La parálisis del sueño es una sensación temporal de parálisis que se produce entre las fases de vigilia y sueño. Durante un episodio de parálisis del sueño, aunque estemos conscientes, no podemos movernos ni hablar.
Esta condición es más común de lo que se cree. Sin embargo, no todas las personas están conscientes de sus causas y la forma de prevenirla.
De este tema, que ha servido de telón para diversas interpretaciones, les voy a hablar a solicitud de Brandy. Ella es una seguidora de Vermont, administradora de una empresa de catering, además de madre y esposa de familia.
Ella me dijo, que la empresa es netamente familiar y en ella participaban sus suegros, cuñados y hermanos. Para Brandy, estar en contacto con las personas y apoyar sus actividades y eventos sociales o familiares, es muy gratificante.
No obstante, ella me comentaba que todo tiene un precio. Uno de ellos, es una condición que suele ocurrirle a su esposo, en épocas donde la demanda de los clientes es muy abundante.
Brandy me comentó que, por lo general, en días de mucho estrés su esposo presenta algunas situaciones desagradables durante el sueño. Esto le estaba ocurriendo desde hace un año, donde entredormido se sentía incapaz de moverse.
Aunque él le atribuía esta condición a la carga de trabajo ocasional, y nunca aceptó buscar una solución. Y precisamente por ello, Brandy decidió contactarme a fin de que le instruyera acerca de esta condición y sobre la forma de prevenirla.
Inmediatamente le respondí y notifiqué, que esa era una condición muy frecuente denominada parálisis del sueño. Así, para brindarle mayores puntos educativos, le envié un informe mostrándole acerca de sus causas y prevención.
Dada la elevada prevalencia de este desequilibrio, estimé conveniente compartir esta información en mi página.
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Generalidades acerca de la parálisis de sueño
De acuerdo a los especialistas, la parálisis del sueño es un fenómeno que se produce en la transición entre la vigilia y el sueño, o viceversa. Se caracteriza por una incapacidad temporal para moverse o hablar, siendo plenamente conscientes de lo que nos rodea.
A diferencia de otros estados del sueño, como los sueños y pesadillas, la parálisis del sueño nos hace conscientes de nuestro entorno real, pero incapaces de interactuar con él.
Para muchas personas, podría ser una experiencia aterradora y angustiosa. Especialmente, si va acompañada de alucinaciones o sensaciones de presión, asfixia o de ser observado.
La parálisis del sueño suele durar unos segundos o minutos, pero puede parecer mucho más larga. No es dañina ni peligrosa, pero puede afectar a nuestra calidad de vida y salud mental si ocurre con frecuencia o gravedad.
La parálisis del sueño suele producirse al quedarse dormido o al despertarse. Está relacionada con la fase de movimientos oculares rápidos (REM) del ciclo del sueño.
En esta fase, nuestros ojos se mueven rápidamente y se producen sueños vívidos. Sin embargo, los músculos del cuerpo se relajan para reducir el movimiento. Este proceso, está controlado por el cerebro y se denomina atonía REM.
El principal objetivo de esta atonía, es evitar que se lleven a cabo los sueños y suele terminar cuando uno se despierta. Sin embargo, cuando ocurre parálisis del sueño, se produce un despertar repentino durante la fase REM.
Ello hace que recobremos la conciencia aun cuando los músculos siguen relajados, en atonía. Por este motivo, la parálisis del sueño puede parecer una parálisis temporal.
Aparte de la atonía, las imágenes mentales del sueño REM también parecen persistir, incluso estando en un estado consciente. Esto puede dar lugar a alucinaciones que pueden asustar o causar ansiedad.
¿Cómo pueden ser estas alucinaciones durante la parálisis del sueño?
Las alucinaciones durante la parálisis del sueño se dividen en tres categorías:
- Alucinaciones de intrusión: la persona puede sentir o ver una presencia en la habitación. Podría ser, una persona, un animal o un ser sobrenatural. También puede oír pasos, voces u otros sonidos.
- Alucinaciones de íncubo: la persona puede sentir presión en el pecho, dificultad para respirar o dolor. Incluso, puede llegar a experimentar que le están ahogando, asfixiando o estrangulando.
- Alucinaciones vestíbulo-motoras: este tipo de alucinación se caracteriza por experimentar la sensación de flotar, volar, caer o moverse. Incluso, se pueden tener experiencias extracorpóreas o sensaciones de giro o balanceo.
Causas más frecuentes de la parálisis del sueño
Las causas de la parálisis del sueño no se conocen del todo, pero algunos factores que pueden aumentar el riesgo de sufrirla son:
Propensión genética
La parálisis del sueño puede estar influida por factores genéticos. Algunos estudios han descubierto, que la parálisis del sueño es más frecuente entre las personas con antecedentes familiares de esta enfermedad u otros trastornos del sueño.
Entre ellos podemos señalar, el síndrome de las piernas inquietas o el trastorno del movimiento periódico de las extremidades. Sin embargo, aún se desconocen los genes exactos implicados en la parálisis del sueño.
Narcolepsia
La narcolepsia, es considerado un trastorno neurológico que ocasiona somnolencia diurna excesiva y ataques repentinos de sueño.
Esta condición, ocasiona que las personas estén muy somnolientas durante el día y que se queden dormidas de repente. Incluso, esto puede ocurrir, con una pérdida del tono muscular denominada cataplejía.
Uno de los síntomas de la narcolepsia es la parálisis del sueño. Ello ocasiona, una incapacidad temporal para moverse o hablar al dormirse o despertarse. Como mencionamos, la parálisis del sueño se produce cuando se interrumpe la transición normal entre la vigilia y el sueño.
Según la ciencia, en condiciones normales, nuestro cuerpo se paraliza durante el sueño REM. Ello impide que las personas representen sus sueños y se hagan daño.
Sin embargo, en las personas con narcolepsia, el sueño REM puede comenzar antes de lo habitual o producirse en momentos inadecuados, como durante el día o al quedarse dormido.
Hasta ahora, no se conoce la causa exacta de la narcolepsia. Aunque se cree, que está relacionada con una deficiencia de una sustancia química cerebral llamada hipocretina.
Dicha sustancia, ayuda a regular la vigilia y sueño REM. Se cree, que la narcolepsia también puede tener un componente genético, ya que suele ser hereditaria. De hecho, ciertos factores ambientales, como las infecciones o el estrés, pueden desencadenar la narcolepsia en personas genéticamente predispuestas.
Patrones de sueño irregulares
Los patrones de sueño irregulares pueden causar parálisis del sueño al interrumpir las transiciones normales entre las fases del sueño. Esto ocasiona un desajuste sustancial del ritmo circadiano.
Especialmente la fase de sueño REM. Durante esta fase, nuestro cerebro está muy activo y produce sueños vívidos, pero los músculos del cuerpo están relajados para evitar la representación de los sueños.
Este estado de relajación muscular se denomina atonía. En condiciones normales, la atonía termina cuando una persona se despierta del sueño REM. Sin embargo, existen ciertas irregularidades vinculadas a factores de conducta social o de trabajo que ocasionan patrones irregulares de sueño.
Dentro de ellos podemos señalar, quedarse despierto hasta tarde, trabajar por turnos, dormir muy poco o tener jet lag. En estos casos, estos desequilibrios pueden ocasionar que la persona despierte repentinamente del sueño REM y experimente desajustes entre el cerebro y cuerpo.
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Ello implica, que la persona se vuelve consciente pero el cuerpo permanece en atonía, lo que provoca una sensación temporal de parálisis. Además, la persona puede tener alucinaciones influidas por las imágenes oníricas del sueño REM.
Estrés, ansiedad o traumatismos.
Según fuentes científicas, la parálisis del sueño es más frecuente en personas que han sufrido traumas o padecen trastorno de estrés postraumático (TEPT). Según los expertos, el trauma puede afectar la calidad y cantidad del sueño. Incluso, puede jugar un papel en la regulación de las emociones y la excitación.
Las personas con TEPT pueden tener pesadillas, insomnio o hipervigilancia que interfieren en su sueño. También pueden tener niveles más altos de hormonas del estrés, como el cortisol y adrenalina, que les mantienen alerta y les impiden relajarse.
Estos factores pueden aumentar la probabilidad de experimentar parálisis del sueño. Según algunos estudios, quienes padecen TEPT tienen episodios más frecuentes y graves de parálisis del sueño que quienes no lo padecen.
Un estudio realizado en Polonia en 2022, encontró hallazgos interesantes. En el mismo participaron cuatro grupos profesionales con alto riesgo de parálisis del sueño (enfermeras, policías, maestros y otras profesiones).
De acuerdo a los resultados, las enfermeras y otras profesiones, presentaban una mayor asociación de parálisis del sueño con síntomas de TEPT y ansiedad. L-TRYPTOPHAN promueve la relajación y puede inducir el sueño. Lo puedes adquirir en VitaTienda.com.
Empleo de ciertas sustancias
Una de las posibles causas de la parálisis del sueño es el consumo de sustancias que afectan al ciclo del sueño, especialmente a la fase de movimientos oculares rápidos (REM).
Algunas de las sustancias que pueden interferir con el sueño REM y causar parálisis del sueño son:
- Alcohol: el alcohol puede reducir la cantidad y la calidad del sueño REM, provocando un efecto rebote cuando desaparece. Esto significa que una persona puede tener sueños más intensos y vívidos, y más posibilidades de despertarse durante el sueño REM con parálisis del sueño.
- Cafeína: la cafeína es un estimulante que puede mantener despierta a una persona y retrasar el inicio del sueño. También, puede reducir la cantidad de sueño REM y causar sueño fragmentado, lo que puede aumentar la probabilidad de episodios de parálisis del sueño.
- Nicotina: la nicotina es otro estimulante que puede afectar al ciclo del sueño. Puede hacer que sea más difícil conciliar el sueño y permanecer dormido, disminuyendo la cantidad de sueño REM. La abstinencia de nicotina igualmente puede causar pesadillas e insomnio, lo que puede desencadenar la parálisis del sueño.
- Antidepresivos: algunos de estos fármacos, pueden aumentar la cantidad de sueño REM, que es la fase en la que se producen los sueños y la parálisis muscular. Algunos ejemplos son el citalopram, la fluoxetina y la venlafaxina. Puedes evitar su empleo con mi fórmula especial natural MELATONIN.
- Antipsicóticos: pueden bloquear la acción de la dopamina, un neurotransmisor que regula el estado de ánimo, movimiento y sueño. Algunos ejemplos son la risperidona, olanzapina y la quetiapina.
- Antihistamínicos: pueden provocar somnolencia y dificultar el despertar. Algunos ejemplos son la difenhidramina, la loratadina y la cetirizina.
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Como prevenir la parálisis de sueño
Para prevenir la parálisis del sueño, es importante practicar una buena higiene del sueño y seguir un horario de sueño regular. Algunos consejos para mejorar la calidad del sueño y evitar la parálisis del sueño son:
- Practica una buena higiene del sueño: procura dormir entre 7 y 9 horas por noche, y evita las siestas durante el día.
- Limita tu exposición a la luz y a las pantallas antes de acostarte.
- Controla el estrés: encuentre formas saludables de afrontar el estrés, como el ejercicio, la meditación, los pasatiempos o hablar con alguien de confianza. STRESS RELIEF puede ayudarte a mejorar tus patrones de sueño.
- Cambia de postura al dormir: algunas personas consideran que dormir boca arriba aumenta la probabilidad de sufrir parálisis del sueño. Intenta dormir de lado o boca abajo.
- Acuéstate y levántate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana y las vacaciones.
- Evita la cafeína, el alcohol, la nicotina y otros estimulantes, sobre todo por la noche.
- Evita las comidas copiosas, los alimentos picantes y los líquidos antes de acostarte.
- Crea un entorno cómodo y tranquilo para dormir, con un mínimo de luz, ruido y variaciones de temperatura.
- Sigue una rutina relajante antes de acostarte, como leer, escuchar música relajante o meditar.
- Haz ejercicio con regularidad, pero no demasiado cerca de la hora de acostarte.
- Trata las afecciones subyacentes: si padeces un trastorno del sueño o un problema de salud mental que pueda contribuir a la parálisis del sueño, busca ayuda profesional y sigue el plan de tratamiento recomendado.
Opciones de tratamiento para la parálisis del sueño
Experimentar parálisis de sueño con frecuencia o sentir que interfiere en tu funcionamiento diario, podría indicar de una enfermedad subyacente.
Por ello, es importante solicitar un diagnóstico médico para determinar la causa de la parálisis del sueño. Esto permitiría recomendar las opciones de tratamiento adecuadas. Algunos tratamientos posibles son:
- Medicación, como antidepresivos o somníferos, para regular el ciclo del sueño y evitar la interrupción del sueño REM. También puedes emplear mi alternativa completamente natural: SLEEPING BOMB KIT.
- Terapia cognitivo-conductual (TCC). Este tipo de psicoterapia ayuda a identificar y cambiar los pensamientos y comportamientos negativos que afectan a la calidad del sueño y al estado de ánimo.
- Técnicas de relajación: su empleo, podría reducir el estrés y la ansiedad antes de acostarte. Dentro de ellas destacan: la respiración profunda, relajación muscular progresiva o las imágenes guiadas.
Es importante saber, que la parálisis del sueño no es una enfermedad peligrosa. Sin embargo, puede ocasionar mucha angustia. Las siguientes estrategias pueden ayudar a afrontar un episodio de parálisis del sueño:
- Mantén la calma e intenta respirar con normalidad. Recuerde que se trata de un fenómeno temporal y que nada puede hacerte daño.
- Procura mover una pequeña parte del cuerpo, como los dedos de las manos o de los pies. Esto puede ayudar a romper la parálisis y restablecer el control muscular.
- Intenta abrir los ojos y mirar a tu alrededor. Esto puede ayudarte a darte cuenta de que estás despierto y no soñando.
- Si experimenta alucinaciones, intenta ignorarlas o desafiarlas. Recuérdate a ti mismo que no son reales y que no pueden hacerte daño.
- Si es posible, haz ruido o pide ayuda. Esto puede alertar a alguien cercano que puede despertarte o tranquilizarte.
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Concluyendo
De acuerdo a lo mostrado, la parálisis del sueño puede afectar a muchas personas en algún momento de su vida. No es una afección grave, pero puede ser muy aterradora y desagradable, sin ser dañina ni peligrosa. Suele durar unos segundos o minutos y no afecta a la respiración ni al ritmo cardíaco.
Dentro de las causas más frecuentes de parálisis de sueño destacan la narcolepsia, patrones de sueño irregulares, estrés, ansiedad, traumatismos y el empleo de ciertas sustancias.
Por ello, es importante evitar la cafeína, alcohol, nicotina y comidas copiosas antes de acostarse. Es importante además que la habitación sea cómoda, oscura, silenciosa y fresca.
También debe evitarse el empleo de dispositivos electrónicos, como teléfonos, ordenadores o televisores, al menos una hora antes de acostarse. Es fundamental relajar la mente y el cuerpo antes de acostarse, leyendo, escuchando música o meditando.
Incluso, es necesario buscar apoyo médico si se padece algún trastorno del sueño, como narcolepsia o apnea del sueño.
Para Brandy, la información recibida, la cual comparto en el post, fue de gran utilidad. De hecho, estaba muy contenta, porque su esposo al verse reflejado en la información, decidió acudir al médico.
Con tan solo dejar de emplear los dispositivos antes de acostarse, y tomar un tiempo para relajarse, le ayudó a combatir la parálisis de sueño.
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- Sleep Paralysis.
- Nightmare Disorder and Isolated Sleep Paralysis.
- Sleep paralysis: Causes, symptoms, and treatments.
- Narcolepsy.
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- Characteristics of Sleep Paralysis and Its Association with Anxiety Symptoms, Perceived Stress, PTSD, and Other Variables Related to Lifestyle in Selected High Stress Exposed Professions