Para Andrea, asistente de enfermería en un centro de retiro para adultos mayores, es terrible ver como los ancianos van deteriorándose por el Alzheimer y la demencia senil. Ella dice que es lo más triste del final de la vida.
A pesar de que los internos del centro reciben todos los cuidados requeridos en materia de atención médica, psicológica, nutricional, recreacional y cuidado personal, Andrea asegura que nada puede evitar que poco a poco vayan sumiéndose en la oscuridad.
Me cuenta que es impactante y muy triste cuando sus seres queridos los visitan y comparten con ellos. Es triste porque los ancianos con estas condiciones no los reconocen. Ante la visita de sus familiares, los abuelitos la llaman y le preguntan “quienes son estos chicos tan simpáticos”, aseguran no conocerlos.
Sin embargo, Consuelo Márquez, de 82 años, conserva una lucidez impresionante. Andrea me cuenta que Consuelo lee mucho y pasa una o dos horas frente a la pantalla de su laptop. Además, escribe poemas, recetas de cocina, da consejos a sus compañeras y camina todos los días.
Un día, cuando Andrea le preguntó, la abuela le confesó que el secreto de su buena salud mental era el ginkgo biloba. Su nieta le lleva en cada visita, además, su médico le dijo que esta planta era maravillosa para el cerebro.
Consuelo afirma que ha tomado ginkgo biloba desde que cumplió 60 años. Es asidua lectora de mi blog y le ha recomendado a Andrea sumarse al Reto #Yo Puedo. Andrea quiere que llegada la edad de Consuelo, pueda tener la misma lucidez y energía. Por eso, me ha escrito preguntándome acerca de los beneficios del ginkgo biloba para el cerebro.
Protege al cerebro de la toxicidad
Estudios científicos han demostrado que el extracto de esta interesante planta protege al cerebro de la toxicidad producida por el cloruro de aluminio. Esta sustancia está relacionada con la enfermedad de Alzheimer y la demencia senil.
Estos estudios sugieren que el ginkgo biloba posee antioxidantes que ayudan a proteger las células del daño de los radicales libres dentro de los sistemas circulatorio y nervioso.
Las investigaciones sobre los efectos del ginkgo biloba en relación a la salud cerebral, revelan que es eficaz en tratamiento de la demencia senil y el Alzheimer. Pero sobre todo en la etapa preventiva.
El árbol de ginkgo biloba está entre los más antiguos del mundo. Sus semillas se han utilizado en la medicina tradicional china para la salud cerebral desde hace más de tres mil años, especialmente para potencia la memoria.
El ginkgo biloba ha sido estudiado y procesado desde hace muchos años y hoy se puede adquirir en:
- Tabletas
- Cápsulas
- Extractos
- Infusiones
Es además un ingrediente principal de cosméticos y productos de higiene personal.
Reduce el riesgo de padecer enfermedades neurodegenerativas
Cada vez es más evidente que la toxicidad del aluminio tiene mucha responsabilidad en el desarrollo de enfermedades neurodegenerativas. Esto se debe a que apunta a las mismas áreas del sistema nervioso y el cerebro. Las personas con toxicidad de aluminio presentan muchos de los síntomas de quienes padecen:
- Hiperactividad
- Déficit de atención
- Demencia
- Parkinson
- Autismo
Al inhalar vapores o polvo de aluminio, las partículas de este metal van directamente a los pulmones. De allí, pasan al torrente sanguíneo, distribuyéndose por todo el cuerpo, incluyendo huesos y cerebro. La exposición al aluminio es un riesgo laboral para quienes trabajan en fábricas, agricultura, soldadura y minería. Pero también se ingieren estos vapores en el humo del cigarrillo.
Otros beneficios del ginkgo biloba para la salud
Además de sus propiedades estimulantes de la memoria y la cognición, el ginkgo biloba aporta otros beneficios a nuestra salud que también son importantes. Algunos de ellos son los siguientes:
- Disminuye el dolor en las piernas causado por el engrosamiento de las arterias
- Trata problemas oculares como la degeneración macular y el glaucoma
- Apoya al tratamiento de la disfunción sexual
- Ayuda a combatir la esclerosis múltiple y la tinnitus
- Puede aumentar el suministro de sangre al reducir su viscosidad.
- Estimula los neurotransmisores
- Reduce a los radicales libres
¿Cuáles son los riesgos de consumir ginkgo biloba?
El consumo de ginkgo biloba es seguro para adultos saludables, si se toma por vía oral en cantidades moderadas. Esto, según el Centro Nacional de Salud Complementaria e Integral de Estados Unidos. Existe el riesgo de sufrir efectos secundarios por el consumo indebido de ginkgo biloba como:
- Mareos
- Dolor de cabeza
- Reacciones alérgicas en la piel
- Malestar estomacal
En mujeres embarazadas se corre el riesgo de provocar sangrados y, de ya presentarlos, los aumenta. El ginkgo biloba interactúa con los diluyentes de la sangre, así que evita consumirlo si estas tomando anticoagulantes o antes de una cirugía.
Las semillas de ginkgo biloba tostadas o crudas causan efectos secundarios graves. Esto debido a la toxicidad de algunos de sus componentes. Por ello no es recomendable el consumo de estas semillas.
Un estudio realizado en 2013, sugiere que el consumo indebido del ginkgo biloba puede aumentar el riesgo de cáncer de tiroides e hígado. Por eso es de gran importancia no exceder su consumo.
Si consumes ginkgo biloba añade vitamina B a tu organismo
Las semillas del ginkgo biloba contienen ginkgotoxina, una antivitamina que puede causar problemas neurológicos a personas con deficiencia de vitaminas del complejo B. De manera que es importante consumir estas vitaminas para contrarrestar a esta sustancia tóxica.
Pero las vitaminas del complejo B no sólo deben consumirse si se toma ginkgo biloba. Estas vitaminas ayudan a reducir el encogimiento del cerebro y prevenir enfermedades cerebrales degenerativas. Particularmente, las que ayudan a prevenir el Alzheimer son el ácido fólico, las vitaminas B6 y B12.
Pero ten en cuenta que, como toda enfermedad crónica, la mejor estrategia para combatir el Alzheimer es prevenirlo. Por eso te doy estas cuatro recomendaciones alimenticias básicas para mantener la salud del cerebro:
1. Consume comida real u orgánica
Asegúrate de comprar carne de animales criados con pastura y productos naturales. Así mismo deben ser los vegetales, cultivados en granjas orgánicas donde no son tratados con pesticidas ni fertilizantes químicos.
Evita los alimentos procesados ya que contienen sustancias perjudiciales para tu cerebro como endulzantes artificiales, azúcares refinados, gluten, pesticidas e ingredientes transgénicos. Mantén tu fructuosa por debajo de los 25 gramos diarios si estas en buen estado de salud, o por debajo de los 15 gramos si eres resistente a la insulina y/o la leptina.
1. Reemplaza los carbohidratos refinados por grasas saludables
El cerebro no necesita azúcares ni carbohidratos. Pero sí requiere de grasas saludables como las saturadas de origen animal y omega-3 de origen animal. Estas grasas también protegen a las mitocondrias. Las grasas saludables que puedes incluir en tu alimentación para proteger tu cerebro son:
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Elimina las grasas trans y grasas hidrogenadas, incluyendo la margarina y aceites vegetales como los de canola y soya.
2. Evita el gluten y la caseína
Para proteger tu cerebro, es importante que minimices o elimines por completo el consumo de alimentos que contengan gluten y caseína. Entre ellos, los productos lácteos pasteurizados y los elaborados a base de trigo. Pero no elimines las grasas lácteas como la mantequilla.
3. Fortalece tu flora intestinal
Además de evitar los alimentos ya mencionados, también es importante eliminar el agua fluorada, los antibióticos y productos antibacterianos. Aumenta tu consumo de yogurt y otros alimentos fermentados, a fin de fortalecer tu flora intestinal y así fortalecer evitar que las toxinas dañen tu cerebro.
Técnicas para cuidar la función cerebral
Además de la alimentación, quiero contarte cómo puedes ayudar a tu cuerpo a preservar la salud de tu cerebro. La primera por supuesto es añadiendo el consumo de ginkgo biloba a tu alimentación, siempre con moderación. Pero además te recomiendo lo siguiente:
Duerme bien
Es vital para la salud en general dormir lo suficiente. Lo ideal es de 7 a 9 horas por noche para los adultos, y más para adolescentes y niños, alrededor de 10 horas.
Haz ejercicios
Evita pasar más de tres horas sentado. Mantente en movimiento todo lo que puedas. Practica alguna rutina de actividad física como caminar, gimnasia, estiramientos y entrenamientos de fuerza. Los especialistas sugieren que el ejercicio puede desencadenar cambios en la forma en que se metaboliza la proteína precursora amiloidea, ralentizando el inicio y la progresión del Alzheimer.
Ayuna de manera intermitente
El ayuno intermitente estimula al cuerpo a quemar grasa y reparar la resistencia a la insulina y la leptina. Ambas resistencias son factores que apoyan al Alzheimer.
Optimiza tus niveles de vitamina D
Contar con vitamina D suficiente, ayuda a tu sistema inmunológico a combatir la inflamación asociada con el Alzheimer. La mejor manera de optimizarla, es exponerte con prudencia a la luz del sol. Toma suplementos orales de vitamina D3, junto a vitamina K2 y magnesio.
Retira las amalgamas dentales
Las amalgamas o rellenos dentales son 50% mercurio, una fuente de toxicidad de metales pesados. Si tienes amalgamas, busca un odontólogo biológico para retirarlas e inicia un protocolo de desintoxicación de mercurio.
Reduce el contacto con el aluminio
El aluminio está presente en utensilios de cocina antiadherentes, antitranspirantes y vacunas coadyuvantes. Evita el contacto con estos productos y así reduces el riesgo de absorber partículas tóxicas metálicas.
Evita las vacunas contra la gripe
Aunque se han hecho grandes campañas, promoviendo la aplicación de la vacuna contra la gripe, la verdad es que la mayoría de estas vacunas contienen aluminio y mercurio.
Reduce el consumo de anticolinérgicos y estatinas
Estas sustancias se encuentran en medicamentos como analgésicos nocturnos, pastillas para dormir, ciertos antidepresivos, antihistamínicos, medicamentos la incontinencia y algunos narcóticos contra el dolor.
Desafía tu mente
El cerebro también necesita ejercitarse. Realiza juegos de desafió mental como crucigramas, ajedrez y otros juegos de mesa que exijan concentración, cálculos y razonamiento. La lectura y la creatividad literaria son también excelentes ejercicios para tu cerebro.
En general, cualquier acción que requiera creatividad. Tocar un instrumento musical, pintar, dibujar o moldear, fortalecen el cerebro.
Andrea está convencida de que la lucidez de Consuelo es gracias al ginkgo biloba y a sus hábitos de vida saludable. Por ello, ha decidido seguir tanto su consejo como el mío y empezará esta misma semana a cuidar sus hábitos alimenticios y de vida.
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