Gladys está preocupada. Hace aproximadamente cuatro meses se realizó una operación estética para eliminarse unas libras de grasa en el abdomen. Luego se reafirmó los senos y quedó muy linda, pero algo se complicó.
Esta mujer de 32 años es muy activa, empresaria de publicidad y madre de dos niños. Ella decidió retomar el gimnasio y su rutina deportiva, el windsurf, actividades que dejó a los 29 años cuando se graduó, se casó, tuvo su primer hijo y comenzó a trabajar.
Durante los primeros días de ejercicios en el gimnasio, sintió una pequeña molestia en el abdomen. Era una molestia no focalizada, algo que relacionó con los años sin entrenar. Se dijo así misma que estaba un poco oxidada.
Pero la molestia pronto se convirtió en dolor, un dolor localizado en la zona donde le realizaron la cirugía estética. Era punzante a ratos, quemante en otros. Un bulto apareció justo a la derecha del punto donde ya la cicatriz apenas se notaba.
Cualquier esfuerzo que realiza le causa dolor en la zona donde la operaron, incluso al ir al baño, pues el estrés le ocasiona estreñimiento. Entonces su esposo la convenció de ir al médico y fue diagnosticada con una hernia ventral.
El galeno le recetó algunos fármacos desinflamatorios y analgésicos, reposo y una faja. Pero Renata, su mejor amiga, quien es asidua lectora de mi blog y acaba de terminar exitosamente el Reto #Yo Puedo, si bien respeta el tratamiento médico, también cree en la vida saludable y los remedios naturales.
Así que le preparó a Gladys algunos remedios caseros para reforzar el tratamiento prescrito por el médico. Además, le ayuda a llevar una dieta más sana.
Tipos de hernias
La hernia se produce cuando un órgano empuja, a través de alguna abertura en el tejido o el músculo que lo mantiene en su sitio. Un ejemplo son los intestinos que pueden romperse a través de una zona debilitada de la pared abdominal. Existen diferentes tipos de hernias:
Hernia ventral
Las hernias ventrales son las que sólo se localizan en el área del abdomen. Entre ellas se encuentran la hernia umbilical, epigástrica, de Spiegel y la incisional. Ésta última es consecuencia de intervenciones quirúrgicas en esta zona, como el caso de Gladys.
La hernia ventral suele llamarse incisional, por ser causada por las cirugías. Se produce cuando hay un fallo en la sutura o en alguna zona cercana a la sutura. La pared interna del abdomen debilitada por la intervención se rompe por la abertura que deja la pared debilitada del abdomen, sobresale parte del intestino. De esta manera, se forma un bulto, que es la manifestación externa de la hernia.
Generalmente esta hernia se produce al hacer algún esfuerzo como levantar pesos, esforzarse o pujar al ir al baño, movimientos bruscos o correr.
Hernia inguinal
La hernia inguinal es el tipo más frecuente, representa alrededor del 70% de todas las hernias. Se produce cuando los intestinos empujan, a través de un punto débil o desgarro en la pared abdominal inferior o canal inguinal.
Este canal se encuentra en las ingles, tanto en mujeres como en hombres. Pero en los hombres se ubica específicamente el área donde el cordón espermático pasa desde el abdomen al escroto que sostiene los testículos.
En las mujeres, el canal inguinal contiene un ligamento que ayuda a mantener al útero en su sitio. La hernia inguinal es más común en los hombres, ya que los testículos descienden a través del canal poco tiempo después de nacer. Y el canal, que debe cerrarse de inmediato, a veces no se cierra, dejando un punto débil propenso a la hernia.
Hernia hiatal
La hernia hiatal, ocurre cuando una parte del estómago sobresale a través del diafragma hacia el pecho. Este tipo de hernia es más común en personas mayores de 50 años de edad. Las hernias hiatales causan reflujo gástrico.
Hernia umbilical
Estas hernias se producen en los bebés y niños menores de seis meses, si sus intestinos sobresalen a través de la pared abdominal cerca del ombligo, cuando el niño llora y hace fuerzas (puja), esta hernia es fácil de detectar, ya que se forma un pequeño bulto cerca o en el ombligo.
La hernia umbilical es la única que, por lo general, desaparece por sí sola antes del primer año de edad. Si no desaparece sola, se recurre a la cirugía para corregirla.
Síntomas de una hernia
Las hernias son causadas por la combinación de la tensión y la debilidad muscular. Dependiendo de la causa, pueden desarrollarse rápidamente o durante un largo periodo de tiempo. Las causas más comunes de la debilidad muscular pueden ser:
- La edad
- La imposibilidad de la pared abdominal para cerrar el útero
- Tos crónica
- Daño de una lesión o cirugía
- El estreñimiento
- Estar embarazada
- Levantamiento de pesas muy pesadas
- Líquido en el abdomen
- Aumento de peso repentino
- Estornudos violentos
Las hernias suelen manifestarse en el organismo con diversos síntomas. Las podrás identificar por:
- Una protuberancia o bulto forma en la zona afectada
- Dolor o molestia en la zona afectada
- Debilidad, sensación de pesadez o presión en el abdomen
- Sensación de gorgoteo, dolor o ardor en el punto de la hernia
- Reflujo ácido (hernia hiatal)
- Dolor en el pecho (hernia hiatal)
- Dificultad para tragar (hernia hiatal)
Tratamiento de la hernia
El tratamiento de una hernia varía según el tamaño y gravedad de los síntomas. El médico simplemente monitorea la hernia para evitar posibles complicaciones. Es cierto que la hernia puede desaparecer cuando presionamos sobre ella, pero esto no quiere decir que desaparezca para siempre.
Ten en cuenta que la debilidad de la pared abdominal sigue existiendo, así que volverá a parecer cuando dejas de hacer presión. Para ayudar al tratamiento contra cualquier tipo de hernia es importante:
- Un cambio de dieta
- Reducir las porciones de alimento
- Evitar las comidas pesadas
- Tratar de no acostarte después de comer
- Mantener un peso corporal en rango saludable
Si la hernia crece o causa dolor, se recurre a la cirugía. Lo más frecuente es parchar el agujero de la pared abdominal con malla quirúrgica.
Complicaciones de una hernia ventral o abdominal
De no tratarse, la hernia puede crecer, haciéndose más dolorosa. Una parte del intestino puede quedar atrapado en la pared abdominal, causando dolores intensos, estreñimiento y náuseas. Si la sección de intestino atrapada no recibe suficiente flujo sanguíneo se “estrangula”, provocando que el tejido se infecte convirtiéndose en un riesgo letal para el paciente.
Tratamiento casero para aliviar los síntomas de una hernia
Estos son algunos de los remedios caseros que pueden ayudarte a aliviar los síntomas de las hernias. Pero recuerda que siempre debes visitar al especialista.
1. Jugo de aloe vera
Especial para la hernia hiatal. Ayuda en los casos de acidez e inflamación del estómago, úlceras y gastritis. Sólo debes beber un vaso de jugo de aloe antes de cada comida.
2. Cataplasma de arcilla y col
Para los casos de hernia discal, se prepara un cataplasma de arcilla y col y se coloca sobre la zona afectada. Esto alivia el dolor. Hierve 60 gramos de hojas de col en una olla con agua, cuela el líquido y mezcla con arcilla en polvo hasta conseguir una pasta. Aplica esta pasta sobre la zona afectada y déjala actuar durante 30 minutos.
3. Xiang fu
Esta hierba se utiliza en la medicina tradicional china para tratar la hernia inguinal. Calma el dolor y calienta los canales estancados, ayudando a la circulación sanguínea. Mezcla una cucharada de hierba Xiang Fu, con una cucharadita de sal de roca. Calienta en 8 onzas de agua, cuela y aplica la cataplasma sobre la zona afectada durante 15 minutos. Haz el tratamiento a diario.
4. Té de caléndula
Remedio especial para la hernia hiatal. Ayuda a reducir la inflamación y alivia los tejidos inflamados. Bebe una taza de esta infusión una o dos veces al día. Puedes sustituirlo con la infusión de olmo, pues también desinflama los tejidos.
Entrenamiento deportivo y las hernias
Cuando se tiene una hernia, lo mejor es no esforzarse haciendo ejercicios físicos. Esto, debido a que cualquier intento de fuerza te causará dolor y puede empeorar la hernia. Si eres deportista y practicas alguna disciplina específica, detén el entrenamiento hasta que te encuentres totalmente recuperado para evitar recaídas.
En estos casos, la inactividad puede afectarte en lo físico y emocional. Así que puedes aliviar tu necesidad de descargar energía, dando paseos sin forzarte, por ejemplo subiendo cuestas. Elige una pista plana sin obstáculos y camina. Eso será suficiente hasta que puedas retomar tu rutina con normalidad. Y una vez que la hernia deje de molestar, recuerda usar fajas para evitar recaídas.
Algunas recomendaciones
Para tener un organismo saludable es importante que cuides tus hábitos de vida para evitar complicaciones. Te recomiendo:
- Eliminar el cigarrillo
- Reducir la ingesta de cafeína y alcohol
- Acudir al médico si desarrollas una tos persistente
- Mantener un peso corporal saludable
- Evitar esforzarte cuando defeques y orines
- Beber mucho líquido
- Evitar a toda costa levantar pesos superiores a tus fuerzas
- Levanta los pesos apoyado en las piernas y no en la espalda
- Evita el estrés
- Trata de no acostarte inmediatamente después de comer
- Mastica bien los alimentos y evita comer deprisa
- Evita los alimentos picantes y muy condimentados
- Lleva una dieta rica en fibras y proteínas
- Reduce el consumo de grasas y azúcares refinados
- Si sufres de hernia, usa fajas, esto puede ayudar a llevarla a su luga
Gladys está combinando el tratamiento médico con los remedios naturales. Y Renata está muy contenta porque asegura que su amiga está mucho mejor.
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