César se siente bastante mal porque últimamente sufre de constante y fuerte mal olor en las axilas. Me ha contado que esto le causa grandes problemas de inseguridad. Últimamente no desea salir y se siente deprimido, en parte porque la mayoría de las personas en su entorno se burla de él o lo rechazan.
César ya ha probado con numerosos desodorantes, pero el mal olor en las axilas persiste. No obstante, lo que César desconoce es que, tanto los desodorantes como los antitranspirantes, incrementan la densidad de la variedad de bacterias en la zona de las axilas.
Esto pudiese parecer contradictorio, puesto que a diario precisamente usamos estos productos para evitar malos olores. Pero resulta que con el tiempo más que disimular el mal olor, lo que hacen es aumentarlo.
Estudios científicos han demostrado el hecho de que el aluminio que contienen los antitranspirantes, se acumula en el tejido de los senos. Esto está asociado al riesgo de cáncer de mama. Resulta que los antitranspirantes bloquean el funcionamiento de las glándulas sudoríparas. De manera que evitan el sudor en la zona.
Este efecto es lo que, por lo general, buscamos al comprar el producto, a nadie le gusta la sudoración en las axilas. Sin embargo, es indispensable permitir que el cuerpo transpire. Por medio del proceso de transpiración, es como el organismo elimina las toxinas.
Además, la transpiración apoya la función inmunológica y previene todas aquellas enfermedades relacionadas a la acumulación de toxinas. También puedes ayudar a tu cuerpo a eliminar las toxinas con el Reto #Yo Puedo, un método efectivo y saludable que he creado para ti.
¿Los antitranspirantes pueden poner en riesgo nuestra salud?
Anualmente, la población gasta una suma exorbitante de dinero en desodorantes y antitranspirantes. Todo con el propósito de evitar malos olores en la zona de las axilas y reducir al máximo la sudoración natural del organismo.
Ahora bien, nuestro cuerpo es un constructo de bacterias y muchas de ellas son benéficas para la buena salud. Es muy cierto que el exceso de sudoración podría desprender un olor poco agradable. Esto se debe a que las bacterias que viven en las axilas descomponen los aminoácidos y lípidos, dejando como resultado este olor desagradable.
La función del antitranspirante, entonces, es eliminar estas bacterias y bloquear las funciones de las glándulas sudoríparas. Sin embargo, como el cuerpo requiere eliminar las toxinas, produce una mayor cantidad de bacterias para regular su funcionamiento natural.
En pocas palabras, el uso de los antitranspirantes, a largo plazo, no siempre es la mejor solución cuando deseamos eliminar el mal olor de las axilas. Al contrario, su uso incrementa con el tiempo, tanto el mal olor como la sudoración.
Desde hace 3 décadas, a los productos antitranspirantes se les viene relacionando con el cáncer. Pero aún se desconoce con certeza la influencia que existe entre el producto y la propagación de las células cancerígenas.
La realidad es que algunas personas son más propensas a padecer de cáncer que otras. Entonces, en las personas con mayor predisposición a la enfermedad, el antitranspirante podría estimular la pronta aparición de esta enfermedad. Resulta que uno de los ingredientes más comunes en este tipo de productos, es el aluminio cuya función es reducir la sudoración.
Este contenido de aluminio, con el tiempo, se acumula en el tejido de las axilas, pechos y senos, produciendo cáncer en la zona de las axilas y en las mamas. Sucede principalmente cuando existe una predisposición genética, en quienes no se retiran bien el desodorante al ducharse o en aquellos que incluso al dormir se aplican antitranspirantes.
Medidas para evitar el mal olor en las axilas
Es cierto que no todos los antitranspirantes contienen aluminio y, aunque de alguna manera son más saludables, no quiere decir que sean la mejor opción. En principio, para evitar los malos olores es indispensable mantener una buena higiene.
Eliminar la vellosidad de las axilas es un primer paso. Para ello debes tener sumo cuidado ya que muchas cremas depilatorias son tóxicas. La cera es un producto que hala los vellos de raíz, pero por ser una zona tan sensible, puede ser contraproducente. Las afeitadoras, por su parte, si no están desinfectadas pueden causar estragos.
No se trata de buscarle el lado negativo a todos los productos que usamos en la cotidianidad, se trata de tomar conciencia de lo delicada que es la zona de las axilas y los graves problemas de salud que podemos atravesar si no le damos el cuidado que merece.
Aun cuando tengamos los vellos eliminados o reducidos, debemos lavar frecuentemente la zona debajo del brazo. Para la buena higiene es recomendable usar un jabón de pH neutro con abundante agua, sin agregar más productos.
Esta limpieza es recomendable hacerla en cada mañana, luego de realizar actividades de alto impacto, y antes de dormir. Esto es fundamental para evitar el mal olor, pues, aunque no representa un grave problema de salud, puede resultar muy desagradable, además podría llegar a ser ofensivo para quienes nos rodean, causando su rechazo.
Cuando la buena higiene no basta, el bicarbonato de sodio funciona como un desodorante natural bastante óptimo. Éste reduce la sudoración excesiva sin atrofiar las glándulas del sudor, elimina el mal olor de la zona y además blanquea la zona.
Desodorantes naturales para eliminar el mal olor de las axilas
¿Te quitaste los vellos de las axilas para evitar que se acumule el sudor, te limpiaste con jabón neutro tres veces al día y usaste bicarbonato, pero aún sientes mal olor en las axilas? De ser así, te recomiendo estos dos desodorantes naturales que te harán olvidar de los antitranspirantes dañinos y del temor a padecer mal olor:
1. Spray natural
Si la acumulación de bacterias en la zona de las axilas es cuantiosa, puede causar problemas de exceso de sudoración y mal olor. La solución no es eliminarlas por completo, sino regular la población de las mismas. Para ello te recomiendo este spray casero:
¿Qué necesitas?
- 8 onzas de vinagre de manzana
- 4 onzas de alcohol
¿Cómo lo prepararás?
Coloca ambos ingredientes en un envase con spray y mezcla bien.
¿Cómo lo usarás para eliminar el mal olor en las axilas?
En la noche, cuando ya estás por irte a dormir, lavar bien tus axilas. Luego colócate la mezcla anterior, retira el exceso con una toalla limpia, de uso exclusivo para las axilas y deja actuar toda la noche.
Desde la primera semana notarás que el mal olor ya es sólo un recuerdo que quedó en el pasado, los hongos habrán desaparecido y las bacterias se irán equilibrando con el paso del tiempo.
2. Crema natural
Si el vinagre con alcohol no es un método que sientas que es apropiado para ti, ya sea porque es muy fuerte o te irrita, siempre puedes optar por esta crema natural:
¿Qué necesitas?
- 2 cucharadas de bicarbonato de sodio
- ½ limón
¿Cómo la prepararás?
Mezcla ambos ingredientes, haciendo una especie de pasta con ellos.
¿Cómo la usarás para eliminar el mal olor en las axilas?
En la noche, luego de haber hecho todas tus actividades cotidianas, procede a limpiar bien las axilas. Seguidamente, con una gasa aplica la crema de bicarbonato y limón, sin dejarte exceso de residuos.
Déjala actuar el por 30 minutos y vuelve a lavar tus axilas. Recuerda no usar desodorantes o antitranspirantes después de retirar la crema ya que estarías contrarrestando sus efectos.
Desodorantes naturales para piel sensible
Las personas de pieles muy delicadas suelen irritarse con el uso de bicarbonato, limón, vinagre y alcohol. Sin embargo, no están exentas de la necesidad de eliminar malos olores de en sus axilas. En estos casos, es mejor seguir las siguientes recomendaciones:
1. Gel de aloe vera
Las cuantiosas propiedades que nos ofrece el aloe vera, son indiscutibles. El cristal de esta planta es muy útil para eliminar los malos olores de las axilas sin irritaciones. Puedes preparar un gel de aloe para combatir el mal olor en las axilas.
¿Qué necesitas?
1 Penca de aloe vera
¿Cómo lo prepararás?
Retira la piel de la penca de aloe vera, extrae el cristal y lávalo bien. Luego, en un recipiente muy limpio y seco, tritúralo a fin de hacer un gel.
¿Cómo la usarás para eliminar el mal olor en las axilas?
Una vez que tienes el gel de aloe preparado, aplica un poco en las axilas, previamente lavadas y secas. Hazlo 3 veces al día y deja que se seque de forma natural. Una vez que esté bien seco no sentirás la zona pegajosa. No te coloques productos químicos luego del aloe vera en tus axilas, pues así eliminarás los beneficios que te aporta este desodorante natural.
El cristal de la aloe vera no sólo te ayuda a controlar la población bacteriana de las axilas. También reduce el exceso de sudoración y te ayuda a cicatrizar las lesiones ocasionadas por depilaciones agresivas o irritaciones causadas por productos químicos.
2. Infusión de tomillo y eucalipto
Ahora bien, suponiendo que el problema no sea el mal olor, sino el exceso de sudoración tu preocupación. Ya puedes estar más tranquilo pues la solución es aún más sencilla. Prepara una infusión concentrada con hojas de tomillo y eucalipto.
Aplica la infusión con una toalla limpia, cuando esté bien fría. Hazlo durante la noche y deja que actúe mientras duermes. Desde el tercer día de aplicación consecutiva notarás como el exceso de sudoración se vuelve un problema del pasado.
César ha seguido estas simples recomendaciones, y me cuenta que ya no se siente inseguro al interactuar con otras personas. Ya no siente miedo de andar en franelillas, de ir al gimnasio ni de levantar los brazos en público. Esto le ha ayudado a no sentirse deprimido pues ahora está más seguro de sí mismo y esto le añada un atractivo particular para el resto de las personas.
Si te ha gustado este artículo y tienes un interés sincero en aprender cómo puedes vivir más sano, me gustaría regalarte una copia de mi último libro #Yo Puedo con la Dra Cocó.
Pulsa Aquí para tu E-book Gratis, llegará a tu email en unos momentos.