El cuerpo humano está constituido por un 60 a 70% de agua, por si fuera poco el 90% del peso del cerebro es agua. Por ello, la recomendación primaria para tener una buena salud es beber agua a diario en una cantidad adecuada.
Sobre este fundamental tema me voy a referir por la solicitud de Madeleine, una seguidora de Filadelfia. Ella es una joven médico veterinario de 32 años, cuando hablo conmigo me comentó, que veía cómo repentinamente su piel estaba muy seca y marchita al igual que su cabello.
Sin embargo, aunque esta situación la incomodaba, lo que más le preocupaba era la taquicardia que sentía en las noches, cuando se acostaba a dormir. Madeleine me decía, que no entendía lo que le estaba ocurriendo y al comentárselo a su madre, ésta le preguntó si estaba tomando suficiente agua. Pues, todo lo que estaba experimentando podría relacionarse con una deshidratación.
Madeleine me expresaba, que le gustaría mi apoyo para aseverar si realmente una hidratación inadecuada podía causar los problemas de salud que ella estaba presentando. Dada la gran importancia de este tema lo comparto con todas en mi página.
Hablando sobre el agua
En el proceso evolutivo, cuando las especies primitivas comenzaron a dejar los océanos para vivir en tierra firme, la clave principal de sobrevivencia fue la hidratación. Por tanto, esto permite afirmar que el agua es esencial para la vida. Si hubiese que definir en una sola palabra el cuerpo humano, ésta sería agua.
El agua abarca el 75% del peso corporal de los bebés y hasta un 55% en los ancianos. Además, el agua es indispensable para la homeostasis celular. Es decir, para mantener el equilibrio que debe existir entre los órganos y la función que realizan.
Los riñones, por ejemplo, son más eficientes con un abastecimiento abundante de agua. Cuando los riñones no disponen de suficiente cantidad de agua, producen una orina más concentrada, lo que acarrea un mayor gasto de energía y mayor desgaste de sus tejidos.
Esto puede ocurrir cuando los riñones están bajo estrés, ante una dieta alta en sodio o sustancias tóxicas que debe eliminar. Por eso, tomar suficiente agua favorece la protección de este vital órgano.
La forma más adecuada de hidratar el organismo es tomando agua, ya que los alimentos que como sopas, batidos, entre otros, solo aportan un 20% del agua que requiere el cuerpo humano.
Las cinco razones más importantes para beber agua
Son muchas y variadas las razones por las que se debe tomar agua a diario. Así se tiene:
1. Beber agua es necesario para rendir al máximo
Como muchos saben, el ejercicio físico provoca deshidratación, lo cual genera un aumento de la necesidad de agua en el cuerpo humano. Estudios realizados confirman, que el rendimiento físico disminuye frente a la falta de líquido. Incluso, puede llegar a provocar fatiga y pérdida de control de la temperatura corporal, así como también disminuir la motivación.
En pruebas atléticas exigentes, los atletas pueden perder por el sudor de un 6 a 10% de su peso corporal. Esto puede conducir a la deshidratación si no hay una reposición de líquidos. Por ello es importante que antes, durante y después de la actividad física se repongan los líquidos en el organismo.
Estudios demuestran que el rendimiento se ve afectado en mayor dimensión, en climas templados y cálidos. Realizar ejercicios en condiciones de calor con reposición inadecuada de líquidos, se relaciona con hipertermia y disminución del gasto cardíaco. También, con la reducción del volumen del flujo sanguíneo al musculo y disminución de la presión sanguínea.
La recomendación, es que los atletas y deportistas en climas cálidos, en especial los niños, comiencen las actividades deportivas bien hidratados.
2. Es beneficioso para la adecuada función cerebral
El nivel de hidratación ejerce un gran impacto en el cerebro humano. Así se tiene que, niveles bajos de hidratación afectan el funcionamiento cognitivo y pueden producir alteraciones en el estado de ánimo, incluso puede generar dolor de cabeza. Asimismo, la sensación de fatiga y ansiedad pueden aumentar y reducir la memoria de trabajo.
La deshidratación, aunque sea leve, puede generar alteraciones en diferentes aspectos importantes de la función cognitiva como la concentración. Así como también el estado de alerta, y la memoria a corto plazo en niños, jóvenes y adultos mayores.
Lo mismo sucede con el funcionamiento físico. Niveles de deshidratación de leves a moderados afectan el rendimiento en tareas como la capacidad aritmética, seguimiento visomotor y habilidades psicomotoras.
3. Ayuda a prevenir afecciones en el organismo
En ocasiones, el dolor de cabeza puede presentarse por niveles bajos de hidratación en el cuerpo humano. De igual manera, la deshidratación en muchas personas es la principal causa de la migraña. Por lo tanto, tomar agua para mantenerte hidratado, es efectivo para tratar o prevenir dolores de cabeza.
En el caso de presentar algún problema con los bronquios, tomar agua en abundancia, ayuda a expectorar.
Para las personas que presentan cálculos renales, el tomar agua adecuadamente permite soltar los restos sólidos de sales ácidas y minerales que se acumulan en la orina. Además, el agua optimiza la función renal, moviendo de forma más rápida las toxinas a través de nuestro sistema.
Esto permite afirmar que el agua ayuda a desintoxicar el organismo, por lo tanto, una hidratación inapropiada significa que hay una función renal inapropiada.
Asimismo, las personas con desórdenes alimenticios como bulimia o anorexia o mujeres embarazadas que presentan vómitos, deben tomar abundante agua. Esto para ayudar a reponer en el organismo los líquidos vitales.
A su vez, tomar agua en forma adecuada, ayuda a estabilizar la tensión. En especial las personas que sufren de hipopresión deben mantener un apropiado nivel hídrico, pues esto ayuda a estabilizar la presión.
De igual manera, tomar agua contribuye con el movimiento del proceso digestivo a través de todo el sistema. Esto evita la manifestación del estreñimiento.
Dado que el agua ayuda a sentirse satisfecho por más tiempo, esto permite controlar el peso. Por ello beber agua o consumir alimentos con alto contenido de agua, es de gran ayuda.
El agua es el mejor hidratante para la piel, convirtiéndose en la defensa más adecuada contra las arrugas.
4. Ayuda al cuerpo a regular la temperatura
El mecanismo principal por el cual el organismo regula la temperatura, es mediante el agua. Además, el agua tiene una alta capacidad de absorción del calor, lo que le permite funcionar como un escudo protector contra los cambios bruscos de temperatura.
Por ello, lo recomendable es beber abundante agua en climas cálidos o con temperaturas elevadas.
5. Transporta nutrientes a todo el organismo
El agua por sí misma no posee nutrientes, pero si tiene la capacidad de absorber algunos minerales y transportarlos por todo nuestro organismo.
El agua proporciona importantes nutrientes a las células del organismo, en especial a las células musculares, retardando la fatiga muscular.
Además, es capaz de llevar nutrientes al interior de las células, donde al mismo tiempo ayuda a eliminar los desperdicios de las mismas.
¿Cuál es la cantidad de agua que se recomienda tomar?
Tomar demasiada agua puede llegar a ser peligroso, de igual modo en que no beber lo suficiente puede afectar negativamente a la salud. Por ello, para no caer en extremos se recomienda seguir a la Organización Mundial de la salud (OMS) que manifiesta: beber como mínimo dos litros de agua diarios. Y mantener así el cuerpo hidratado y sano.
Sin embargo, no hay una medida exacta de la cantidad de agua necesaria que sea igual para todo el mundo. La cantidad de agua diaria a tomar va depender de:
- Sexo
- Peso
- Clima
- Edad
- Embarazo
- Estado de lactancia
- Dieta
- Ingesta de electrolitos
- Actividad física
- Condiciones médicas crónicas.
Asimismo, se puede completar la ingesta diaria de agua a través de zumos, infusiones, sopas, frutas y verduras.
Método para beber agua y recibir todos sus beneficios
Conforme a la medicina Ayurvédica de la India, uno de los sistemas de sanación más antiguo, existen seis recomendaciones para beber agua adecuadamente:
- Tomar agua despacio. Al ser el interior del cuerpo humano un ambiente delicado y controlado, introducir el agua en forma muy rápida puede alterar este ambiente
- Beber agua tibia. El agua tibia estimula las enzimas digestivas naturales, mejorando así la digestión y la circulación sanguínea
- Comenzar el día tomando un vaso de agua. Beber agua tibia en ayuno, luego de ocho horas de sueño, purifica y rehidrata el organismo. Asimismo, estimula el metabolismo y contribuye a expulsar las toxinas del cuerpo que se acumulan durante la noche
- Se debe evitar tomar agua con las comidas, ya que la saliva y las enzimas digestivas se diluyen, haciendo que la digestión sea lenta y pesada
- Incrementar la absorción de agua. Esto se puede lograr añadiendo una pizca de sal marina sin refinar a cada vaso de agua
- Escuchar las señales que el cuerpo envía. Prestar atención a las señales de sed y beber agua tibia, para suplir las necesidades hídricas.
Señales enviadas por el cuerpo cuando necesita agua
Cuando el cuerpo ha perdido entre uno a dos por ciento de su contenido de agua, inmediatamente manda la señal haciéndote sentir sediento. No obstante, es probable que al momento de activarse el mecanismo de la sed ya la persona esté un poco deshidratada.
Efectivamente, esto es especialmente cierto en personas de avanzada edad. Por ello es necesario conocer otras señales, que el cuerpo manda indicándonos que necesita más agua.
Entre estas señales están:
- Fatiga
- Cambios de humor
- Dolor de espalda
- Dolor articular
- Piel opaca
- Piel seca
- Disminución en la frecuencia de micción
- Piel con arrugas pronunciadas
- Orina color amarillo oscuro
- Estreñimiento.
Un estudio publicado en el 2005 destacó los beneficios de tomar suficiente agua. Debido a que la deshidratación leve está asociada con varias afecciones de salud, como:
- Asma por ejercicio
- Infecciones del tracto urinario
- Enfermedad coronaria fatal
- Hiperglucemia en cetoacidosis diabética
- Urolitiasis (formación de cálculos en el tracto urinario)
- Tromboembolismo venoso (coagulo de sangre en venas profundas)
- Infarto cerebral (accidente cerebrovascular)
- Trastornos broncopulmonares.
Asimismo, existen otros síntomas que podrían indicar una deshidratación crónica. Estos síntomas son:
- Trastornos digestivos (como acidez estomacal)
- Confusión
- Ansiedad
- Envejecimiento prematuro
- Colesterol alto.
Prácticas que favorecen una mayor ingesta de agua
Dado que el organismo pierde agua todos los días, la misma debe reponerse para mantener los niveles idóneos. Esto ayuda en la autorregulación interna, que permite preservar la composición y propiedades del organismo (homeostasis), cuando se defiende de factores como enfermedades, ejercicio y exposición al calor. Así que, si la meta es mejorar la salud, aumentar el consumo de agua es necesaria
Entre las prácticas para tomar más agua es recomendable:
- Llevar siempre una botella de agua para hidratarse todo el día, en cualquier lugar
- Tomar agua filtrada para asegurarse que no tenga contaminantes
- Mantener una jarra de agua cerca
- Colocar en el teléfono una alarma como recordatorio para tomar agua
- Se puede usar una aplicación que te indique cuantos vasos de agua te has tomado en el día
- Agregar sabor al agua colocando unas gotas de limón, de esta forma resultará más agradable tomar agua.
¿Cuándo se considera demasiada agua?
Como se ha visto aquí, estar adecuadamente hidratados trae numerosos beneficios para la salud. Pero debe ser una hidratación como corresponda a cada quien, según sus propios requerimientos, pues beber agua en exceso puede provocar hiponatremia. La misma es una afección que se presenta cuando el nivel de sodio en sangre es muy bajo.
Esta afección hace que las células se expandan debido al exceso de agua. Esto podría dañar el cerebro por no tener capacidad para expandirse más allá del cráneo. Un estudio del British Journal of General Practice, menciona que la ingesta recomendada de agua por hora es de 400 a 800 mililitros.
La hiponatremia se puede reconocer por estos síntomas:
- Fatiga
- Letargo
- Náuseas
- Vómito
- Dolor de cabeza
- Desorientación
- Confusión.
Concluyendo
El agua es un líquido indispensable en el cuerpo y sustancial en funciones corporales, como en el mantenimiento del equilibrio celular.
El agua ayuda a compensar los líquidos del cuerpo responsables de funciones como la digestión, absorción y transporte de nutrientes. Así como la circulación sanguínea, producción de saliva y el mantenimiento de la temperatura corporal.
Tomar agua en la cantidad adecuada evita la deshidratación, la cual puede causar incoherencia al hablar. Al igual que debilidad, hipotensión (disminución rápida de la presión arterial al levantarse) y taquicardia.
Para Madeleine la información suministrada, la cual comparto con todas en mi post, fue de gran ayuda, por lo que está muy agradecida. Ella entendió, que se estaba hidratando deficientemente, pues como su trabajo es al aire libre y bajo el sol, requería mayor hidratación.
Madeleine corrigió el mal hábito de tomar poca agua y de inmediato las taquicardias se corrigieron. Asimismo, ve como su piel y cabello van recobrando su brillo y lozanía.
“Tomar agua es la mejor manera de hidratarse al menor costo”
Sara Abu Sabbah, Nutricionista
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