☑️ 5 Remedios Caseros y Efectivos Para Reducir Las Ojeras

Siempre se ha dicho, que existen ciertas condicionantes más allá de las genéticas, que determinan el desempeño de cada órgano humano.  Ello incluye la piel, el órgano de mayor tamaño que posee el cuerpo.  Son sus signos visibles los que van indicando el paso inexorable del tiempo y a menudo, como en el caso de las ojeras, generan mucha inquietud.

Vale destacar, que las ojeras poseen muchos elementos que propician su aparición. Es decir, no siempre van de la mano con la edad cronológica. Esto lo afirmo, porque una joven de Nuevo Hampshire entabló comunicación conmigo a raíz de la persistencia de sus ojeras. Ella me contactó a mediados de abril porque deseaba que le asesorara en el tratamiento de sus ojeras.

Ella lograba disimularlas empleando maquillaje, sin embargo, preferiría eliminarlas de una forma natural, pues en ese momento ya tenía unas tres semanas con ellas. Todas las damas en algún momento han presentado estos círculos oscuros debajo de los ojos, ellos hacen que luzcan cansadas y trasnochadas. Y Helen ya no quería seguir ocultándolos con cosméticos, por ello decidió solicitarme algunas alternativas naturales.

Así, honrando su solicitud le hice llegar una serie de alternativas naturales para controlar de forma eficaz las ojeras. A sabiendas, que las mismas no generan inconvenientes sobre la piel y poseen eficacia comprobada, decidí compartirlo en mi página.

¿Realmente que son las ojeras?

Según los especialistas, para comprender acerca de las ojeras es necesario conocer ciertos aspectos de la anatomía facial.

Hasta los momentos han sido detectados una serie de factores que están asociados con la aparición de las ojeras. Entre estos elementos se señalan la estructura ósea, la arquitectura de los ligamentos faciales y la piel del párpado. Además de ello, se incluye el tejido blando de la parte media del rostro, la vasculatura y el músculo orbicular.

Se ha observado, que los ligamentos faciales (conjunto de bandas fibrosas) proporcionan apoyo a los tejidos blandos subyacentes del rostro. Además de ello, estos ligamentos están asociados con la estructura ósea. Por ello, se puede afirmar que ambos elementos influyen en el aspecto general del rostro.

Así mismo, los ligamentos de sujeción de la cara sostienen los tejidos blandos en una posición anatómica normal. Sin embargo, los tejidos blandos del rostro van descendiendo en la medida que estos ligamentos pierden elasticidad.

Además de ello, hay que resaltar que los ligamentos faciales óseo-cutáneos son las principales divisiones estructurales de los compartimentos de grasa presentes en el rostro. De allí que los científicos han desarrollado dos teorías acerca del envejecimiento.

La primera se refiere a la gravitacional, que impulsa la caída de los tejidos blandos por efecto de los cambios que se generan en los ligamentos de retención. La otra teoría, denominada volumétrica, está relacionada con la atrofia de la grasa en ciertos compartimentos del rostro.

Este efecto ocasiona el descenso de la grasa facial con la consecuente disminución del volumen de grasa. A su vez, los ligamentos se tornan rígidos y dan origen a un anclaje y ahuecamiento del rostro, muy visible en el reborde de la órbita o cuenca del ojo. De esta forma, considerando los efectos cronológicos, se originan las indeseadas ojeras.

Las ojeras no son exclusivas de la edad

Hasta ahora, se explicaron algunas teorías científicas acerca de las ojeras como efecto del envejecimiento. Sin embargo, existen una serie de elementos, que logran explicar la presencia de ojeras en personas jóvenes.

Dentro de ellos destacan la piel del párpado, caracterizada por ser fina y algo transparente. Esta característica permite mucha visibilidad al tejido blando subyacente, incluida la densa red vascular subcutánea y el músculo orbicular.

Esto hace que, cuando se presentan algunas patologías se produzca un aspecto oscurecido y envejecido debajo del ojo. Este efecto está muy vinculado con la acumulación de los subproductos de la degradación de la hemoglobina de la sangre, lo cual está asociado a la fragilidad de los capilares ubicados en esa zona. Los principales productos de degradación de la hemoglobina, comprenden el grupo hemo y el hierro.

Se ha observado que la degradación del grupo hemo, produce biliverdina, este pigmento posee color verde oscuro a violeta. Además de ello, se producen bilirrubina y hierro que dan lugar a pigmentos marrón oscuro a naranja-rojizo. Esta acumulación de pigmentos poco solubles, produce la desagradable coloración de las ojeras.

Causas frecuentes de la aparición de ojeras

• Alimentación inadecuada

Una baja ingesta de frutas y hortalizas, así como un alto consumo de alimentos procesados generan ojeras

• Fármacos

Ciertos colirios hipotensores empleados para el glaucoma, producen pigmentación alrededor del ojo.

• Alergias

Muchos desencadenantes de procesos alérgicos, producen la congestión de los vasos sanguíneos ubicados alrededor del ojo, impidiendo un adecuado retorno venoso

• Alteraciones hormonales

Los cambios producidos durante el embarazo o la menstruación, pueden generar ojeras

• Problemas vasculares

Los problemas circulatorios y la fragilidad capilar también inciden en la aparición de ojeras

• Consumo insuficiente de agua

Cuando las células del organismo no poseen los niveles adecuados de hidratación se acumulan toxinas, pudiendo propiciar la presencia de ojeras

• Insomnio

El insomnio  se presenta por la falta de descanso y patrones de sueño irregular que generan desequilibrios físicos y mentales, reflejándose en la formación de ojeras

• Factores genéticos

Se ha observado existen condiciones como la delgadez de la piel y su palidez, que se transmiten de padres a hijos. Esto también condiciona la cantidad de melanina presente

• Forma de dormir

Dormir boca abajo o de lado, produce tensión alrededor del ojo, generando inflamación y ojeras

• Enfermedades de tipo autoinmune e inflamatorias

Las enfermedades autoinmunes Pueden alterar diversos procesos fisiológicos e incrementan los niveles de melanina. Dentro de ellas destacan: enfermedad inflamatoria intestinal, lupus, esclerosis múltiple, eccema y dermatitis atópica

• Empleo indebido de computadoras y smartphones

La exposición a pantallas por largas horas genera tensión ocular y estrés, propiciando la aparición de ojeras

• Conjuntivitis

Diversos tipos de conjuntivitis, sean alérgicas, virales o bacterianas favorecen la formación de ojeras

• Exposición solar sin protección

La radiación solar incrementa los niveles de melanina alrededor de los ojos, produciendo ojeras

Reducción de ojeras por métodos tradicionales: una solución con consecuencias

El mundo de la cosmetología y de los tratamientos costosos cada día se hacen más sofisticados.

De hecho, algunos cosméticos empleados para desmaquillar inciden en el daño a la piel del párpado. Muchas personas saben y recuerdan que, en condiciones normales esta zona es cinco veces más delgada que el resto de la piel del rostro. Además de ello, existen una serie de procesos costosos e invasivos, tales como: peeling químico, tratamiento con láser, micro agujas y relleno lagrimal.

Vale destacar, que estos procedimientos pueden suplir cierto nivel de alivio temporal, pero en muchas ocasiones encierran algunos efectos negativos. Se destacan entre ellos, la aparición de inflamación y hasta en algunos casos el desarrollo de infecciones. Por ello, de ser posible es importante acudir a los tratamientos naturales para el alivio de las verdaderas causas subyacentes que ocasionan las ojeras.

Propuestas naturales para combatir las ojeras

1. Aceite de almendras dulces

Según los expertos, el aceite de almendras dulces posee ciertas propiedades que promueven la reducción de las ojeras. Entre ellas destaca la propiedad esclerosante, la cual facilita el correcto desempeño del proceso circulatorio. Posee además propiedades emolientes y antiinflamatorias, que permiten suavizar y relajar la piel, además evita la formación de edemas.

En los efectos beneficiosos del aceite de almendras dulces también participan otros compuestos. Los más resaltantes son denominados bioactivos liposolubles, a saber: escualeno, fosfolípidos, tocoferoles, esteroles, fitoesteroles, esfingolípidos y terpenoides.

Se ha observado que en la fracción lipídica de la almendra dulce predominan cinco ácidos grasos. A saber, ácido oleico, linoleico, palmítico y esteárico. Además de ello, el aceite de almendras también contiene vitamina A, vitamina E, vitamina K y zinc. Se ha observado asimismo, que puede mejorar el tono de la piel de los vasos sanguíneos dilatados.

¿Cómo realizarlo?

• Colocar dos a tres gotas de aceite de almendras dulces en un algodón
• Aplicarlo suavemente sobre las ojeras masajeando la piel con movimientos circulares
• Permitir que actúe toda la noche y retirarlo con agua tibia al levantarse
• Realizar este procedimiento todas las noches antes de acostarse hasta observar que las ojeras se han desvanecido.

2. Aloe

El gel de aloe posee diversas vitaminas, minerales, aminoácidos y proteínas que favorecen el combate de los radicales libres. Además de ello, contiene una serie de esteroides con actividad antinflamatoria, reforzada además, por la presencia de ácido salicílico.

Muchos de estos compuestos favorecen de igual forma la hidratación profunda, mejorando la microcirculación y oscurecimiento de la piel. Dentro de estos compuestos, existe uno denominado aloesina, el cual posee la capacidad de inhibir la actividad de la tirosinasa, una enzima asociada con la pigmentación de la piel. Por ello el gel de aloe constituye una opción natural adecuada para el tratamiento de las ojeras

¿Cómo lo realizo?

• Extraer el gel de una hoja de aloe orgánico
• Reservarlo en un recipiente que se encuentre perfectamente limpio y tenga tapa
• Guardarlo en el refrigerador hasta un máximo de diez días
• Antes de ir a dormir, extraer una pequeña cantidad de gel
• Aplicarla con los dedos bien limpios, masajeando suavemente de forma circular
• Dejarlo actuar toda la noche
• Realizar este procedimiento durante diez días y luego descansar una semana antes de reiniciar el tratamiento.

Nota

No debe emplearse en niños menores de doce años, mujeres embarazadas o que estén amamantando. Es recomendable realizar una prueba de parche antes de iniciar el tratamiento.

3. Yogur natural y perejil

El yogur ha sido empleado tradicionalmente en la medicina ayurvédica como máscara facial natural. Su empleo permite combatir la inflamación de los ojos y las ojeras. Su contenido de ácido láctico permite desplazar las células muertas actuando como un exfoliante suave. Este efecto asociado con los probióticos presentes en el yogur, actúa como un excelente agente restaurador del tono natural de la piel.

A su vez, el perejil contiene una serie de antioxidantes como la vitamina C, ácido fólico y vitamina K. Todos estos compuestos interactúan favoreciendo la microcirculación y mejoran y realzan el tono de la piel.

¿Cómo realizarlo?

• Lavar adecuadamente el perejil
• Trocear unos cinco centímetros y triturarlos en un mortero
• Añadir una cucharada de yogur natural y mezclar hasta obtener una pasta
• Aplicar esta mascarilla con los dedos limpios
• Dejar que seque unos quince minutos
• Retirar suavemente con agua natural filtrada

Este procedimiento se debe realizar diariamente durante unas dos semanas, a fin de obtener los resultados esperados. Una opción práctica es efectuar este tratamiento durante las noches antes de irte a dormir.

4. Tomate y zumo de limón

Desde hace tiempo, se ha logrado determinar que el tomate posee algunos compuestos con un alto efecto antioxidante y antiinflamatorio. Dentro de ellos destacan, el licopeno, betacaroteno, luteína, quercetina, vitamina C y vitamina E.  Dichos compuestos, son capaces de combatir el daño celular y la inflamación de la piel. Se ha observado además su capacidad astringente, blanqueadora y mejoradora de la textura de la piel.

A su vez, el zumo de limón contiene altos niveles de ácido cítrico y vitamina C o ácido ascórbico. Se ha determinado que también posee propiedades blanqueadoras y regeneradoras de la piel, a la vez de un efecto exfoliante. De allí que la combinación de estos compuestos sea una alternativa natural empleada desde hace mucho tiempo para ayudar a eliminar ojeras y piel con pigmentos irregulares.

¿Cómo realizarlo?

• Lavar muy bien un tomate mediano orgánico y seleccionarlo en dos partes
• Triturar muy bien la pulpa de una de las partes luego de retirar piel y semillas
• Mezclar la pulpa triturada con una cucharada de zumo de tomate
• Colocar esta pasta debajo de los ojos en la zona de las ojeras y dejarla actuar diez minutos
• Enjuagar con agua filtrada a temperatura ambiente
• Secar con una toalla de papel con ligeros toques sin frotar la piel.

5. Cúrcuma y suero de leche

El suero de leche o buttermilk es un alimento ancestral de India, que ya es conocido en todo el mundo. Es muy empleado en repostería y en la preparación de diversos platos. Sin embargo, posee también propiedades que permiten su empleo en el control de las ojeras.

Sus principales componentes son el ácido láctico y las bacterias benéficas. Es similar al yogur pero difiere en la textura, además posee mayores cantidades de vitamina A y C. De allí sus beneficios exfoliantes y nutritivos.

La cúrcuma es también una especia empleada en la cultura de la India desde hace siglos. Su principal componente bioactivo, la curcumina otorga propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Al conjugar el suero de leche y la cúrcuma se genera una mezcla capaz de eliminar y proteger la piel contra las ojeras.

¿Cómo realizarlo?

• En un recipiente pequeño añadir una cucharada de suero de leche y dos cucharaditas de cúrcuma en polvo
• Mezclar muy bien hasta conformar una pasta homogénea
• Con una brocha limpia de maquillaje aplica esta pasta sobre la zona de las ojeras
• Mantén esta preparación unos diez minutos sobre esta zona y retírala con agua tibia
• Algunas pieles tienden a retener la tintura amarillenta por más tiempo, con los sucesivos enjuagues esta coloración desaparece.

Nota

No debe emplearse en niños menores de catorce años. No se conocen con exactitud los efectos de la cúrcuma en mujeres embarazadas. Por ello, no es conveniente el empleo de este tratamiento en mujeres embarazadas o que se encuentren amamantando.

Concluyendo

Lo mostrado aquí permite hacerse una idea bastante aproximada de cómo se producen las ojeras.

Según los estudiosos, su origen puede ser debido a procesos de envejecimiento natural, sin embargo, son muchas las causas asociadas. Entre ellas se puede  resaltar el empleo de ciertos medicamentos, enfermedades autoinmunes, descanso inadecuado, falta de hidratación y factores genéticos. Además de ello, el abuso de exposición a pantallas, problemas vasculares y la forma de dormir inciden en su aparición.

En el mercado actual de la cosmetología y tratamientos estéticos existen infinidad de opciones, que ofrecen mejorías. Sin embargo, algunos de estos procedimientos invasivos podrían acarrear en ocasiones problemas que muchas veces son inimaginables.  Es por ello, que presenté una serie de alternativas muy sencillas y al alcance de todas.

Dentro de ellas mencioné el empleo de mi planta preferida, el aloe, y el aceite de almendras dulce. Aparte de ello, resalté el empleo del perejil, yogur, limón, cúrcuma, tomate y suero de leche. Muchas de estas alternativas son de fácil acceso y lo más importante, es que no generan efectos secundarios.

Para Helen fue muy ilustrativo el material recibido, el cual es el que comparto en el post. Ella leyó atentamente y me dice que sintió mucho alivio al percatarse que las ojeras no están asociadas exclusivamente con la edad.

Helen se comunicó conmigo hace poco, estaba muy contenta, pues decidió optar por el empleo de aloe, perejil y yogur. Me comentó, que los efectos se comenzaron a notar justamente a las tres semanas de tratamiento. De hecho, cayó en cuenta de lo negativo de sus trasnochos por el empleo desmedido de su PC.

“La vitamina C favorece la producción de colágeno y disimula el color de la estasis sanguínea*, lo que podría mejorar el aspecto de las ojeras bajo el párpado inferior”

Dr. Rashmi Sarkar,

Departamento de Dermatología del LokNayak Hospital, Nueva Delhi, India

* La estasis sanguínea es una enfermedad que afecta la circulación de la sangre, afectando su calidad.

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