La chirivía, denominada en algunas partes pastinaca, podría ser considerada en la actualidad una hortaliza un poco olvidada. Ella siempre jugó un papel alimentario fundamental en muchos países europeos donde constituía un alimento muy especial en invierno. Actualmente en Europa, es un alimento típico de otoño e invierno, sin embargo, ya no es muy demandada como en antaño.
De esta hortaliza tan especial, que busca ser rescatada, les voy a hablar porque una seguidora de Oklahoma sentía mucha curiosidad acerca de ella. Rebecca realmente había observado la chirivía cuando compraba sus hortalizas, pero esta vez, alguien le habló acerca de ella de una forma inusual.
Rebecca, es una joven madre que actualmente se encuentra embarazada de su segundo hijo. Ella se comunicó conmigo a finales de octubre de 2020, estaba finalizando su sexto mes de gestación. Me comentó que cierto día, se encontraba en un supermercado donde acostumbra ir con su esposo. Y una pareja de adultos mayores se les acercaron y les hablaron sobre la chirivía.
Rebeca me dijo que al principio no entendía muy bien. Pero luego captó que la dulce pareja le estaba indicando comer chirivía, para ayudar en su embarazo. Ella en ese momento, quedó con muchas dudas y decidió no comprarlas. Pero luego de recibir la información que le envié, su posición cambió mucho con respecto a esta noble hortaliza. Dado que es un recurso vegetal muy valioso y nos provee muchos beneficios, decidí compartirlo en mi blog.
Conociendo acerca de la chirivía
La chirivía es una hortaliza de raíz originaria de Asia y Europa. Su nombre botánico es Pastinaca sativa y pertenece a la familia Apiácea, al igual que el apio, hinojo, zanahoria, perejil, eneldo y cilantro. La parte mayormente aprovechable es similar a una zanahoria, solo que su cubierta exterior es más rugosa. Por lo general presenta coloraciones que van desde el blanco crema al marfil.
Se cultiva por su enorme raíz carnosa, se sabe que los romanos y griegos antiguos la utilizaron con fines alimenticios y medicinales. La raíz de esta planta mide entre 20 a 30 centímetros de longitud. Su sabor es dulcemente anisado con un toque picante, lo que resalta el gusto de las comidas donde se emplea. Para desarrollar sus características requiere de condiciones frías, por ello no se cultiva en tierras cálidas.
De acuerdo a los análisis realizados, se ha establecido que posee mayores condiciones nutricionales que la zanahoria. Debido a su dulzor, se empleó en Europa para sustituir al azúcar, dado su elevado costo. En Gran Bretaña, era muy frecuente utilizar la chirivía en la elaboración de pasteles y mermeladas. Esta planta fue introducida al continente americano durante la época de la conquista.
Luego de dos décadas, la chirivía se hizo muy común en Massachusetts. De hecho, muchos nativos americanos comenzaron a cultivarla, de esta forma se extendió a todo Estados Unidos. Hoy en día se cultiva en muchas partes del mundo que reúnen las condiciones para su producción. Las especies más cultivadas a nivel mundial: modelo Harris, All American, Hollow Crown, Cobham Marrow y Student.
En la actualidad, su consumo ha ido disminuyendo, de hecho, en Europa esto ocurrió de forma abrupta cuando se introdujo la papa. Sin embargo, es valorada por sus beneficios para la salud.
Propiedades de la chirivía
Esta planta en parte olvidada, posee una serie de propiedades muy importantes para la salud, entre ellas destacan:
- Anticancerígeno
- Antioxidante
- Antienvejecimiento
- Antinflamatorio
- Digestivo (mejora el tránsito intestinal)
- Depurativo (favorece la eliminación de toxinas)
- Hipocolesterolémico (reduce los niveles de colesterol)
- Hipoglucémico.
Composición nutricional de la chirivía (Fuente USDA)
De acuerdo a los estudios se ha logrado determinar que una taza (133 gramos) de chirivías aporta:
- 100 calorías
- 24 g de carbohidratos totales, equivale al 18,41% de Ingesta Diaria Requerida (IDR)
- 6,5 g de fibra (17,11% IDR)
- 1,5 gramos de proteínas (2,66% IDR)
- 0,5 g de grasas totales (1% IDR)
- 22,6 mg de ácido ascórbico (vitamin C) (25.11% IDR)
- 1,98 mg de vitamin E (alpha-tocopherol) (13,20% IDR)
- 9 µg de vitamina K (filoquinona) (24,92 % de la IDR)
- 89 µg de folato (vitamina B9) (22.25% IDR)
- 0,12 mg de vitamina B1 (Tiamina) (10% IDR)
- Vitamina B6: (7% IDR)
- 798 mg de vitamina B5 (ácido pantoténico) (15,96% IDR)
- 94 mg de fósforo (13.43% IDR)
- 39 mg de magnesio (9,29%IDR)
- 499 mg de potasio (10,62% IDR)
- 0,745 mg de manganeso (32,39% IDR)
- 0,78 mg de hierro (9,75% IDR)
- 0,16 mg de cobre (17,78% IDR)
- Zinc: 7% de la IDR.
Además de los nutrientes mencionados, las chirivías contienen una pequeña cantidad de calcio y riboflavina.
¿Qué compuestos bioactivos presenta la chirivía?
Esta nutritiva y actualmente poco conocida raíz, posee una gran cantidad de compuestos antioxidantes poliacetilénicos. Dentro de ellos destacan: el falcarinol, falcarindiol, panaxidol y metil-falcarindiol. Además de ello, posee cantidades importantes de vitaminas con un alto poder antioxidante como las vitaminas C y E.
Beneficios de la chirivía
La chirivía no solo aporta un sabor único a sus platos, también es altamente nutritiva. Asociándose con una gran variedad de beneficios para la salud. Entre los cuales podemos mencionar:
1. Ayuda a disminuir defectos neurológicos en el feto
La chirivía está compuesta por varias vitaminas del complejo B, destacándose el folato, también conocido como ácido fólico o vitamina B9. Esta vitamina se relaciona con la disminución de los defectos congénitos del tubo neural. Así como también el paladar hendido, la espina bífida y el daño cerebral en bebés.
Estudios comprueban que el folato equilibra el sistema nervioso. Mejora los procesos metabólicos relacionados con la producción de energía. Además, esta hortaliza ayuda a las madres a superar la depresión postparto.
2. Protege y ayuda a mejorar las propiedades de la piel
Las vitaminas E y C presentes en la chirivía, le confieren a esta hortaliza un alto contenido en antioxidantes y antienvejecimiento. De esta forma ayuda a prevenir las arrugas. Ello otorga una gran mejoría sobre la elasticidad de la piel, reparando además las células dañadas de la misma.
3. Favorece el tránsito intestinal
La chirivía presenta un alto contenido en fibra soluble e insoluble. Al consumir este alimento, la fibra que contiene se desplaza por el tracto gastrointestinal. Esto coadyuva al movimiento y optimiza la digestión. La ingesta de fibra ayuda al tratamiento de afecciones digestivas como la diverticulitis, el reflujo gastroesofágico, las ulceras intestinales y las hemorroides.
También facilita la regularidad. Estudios indican que el consumo de fibra favorece la frecuencia de las deposiciones en personas que sufren de estreñimiento. Además de ello, la fibra ayuda al control de la glucosa en sangre, disminuye la tensión arterial, reduce los marcadores de inflamación y los niveles de colesterol. Previene la diverticulitis
4. Ayuda a la pérdida de peso
La chirivía tiene pocas calorías, pero alto contenido de fibra. Esta al pasar lentamente por el tracto digestivo, mantiene la sensación de saciedad por más tiempo. Lo que reduce el apetito y la ingesta de alimentos es menor. También, esta hortaliza presenta un alto contenido de agua. Diversos estudios confirman, que el consumo de alimentos altos en agua está relacionado con una menor ingesta de calorías y una mayor pérdida de peso.
5. Favorece la función inmunológica
La chirivía presenta un alto contenido de vitamina C y antioxidantes, los cuales mejoran la función inmune. Según diferentes estudios, el consumo de vitamina C ayuda en la disminución de los síntomas del resfriado. Así como también, acorta la duración del resfriado común y otras infecciones del sistema respiratorio.
Además, ayuda en la prevención y tratamiento de otras afecciones tales como la neumonía, la malaria y las infecciones diarreicas. Muchos de sus compuestos bioactivos logran prevenir el estrés oxidativo y las enfermedades crónicas como la diabetes, el cáncer y las cardiopatías. También, la vitamina E facilita la absorción de hierro y evita procesos de anemia ferropénica que ocasionalmente produce ciertas patologías de alto riesgo.
6. Promueve la salud bucal
Este beneficio se obtiene por la presencia de vitamina C y el folato. Estas vitaminas previenen la gingivitis, el dolor de muelas y el mal aliento (Halitosis). Además, se ha logrado establecer que ayudan al fortalecimiento de los dientes. Principalmente este efecto se logra mediante el mantenimiento adecuado de la salud de las encías y del tejido conectivo. Esto protege del padecimiento de enfermedades gingivales.
7. Favorece un mejor desempeño del sistema visual
El ácido ascórbico presente en la chirivía, ayuda a prevenir diversos problemas oculares. Entre ellos la degeneración macular. A su vez, se ha logrado establecer que algunos antioxidantes presentes en esta hortaliza, protegen los ojos de daños causados por el sol.
8. Potencia la salud de los huesos
Esta hortaliza tiene alto contenido de manganeso, calcio y zinc, minerales que contribuyen a mejorar la salud de los huesos. El manganeso, por ejemplo, es un cofactor de las glicosiltransferasas. Las mismas participan en la producción de cartílago y fortalecen los huesos. Además, sirve en el tratamiento de la osteoporosis. También, debido a las propiedades antiinflamatorias de esta raíz, disminuye los síntomas de la artritis.
9. Fortalece las funciones cerebrales
El folato y el potasio presente en la chirivía, genera un efecto positivo en la salud neurológica. Permite un mayor nivel de concentración y estado de alerta. También se ha determinado que puede combatir ciertos estados depresivos y la ansiedad, entre otros problemas mentales.
10. Protege el desempeño de la función cardiovascular
Gracias al excelente aporte de potasio y vitamina C, la chirivía posee efectos vasodilatadores, disminuyendo así, la tensión arterial. Además de ello, sus altos niveles de folato disminuyen los niveles de homocisteína, un aminoácido que posee efectos agresivos sobre los tejidos del corazón. De esta forma, se atenúa el riesgo de enfermedades cardiacas. Además de ello, la fibra reduce los niveles de colesterol en sangre.
Algunos consejos para comprar y conservar las chirivías
Como con todos los vegetales, lo más recomendable es adquirir la chirivía lo más fresca posible. Es importante elegir raíces firmes, carnosas, de superficie uniforme y de tamaño medio. Procurar evitar raíces muy maduras o con apariencia leñosa, nudosas, arrugadas o muy blandas. Esto puede acarrear, sabores desagradables, deterioro o dificultades para digerirlo. De igual forma, deben conservarse refrigeradas en bolsas plásticas, no deben congelarse.
Cómo preparar las chirivías
Lo primero que se debe hacer para utilizar la chirivía, es lavarla muy bien. Seguidamente, eliminar toda la cubierta exterior y cortas las puntas. Se puede trocearla o picarla como se desee.. Su cocción, es muy parecida a la de las zanahorias. También se pueden asar, hornearlas, freírlas, hacer puré, utilizarla para adornar, así como también agregarla a guisos y sopas como espesante.
Receta de nabos y chirivías al horno
Esta sencilla receta, es muy esquisita,
Ingredientes
- Tres chirivías medianas bien firmes
- Tres nabos orgánicos blancos frescos
- Una cucharada de miel orgánica
- Tres nabos orgánicos morados frescos
- Aceite de oliva virgen extra (al gusto)
- Pimienta blanca recién molida (al gusto)
- Romero, tomillo y albahaca (al gusto)
- Sal marina (al gusto)
- Queso de su preferencia para gratinar (los veganos podrían utilizar tofu).
¿Cómo realizarlo?
- Lavar muy bien todas las hortalizas
- Eliminar la cubierta externa y seccionarlos en diferentes formas (rodajas, cubos, bastones)
- Precalentar el horno a unos 200ºC
- Colocar las hortalizas en una bandeja y sazonar al gusto
- Añadir el aceite de oliva y la miel, esparciéndolo de forma homogénea
- Llevar la bandeja al horno cuando alcance la temperatura deseada
- Llevar al horno unos 45 minutos, pero removiendo cada cierto tiempo hasta que se deshidraten las hortalizas
- Revisar la sazón y añade el queso un poco antes de finalizar para gratinar
- Disfrutar esta delicia mediterránea (se puede acompañar con pollo o pescado a la plancha, arroz, y cualquier pasta de tu preferencia).
Concluyendo
La naturaleza siempre será para muchas personas una caja llena de sorpresas. Y eso debe llevar a todos a tener una mirada diferente para con ella, pues está repleta de cosas hermosas y benéficas. Como se pudo ver, la chirivía fue un regalo de la naturaleza para muchos países europeos y por muchos siglos desempeñó un papel muy importante. Sirvió para calmar el hambre en la época de invierno, además de favorecer una adecuada salud y nutrición.
Hoy en día, se pueden conseguir muchas personas, que al igual que yo, comparten la visión de rescatar especies promisorias con potencialidad como alimento de las nuevas generaciones.
La chirivía posee gran cantidad de nutrientes que incluyen una diversa variedad de vitaminas y minerales. En especial, elevados niveles de vitamina C, K, E, ácido fólico, además de algunas del complejo B. Vale destacar además, sus altos contenidos de minerales como potasio, fósforo, manganeso, magnesio, hierro zinc y cobre. Todos estos nutrientes, junto a sus compuestos bioactivos, eleva su importancia
Para Rebecca, fue realmente sorpresivo lo que leyó en el material que le envié. Dicha información es la misma que comparto en el post. Ella me confesó a mediados de enero, que esta raíz le parecía insignificante y poco apetecible. Sin embargo, al leer con detenimiento, descubrió su valor nutricional, sobre todo para quienes están en etapa de gestación. Por la enorme riqueza de minerales y vitaminas, incluyendo el folato.
Actualmente, su bebé ya va alcanzando los dos meses. Ella realmente se sintió muy nutrida por esta raíz especial, sintiéndose muy agradecida por la dulce pareja que le permitió nutrir adecuadamente su organismo. De hecho, a su esposo le gusta hornear discos delgados de chirivía y degustarlos eventualmente como un snack saludable.
“Una taza de chirivías proporciona aproximadamente una cuarta parte de la fibra, la vitamina C y la vitamina K diarias. También aportan potasio, magnesio y vitamina E y B, así como calcio y otros minerales”
Dra. Michelle Hauser
Becaria clínica de medicina en la Facultad de Medicina de Harvard y chef certificada y educadora en nutrición.
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https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/23635379/
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