8 Remedios Caseros Para Desinflamar Las Encías

En otras ocasiones os he comentado lo importante que es para mí, compartir con mi familia. Dentro de mi familia, existe un grupo especial, con el cual compartimos en casa, con toda confianza y respeto. Ellos son nuestros amigos más íntimos.

Hace aproximadamente unos dos meses, les invitamos a cenar a una de esas parejas especiales. Conversamos mucho sobre nuestros niños, las rutinas del colegio y de algunos temas del clima, pues a ellos les encanta.

Estando en la sobremesa, mi amiga comenta en voz alta, que su esposo estaba padeciendo desde hacía unos días, un pequeño sangramiento en las encías. Me acerqué a él y en efecto tenía un cierto nivel de inflamación en las encías. Como apasionada de la salud, le ilustré de muchas formas la importancia de una buena higiene bucal y le hice algunas recomendaciones naturales para tratar su problema de salud. Le expresé que lo que estaba padeciendo era un cuadro claro de gingivitis.

Conozcamos nuestra boca

En la cavidad bucal, que es el inicio de nuestro sistema digestivo se encuentran los dientes, insertos en una cripta ósea o hueso alveolar. Dicho hueso alveolar está protegido por una mucosa especializada denominada encía.

El resto de la cavidad oral está cubierto con una membrana mucosa oral. El número de piezas dentales en adultos es de 32. De las cuales, dieciséis se encuentran en la en la mandíbula y dieciséis en el maxilar superior.

Es importante que sepamos que existe un componente muy importante que permite el aporte de nutrientes a los diversos componentes de las piezas dentales, incluyendo encías, hueso alveolar y cemento radicular. Se le denomina ligamento periodontal y junto a los componentes mencionados, forman el periodonto, que es una parte importante del sistema masticatorio. A sabiendas de su importancia para nuestra salud y calidad de vida debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para cuidarlo y preservarlo.

¿Qué se entiende por gingivitis?

La gingivitis es una enfermedad bucal leve, que causa irritación, hinchazón (inflamación) y enrojecimiento de las encías. Si no se trata a tiempo la gingivitis, puede en muchas ocasiones transformarse en una enfermedad más agresiva, denominada periodontitis. La periodontitis viene acompañada de dolor y sangramiento de las encías, dolor al masticar los alimentos y en muchos casos perdida de los dientes. Afortunadamente esta enfermedad es reversible, si se trata a tiempo. Las enfermedades vinculadas a las encías se llaman periodontales.

¿Cuáles son las causas más frecuentes?

En nuestra cavidad bucal abundan muchos tipos de bacterias, ellas junto con la saliva y los restos alimentarios forman una placa. Esta placa, es blanda y de color blanco amarillento. Ella puede ser retirada con un correcto cepillado y el uso del hilo dental.

Sin embargo, no todas las personas poseen hábitos correctos de higiene bucal y dental. Cuando este hábito falla, se produce la formación del desagradable sarro. Esta placa endurecida puede acarrear muchas complicaciones, por lo que debe ser retirado por intervención de un odontólogo.

¿Existen factores de riesgo?

Ciertamente, existen una serie de factores que hacen que seamos propensos a sufrir de enfermedad periodontal. Dentro de ellos destacan:

• Hábito de fumar o mascar tabaco.
• Diabetes
• Higiene bucal deficiente.
• Metabolismo hormonal por efecto del desarrollo en niñas, envejecimiento en mujeres y embarazo.
• Uso de anticonceptivos orales.
• Estrés.
• Piezas dentales torcidas.
• Mal estado de los rellenos de las piezas dentales.
• Prótesis dentales en mal estado o defectuosas.
• Uso de medicamentos que inciden en la disminución de secreción de saliva.
• Padecimiento de inmunodeficiencias como el SIDA y los medicamentos asociados al tratamiento de la enfermedad.
• Mecanismos asociados a la genética.
• Se ha encontrado que la enfermedad periodontal se incrementa con la edad. Las estadísticas indican que el 70.1% de los adultos, que superan los 65 años padecen de enfermedad periodontal.
• Se ha establecido que en la población masculina existe un mayor porcentaje de padecerla (56,4%).  En la población femenina el porcentaje es menor (38,4%)

¿Cuáles son los síntomas?

Existen una serie de síntomas que pueden guiarnos para detectar si estamos padeciendo una enfermedad periodontal. Los más frecuentes son:

• Halitosis recurrente
• Inflamación y enrojecimiento de las encías
• Encías blandas y sangrantes
• Dolor al masticar los alimentos
• Presencia de piezas dentales flojas
• Sensibilidad en las piezas dentales
• Retracción de las encías, dejando al descubierto las raíces de los dientes

Consejos útiles

• Desde niños, se nos van inculcando buenos hábitos de higiene dental. Es muy importante no descuidar nuestra salud bucal y valorar todos los elementos que constituyen nuestro sistema masticatorio. Por eso es importante recordar algo que ya hemos escuchado desde hace mucho.
• No olvidar que el cepillado es la técnica más efectiva para eliminar la placa bacteriana. Es importante realizarlo al menos dos veces al día utilizando una pasta dental con flúor.
• La correcta higiene bucal, supone el uso frecuente del hilo dental. Su uso frecuente permitirá que la placa interdental salga y no se endurezca.
• Estudios muy recientes encontraron un hallazgo interesante .Es más efectivo para la eliminación de la placa, hacer uso del hilo dental y luego realizar el cepillado. ¿Recuerdan que por mucho tiempo se recomendó al revés?
• Muy importante acudir al menos una vez al año al odontólogo. En caso de que padezcas alguno de los factores de riesgo, es muy importante acudir con más frecuencia.
• Muy importante dejar el hábito del cigarrillo
• Si presentas diabetes, es importante mantener niveles adecuados de glucosa en sangre. Se ha comprobado que una diabetes mal controlada, incide en un aumento y proliferación de bacterias que consumen azúcar en tu boca. Esto acarrea los inconvenientes vinculados a la placa dental. Una dieta ceto vegana puede favorecer el control de glucosa en la sangre.

Remedios caseros para desinflamar las encías rápido

Considero muy importante, actuar preventivamente durante la etapa de gingivitis, en caso de que la padezcamos. Es bien conocido que más allá de lo barato que puedan resultar los remedios naturales, existe la gran ventaja de no tener efectos perjudiciales como la medicina tradicional.

1. Enjuague de agua tibia y sal

Se ha comprobado que los enjuagues en base a alcohol pueden ser carcinogénicos. Este enjuague natural que les traigo, es utilizado desde tiempos ancestrales con excelentes resultados. Puede servir para: combatir bacterias bucales, remover los residuos, calmar el dolor por la inflamación y evitar la halitosis.

Ingredientes

• Un vaso de agua filtrada tibia
• ½ a ¾ de cucharadita de sal.

Procedimiento

• Añade la sal en el vaso de agua tibia y mezcla hasta disolver.
• Haz gargarismos con el contenido del vaso.
• Utiliza pequeños sorbos y déjalos en tu boca removiendo de un lado a otro durante unos treinta segundos.
• Expulsa la mezcla y repite hasta terminar la solución completa del vaso.
• Este procedimiento lo puedes repetir dos a tres veces al día.

2. Enjuague de salvia

Son muy bien conocidas las propiedades de la salvia. Posee propiedades antibacterianas muy efectivas.

Ingredientes

• Dos tazas de agua
• Dos cucharadas de salvia fresca o una cucharadita de salvia seca

Procedimiento

• Coloca el agua en una pequeña cacerola
• Añade la salvia de acuerdo a como la tengas en casa(fresca o en polvo)
• Hierve a fuego lento durante cinco a diez minutos.
• Deja que el agua se enfríe y cuela.
• Usa la solución como enjuague bucal dos a tres veces al día.

3. Enjuague de hojas de guayaba

Este remedio es también utilizado desde antiguo. Es muy efectivo para controlar la placa, aliviar el dolor y disminuir la inflamación. Posee excelentes propiedades antimicrobianas.

Ingredientes

• seis hojas tiernas de guayaba,
• ½ cucharadita de sal
• una taza de agua.

Procedimiento

• Tritura las hojas
• Pon a hervir el agua en un recipiente pequeño
• Añade el agua hervida en una taza
• Sumerge las hojas trituradas por unos quince minutos en el agua caliente
• Cuando esté tibia el agua, retira las hojas con un colador y añada la sal
• Utiliza el enjuague tibio y mantenlo por unos treinta segundos dentro de tu boca
• Puedes repetir dos o tres veces al día

4. Aceite de coco

El aceite de coco se ha utilizado durante muchos siglos en la medicina ayurvedica. Uno de los componentes básicos para su acción curativa le viene del ácido láurico, el más potente de los ácidos grasos. Es antiinflamatorio,antiviral y antimicrobiano. Ayuda de esta forma a disminuir la placa y los efectos de la gingivitis.

Procedimiento

• Coloca una o dos cucharaditas de aceite de coco en tu boca
• Agita el aceite dentro de tu boca como lo haces con un enjuague bucal
• Agítalo por unos veinte o treinta minutos, haciéndolo pasar dentro de los dientes
• No debes agitar el aceite en la parte posterior de tu boca
• Evita tragar el aceite, pues está cargado de bacterias y tóxicos
• Expulsa el aceite cuando se cumpla el tiempo y enjuaga con agua
• Luego cepilla tus dientes normalmente
• Si al principio no puedes tolerar el aceite en tu boca por tanto tiempo, inicia con menos de veinte minutos, hasta irte acostumbrando

5. Aceite de arimedadi

Se ha demostrado que el aceite de arimedadi inhibe el crecimiento de la placa y mejora los síntomas de la gingivitis. También, favorece la reducción de la hinchazón y fortalece los dientes y las encías. Este remedio no es conveniente si padeces de sinusitis.

Procedimiento

•  Coloca una o dos cucharaditas de aceite de arimedadi en tu boca
•  Agita el aceite dentro de tu boca como lo haces con un enjuague bucal
•  Agítalo por unos veinte o treinta minutos dentro de toda tu boca, haciéndolo pasar dentro de los dientes
•  No debes agitar el aceite en la parte posterior de tu boca
•  Evita tragar el aceite, pues está cargado de bacterias y tóxicos
•  Escupe el aceite cuando se cumpla el tiempo y enjuaga con agua
•  Luego cepilla tus dientes normalmente
•  Si al principio no puedes tolerar el aceite en tu boca por tanto tiempo, inicia con menos de veinte minutos, hasta irte acostumbrando

6. Enjuague de Aloe vera

Se ha comprobado que el Aloe es tan potente como la clorhexidina en sus efectos sobre la placa dental y los síntomas asociados a la gingivitis.

Ingredientes

• Jugo de Aloe media taza
• Agua filtrada media taza
• Bicarbonato de sodio, una cucharadita y media
• Aceite esencial de menta, dos gotas
• Esencia de árbol de té, una gota

Procedimiento

En un recipiente con tapa hermética (puede ser una botella) mezclar todos los ingredientes. Agitar bien hasta disolver todo el bicarbonato presente. Tomar una pequeña porción y enjuagar por unos treinta segundos. Hazlo pasar con fuerza entre los dientes. Puedes repetir dos o tres veces al día.

Nota: Si no consigues jugo de aloe comercial, puedes preparar el jugo en casa, utilizando el gel contenido en una pulgada de hoja de aloe orgánico. Incluso puedes aplicar el gel natural sobre las encías, dejarlo actuar y enjuagar con agua filtrada.

7. Jugo De Limón

Desde tiempos ancestrales, los frutos con alto contenido de vitamina C se han utilizado en el combate y prevención de muchas enfermedades. Es bien sabido que la vitamina C, es un potente antioxidante y además un potente estimulador del sistema inmunológico. Propicia además la producción de colágeno, favoreciendo la salud de las encías.

Ingredientes: un vaso de agua filtrada, una cucharada de jugo de limón.

Procedimiento

• Añade el jugo de limón al agua y agita hasta homogenizar la mezcla.
• Úsalo como enjuague bucal, agitando bien durante uno a dos minutos
• Escupe e inicia de nuevo hasta emplear toda la mezcla que preparaste
• Al finalizar enjuaga tu boca con agua filtrada

8. Aceite De Mostaza y Sal

El aceite de mostaza ha sido empleado con mucho éxito en el alivio de las encías inflamadas. Masajea las encías con la mezcla de aceite de mostaza y sal, aprovechando las propiedades antimicrobianas de ambos. Es un excelente recurso que ayuda a combatir la inflamación y activar la circulación en el tejido de las encías.

Ingredientes: Aceite de mostaza una cucharadita y un cuarto de cucharadita de sal.

Procedimiento

• En un plato pequeño vierte el aceite y añade la sal.
• Mézclalos hasta disolver la sal.
• Impregna tus dedos con esta mezcla y masajea la encía por un lapso de dos a tres minutos.
• Deja actuar por un minuto y enjuaga con agua tibia
• Puedes repetir este procedimiento dos veces al día y experimentarás mucho alivio.

Algunas consideraciones basadas en Investigaciones

• Aunque parezca insólito, se han realizado estudios, que vinculan de forma directa a la osteoporosis con la pérdida ósea de la mandíbula. Esto es un impacto directo para la pérdida de piezas dentales.
• Se ha encontrado que muchas bacterias que crecen en la cavidad oral, son aspiradas a los pulmones. Esto por      supuesto, acarrea enfermedades respiratorias.
• Adicionalmente a esto, se ha descubierto que los hombres con enfermedad periodontal son más propensos a sufrir diversos tipos de cáncer. Entre ellos destacan: riñón, páncreas y tejido sanguíneo.
• Como dato interesante, os menciono que la ciencia ha encontrado que existe una vinculación entre la enfermedad periodontal y la cardiovascular. Se cree que la inflamación de las encías puede afectar el riesgo de enfermedad cardiovascular.
• El cuidado permanente, el monitoreo y la higiene de nuestra boca, es un elemento muy importante a considerar para nuestra salud en general.
• A nivel mundial existen cuatro enfermedades no transmisibles que son las más importantes. Dentro de ellas destacan las cardiovasculares, el cáncer, las enfermedades pulmonares y la diabetes.
• Las enfermedades orales poseen factores de riesgo muy parecido a dichas enfermedades. Es importante mencionar que las enfermedades orales ocupan el cuarto lugar en cuanto a costos, en los países desarrollados. Ahora bien, dentro de las enfermedades de la cavidad oral, destacan la caries y la gingivitis.

Mi amiga, en días posteriores a la reunión en casa, me expresó casi avergonzada que su esposo no era muy amigo de utilizar el hilo dental. Por supuesto, esta negativa a realizar una adecuada higiene le dio un ligero sobresalto. Afortunadamente, siguió al pie de la letra uno de los remedios caseros que menciono en el post y pudo superar la gingivitis.  Ahora en su rutina de higiene bucal ha comenzado a incorporar  el uso del hilo dental.

Cuida tu cavidad bucal y en especial tus dientes, ellos también reflejan tu vitalidad.  Recuerdad que: “Es más sencillo obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada(William Shakespeare)”

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