A finales del verano me llamó una querida amiga, llamada Anna Lee. Estaba un poco preocupada porque a su hijo le diagnosticaron una infección parasitaria llamada giardiasis.
El chico, Mike, tiene unos 19 años y practica campismo. Durante ese verano visitó una región llena de arroyos y lagos en los que disfrutó nadando. Unas semanas después de su regreso, comenzaron los síntomas.
Aunque Mike ya estaba bajo tratamiento médico, Anna Lee quería saber si existían tratamientos naturales para la giardiasis.
Su idea era acompañar el tratamiento médico con alimentos que contribuyeran a eliminar las giardias y a disminuir los síntomas, tanto de la infección como los efectos secundarios del tratamiento.
Le di algunas ideas que comparto en este artículo con ustedes.
¿Qué son giardias?
Las giardias son organismos microscópicos llamados protozoos que son parásitos intestinales.
Estos microorganismos viven normalmente en medios acuáticos, especialmente donde el agua no es tratada especialmente en ríos, arroyos y lagos de las zonas montañosas son lugares ideales, pues hay animales que son vectores y defecan cerca de las aguas.
Se dice que un ser vivo es un vector cuando transporta a otro, en este caso, animales infectados de giardiasis.
Las giardias son parásitos porque viven y se alimentan de las sustancias que produce otro organismo vivo.
Es importante aclarar que, aunque estos protozoos son comunes en zonas montañosas, también pueden estar en ciudades y zonas urbanas.
Hay que diferenciar de otros microorganismos que viven en nosotros, pero con los que tenemos una relación simbiótica, es decir, nos beneficiamos mutuamente. En cambio las giardias, como organismos parasitarios, son dañinas y capaces de provocar enfermedades y malestares intestinales.
Cómo se contagia la giardiasis
Una vez las giardias infectan el intestino de la víctima, estas pasan a las heces y son expulsadas, lo que inicia el ciclo en otro organismo que esté en contacto con estas deposiciones contaminadas.
Estos microorganismos pueden vivir por un largo período fuera del huésped.
La forma más común de contraerlo es a través del consumo accidental de agua contaminada. También al estar en contacto con heces (por ejemplo, pañales de niños huéspedes) y no lavarse las manos adecuadamente.
El consumo en alimentos es menos probable, ya que el calor al cocinar los parásitos mueren. Por supuesto, una manipulación inadecuada de alimentos o enjuagarlos en agua contaminada también son causas de infección.
Aunque menos probable, pero igual posible, es contraer giardias por sexo anal sin protección.
Cuáles son los síntomas de la giardiasis
El síntoma principal de la infección por giardias son deposiciones frecuentes y líquidas, es decir, diarrea. También es posible presentar heces que flotan por alto contenido graso y por estar llenas de aire. De hecho, la flatulencia es otro síntoma de la giardiasis.
Son características las náuseas, vómitos, dolores estomacales parecidos a calambres.
Otros síntomas son fatiga o cansancio, dolores de cabeza, pérdida de apetito, inflamación abdominal.
Si los vómitos y las diarreas son muy agudos, puede degenerar en deshidratación e, incluso, pérdida de peso. Si esos malestares duran más de una semana, es necesario ir al médico, especialmente si se ha estado en zonas de alta exposición.
En el caso de un bebé, se debe buscar atención médica si la diarrea dura más de dos o tres días o si ha tenido más de seis deposiciones en menos de 24 horas. El riesgo de deshidratación es muy grande en niños pequeños.
Sin embargo, hay un detalle adicional: también se puede ser vector de parásitos sin presentar síntomas.
¿Cómo se diagnostica la giardiasis?
En cuanto acudas a tu proveedor de salud, seguro te indicará hacerte exámenes de heces, solo de esta forma se evidencia la presencia de protozoos en las deposiciones.
Es probable, dependiendo de los síntomas y la gravedad con la que se presenten, que debas llevar muestras por varios días.
Una vez el bioanalista reporte en el resultado que hay giardias, el doctor recetará un fármaco antibiótico desparasitante. En la mayoría de los casos indicará metronidazol o tinidazol. Estos medicamentos se usan cuando se detectan parásitos microscópicos.
El metronidazol se toma de cinco a siete días. Puede causar náuseas y dejar un sabor metálico en la boca y, en casos raros, puede haber mareos y somnolencias.
El tinidazol puede ser tan eficaz como el metronidazol y casi siempre se receta una sola dosis para tratar la giardiasis.
En el caso de niños pequeños, es común la nitazoxanida porque está disponible en forma líquida y solo se toma durante tres días.
La paromomicina es otra opción y se administra en tres dosis en el transcurso de 5 a 10 días.
Ninguno de estos fármacos deben tomarlo las mujeres embarazadas, ella deben esperar hasta después del parto antes de tomar cualquier medicamento para la giardiasis.
Si el paciente es un adolescente o adulto, es necesario que evite el alcohol incluso 48 horas después de haber terminado el tratamiento.
Cabe la posibilidad de que otros miembros de la familia estén infectados, así que es posible que el personal médico recete estos medicamentos a todos los que pudieron estar potencialmente expuestos.
¿Se puede prevenir la giardiasis?
En realidad, no puede prevenirse una infección por giardias. Lo que sí se puede hacer es disminuir los riesgos de contraerlas.
Las medidas básicas son: lavarse las manos con frecuencia de una forma adecuada y hervir el agua, esto es especialmente importante si no se vive en un lugar que garantice la potabilidad del agua.
Si viajas, especialmente a zonas donde es común, es preferible que compres agua embotellada si no puedes hervirla. Incluso toma en cuenta que necesitarás agua para lavarte los dientes.
Si trabajas en lugares donde hay niños pequeños y bebés, es importante el lavado de las manos después de deshacerte de los pañales.
En el caso de visitar estanques, arroyos o ríos, evita tragar agua o recoger agua superficial para beber.
Lleva siempre contigo tu agua embotellada o químicos para desinfectar el agua.
No olvides tomar precauciones en caso de prácticas sexuales relacionadas con la propagación de las giardias.
Tratamientos naturales contra las giardias
Estas recomendaciones son para contribuir con el tratamiento médico contra la giardiasis y aliviar los efectos secundarios.
También puedes pedir recomendaciones a tu médico sobre alimentos y hierbas que sea útiles para esta patología.
1. Semillas de calabaza
Las semillas de la calabaza son un remedio natural comúnmente para la infección de parásitos intestinales, tanto protozoos como gusanos.
Normalmente, se tritura la semilla y se mezcla con alguna bebida y, si no te resulta desagradable, puedes comerlas con cebollas y leche de soja. Aunque también las puedes comer ya secas, expuestas al sol, o tostadas.
Las semillas de calabazas aportan vitaminas, liberales ácidos grasos y carbohidratos, para complementar tu alimentación.
2. Uva de Oregón
La uva de Oregón es un arbusto de hoja perenne de América del Norte con racimos de bayas moradas.
Resulta útil contra la giardiasis gracias a un alcaloide amarillo activo llamado berberina.
En su libro de 2000, “The Herbal Drugstore”, la Dra. Linda B. White y el experto en plantas medicinales Steven Foster recomiendan las capsulas o la tintura de esta planta para tratar la infección.
La uva de Oregón está contraindicada en casos de problemas gastrointestinales crónicos.
3. Ajo
El Allium sativum o ajo, tiene una larga tradición en la historia de la medicina.
Por esta razón, el ajo tiene una amplia gama de usos en varias patologías que incluye las infecciones parasitarias digestivas e intestinales.
En 2003, Jason Hawrelak, ND, aseguró que esta planta inhibe la movilidad de Giardia lamblia y su capacidad para adherirse a las células humanas. Además, puede tener un efecto letal sobre estos parásitos.
Al parecer, estimula la producción de una enzima que conduce a la degradación celular.
Por supuesto, el ajo tiene contraindicaciones: puede causar malestar estomacal y aumentar el riesgo de hemorragia, por esta razón, debes consultar siempre antes de consumirlo y hacerlo con moderación.
4. Zanahorias
Los beneficios de la zanahoria son múltiples y maravillosos. Sus nutrientes fortalecen el sistema inmunológico y lo acondiciona para “pelear” contra la presencia de microorganismos. Además, es útil contra los radicales libres.
Esto quiere decir que retrasa el envejecimiento y previene el cáncer y otras enfermedades degenerativas. A tantas cosas buenas, se suma el hecho de que también se utiliza contra las infecciones parasitarias como la giardiasis.
Puedes comerla cruda o extraer el jugo para tomarlo con miel. Le puedes agregar las semillas de calabazas molidas.
5. Pippali Rasayana
Este es un fármaco de la India preparado con dos ingredientes: pimienta larga (Piper longum) y palash (Butea monosperma).
En un estudio de caso sobre el efecto del Pippali Rasayana en casos con giardiasis, se evidenció que después de 15 días de tratamiento, las giardias desaparecieron por completo en 23 de los 25 pacientes.
Los signos y síntomas generales de mala salud y malestar abdominal, la presencia de moco, células de pus y glóbulos rojos se redujeron significativamente.
Incluso, hubo una mejora notable en el perfil clínico y hematológico de los pacientes.
Al parecer, ambas plantas tienen un efecto sinérgico al estimular la respuesta inmune.
Anna Lee me comentó luego que Mike mejoró y que mis recomendaciones les fueron de gran utilidad, tanto para eliminar la infección como los síntomas y efectos secundarios de los fármacos.
Aliviada, me dijo que Mike tomó más en serio los consejos para disminuir el riesgo de reinfección.
Por supuesto, le recordé que mantener una alimentación saludable y natural, hidratarse de forma adecuada y una vida activa, es la mejor forma de fortalecer su sistema inmunológico para que enfrente mejor cualquier patología.
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Referencias
https://www.healthline.com/health/giardiasis
https://www.emedicinehealth.com/giardiasis/article_em.htm
https://www.medicinenet.com/giardia_lamblia/article.htm
