Descubre 3 Formas De Proteger Tu Sistema Inmunológico

Entre la semana pasada y esta semana he estado más ocupada de lo normal, sintiéndome físicamente muy cansada, como si hubiera realizado mil actividades cada día. Y para ser sincera, me cuesta centrarme en muchas de las cosas que he hecho últimamente.

Así que ayer, me detuve a pensar ¿Por qué estoy tan cansada? Sé que hice muchas actividades estas dos semana pero debe haber algo más, un motivo, es decir, he comido sano, me he ejercitado y no he hecho nada distinto a lo que acostumbro hacer.

Pensando, pensando y pensando, me di cuenta que todos estos días me he acostado verdaderamente tarde en la noche y me he despertado realmente temprano. Las 8 horas de sueño que toda persona debería tener para mantener su cuerpo y mente sanos. Me descuide, lo admito. No respetar las horas de sueño es el motivo de mi fatiga y falta de concentración.

Desde pequeña, escuchaba como las abuelas decían vas a dañar tu reloj biológico, o tienes invertido el reloj biológico, de chiquita no lo entendía. Pero esas frases hoy me vinieron a la mente y entonces una vez más me dije que las abuelas tenían toda la razón.

Resulta que cuando estamos casi todo el día pegados a una fuente de luz artificial, por ejemplo, frente a nuestra computadora o el teléfono hasta altas horas de la noche y lo combinamos con no aprovechar la luz solar durante el día, descontrolamos nuestro reloj  biológico y,  por ende, interrumpimos la producción de melatonina, ocasionando problemas negativos a nuestra salud.

1. Manten óptimos niveles de melatonina

La melatonina, es una hormona encargada de controlar el reloj biológico y, por lo tanto, cumple tareas muy importantes en nuestro organismo. Ella, nos ayuda a fortalecer nuestro sistema inmunológico, lo cual a su vez, contribuye a frenar el envejecimiento del cerebro.

Igualmente, la producción de melatonina, contribuye a que podamos dormir mejor, disminuir los problemas de migraña, cuidar la masa ósea.  Además algo muy  importante como proteger al organismo de producir células cancerígenas.

Tan importante es la función de la melatonina, que ha sido sometida como fuente de estudio preclínico  en un número superior a 100 usos diferentes de enfermedades, donde, muchas de ellas, guardan relación con la necesidad de dormir las horas necesarias de sueño.

La melatonina también es elaborada en laboratorios y vendida al público en presentaciones diversas como pastillas. Si necesitas tomarlas, te recomiendo hacerlo en pequeñas dosis ya que puede ocasionar efectos adversos como sensación de estar más despierto de lo normal en vez de conseguir un estado de somnolencia.

La dosis recomendada es de 0.25 mg como mínimo,  o de  0.5 mg como máximo para empezar, luego puedes ir controlando el aumento de la dosis de manera paulatina, acuerdo a la necesidad.

Por otro lado, investigaciones encontraron cómo la melatonina ayuda a disminuir el efecto de “jet lag” que es la descompensación horaria que se produce cuando se viaja a lugares con diferentes zonas horarias.

Otro estudio demostró, como niños que sufrían de eczema (en muchas ocasiones esta enfermedad impide que los niños duerman bien durante la noche) a través de suplementos de melatonina pudieron conciliar mejor el sueño. Asimismo, esta hormona ayudó a mitigar el alcance del eczema, al señalar los impactos antiinflamatorios.

2. No descuides tus horas de sueño

La melatonina se encarga de regular nuestro reloj biológico, pero ¿cómo funciona y donde se encuentra?. El reloj biológico, se encuentra ubicado en el hipotálamo.  Para ser más específica, se ubica en el núcleo supraquiasmático del cerebro y se simplifica en la glándula pineal.

Seguidamente, va a funcionar a través de las señales de luz y oscuridad que recibe el núcleo supraquiasmático, para indicarle luego a la glándula pineal, cuándo debe empezar a segregar la melatonina a través de la sangre en reducidas proporciones.

A su vez, la melatonina va a indicarle al cuerpo los periodos circadianos.  En otras palabras, son los periodos de tiempo en la cual normalmente hacemos algo.  Es decir, si todos los días desayunamos a las 7am, nuestro organismo normalmente a las 7m nos va indicar que debemos desayunar.

Diversos estudios que se han realizado a la melatonina, han indicado cómo esta hormona ayuda al organismo a dormir mejor y más rápido (conciliar el sueño), disminuyendo el cansancio y el sentimiento de zozobra durante todo el día.

No obstante, la melatonina, no se limita en sus funciones sólo a ayudarnos a conciliar mejor el sueño ya que sirve para tratar enfermedades como:

• Depresión
• Esclerosis múltiples
• Cáncer, entre otras enfermedades.

3. Optimiza tu reloj biológico

Tal y como te comenté anteriormente, la secreción de melatonina se produce por señales de luz y oscuridad que recibe nuestro organismo.  Esto además es muy  importante para el perfecto funcionamiento de nuestro cuerpo.

Para que esta hormona se forme normalmente en nuestro cuerpo, es necesario impulsar su producción a través de la oscuridad de la noche. De este manera, al anochecer deberían los niveles estar más alto para conciliar el sueño más rápido.  Al amanecer deberían despertar completamente enérgicos.

Te sucede que no puedes dormir bien o te despiertas cansado y con fatiga en la mañana.  Seguramente tu reloj está descontrolado y no estás produciendo la melatonina necesaria para proteger tu sistema inmunológico de enfermedades y el envejecimiento cerebral. Y esto es una señal grave que requiere ser atendida.

Recomendaciones:

• Duerme en un lugar completamente oscuro (la oscuridad estimula la producción de melatonina)
• Procura no utilizar electrodoméstico (Computadora, celulares, televisor) una hora antes de acostarte.
• Para iluminar habitaciones en la noche usa una luz “low blue light”
• Recibe la luz del sol necesario y pasa tiempo al aire libre.  Tu cuerpo lo necesita para que el reloj biológico no se descontrole.  De este modo, ayudarás a tu organismo a conciliar mejor el sueño en la noche.  Por ende, a producir melatonina para proteger tu sistema inmunológico de enfermedades

Bien, te conté todo esto por lo que me paso. Ayer me acosté a la hora que normalmente me acostaba antes de empezar a desvelarme por las noche.  Hoy amanecí mucho mejor, se nota la diferencia de cómo me he despertado las dos últimas semanas. Hoy me siento descansada y mucho mejor, no tengo fatiga ni ando azorada corriendo de un lado a otro.

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