La salud bucal es un factor sumamente importante en la vida de las personas. No solo desde la perspectiva física sino fisiológica. Cualquier condición que se pueda desarrollar en la cavidad bucal, dientes, lengua afecta notablemente a quien la padezca. No solamente eso, sino que tiende a perjudicar el resto del cuerpo y la salud en general.
De este tema tan interesante, quiero hablar debido a una solicitud hecha por Mainee, de Carolina del Norte. Ella es una mujer que ha permanecido en el hogar durante los últimos años. Me escribe porque en este último año vio comprometida su salud debido a un problema bucal, que según el especialista le afectaba no solo el área de los dientes, sino amígdalas. Se habían alojado bacterias, que luego según el especialista pasaron al área estomacal, lo que conllevó a padecer por un tiempo y tener que cumplir con un régimen medicamentoso para poder superar ese problema. Ella pensó que era sencillamente problemas en las encías.
Mainee estaba interesada en saber cómo hacer para evitar que se pudiera repetir esa situación, puesto que su dentista le manifestó que podría repetirse si ella no guardaba el debido cuidado y compromiso con su salud bucal.
¿Por qué es importante la salud bucal?
Desde edad temprana, ha sido una constante enseñanza de que la buena salud bucal implica mantener los dientes limpios y sanos. Cepillar los dientes en la mañana, después de cada comida y antes de acostarse, es la rutina que se ha aprendido a lo largo de distintas generaciones.
Eso va acompañado del uso de hilo dental, enjuagues bucales y visita periódica al odontólogo. Pero, la salud oral va mucho más allá de eso. Implica además las encías y los huesos de la cavidad bucal, es decir los huesos de la mandíbula superior y los de la mandíbula inferior. El revestimiento de la boca y la garganta, la lengua, las glándulas salivares.
La buena higiene bucal y dental son factores importantes que pueden ayudar a prevenir las caries, enfermedades de las encías como gingivitis, el mal aliento… además bien necesario. Es que la buena salud bucodental ayuda a conservar los dientes a la personas durante toda su vida, inclusive al envejecer con sus dientes completo.
Investigaciones han demostrado que los buenos hábitos de higiene bucal ayudan en mayor bienestar físico. Así es, el no tener una buena salud bucal tiende a afectar el autoestima de las personas, su apariencia, el aspecto del rostro, la alimentación, la forma de hablar y las relaciones interpersonales a nivel familiar, social y laboral.
Científicos han demostrado constantemente que la salud empieza por la boca. Mantener una buena salud bucal no solo implica tener unos dientes sanos y perfectos, sino que es la punta de lanza para conservar la salud y bienestar
Función de los dientes
Los dientes juegan un rol esencial en la salud de las personas. Tienen la función de ayudar a masticar y digerir los alimentos. De igual forma dan forma al rostro y ayudan a que las personas puedan hablar con mucha más claridad.
Reir y sonreír tienen beneficios para la salud y emociones. Aumentan la autoconfianza y tienen un impacto en la vida personal, familiar, social y laboral. Todo esto confirma que una buena salud bucal es de gran utilidad para las personas.
Conservar una dentadura sana
Tener una higiene bucal ayuda a conservar una dentadura sana que perdura hasta la vejez. Las investigaciones han descubierto la relación entre el número de dientes que una persona tenga y la duración vital. En ese Estudio planteaban que las personas que tenían 20 dientes o más a la edad de 70 años, tenían una probabilidad de vivir más año que las personas que tenían menos de esa cantidad.
Tener dientes limpios sanos puede evitar la halitosis o mal aliento, el cual puede ser causado por la cantidad de placa acumulada, gingivitis u otra enfermedad dental.
Las enfermedades bucales pueden ser prevenibles con una buena rutina de salud bucal, asistencia al odontólogo y el cuidado de no usar los dientes como abridores de botellas o cortadores de paquetes. Eso los lesiona y pueden fracturarse en cualquier momento.
¿Qué sucede al tener mala higiene bucal?
Según investigaciones, la salud bucal tiene implicaciones sistémicas multiorgánicas, como se ha demostrado en publicaciones literarias médicas recientes.
¿Cuáles implicaciones? Van desde la resistencia a la insulina por una enfermedad periodontal (a nivel de encías y soporte de los dientes, producida por bacterias de la placa bacteriana) hasta enfermedades tan delicadas como las enfermedades cardiovasculares.
De acuerdo a investigaciones, cualquier bacteria en la boca puede viajar a otras partes del cuerpo, poniendo a las personas en riesgo de padecer otras enfermedades.
Según una encuesta realizada por la Asociación Dental Americana, menos del 31% de los habitantes de los Estados Unidos utilizan el hilo dental diariamente, y el 19% no lo utilizan. Esto implica que hay un gran porcentaje de personas que tienen mala higiene bucal.
Al no tener una buena higiene bucal, no cuidar la dentadura, las encías, no ir al dentista con la frecuencia que debe ir de acuerdo a la salud dental, puede afectar la cavidad bucal, dando como consecuencia, la lesión a otras partes del cuerpo. Puede suceder:
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Dolor en la cavidad bucal y en la cara en general
Las encías son las encargadas de sostener los dientes. Al haber alguna lesión como la gingivitis puede provocar que los dientes se aflojen y puedan finalmente perderse si no se toman las acciones a tiempo.
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Lesiones cardiovasculares
Aunque parezca incierto, al haber mala higiene bucal y dañar la cavidad, se puede afectar a otros órganos y promover lesiones. Puede dañar la salud del corazón, esto implica que las bacterias producidas pueden entrar en el torrente sanguíneo y pueden hasta perjudicar a las personas cardiópatas, o que tengan cualquier afección del tejido del corazón.
Cuando las personas tienen algún tipo de enfermedad periodontal (producidas por bacterias) tienen una alta probabilidad de diagnóstico de enfermedad cardíaca, y sufrir arterias estrechas causadas por bacterias y placa bacteriana que entran en el organismo a través de las encías.
Las bacterias pueden obstruir las arterias, incrementando el riesgo de sufrir un infarto. Así mismo, el vaso sanguíneo que transporta la sangre al cerebro puede obstruirse, aumentando el riesgo de un accidente cerebro vascular.
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Problemas respiratorios
Si hay una afección bacteriana en la cavidad bucal con la enfermedad periodontal, las bacterias se transportan al torrente sanguíneo, llegando a los pulmones, pudiendo lesionar el sistema respiratorio.
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Problemas digestivos
El tener problemas en los dientes y la cavidad bucal hace que no se pueden digerir bien los alimentos, haciendo que el paso hacia el estómago sea incompleto, ya que los alimentos no han sido predigeridos en la boca y su paso al esófago. En caso de que el estómago no esté acidificado por no tener el pH correcto, puede provocar otros trastornos en la microbiota intestinal y provocar el síndrome de intestino permeable.
Conexión entre la salud bucodental y las enfermedades sistémicas
Existe una conexión bien importante entre la salud bucodental y la salud general. Como se ha dicho anteriormente la salud entra por la boca. Es el primer paso tanto a la salud como a las enfermedades sistémicas. La boca es la puerta que se abre a la entrada de muchas bacterias.
En general, los profesionales e investigadores de la odontología educan a sus pacientes en la salud bucal e higiene dental para evitar que suceda el pase de bacterias y por consiguiente, el desarrollo de enfermedades sistémicas tales como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, problemas respiratorios.
La educación en cuanto a la salud bucodental (cepillado de dientes, lengua, encías, cuidado de la cavidad bucal) pueden explicarla a los pacientes pero la razón principal, que es el pase de bacterias al torrente sanguíneo debería ser una constante en la explicación. Esto formaría parte de la enseñanza y aprendizaje de estos procesos para que haya una mejor toma de conciencia en cuanto a la higiene bucal.
La salud bucodental y la diabetes
De acuerdo a información publicada por Oral Health in America, las personas diabéticas son más propensos a padecer enfermedades bucodentales. Las enfermedades periodontales, como la gingivitis, las caries, la sequedad en la boca y las infecciones.
La diabetes tipo I y tipo II se ha conectado con la enfermedad periodontal, complicándose la situación. A esto se le ha llamado la “sexta complicación” de la enfermedad.
La enfermedad periodontal la causan las bacterias que producen la placa en la cavidad bucal. En el caso de las personas diabéticas, puede tener relación con el control que las personas tengan de la diabetes.
Es sumamente importante que las personas diabéticas entren en contacto con su odontólogo al observar que sus encías sangran o se hinchan. Cuando esto sucede los dientes pueden aflojarse un poco y separarse, producir mal aliento o halitosis, cambios en la forma de los dientes, aparición de flema entre los dientes y las encías.
La salud bucodental y las enfermedades cardiovasculares
Muchas investigaciones han podido demostrar que la enfermedad periodontal puede tener una conexión con las enfermedades cardiovasculares, así con los accidentes cerebrovasculares, neumonía bacteriana. Esto indica que las personas con enfermedad periodontal son más proclives a sufrir una enfermedad cardiovascular.
Cuando las bacterias orales entran al torrente sanguíneo pueden afectar al corazón. Éstas se adhieren a las placas de grasa de los vasos sanguíneos del corazón, haciendo que se formen coágulos.
La salud bucal y niveles hormonales en mujeres embarazadas
Las mujeres embarazadas sufren esos cambios de niveles hormonales, casos de estrógeno y progesterona. Por esa razón corren riesgo de que sus encías se inflamen y puedan provocar una enfermedad periodontal si no se realizan consecuentemente revisión odontológica.
De acuerdo a un estudio realizado en la Universidad de Carolina del Norte, se pudo detectar que las mujeres embarazadas con enfermedad periodontal tienen más probabilidades de tener un bebé prematuro y con bajo peso.
La salud bucal y el estilo de vida saludable
Un estilo de vida saludable es necesario para evitar problemas de la salud bucal. Comienza con la alimentación, la forma de masticar los alimentos y digerirlos. También se pueden manifestar al no consumir los nutrientes necesarios que el cuerpo requiere para mantenerse sano.
La salud bucal y la obesidad
Una de las mayores manifestaciones de enfermedad subyacente es la obesidad. La mala alimentación, el no poder consumir los nutrientes que el cuerpo requiere, el no tener la capacidad económica para poder alimentarse, afecta notablemente al organismo. La mala alimentación puede provocar caries y obesidad.
En una investigación realizada en la Universidad de Búfalo, se examinaron a niños entre 2 y 5 años de edad, cuyos dientes de leche fueron tratados por desnutrición. Casi el 28% de esos niños tenían un índice de masa corporal correspondiente a un niño con sobrepeso u obesidad.
¿Cómo proteger la salud bucal?
Como se dijo anteriormente, tener una buena higiene bucal ayuda a mantener los dientes y las encías saludables. Esto significa que deben adquirirse desde temprana edad y mantener a lo largo del tiempo, los hábitos como cepillarse los dientes y realizar visita periódica al odontólogo.
La salud bucal debe protegerse porque de ella depende la salud de muchos órganos principales. Las investigaciones han demostrado que la salud de la cavidad bucal tiene una estrecha relación con la salud general.
Las personas pueden prevenir problemas y proteger su salud bucal. Deben guardar los cuidados necesarios tanto en la casa como con una visita al dentista.
Estas son algunas formas de proteger los dientes:
1. Evitar la aparición de caries, teniendo una buena higiene dental
El esmalte de los dientes es la capa dura que se encuentra en el exterior de los mismos. Diariamente se va acumulando bacterias formando la placa dental. Estas bacterias producen ácidos capaces de lesionar el esmalte y producir caries.
Proteger los dientes ayuda a prevenir las caries. Esto se puede obtener al cepillarse los dientes y usar hilo dental.
2. Mantener cautela con las encías para evitar que se enfermen
La placa dental se acumula debajo y a lo largo de las encías, allí comienza la enfermedad de las encías. Esto se debe a que la placa provoca un proceso inflamatorio e infección que lesionan la encía y el hueso. Esto puede hacer que los dientes no estén en su lugar.
La enfermedad de las encías, cuyo nombre es periodontitis, comienza cuando la placa se acumula a lo largo y debajo de la línea de las encías. La placa provoca una infección que daña la encía y el hueso que mantiene los dientes en su sitio.
Esta infección debe tratarse enseguida. De no hacerlo puede provocar más dolor, sangrado de las encías, pudiendo implicar al final, la pérdida de los dientes.
La gingivitis hace que las encías se inflamen, se tornen sensibles y sangren. Para aliviar la gingivitis, se debe dar un buen cepillado en los dientes y utilizar hilo dental todos los días.
3. Realizar visita al dentista
La visita regular al dentista es primordial, por cuanto él se encarga de revisar toda la cavidad bucal. Detecta cualquier dificultad en los dientes cuando está en su etapa inicial. Además, ayuda a prevenir problemas y puede efectuar un diagnóstico de alguna enfermedad.
4. Mantener un estilo de vida saludable
Una alimentación adecuada ayuda a que el sistema inmunológico esté fortalecido. Por lo tanto ayuda a prevenir enfermedades cardiacas, y dilata el avance de la diabetes.
Concluyendo
Según la Organización Mundial de la Salud, la salud bucal es un indicador clave de la salud general. Además de ser reflejo del bienestar y la calidad de vida de las personas. Comprende una cantidad de enfermedades y afecciones. Entre ellas se incluyen la caries dental, la enfermedad periodontal, la pérdida de dientes y otros. Se estima que las enfermedades bucales afectan alrededor de 3.500 millones de personas en todo el mundo.
Una buena higiene bucal puede ayudar a prevenir enfermedades, caries, mal aliento, enfermedades de las encías. De igual manera, conservar dientes firmes con el transcurrir del tiempo. Está demostrado que tener buenos hábitos de higiene bucal y un buen estilo de vida es fundamental. Es la mejor forma de mantenerse saludables física y emocionalmente.
Una mala salud bucal puede repercutir en la persona y repercutir su autoestima, autoconfianza, relaciones interpersonales. Una enfermedad bucal puede afectar el organismo, contribuyendo a tener una cantidad de condiciones que comprometen la salud en general.
Mainee recibió la información y pudo corroborar la importancia de tener una buena salud bucal. De esa manera es factible evitar cualquier tipo de enfermedad que pueda comprometer su organismo. La cavidad bucal es primordial para estar completamente saludable.
“Una boca limpia conducirá a un cuerpo limpio”, “Aunque te limpies la boca todos los días en casa, las revisiones periódicas al dentista evitarán condiciones adicionales que probablemente te hagan enfermar”.
Dr. Steven Grater, DMD
Dentista Practitioner
Harrisburg, Pennsilvania
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Referencias
- https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6560319/
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- https://www.nia.nih.gov/health/taking-care-your-teeth-and-mouth