Las semillas de chía se encuentran entre los alimentos más saludables del planeta. Están cargadas de nutrientes que pueden tener importantes beneficios para el cuerpo y el cerebro. La chía es una excelente fuente de grasas omega-3 y potentes antioxidantes con efectos protectores cardíacos, antienvejecimiento y anticancerígenos.
Gracias a todas sus propiedades ha sido utilizada como un alimento beneficioso para el sistema digestivo y para controlar la diabetes. Cuenta con una concentración de ácidos grasos insaturados beneficiosos, proteínas sin gluten, vitaminas, minerales y compuestos fenólicos.
Sin embargo, las semillas de chía no son solamente una rica y potente fuente de alimentación. Sus propiedades le permiten ser un ingrediente importante para elaborar mascarillas que fomentan la función celular saludable de la piel y cabello. Sus ácidos grasos estimulan la formación de colágeno y elastina, los cuales apoyan la estructura de la piel y ayudan a mantener los niveles de humedad.
Quiero compartir aquí todos los beneficios que pueden otorgar las mascarillas de chía, y sobre todo, cómo usarlas como un tratamiento 100% natural. El mes pasado me contactó una fiel seguidora de Instagram. Me comentó que ya en varias ocasiones había acudido a centros de bellezas y había comprado en algunas tiendas algunas mascarillas para revitalizar su rostro. Sin embargo, por tener una piel altamente delicada, los químicos que estas mascarillas tenían la habían irritado, resultando peor el remedio que la enfermedad.
Ante esto me escribió en búsqueda de un tratamiento natural para cuidar su piel. Le hablé sobre la mascarilla en base a semillas de chía. La misma no solo permite lucir una piel fresca sino un cabello brilloso.
¿Qué es la chía?
Las semillas de chía provienen de la planta Salvia hispánica, la misma está relacionada con la menta. Estas pequeñas semillas negras se remontan a 3.500 años a.C. Fueron cultivadas en el Valle de México, donde las civilizaciones Azteca y Maya fueron las primeras en usarla. Incluso, en la época precolombiana la chía fue uno de los cuatros alimentos básicos más utilizados no solo en la alimentación, sino además en la elaboración de medicinas.
Sin embargo, a pesar de su antigua historia como un alimento básico, recientemente las semillas de chía fueron reconocidas como un superalimento. En este orden de ideas, durante los últimos años han crecido en popularidad, y actualmente son consumidas por personas que cada día toman más en serio su salud.
A pesar de su pequeño tamaño estas semillas contienen poderosos nutrientes. Por ejemplo, una porción de una onza de semillas de chía contiene:
- 11 gramos de fibra
- 4 gramos de proteína
- 9 gramos de grasa
- 18% de calcio
- 30% de manganeso
- 30% de magnesio
- 27% de fósforo
- Un gramo de carbohidratos digeribles
- Posee una gran cantidad de zinc, potasio y vitamina B1, B2 y B3
Todas estas propiedades lo convierten en una de las mejores fuentes de alimentación del mundo. Así mismo es importante destacar que las semillas de chía son un alimento integral que generalmente se cultiva orgánicamente y encima de todo esto, es completamente libre de gluten.
Es vital destacar que otra área en la que brillan las semillas de chía es en su alto contenido de antioxidantes, los cuales protegen las grasas sensibles de las semillas para que no se desconpongan. Los antioxidantes combaten la producción de radicales libres que pueden contribuir al envejecimiento y el cáncer.
Beneficios de las semillas de chía
Entre los numerosos los beneficios de estas semillas, destacan los siguientes:
1. Ayudan a perder peso
Como ya se ha visto, las semillas de chía tienen un alto contenido de fibra, este elemento puede ayudar a las personas a sentirse más satisfechas por más tiempo, y normalmente cuentan con poca cantidad de calorías. Del mismo modo, está demostrado que incrementar la ingesta de fibra es vital en el proceso de pérdida de peso.
Al hablar de cifras, las semillas de chía tienen aproximadamente 5 gramos de fibra por cucharada. Además, sus altos niveles de ácidos grasos omega-3 y ácido alfa-linoleico facilitan la pérdida de peso.
2. Es útil para el tratamiento contra la diverticulosis
La diverticulosis es una enfermedad que se caracteriza por la aparición de pequeños sacos inflamados en el tracto digestivo. Hay estudios que han demostrado que las dietas altas en fibra disminuyen la prevalencia en los brotes de la enfermedad, puesto que permiten la absorción de agua en el colon y hacen que las evacuaciones sean más fáciles.
Ante esto, una comida saludable y rica en fibra, con gran variedad de frutas y verduras permiten que se pueda reducir la presión e inflamación en el colon. Aunque no se conocen las causas exactas de esta enfermedad, la misma se asocia con una dieta baja en fibra.
3. Contribuyen a contrarrestar la enfermedad cardiovascular y el colesterol
Del mismo modo se ha demostrado que una mayor ingesta de fibra disminuye la presión arterial y los niveles de colesterol. Durante una revisión de 67 estudios llevada a cabo se encontró que un aumento de 10 gramos al día de fibra reducen el colesterol LDL, también conocido como colesterol malo, ocurriendo lo mismo con el colesterol total.
De igual forma, los estudios han demostrado que la fibra dietética desempeña un papel importante en la regulación del sistema inmunitario y la inflamación. De esta forma, se puede disminuir el riesgo de afecciones relacionadas con la inflamación, cáncer, obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares.
4. Pueden ayudar a un menor riesgo de desarrollar diabetes
Hay estudios que sugieren que las semillas de chía tienen la capacidad de convertir la glucosa en un carbohidrato de liberación lenta. Este proceso podría tener un efecto positivo en las personas que sufren de diabetes tipo 2.
Del mismo modo, las dietas altas en fibra se asocian con un menor riesgo de desarrollar diabetes. De igual modo, consumir comidas altas en fibra permite mantener estable el azúcar en la sangre. Por otro lado, el Instituto Nacional de Medicina reveló que las dietas con 14 gramos de fibra por cada 1.000 de calorías están asociadas con una reducción significativa en el riesgo de enfermedad coronaria y diabetes tipo 2.
5. Ayuda a la digestión y desintoxica
El consumo de semillas de chía previene el estreñimiento y promueve la regularidad del tracto digestivo. Su alto contenido de fibra permite regularizar los movimientos intestinales, los cuales son necesarios para la excreción diaria de toxinas a través de las heces y la bilis.
6. Combate las enfermedades del corazón
Los estudios demuestran que el omega-3 disminuye el riesgo de arritmia, trombosis y trastornos que pueden provocar ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Del mismo modo puede disminuir los niveles de LDL y triglicéridos. Es importante destacar que una de las fuentes más rica de Omega-3 son las semillas de chía.
Mascarillas de chía
Las mascarillas naturales además de efectivas son muy fáciles de preparar. Es donde entra las mascarillas naturales fabricadas en base a semillas de chía. Ya que al no contienen químicos que pueden dañar la piel y son muy económicas de realizar. Estas mascarillas principalmente se centran en eliminar la suciedad, revitalizar y proteger.
Estas pequeñas semillas negras están llenas de nutrientes que pueden eliminar de forma eficaz la acumulación de aceite, sin dejar que la piel sufra pérdida de agua. De hecho, sus beneficios han hecho que las semillas de chía lleguen a productos para la piel de alta calidad. Ante esto, no solo se puede cosechar sus beneficios incorporándolas a los refrigerios y comidas, también es posible crear una mascarilla propia tanto para el cabello como la piel, y beneficiarse así de todos sus nutrientes y propiedades. Esto garantiza que tanto el cabello como la piel experimentarán todos los beneficios de belleza tanto por dentro como por fuera.
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Mascarilla de chía para el cabello
El cabello necesita proteínas para mantenerse fuerte y grueso y las semillas de chía son una fuente inagotable de nutrientes. Contiene hasta 20% más de proteínas que los frijoles de soya. Del mismo modo también contiene Omega-3 que es fundamental para ayudar a prevenir la pérdida de cabello. Ante esto, agregar semillas de chía a la dieta diaria puede ayudar a promover la salud del cabello, y también es posible utilizar las semillas de chía como mascarilla para potenciar sus cualidades.
En este orden de ideas, las semillas de chía son el ingrediente perfecto para crear un tratamiento de mascarilla capilar. Sus nutrientes permiten que la chía pueda hincharse hasta 12 veces su tamaño cuando se remojan en agua. Esto permite que las semillas puedan adoptar una consistencia similar a un gel que hidratará el cabello.
Ingredientes
- 6 cucharadas de aceite de coco (cumple una función acondicionadora).
- 2 cucharadas de vinagres de manzana (le otorga brillo al cabello).
- 3/4 taza de miel (suaviza el cabello).
- 1 cucharada de semilla de chía (hidrata el cabello).
¿Cómo lo realizo?
- Agregar todos los ingredientes en una olla.
- Calentarlos a fuego lento durante un minuto o menos, hasta que el aceite de coco se derrita.
- Esperar que se enfrié la mezcla.
- Aplicar la mezcla en el cabello después del champú.
- Dejar actuar entre 3 y 5 minutos.
- Enjuagar con abundante agua.
- El resultado será un cabello suave y sedoso.
Nota
El resto de la mezcla se puede almacenar en un envase de vidrio para utilizarla durante la próxima limpieza de cabello.
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Mascarilla de chía para la piel
La piel es el órgano más grande del cuerpo, por lo que requiere de un cuidado importante para mantenerse sana y flexible. Las semillas de chía permiten disminuir la inflamación y mejorar las imperfecciones causadas por el acné. Además, sus ácidos grasos Omega-3 permiten que la mascarilla de chía ayude en el proceso de curación de las manchas, irritaciones y una gran cantidad de lesiones que afectan la piel. Así mismo, permite crear una capa protectora externa contra las bacterias.
Es aconsejable aplicarse la mascarilla de semillas de chía todas las mañanas. De esta manera se logra exfoliar los poros y rejuvenecer el rostro antes de comenzar el día.
Ingredientes
- 2 cucharadas de semillas de chía
- 1/2 taza de aceite de coco
- 1 cucharada de jugo de limón
Cómo lo hago:
- En un tazón mezclar todos los ingredientes
- Una vez que se haya creado una mezcla unificada aplicarla en la cara
- Evitar el contacto con los ojos
- Dejar actuar la mascarilla entre 5 y 10 minutos
- Esperar que las semillas hayan creado una consistencia similar al gel
- Masajear el rostro con una toalla húmeda para exfoliar
- Enjuagar la cara con agua tibia
Concluyendo
Las semillas de chía son unas pequeñas semillas antiguas utilizadas por los aztecas y mayas que proporcionan nutrientes importantes con un mínimo de calorías. Las mismas contienen 11 gramos de fibra por onza, es decir el 42% del valor diario recomendado en una sola porción de comida. Además de sus numerosos beneficios, son un aliado contra la diabetes, los problemas del corazón y la pérdida de peso.
No solo eso, las semillas de chía hacen maravillas si se incluyen al régimen de belleza, gracias a sus propiedades, destacándose los ácidos grasos omega 3, proteínas, magnesio, zinc, vitamina E, vitamina B1, B2 y B3. Con un reducido número de ingredientes y en pocos minutos se podrá elaborar una potente mascarilla natural tanto para el cabello como la piel.
Luego de brindarle toda esta información a mi seguidora, semanas después hizo nuevamente contacto conmigo. Me mostró los cambios que la mascarilla había hecho en su piel y su cabello. Todo sin utilizar ningún tipo de producto químico que pudiese ocasionarle alergias o cualquier otro problema. Muy contenta me indicó que compartió las recetas con sus amigas, que diariamente estaban aplicándose la mascarilla en su piel. Uno de sus allegados, en menos de un mes, presentó una mejoría significativa en unas manchas que tenía en la piel. Otra de sus amigas había vuelto a tener una cabellera sedosa luego de años maltratándose con fuertes químicos y tintes.
Definitivamente los beneficios de las semillas de chía no solo nos garantizan tener un cuerpo saludable por dentro sino lucir hermosas por fuera y sentirnos felices por eso.
“En términos de contenido nutricional, una cucharada de chía es como un batido hecho de salmón, espinacas y hormona de crecimiento humano. Por muy pequeñas que sean esas semillas, están repletas de Omega-3, proteínas, calcio, hierro, zinc, fibra y antioxidantes.”
Monica Van Zandt
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https://www.webmd.com/food-recipes/features/why-are-chia-seeds-good-for-me#1