente, decidió realizar baños de sol matutinos mediante caminatas en un parque cercano a su casa.

“Los suplementos de vitamina D están muy extendidos y se cree que tienen efectos beneficiosos en las personas mayores. La vitamina D reduce el riesgo de fractura de cadera en una sexta parte cuando se administra junto con suplementos de calcio y magnesio, pero las pruebas disponibles sugieren que cuando se administra sola no tiene efectos protectores sobre el riesgo de fractura”

Dr. Robert Clarke

Departamento de Salud de la Población de Nuffield (NDPH), Universidad de Oxford

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