En nuestro cuerpo existe un equilibrio de los fluidos presentes dentro y fuera de las células. Cuando este equilibrio se rompe se produce una mayor acumulación de líquido fuera de ellas, produciendo edema (retención de líquido). Afortunadamente existen algunas estrategias, que pueden implementarse a fin de evitar que esto se produzca.
De este tema tan preocupante, les hablaré a fin de cumplir con una solicitud recibida por parte de Sophie. Ella es una seguidora de Connecticut, que disfrutó de la bonita apariencia de sus piernas y pies. De hecho, cuando era joven colaboró en algunos desfiles de caridad organizados por la comunidad, donde conoció a un fotógrafo que es actualmente su esposo.
Ella me decía que, de este episodio inolvidable de su vida ya han transcurrido treinta años. Sin embargo, su esposo e hijos nunca dejaron de halagar esta bonita condición natural mantenida cuidadosamente con caminatas familiares al aire libre.
Sin embargo, con el transcurrir de los años ella fue descuidando un poco el ejercicio y posteriormente realizó un cambio de dieta. Esta se debió, a que por efecto de la mudanza de su último hijo soltero empezaron a socializar más frecuentemente con sus vecinos, amantes de comidas a la parrilla.
Esto le causó en primer lugar un incremento de peso y hace unas dos semanas notó cierta hinchazón inusual en sus tobillos. Ella me afirmaba, que nunca había experimentado esto, por ello decide contactarme. Básicamente, solicitó que le instruyera acerca de algunas técnicas para solventar esta situación.
Yo le expliqué, que esta inflamación se trataba de un proceso de retención de líquidos. Así, a fin de ayudarle a mejorarlo le envié un dossier con algunas estrategias para solventarlo. Dado que, muchas personas suelen presentar edema, creí conveniente compartir esta información en mi página.
Algunas generalidades sobre el edema
De acuerdo a los expertos de Clínica Mayo, el edema es la hinchazón ocasionada por el líquido encerrado a nivel de los tejidos del cuerpo. Por lo general este proceso inflamatorio afecta en mayor grado las extremidades inferiores, es decir piernas, pies y tobillos. Sin embargo, puede presentarse a nivel del abdomen, cara y manos.
Esta retención de líquido puede estar influenciado por la fuerza de gravedad, haciendo que el agua descienda hacia miembros inferiores. Este efecto, es común en personas que suelen estar mucho tiempo sentadas o de pie. Dentro de los síntomas principales del edema destacan:
- Presencia de hinchazón y estiramiento de la piel sobre la zona afectada
- Según la Biblioteca Nacional de Medicina, el edema puede ser con o sin fóvea
- El edema con fóvea deja un hoyuelo en la piel si el área es presionada con un dedo, al menos cinco segundos y luego se va recobrando lentamente
- El edema sin fóvea no deja este tipo de abolladura cuando se presiona el área hinchada
- Se puede presentar dificultad para caminar si la hinchazón se presenta en las piernas
- En caso de que el edema se presente a nivel pulmonar, suelen ocurrir dificultades respiratorias.
¿Cuáles son las causas principales del edema?
Presencia de enfermedades renales
Muchos trastornos a nivel de los riñones son la causa de una serie de enfermedades. Muchas de ellas, como la glomerulonefritis, se originan por daños que pueden ser agudos o crónicos. Es importante destacar, que cada uno de los riñones está formado por alrededor de un millón de unidades de filtración llamadas nefronas.
En el interior de cada una de ellas se encuentran un conjunto de vasos sanguíneos microscópicos denominados glomérulos. Cuando ocurren daños a nivel de estas estructuras del riñón se producen una serie de enfermedades que originan la retención de líquidos.
Dentro de estas enfermedades destacan: glomerulonefritis aguda, síndrome nefrótico, insuficiencia renal aguda (producida en breve período de tiempo), insuficiencia renal crónica (producida a lo largo del tiempo y avanza gradualmente).
Insuficiencia cardíaca
Muchas condiciones que debilitan el corazón, pueden influir en el padecimiento de insuficiencia cardíaca. En el caso de padecer insuficiencia cardíaca congestiva, una o ambas cavidades inferiores del corazón pierden su capacidad de bombear la sangre con eficacia.
Esto implica que, aunque todavía se bombea sangre la misma no es suficiente para cubrir las necesidades del cuerpo. Dentro de los desencadenantes de insuficiencia cardíaca destacan principalmente: apnea de sueño, diabetes, ataques cardíacos, hipertensión arterial y enfermedad valvular.
El debilitamiento ocasionado por estas patologías impiden, que el corazón bombee adecuadamente la sangre. Esto produce, que la sangre no realice un retorno adecuado a través de las venas, produciendo que la sangre se acumule a nivel de piernas y pies.
Debemos recordar, que las venas requieren cierta cantidad fuerza proporcionada por el corazón. Por medio de este impulso se mantiene un flujo adecuado hacia el corazón y pulmones, recibiendo oxígeno y nutrientes.
Se ha comprobado, que cuando no se administran medicamentos o se emplean dispositivos para mejorar la fortaleza del músculo cardíaco, en quienes padecen insuficiencia la sangre no circula adecuadamente.
De esta forma el exceso de sangre y otros líquidos presentes en los capilares puede filtrarse hacia los tejidos corporales, causando edema. De hecho, se ha logrado determinar que el edema es la primera señal de la insuficiencia cardíaca.
Procesos de Insuficiencia hepática
Se ha logrado establecer, que ciertas enfermedades graves del hígado, tal como la cirrosis, influye en la retención de líquidos y en la aparición de edemas. Se puede afirmar que la cirrosis es una etapa tardía de la cicatrización (fibrosis) del hígado.
La misma se produce por efecto de diversas enfermedades hepáticas, entre ellas la hepatitis y alcoholismo crónico. Esto ocurre debido a que el hígado cada vez que presenta una lesión provocada por estas enfermedades, se repara a sí mismo, formando un tejido de cicatrización.
Cabe destacar, que en la medida que la cirrosis avanza se forman cada vez más tejidos de cicatrización. Esto produce un desequilibrio en el funcionamiento del hígado, lo cual conlleva a una menor producción de albumina. Esta proteína posee un alto peso molecular y atraviesa difícilmente la mayoría de capilares sanguíneos, ayudando a mantener la presión dentro de ellos.
Esto contribuye de manera fundamental a prevenir la salida de líquido. Por ello, al producirse bajos niveles de la misma por efecto de un mal funcionamiento del hígado, se produce edema. Este efecto se conoce como hipoalbuminemia.
Embarazo
A medida que avanza el embarazo se acumula líquido en los tejidos, especialmente a nivel de pies, tobillos y piernas. Esto produce principalmente durante el tercer trimestre y se denomina edema fisiológico. Sin embargo, ciertas complicaciones graves del embarazo, tales como la trombosis venosa profunda y la preclamsia también producen edemas.
De acuerdo a la ciencia esta acumulación de líquido, que ocurre durante el embarazo tiene origen hormonal. Es decir, durante el embarazo, se produce una mayor cantidad de hormonas por las glándulas suprarrenales. Estas son principalmente el cortisol y la aldosterona, las cuales provocan retención de líquidos.
Además de ello, el crecimiento del útero se interpone en la sangre que retorna desde las piernas al corazón. Esto trae como consecuencia, el almacenamiento de líquido en las venas de las piernas, que se filtra hacia tejidos circundantes.
Enfermedad de la tiroides
De acuerdo a los expertos, el hipotiroidismo puede llegar a causar un tipo de edema frecuente entre personas con hipotiroidismo severo no tratado.
Esta producción insuficiente de hormonas tiroideas posee sus consecuencias. Entre ellas, la producción de mixedema, caracterizado por la acumulación de líquido en la capa subcutánea de la piel. Esta afecta principalmente la cara, piernas y pies, pero puede presentarse incluso en órganos internos.
Causas varias
Es importante mencionar, que ciertos factores producen un incremento momentáneo o transitorio de la permeabilidad de las venas y vasos. Esto puede producir un incremento de líquidos fuera de ellas y generar edema.
Dentro de estas causas temporales podemos mencionar:
- Alergias
- Infecciones bacterianas
- Picaduras de insectos
- Quemaduras de sol
- Ingesta excesiva de sal
- Empleo de medicamentos para el tratamiento de diabetes, hipertensión y enfermedades cardiovasculares
- Daños en el sistema linfático, lo cual provoca linfedema. Esta es una afección común, en pacientes oncológicos a quienes se les extirpó los ganglios linfáticos.
¿Cómo se trata el edema o retención de líquidos?
De acuerdo a los expertos, el edema puede ser temporal o permanente en función de su causa. Así, cuando el paciente presenta insuficiencia cardíaca crónica, se aconseja controlar el peso y disminuir la ingesta de alcohol. Además de ello, se sugiere controlar la ingesta de líquidos y sal, además de realizar tratamiento de la enfermedad arterial coronaria.
A su vez, si el edema está causado por una enfermedad pulmonar tal como bronquitis crónica o por enfisema, se recomienda dejar de fumar (en caso de pacientes fumadores)
Por otro lado, si la causa del edema se vincula con la ingesta de medicamentos, simplemente al interrumpir su administración el edema podría resolverse. Sin embargo, es muy importante consultar con el médico de cabecera antes de suspender el empleo de cualquier medicamento.
Aparte de realizar el tratamiento de enfermedades secundarias, existen otras medidas que pueden servir para evitar la presencia de edema. Entre ellas podemos resaltar:
- Mantener las piernas por encima de la altura del corazón. Esto se puede lograr, colocando una almohada debajo de las piernas al estar acostado
- Evitar permanecer de pie o sentado sin moverse durante mucho tiempo
- Emplear medias de presión, así se evita que los líquidos se acumulen en las piernas y tobillos
- Asesorarse con su médico acerca de la posibilidad de disminuir la ingesta de sal
- Proteger las zonas hinchadas, evitando causarle lesiones o someterlas a temperaturas extremas o al sol sin protección
- Seguir las indicaciones médicas al pie de la letra en cuanto a los medicamentos recetados. En ocasiones, algunos especialistas recomiendan el empleo de diuréticos para favorecer la eliminación del exceso de líquido.
Estrategias para combatir la retención de líquidos
De acuerdo a lo que vimos, existen algunas causales de retención de líquidos que pueden ser controladas de forma sencilla al cambiar el estilo de vida. Por supuesto existen otras causas que están relacionadas con patologías a nivel hepático, cardíaco o renal, que ameritan recomendaciones médicas.
Dentro de estas estrategias podemos resaltar:
1. Realizar ejercicio
Los especialistas recomiendan en forma general los ejercicios aeróbicos diarios, por períodos de un poco más de 30 minutos. Además, recomiendan incluir ciertos ejercicios específicos empleando algunos objetos y artefactos. Se ha observado que los ejercicios favorecen la actividad de diversos músculos, en especial los de piernas, brazos y glúteos. Esto favorece la eliminación de líquidos mediante la orina.
Algunos de los ejercicios indicados incluyen:
- Fitball (pelota de entrenamiento físico): favorece la circulación al ayudar a mantener las piernas en alto
- Subir escaleras, realizar sentadillas
- Empleo de mancuernas
- Natación (especialmente en el mar por el efecto del agua salada)
- Yoga
- Pilates
- Montar bicicleta
- Saltar la cuerda
- Caminar rápido
- Trotar
En el caso de adultos mayores, que estén imposibilitados de realizar ciertos ejercicios, se recomienda el taichí. Incluso pueden realizar ejercicios sentados, moviendo las piernas a manera de pedalear en bicicleta.
2. Emplear hierbas con efecto diurético
Muchas plantas medicinales han sido bien estudiadas por sus excelentes propiedades diuréticas. Lo importante, es que su empleo posee muy pocos efectos secundarios en comparación con los medicamentos diuréticos normalmente utilizados.
Esta alternativa natural, favorece el equilibrio de líquidos corporales y coadyuva en la eliminación del edema. Dentro de estos diuréticos naturales se mencionan:
Plantas como el perejil, cola de caballo, diente de león, hibisco, hinojo, castaño de indias y té verde.
3. Incluir alimentos con efecto diurético en el menú
No cabe duda, que mediante una alimentación sana y natural se pueden equilibrar adecuadamente los líquidos corporales. Por ello, debemos incluir en nuestra dieta diversos alimentos que posean propiedades diuréticas. Estos alimentos, ayudan en la regulación de los desequilibrios electrolíticos, que por lo general propician la retención de líquidos.
Según los expertos, estos alimentos poseen altos niveles de agua y algunos minerales como magnesio y potasio. A saber: remolacha, apio, pepino, lechuga, espárragos, pera, melón, sandía, plátano, papas, aguacate, papaya, espinaca y calabaza.
4. Fomentar una adecuada disciplina alimenticia
- Ingerir suficiente cantidad de agua (mínimo dos litros diarios)
- Emplear menor cantidad de sal en las comidas, utilizando hierbas aromáticas y otros condimentos para aderezar
- Evitar el empleo de alimentos conservados en sal, además de los alimentos embutidos, ahumados, carnes procesadas y quesos salados
- Incluir en la dieta alimentos que posean altos contenidos de agua. Entre ellos destacan: pepino, naranja, sandía, melón, calabacín, melocotón, apio, kiwi, fresa, tomate, piña, toronja, pimiento, coles, coliflor y espinaca
- Ingerir alimentos ricos en potasio a fin de ayudar a eliminar los excesos de sodio. Entre ellos podemos mencionar: aguacate, guayaba, kiwi, plátano, melón, papaya, cerezas, granada, ciruelas pasas, mango, naranja, batata y yogur natural.
5. Realizar drenajes linfáticos manuales
Esta técnica es manejada de forma profesionalmente adecuada por masoterapeutas. Su empleo además de aliviar el edema, posee una serie de efectos beneficiosos, dentro de los que destacan:
- Reducción de la inflamación ocasionada por la retención de líquidos, propiciando además la regulación del tono muscular
- Mejora la circulación del sistema linfático, favoreciendo la eliminación de sustancias tóxicas y exceso de líquidos
- Mejora el desempeño de los ganglios linfáticos, elevando el rendimiento del sistema inmunológico
- Posee un efecto analgésico, empleándose también en procesos de fibromialgia
- Coadyuva a estimular la función renal
Concluyendo
Nuevamente las investigaciones logran demostrar, que es posible lograr equilibrar ciertos procesos que acarrean graves problemas de salud en el mediano y largo plazo. Muchos de ellos, tales como la retención de líquidos (edema) puede ser manejado adecuadamente, incluyendo ciertas correcciones.
El edema puede tener diversas causas, como reacciones a ciertos medicamentos o alérgicas y alimentos con altos contenido de sodio. Pero también, puede ser desencadenada por diversas enfermedades que afectan sistemas claves como el hepático, renal, cardiovascular o tiroideo.
Vale destacar, que existen algunas alternativas sencillas que permiten manejar adecuadamente el desequilibrio de los líquidos corporales. De acuerdo a los expertos, su implementación permite mantener una adecuada calidad de vida.
Dentro de ellas resaltan: la práctica permanente de ejercicios, ingesta de alimentos ricos en agua y empleo de hierbas diuréticas. Así como también, resalta la importancia de una serie de hábitos que son importantes de incorporar en la rutina alimenticia. Entre ellos, el empleo de alimentos naturales con altos contenidos de potasio y magnesio, además de evitar el exceso de sal.
Incluso, se puede optar por la realización de un drenaje linfático realizado por un profesional en masoterapia.
A Sophie el material recibido, cuyo contenido es el mismo que comparto en el post, le pareció muy interesante. Cabe destacar, considerando lo que me comentó luego de recibir el material, que ella se sintió muy motivada, lo cual la impulsó a cambiar diversos hábitos.
Para ella, esto solo representó un pequeño esfuerzo en comparación con todos los beneficios recibidos. En especial, pudo erradicar la indeseable inflamación, que por algún tiempo estuvo opacando la belleza natural de sus extremidades inferiores.
“Normalmente, las personas que sufren de pesadez e hinchazón en las piernas cometen el error de no beber suficiente agua. Algunos consejos útiles para aliviar el dolor cuando se sufren pies y piernas hinchados son hacer ejercicio, mantenerse activo y beber mucha agua. Por la noche, también hay que mantener las piernas elevadas apoyándolas en una almohada blanda”
Dr. Marco Setti
Especialista en Cirugía Vascular, Angiología y Flebología
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https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK279409/
https://www.niddk.nih.gov/health-information/kidney-disease/kidneys-how-they-work
https://my.clevelandclinic.org/health/diseases/12564-edema
https://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/edema/symptoms-causes/syc-20366493
https://www.healthdirect.gov.au/fluid-retention
https://medlineplus.gov/edema.html
https://familydoctor.org/condition/edema/?adfree=true
https://www.myfooddata.com/articles/high-potassium-fruits.php
https://thedailycrisp.com/5-ways-you-can-get-rid-of-your-water-retention/
https://www.healthline.com/nutrition/19-hydrating-foods#TOC_TITLE_HDR_17
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