Cómo Combatir La Malaria Con Remedios Caseros

Recientemente estuve en una charla sobre enfermedades tropicales transmisibles. Compartí con médicos y especialistas de la salud sobre las preocupantes cifras de varias de ellas, pero básicamente de la malaria.

También informaron sobre los esfuerzos, privados y públicos, que se realizan para enfrentar esta enfermedad.

Aunque mucho de ese trabajo ha dado resultado, ya que hay cierta disminución en los casos registrados, igual las cifras de contagio siguen siendo altas.

En las oportunidades en las que participé hablé de maneras alternativas para combatir la malaria y que pueden ser utilizadas junto al tratamiento alopático de esta terrible enfermedad.

Un detalle curioso es que la palabra malaria proviene de los vocablos italianos “mal” y “aria” qué significan “mal aire” y se debe a que en la antigüedad se pensaba que este enfermedad era causada por un mal aire.

¿De qué trata la malaria?

La malaria es una enfermedad transmitida a través de la picadura de un mosquito Anopheles que ya ha sido infectado. Es común en zonas tropicales y subtropicales.

Esos mosquitos portan un parásito del género Plasmodium y, a través de la picadura, el parásito se libera en la sangre de la víctima.

Una vez se produce la infección por el parásito Plasmodium, este se dirige al hígado donde madura , vuelve al torrente sanguíneo y es en la sangre donde infecta los glóbulos rojos.

Es bastante rápido: solo le toma de 48 a 72 horas multiplicarse dentro de los glóbulos rojos y hacer que colapsen esas células de la sangre infectadas. El proceso se repite ciclos que duran de dos a tres días.

Es una enfermedad que puede llegar a ser mortal y el problema es que la mitad de la población está expuesta a este mal.

En 2015, se calcula que hubo unos 2.120.000 de casos y de los cuales murieron 429.000.

Otra grave situación, es que hasta no hace mucho las estimaciones de muertes por malaria eran bastante conservadoras porque, al parecer, en realidad causa el doble de muertes de las que se calculaban.

Según determinó el departamento de Salud Pública de la Universidad de Queensland en Australia a través de una investigación, las mayores víctimas de la malaria son los pequeños menores de cinco años. Sin embargo, el 42% de los fallecimientos ocurren en niños mayores y adultos.

Desde 1985 hasta 2004 los casos de malaria crecieron sostenidamente, pero, a partir del 2004 el número de infectados se redujo en un 7% anual.

Se espera que en un futuro no muy lejano se anuncie que la enfermedad ha sido erradicada. A pesar de esta buena noticia todavía la malaria continúa cobrando vidas.

Otras formas de infección

Hay otros casos de malaria que no ocurren por medio de la picazón de un mosquito sino a través de la sangre.

Esto quiere decir que las transfusiones, trasplantes de órganos y uso de jeringas compartidas aumentan el riesgo potencial padecerlo.cánc

También la infección madre – hijo puede ocurrir en el momento del parto. En ese caso, se le conoce como malaria congénita.

Síntomas de la malaria

Casi siempre se desarrolla después de unos días o un mes, contando a partir de la infección.

Es posible que la persona no presente síntomas durante varios meses. Sin embargo, continúa siendo portador de la enfermedad.

Algunos síntomas comunes de la malaria son

• Fiebre de alta temperatura.
• Dolor de cabeza.
• Vómitos y náuseas.
• Diarrea y dolores abdominales
• Sudoración.
• Dolores musculares.

Complicaciones

Si la malaria no recibe el tratamiento adecuado, o si el sistema inmunológico de la víctima es débil, pueden ocurrir serias complicaciones mortales.

Por ejemplo, es posible que se presente una anemia prolongada y profunda por la destrucción de los glóbulos rojos.

Otra complicación es que se acumulan líquidos en los pulmones en un fenómeno conocido como o edema pulmonar.

Varios órganos internos pueden verse afectados como el bazo, los riñones y el hígado.

Otra complicación es la malaria cerebral qué ocurre cuando los vasos sanguíneos del cerebro se inflama.

Tipos de plasmodium

Existen cinco tipos de parásitos plasmodium capaces de infectar a los humanos. Por ejemplo en América Latina es común la presencia del Plasmodium Vivax. También se encuentra en Asia y en algunas regiones de África.

En África son endémicos el Plasmodium Falciparum y el Plasmodium Ovale.

Por otra parte, el Plasmodium Knowlesi se ubica en el sudeste asiático.

Para culminar, el Plasmodium Malariae está distribuido en muchas zonas del planeta.

Mejor que el tratamiento… la prevención

Como te he comentado con anterioridad, más importante que el tratamiento es la prevención y este consejo aplica también para la malaria.

Los primeros que debes tomar en cuenta es que no hay vacunas para evitar la infección, entonces, toma los correctivos necesarios si piensas viajar a zonas donde la malaria es endémica.

En este caso, los médicos indican como tratamiento preventivo el mismo tratamiento curativo que se aplica en caso de infección con algunas variantes.

Probablemente te indique tomar ciertos fármacos antes, durante y después del viaje.

Utilizar mosquiteros y comprar productos repelentes para mosquitos son buenas opciones para prevenir la malaria.

Mantén limpio tu hogar y libre de aguas estancadas, así evitarás la proliferación del mosquito, principal portador de la enfermedad.

10 remedios naturales para combatir la malaria

Como refuerzo al tratamiento médico que se utiliza para combatir el parásito, quiero recomendarte tratamientos naturales.

Estos pueden utilizarse como refuerzo del tratamiento alopático y también para evitar la resistencia del parásito.

Porque ese es un nuevo problema con el que se debe lidiar: con el paso del el tiempo, el parásito de la malaria ha desarrollado resistencia a los medicamentos.

Por otra parte muchos de esos fármacos producen efectos secundarios negativos y que pueden ser tan desagradables como la enfermedad y que requieren atención y alivio.

Por esa razón comparto contigo 10 remedios naturales para combatir la malaria.

1. Alimentación saludable

Lo primero que necesitas hacer es fortalecer tu sistema inmunológico para que sea capaz de enfrentar y anular al parásito en la sangre y por esto debes consumir muchas frutas y vegetales especialmente aquellos con propiedades antibacterianas y antibióticos.

Incluye frutas cítricas, ajo, cebolla, semillas, miel, repollo y jengibre son algunos de esos alimentos útiles para combatir infecciones.

También es importante tomar suficiente agua fresca y consumir fibra para desintoxicar el organismo.

2. Canela

La canela es capaz de brindar alivio a varios de los síntomas asociados a la malaria gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antiespasmódicas que provienen del cinamaldehido.

Por este motivo, promueve el apetito, elimina las náuseas, alivia la indigestión y los espasmos.

Para consumirla, prepara una infusión de canela y agrega un poco de pimienta negra y miel. Eso sí, ten cuidado si padeces hipertensión porque la canela tiende a aumentar la presión sanguínea.

3. Naranja y otras frutas cítricas

La vitamina C que se encuentra en la naranja es especialmente útil para fortalecer y reforzar el sistema inmunológico.

Es posible que debido a las náuseas, vómitos y malestar general al paciente se le dificulte comer.

En ese caso, se le puede ofrecer un vaso de jugo de naranja para hidratarlo y proporcionarle algunos nutrientes. Recuerda que la vitamina C es uno de los más poderosos antioxidantes.

4. Albahaca

La albahaca es una hierba maravillosa con propiedades terapéuticas que contribuyen a disminuir los síntomas de la malaria.

Por ejemplo, posee dos flavonoides y aceites esenciales que protegen a las células sanguíneas de daños y, además, posee propiedades antibacterianas.

Para consumirlo, hierve hojas de albahaca y un poco de agua. Agrega una pimienta negra en grano triturado. Si el sabor te resulta desagradable puedes agregar algún endulzante natural.

5. Nueces

A todas las nueces se les atribuye un poderoso efecto febrífugo, es decir, que es capaz de disminuir la fiebre.

Prepara agua de la nuez agregando unas semillas y dejándolas en remojo por dos horas. Remueve y deja una hora más en reposo antes de consumirla.

6. Swertia Chirata o Chitretta

La planta es originaria del sur de Asia aunque también se produce en Europa.

Es conocida desde hace siglos y  actualmente se utiliza de forma terapéutica en la India especialmente en Sikkim uno de los microestados de la India.

La Swertia Chirata es antiinflamatoria y además desintoxica el hígado por lo que le proporciona ayuda para luchar contra el parásito de la malaria.

Por otra parte, promueve la formación de glóbulos rojos lo que evita la anemia.

Se puede tomar consumiendo de 0.5 a 2 gramos de la planta cada día o también una tintura de proporción 1:1.

7. Jengibre

El jengibre es un ingrediente muy popular en la cocina asiática y de la India. Esta raíz ayuda a reducir los síntomas tanto de la malaria como de los fármacos y sus efectos adversos.

Por ejemplo es útil contra las náuseas, pérdida de apetito y el mareo.

Puedes consumirlo fresco en polvo seco como aceite un jugo. Ya sea que se prepare una infusión o se agregue a las comidas, los beneficios del jengibre son múltiples.

8. Semillas de fenogreco

Proveniente del sur de Europa, el Mediterráneo y el oeste asiático, las semillas del fenogreco se utilizan tanto en la cocina como en la medicina natural.

Llamado también alholva, el fenogreco tiene un uso terapéutico integral por lo que protege y restablece la salud de todo el organismo.

Por ejemplo, es útil para los malestares estomacales y otros problemas digestivos, además de diabetes, problemas menstruales y de salud femenina.

También protege el corazón y el sistema cardíaco y reduce las grasas como colesterol y triglicéridos.

Puedes conseguir en las tiendas de productos naturales polvo de las semillas de fenogreco. Agrega de 5 a 50 gramos de ese polvo a una o dos comidas durante cuatro días a 24 semanas.

En caso de conseguir el extracto de la semilla, se puede utilizar una dosis de un gramo diario.

También las semillas de fenogreco se han utilizado como cataplasma, envueltas en un paño caliente. Se aplica directamente sobre la piel para tratar dolores locales e inflamación.

9. Cilantro

Está deliciosa hierba aromática también es conocida en la India como dhaniya. Más allá de su uso culinario, tiene un potente efecto terapéutico en el tratamiento de la malaria.

Y es que el cilantro previene la anemia por su alto contenido de hierro, además, coadyuva al funcionamiento apropiado de todos los sistemas orgánicos además de aumentar la energía y la fuerza.

10. Giloy

La planta giloy es originaria del sudeste asiático y se le conoce como “la raíz ayurvédica de la inmortalidad”.

Esta planta es una rica fuente de antioxidantes que contribuyen con el organismo a combatir enfermedades causadas por radicales libres, pero también ayuda a aumentar el recuento de plaquetas en la sangre por lo que se incrementa la concentración de hemoglobina.

Fortalece el cuerpo contra las infecciones. Como otro beneficio, la planta giloy es antipirética, es decir, que ayuda a reducir la fiebre y purifica la sangre.

Para consumirla se hierven los tallos y se toman con miel.

Durante mi intervención sobre estos remedios naturales, hubo mucha participación. Algunos me preguntaron qué debían hacer si se les hacía difícil encontrar todos los alimentos que nombré.

En realidad, eso no importa. Si solo disfrutas de 5 de ellos, está perfecto. Recuerda que, principalmente, debes tener una dieta saludable y adecuada con tu condición, además de cumplir con el tratamiento médico correspondiente.

La idea es apoyar y nutrir al organismo para que su propio sistema inmunológico sea capaz de enfrentar la enfermedad y recuperarse en corto tiempo sin secuelas graves.

“Si te ha gustado este artículo y tienes un interés sincero en aprender cómo puedes vivir más sano, me gustaría regalarte una copia de mi último libro #Yo Puedo con la Dra Cocó.

Pulsa Aquí para tu E-book Gratis, llegará a tu email en unos momentos.

Si la página te da un mensaje de error es porque no has entrado la dirección bien. Vuélvelo a intentar, asegurando no haber dejado ningún espacio antes, después o entre las letras de tu dirección.”