✅ Cómo Bajar La Proteína En La Orina Naturalmente

Desde hace mucho tiempo se tienen dudas acerca de las verdaderas causas del mal funcionamiento de los riñones.  Sin embargo, se conoce que la proteína presente en la orina, puede ser indicio de enfermedad renal.  En lo particular yo he estado investigando al respecto desde hace un tiempo, pues me parece un tema apasionante.

A menudo se concluye de forma simple que son los genes los culpables de la situación. Esto sucedió recientemente con la madre de una amiga muy cercana.  Y esta respuesta, de verdad le hizo sentir muy impotente, llegando a paralizarse en busca de una solución para estabilizar el funcionamiento de sus riñones.

Yo por supuesto, traté de calmarla y comencé a explicarle acerca de la importancia del correcto funcionamiento de los riñones y cuáles factores pueden influir en su correcto desempeño. Le mencioné además, que la proteinuria no es algo tan simple y puede depender de muchos elementos, que a veces desconocemos.

La invité además a utilizar unas recetas naturales, que han sido utilizadas en muchas partes y han logrado mejorar el funcionamiento de los riñones. Todo esto  de lo que le hablé a ella, lo plasmé en este post de una forma sencilla y diferente de enfocar la situación de la proteinuria o presencia de proteína en la orina.

¿Qué es la proteinuria?

Para explicar de la forma más sencilla posible de que se trata la proteinuria, debo mencionar algo acerca de los riñones. De acuerdo a la ciencia, ellos poseen funciones muy importantes que incluyen  la regulación de la presión arterial y el estímulo de los glóbulos rojos para convertir la vitamina D en su forma asimilable. Sin embargo, su trabajo más conocido es eliminar el exceso de líquidos y productos tóxicos del cuerpo.

Este filtrado se realiza por medio de aproximadamente un millón de microfiltros denominados glomérulos. Cuando ellos fallan, una cantidad significativa de proteína que debe utilizarse para otras funciones, puede pasar a la orina.

Dentro de estas proteínas, destaca la albúmina, por lo que también la proteína en la orina se denomina también  como albuminuria. En pocas palabras, cuando los glomérulos están sanos,  permiten que el agua pase a la orina. Esto se realiza pero reteniendo moléculas grandes como la albúmina. Por lo tanto, cuando ellos están dañados, la albúmina se filtra en la orina, causando proteinuria.

¿Cuáles son las causas más conocidas de la proteinuria?   

La proteinuria puede ser el resultado de algunas situaciones momentáneas o por el mal funcionamiento renal. Los análisis bioanalíticos de orina, sitúan el limite normal de proteínas en orina durante 24 horas en 150 mg/día en adultos y 140 mg/día en niños. Estos análisis contienen tanto proteínas filtradas por el glomérulo como las  sintetizadas en el túbulo (proteína de Tamm-Horsfall).

En la actualidad, el avance de los estudios permite detectar proteinuria o albuminuria en un análisis simple de orina, relacionado con la creatinina, que es un producto de desecho del metabolismo producido por los músculos.

 Causas transitorias

Esta es originada por una serie de factores que favorecen el aumento temporal de la concentración de proteína en la orina. Sin embargo, esta situación no es permanente y se elimina cuando el factor ya no está presente. Dentro de estos desencadenantes más conocidos se mencionan: estados febriles, temperaturas extremas (muy frías o muy calientes), situaciones de estrés y esfuerzos físicos. De acuerdo a los estudios, estas causales no son indicativas de daño a nivel de los riñones

Causas por el mal funcionamiento de los riñones

En este caso, si existen razones que son inherentes a un desequilibrio originado por una serie de trastornos que deben ser tratados para estabilizar el correcto desempeño renal.

• Enfermedad Glomerular

Hasta donde se sabe, esta enfermedad es la causa de proteinuria severa más común. Ella afecta los glomérulos, los cuales son los pequeños filtros que se encargan de filtrar la sangre dentro del riñón. Generalmente, se afecta la permeabilidad, lo cual conlleva a la excreción de más de dos gramos proteína al día en la orina. Este tipo de enfermedad puede ser de dos tipos primaria y secundaria.

Dentro de las primarias se incluyen todos los tipos de glomerulonefritis o  inflamación  de los glomérulos y la nefropatía o enfermedad de Berger, que es indicativo de un daño en los riñones.

Dentro de las enfermedades secundarias destacan: diabetes, preeclampsia, rechazo de trasplante renal, linfoma y cáncer. En el caso del daño realizado por la presencia de diabetes, se realizan estudios más precisos que permiten obtener valores sobre la microalbuminuria. Esto permite además realizar una evolución del funcionamiento de los riñones en pacientes diabéticos. Se ha establecido además, que cierto tipo de drogas como la heroína y drogas antiinflamatorias no esferoidales, pueden afectar. Favoreciendo también la excreción de proteína en la orina.

• Enfermedad tubular

Es una enfermedad que afecta entre otras cosas, el equilibrio bioquímico ácido-alcalino de la sangre. Esto consume excesos de bicarbonato en sangre, huesos y dientes. En este caso el daño se origina en unos pequeños conductos del riñón denominados túbulos, próximos a los glomérulos. Generalmente se asocia a casos moderados de proteinuria en la orina (menos de dos gramos excretados al día). Dentro de las causales se mencionan nefroesclerosis hipertensiva y nefropatía a nivel de los túbulos.

Además, la enfermedad túbulo intersticial puede presentarse secundario a una condición de salud subyacente por ejemplo: nefropatía por  ácido úrico, Síndrome de Fanconi  (producido por enfermedades congénitas, algunos medicamentos como medicamentos como  cidofovir, gentamicina y tetraciclina), o trasplante de riñón.

¿Cuáles son los síntomas más frecuentes de la proteína en la orina?

Es usual, que una persona  no note ningún síntoma cuando recién comienza a tener problemas renales. Es por ello muy importante la realización de un análisis de orina, que permitirán la detección de proteínas en ella. Tanto la enfermedad renal, como la proteinuria pueden dar origen a varios síntomas.

• Dificultad para respirar
• Orinar con mucha frecuencia y con mucha espuma
• Inflamación en las manos, pies o cara.
• Resequedad en la piel
• Insomnio
• Sensación de sabor a metal en la boca
• Episodios de hipo
• Presencia de náuseas y vómitos
• Problemas para concentrarse

En el caso de mujeres embarazadas, la presencia de proteína en la orina se vincula con la preeclampsia. Se sabe que es una condición de riesgo para la madre y el bebé. Adicional a los síntomas descritos, si hay preeclampsia, se presentan otros adicionales. Ellos son: dolores de cabeza, dificultad en la visión, dolores abdominales y disminución de la producción de orina.

Tratamientos convencionales  de la proteinuria

Como ya hemos visto, la proteinuria no es una  enfermedad específica. Por ello, Entonces su tratamiento pasa por  identificar y manejar su verdadera causa. Si esa causa es una enfermedad renal, es esencial un tratamiento médico adecuado. Si por el contrario, las causas son transitorias, no es preciso realizar ningún tratamiento. A nivel médico se ha visto la importancia de tratar adecuadamente las enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión.

Por lo general, se utilizan inhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina. Estos medicamentos ayudan a relajar los vasos sanguíneos. Los más frecuentes  son enalapril, lisinopril y ramipril. Y se utilizan también bloqueadores de la angiotensina II, que evitan incrementos de la tensión. Entre los más comunes: andesartán, eprosartán, irbesartán, losartán potásico y valsartán.

¿Cómo reducir la proteína de la orina de una forma natural?

Como expuse los niveles de proteína cuando son altos tienen diferentes causas.  Se incluye la hipertensión, la obesidad, así como la diabetes.  La proteína en la orina podría suceder bien por una afección renal ya manifestada o una señal de problemas renales apremiantes.  Esto quiere decir que es importante llevar a cabo un tratamiento para contribuir a normalizar la salud de los riñones.

Entre lo más importante puedo mencionar lo que se puede hacer para reducir la proteinuria de una manera natural, entre ellas:

Aquí hay algunos remedios caseros naturales que pueden ayudar a tratar la proteinuria:

• Consumir mucho líquido especialmente agua.  Evita consumir sodas y bebidas energéticas que son tan dañinas para el organismo.
• Evitar el alto consumo de sal
• Minimizar los niveles de estrés
• Realizar actividades físicas de una forma regular.
• Evitar el consumo de alcohol y tabaco
• Mantener un peso adecuado.  Es importante evitar el sobrepeso
• Consumir frutas, vegetales y legumbres.  Ayudan a limpiar el organismo.

Remedios naturales para reducir la proteína en la orina

1. Zumo de zanahoria y cilantro

Está bien estudiada la presencia de betacaroteno, la forma soluble de vitamina A en la zanahoria. Ellas además, son ricas en pectinas, un tipo de fibra soluble. De acuerdo a un estudio realizado  el 2009,  se encontró que la pectina es muy eficaz como diurético. Además de ello, es muy eficiente  sobre los síntomas de insuficiencia renal. Incluso mejor que el carbón vegetal o polifepan, dos diuréticos de uso común.

Por su parte, se ha encontrado que el cilantro es un estupendo antioxidante. En el “Indian Journal of Experimental Biology”, se publicó un estudio que muestra cómo el cilantro inhibe el daño oxidativo en los riñones, restaura los niveles de enzimas antioxidantes y mejora  los niveles de azúcar en la sangre.

Ingredientes

• Tres zanahorias orgánicas grandes
• Una taza de hojas de cilantro

¿Cómo lo realizo?

• Lavar muy bien las zanahorias y las hojas de cilantro
• Trocearlos y colocarlos en un exprimidor para jugos
• Tomar este jugo en ayunas
• Lo ideal es tomarlo al menos una semana seguida para obtener los resultados deseados

2. Decocción de jengibre

Como lo hemos referido en muchas ocasiones, el jengibre es una planta que posee es su rizoma, altos contenidos de gingerol. Esta subtancia es altamente antiinflamatoria y antioxidante. Hay estudios que demuestran que ayuda al funcionamiento de las prostaglandinas producidas en el riñón. Al mantener el equilibrio en el funcionamiento de este órgano, se logra superar la presencia de proteína en la orina.

Ingredientes

• Dos pulgadas de rizoma orgánico fresco de jengibre
• Dos tazas de agua filtrada

¿Cómo lo preparo?

• Lavar muy bien el jengibre
• Cortarlo en rodajas finas
• Servir el agua en una olla mediana
• Añadir el jengibre
• Hervir a fuego lento por veinte minutos
• Dejar enfriar y beber esta decocción tres veces al día antes de cada comida
• Si se desea, añadir unas gotas de limón orgánico
• Al realizar este procedimiento durante diez días, se obtendrán valiosas respuestas

3. Infusión de Perejil

El perejil es una fuente rica de vitamina A, B y C, así como de tiamina, riboflavina, potasio y cobre. Los estudios han demostrado que los aceites volátiles del perejil, en especial  particularmente la miristicina, que  protege ante la formación de tumores. La potencia de sus aceites volátiles, le dan la denominación de  “quimioprotector”, en particular algunos  tipos de carcinógenos. Dentro de ellos se incluyen, los benzopirenos que forman parte del humo del cigarrillo y el humo de la parrillas en base a carbón.

Por otra parte, se ha demostrado que la luteolina, un flavonoide presente en el perejil,  funciona como un potente antioxidante. La vitamina C, presente en el perejil, posee muchas funciones diferentes. Es el principal antioxidante soluble en agua del cuerpo, haciéndolo muy eficaz como agente antioxidante en  todos los órganos. Es muy empleado  como diurético, en el tratamiento de la enfermedad renal y en el control de proteína en la orina.

Ingredientes

• Un litro y medio de agua filtrada
• Un manojo de perejil

¿Cómo lo preparo?

• Verter el agua en una olla mediana
• Lavar muy bien el perejil y trocéalo finamente
• Añadir el perejil dentro de la olla y hierve a fuego lento durante unos diez minutos
• Dejar enfriar y filtra la decocción
• Beber a lo largo del día si gusta frío o caliente
• Para obtener buenos resultados beberlo durante diez días seguidos
• Si no gusta el sabor original, añadir unas gotas de limón orgánico

Nota: No es recomendable el uso del perejil en grandes dosis,  en  mujeres embarazadas o en personas que  toman medicamentos anticoagulantes. Es importante consultar al médico,  antes de usar perejil si se tiene condiciones de salud graves.

4. Batido de ajo

El ajo es una planta que ha sido utilizada ancestralmente en la India y en China. Esta planta posee un componente denominado alicina, con muchas propiedades.  Los estudios demuestran que es antihipertensivo, antioxidante, cardioprotector, antidiabético, nefroprotector e inmunomodulador. Existen pruebas clínicas donde se ha observado que la alicina posee el mismo efecto de protección renal que el losartán potásico.

Ha sido empleado positivamente en el  tratamiento de la proteinuria. A su vez, son muy conocidas las propiedades de la miel, Es un antibiótico natural y un potente antioxidante, lo cual ayuda a la reparación de las células en órganos como los riñones. La combinación de ajo y miel es un potente remedio natural para ayudar a equilibrar el funcionamiento de los riñones.

Ingredientes

• Seis dientes de ajo
• Dos cucharadas de miel orgánica

¿Cómo lo preparo?

• Pelar los dientes de ajo
• Colocarlos en una licuadora
• Añadir la miel y mezcla hasta conseguir una mezcla homogénea
• Se puede añadir algunos cubitos de hielo para sentirlo más agradable al paladar
• Beber este batido dos veces al día durante una semana para obtener resultados beneficiosos
• Procurar no almacenar el producto restante, debe estar recién preparado

5. Agua de barba de maíz

Desde hace muchos siglos, los indígenas del continente americano aprovechaban los beneficios obtenidos por el uso de las barbas de maíz. Posee una gran cantidad de flavonoides, alantoína, mucílagos, vitamina C y vitamina B2. También contiene cantidades considerables de Ca y K. Todos estos elementos, le confieren propiedades antibactericidas y diuréticas. Ha sido muy utilizada en el alivio de la enfermedad renal y la proteinuria.

Ingredientes

• Barba de maíz seca proveniente de cinco mazorcas orgánicas
• Medio litro de agua filtrada

¿Cómo lo preparo?

• Retira la barba de las mazorcas
• Colócalas sobre una servilleta de papel y déjalas deshidratar en un lugar fresco
• Trocéalas en pequeñas fracciones después de deshidratadas
• Colócalas en un frasco con tapa y añade el agua
• Coloca el frasco al sol durante un día completo
• Al día siguiente agita muy bien y luego deja reposar
• Mantenlo refrigerado y bébelo frío
• Si no te agrada su sabor insípido añade stevia o miel orgánica
• Realiza este procedimiento durante una semana para obtener resultados favorables

6. Infusión de laurel

El laurel posee ácido acético, ácido fórmico, limoneno y eugenol. Se sabe que contiene minerales como manganeso, magnesio, potasio, zinc, calcio, fósforo, hierro y sodio. Todos estos elementos le confieren excelentes propiedades diuréticas, siendo muy utilizado para eliminar las molestias causadas por la gota, artritis, celulitis, ácido úrico, reumatismo y mal funcionamiento de los riñones. Posee además cineol, con efecto antibacterial. Es utilizado además para el tratamiento de proteína en la orina e infecciones.

Ingredientes

• Dos hojas de laurel
• Una taza de agua

¿Cómo lo preparo?

• Pon a hervir el agua
• Aún caliente viértela en una taza
• Añade las hojas de laurel y déjalas en el agua caliente unos quince minutos
• Bebe esta infusión tibia cuatro veces al día
• Realiza este procedimiento al menos durante una semana y obtendrás grandes resultados

7. Jugo de aloe y toronja

Se sabe que la toronja contiene un flavonoide llamado naringenina. Estudios han demostrado que este compuesto, ayuda a regular una proteína que disminuye el crecimiento de quistes a nivel de los riñones. Posee altas cantidades de ácido cítrico, esto ayuda a expulsar los excedentes de oxalato de calcio que pueden causar daño y mal funcionamiento de los riñones.

Por otra parte, el ácido cítrico ayuda a aumentar el volumen y el pH de la orina. Esto favorece la mejor función renal y evita la proteinuria. Por su parte el aloe, ampliamente conocido por nosotros, posee una serie de propiedades  antiinflamatorias, regeneradoras celulares y antibióticas. Se sabe que el acemanano presente en el aloe, favorece nuestro sistema inmunológico. Cuando conjugamos la potencia de estas maravillas naturales, protegemos muy bien nuestro sistema renal y evitamos la presencia de proteína en la orina.

Ingredientes 

• Una penca de aloe orgánico
• Una toronja orgánica grande

¿Cómo lo preparo?

• Lava muy bien una penca orgánica de aloe
• Quita la cubierta y extrae el gel de acuerdo a como ya les he enseñado anteriormente
• Lava muy bien la toronja y extrae su jugo
• Coloca el gel de aloe y el jugo de toronja en una licuadora
• Batir hasta que se haga una mezcla homogénea
• Tomar este jugo una vez al día en ayunas
• Para observar resultados satisfactorios realiza este procedimiento al menos durante una semana

Concluyendo

Definitivamente que hablar de los riñones y los problemas que les afectan, es un tema que tomaría mucho espacio. Lamentablemente no dispongo de todo el que requeriría.  Sin embargo, como siempre traté de ser lo más sencilla. Claro está, sin perder la oportunidad de entregaros algunos términos que tal vez más adelante les puedan ayudar.

Mi amiga no perdió la oportunidad de ayudar a su madre. Las cosas que compartí con ella y que ahora les presento en el post, fueron para ella de gran valor. Tanto así que le acompañó a realizar varias pruebas para determinar con exactitud los valores de proteína en orina. Luego de volverlos a realizar, se obtuvieron resultados adecuados.

Por supuesto que hubo varios elementos que favorecieron el restablecimiento de sus valores. En primer lugar, recordó que cuando se hizo la prueba que le preocupó, había estado realizando caminatas. Y como ya lo vimos, dentro de las causas transitorias de la albuminuria, destaca el esfuerzo físico. Otro elemento favorecedor fue, su consumo del jugo de aloe y toronja. Me dice que lo bebe al menos tres veces a la semana y se lo recomendó a sus compañeras de ejercicios vespertinos.

Con mucho cariño, como siempre les insisto en no dejar a un lado la sed de aprender cosas nuevas. Esas enseñanzas nos darán luces para entender cómo funciona nuestro organismo y cuan interrelacionados están nuestros órganos. Hagan la prueba y verán que a veces es muy interesante comenzar a escuchar a nuestro cuerpo, el acompañante temporal de nuestra alma.

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Robert C. Peale

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