☑️ El 97% De Los Alimentos Dirigidos A Niños No Son Saludables

Siempre he destacado la importancia de una alimentación saludable. Y ello debe ser asumido, como una norma de vida que se inculca desde el hogar, para luego arraigarse. Por ello, si los hábitos saludables surgen desde la infancia, en la edad adulta siempre prevalecerán por encima del gusto.

Así, un informe de 2019 elaborado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), recoge elementos inquietantes. Entre ellos, el bombardeo alarmante realizado por publicistas y comercializadores, que incide sobre el consumo de alimentos poco saludables.

De este trascendental tema de la alimentación, hablaré debido a la preocupación de una seguidora de Portugal. Su nombre es Concepción y es madre de una niña de nueve años y un niño de once años. Ella decidió comunicarse conmigo, a inicios del otoño, porque comenzó a notar que sus hijos empezaron a ganar peso.

Ella observaba que tenían menos ánimo para realizar algunos ejercicios dentro de casa y descansaban más de lo usual. De hecho, algunas de sus prendas de vestir ya no funcionaban, no por su crecimiento, sino por el ancho de cintura. Cuando empezamos a hablar, fui tomando algunos elementos que me llevaron a sospechar acerca de la calidad de la alimentación.

Y no me equivoqué, pues Concepción admitió que ha cambiado ciertos hábitos alimenticios. Al considerar que ella necesitaba manejar mayor cantidad de elementos acerca la realidad actual, envié para ella un sencillo informe.

En ese informe, le mencioné ciertos aspectos que hay que considerar acerca de determinados alimentos poco nutritivos. Sobre todo, los que van dirigidos a los niños y la importancia de estar atentos como padres y formadores.

Un tema que apoya a la familia merece ser compartido, por ello lo plasmo de mil amores en mi página.

Pinceladas acerca de la importancia de los buenos hábitos alimenticios

De acuerdo a la OMS, una dieta malsana es un factor de riesgo clave de las enfermedades no transmisibles (ENT). Afortunadamente esto puede ser modificado. Sin embargo, en caso de que se decida no combatir la inadecuada alimentación, ello puede transformarse en fuente de ENT.

Aunado a ello, existen ciertos factores de riesgo que agravan aún más la situación y puede conducir a ciertas patologías. Entre ellas destacan: hipertensión, hiperglucemia, hiperlipidemia, sobrepeso y obesidad.

Es importante resaltar que las muertes por ENT se dan con mayor prevalencia en la edad adulta. No obstante, los riesgos ocasionados por dietas inadecuadas, inician durante la infancia, acumulándose a lo largo de la vida.

Por ello es muy importante, mantener un peso saludable en los niños. Esto permitiría reducir el riesgo futuro de dichas enfermedades. Esto podría lograrse consumiendo alimentos con poco contenido de grasas saturadas, grasas de tipo trans, azúcares y sal.

Niños y adolescentes una población vulnerable

De acuerdo a la ciencia, los niños con sobrepeso y obesidad presentan mayor propensión a los problemas de salud graves. Se ha determinado que los hábitos alimentarios inadecuados, además del exceso de calorías, inciden de forma directa en desequilibrios metabólicos.

A saber, tensión arterial elevada, diabetes tipo 2, problemas respiratorios como el asma bronquial y enfermedad del sistema hepático. También, se han reportado algunos desajustes a nivel del sueño, además de depresión, aislamiento social y baja autoestima.

Es imperativo recalcar, que una alimentación saludable es indispensable para alcanzar un adecuado crecimiento y desarrollo en niños y adolescentes. Además, se ha corroborado, que los hábitos alimentarios sembrados durante la infancia continúan hasta la edad adulta.

Se ha determinado que el equilibrio energético es importante a corto plazo para el control del peso. Sin embargo, es el patrón de alimentación quien lo define a largo plazo.

El año 2013, la OMS realizó La Declaración de Viena sobre Nutrición y Enfermedades No Transmisibles en el Contexto de la Salud 2020. En ella, se reconocía que “una dieta saludable podría contribuir a alcanzar las metas mundiales sobre las ENT”.

Además de ello, se reafirmó el compromiso con los marcos europeos y mundiales existentes. Esto con el objeto de abordar importantes factores de riesgo de las ENT, principalmente dietas poco saludables e inactividad física. La idea era alcanzar para el año 2025, una reducción relativa del 25% de la mortalidad prematura por ENT.

A nivel mundial, ha habido un aumento de la ingesta de alimentos densos en energía con alto contenido de grasas y azúcares. Esto es considerado como una amenaza para la salud en general, principalmente para niños y adolescentes.

Los organismos internacionales siempre han estado atentos

Es del conocimiento de muchas personas, que los regímenes alimentarios dañinos están muy asociados con el sobrepeso y la obesidad. Esto se ha monitoreado por algunos organismos, notando que estos problemas se han acrecentado en los últimos años. Sobre todo, a nivel de los niños, en todos los continentes del mundo.

El 2010, en el prefacio del “Conjunto de recomendaciones sobre la promoción de alimentos y bebidas no alcohólicas dirigida a los niños”, se mencionaron elementos muy importantes. El mismo fue elaborado por el Dr. Ala Alwan, Subdirector General Enfermedades No Transmisibles y Salud Mental de la OMS, en ese momento.

Dentro de ellos, realzaba que la mercadotecnia de alimentos y bebidas dirigidas a los niños poseía un gran alcance. Destacaba además que, los mensajes publicitarios se centraban principalmente en productos ricos en grasas, azúcar o sal. Además de ello, puntualizaba sobre la influencia de la publicidad televisiva sobre las preferencias alimenticias y el consumo en infantes. Además, para promocionar esos productos se recurría a una amplia gama de técnicas que lograba llegar a los niños.

Esto incluía llegar a las escuelas, guarderías y supermercados, empleando medios masivos como la televisión e Internet. Además de ello, empleando muchas técnicas de mercadotecnia como publicidad, patrocinios e inserción de anuncios en productos.

Incluso, se realizaban promociones por diferentes medios con la participación de personas famosas, y personajes populares entre los niños. De hecho, se incluían muchos sitios web, mensajes de correo electrónico y de texto mediante el teléfono celular.

Desde ese momento han pasado diez años, y ya para entonces se realizaban importantes recomendaciones. Una de ellas, instaba a los Estados Miembros a considerar diferentes métodos (progresivo e integral), de restricciones. Se buscaba reducir la promoción de alimentos altos en grasas saturadas, grasas trans, azúcares o sal dirigida a los niños.

Diez años después, estudios en España revelan situación alarmante

Como se mencionó anteriormente, la obesidad infantil se asocia al riesgo de ENT, muerte prematura y discapacidad en la edad adulta. De acuerdo a las cifras manejadas por la OMS, los países del sur de Europa, presentan las tasas más altas de obesidad infantil del continente. Es decir, del 18 al 21%.

En España, durante el 2018, la prevalencia de sobrepeso y obesidad fue del 54,5% en adultos y del 28,6% en niños y adolescentes. De acuerdo a muchos especialistas, en este país, se realiza la promoción frecuente de alimentos de bajo valor nutricional.

Tal como en un estudio realizado el 2019, se observó una tendencia que muestra un hallazgo interesante. Se encontró que, los productos comercializados dirigidos al segmento de niños o adolescentes son poco saludables. Se ha determinado que la gran mayoría de ellos, son reconocidos en Europa, como importantes factores de riesgo. Principalmente, para el padecimiento de obesidad infantil y de ENT.

Un estudio realizado en la Universidad Miguel Hernández de la Provincia de Alicante, España, analizó 3.209 alimentos de la Base de Datos de Alimentos, BADALI. Esta base de datos, tiene como objetivo: “contribuir a reducir la incidencia de las enfermedades no transmisibles, el sobrepeso y la obesidad a través del fomento de una dieta equilibrada”

Para efectos del estudio, los alimentos se clasificaron en función a quien se dirigía la comercialización. Es decir, para niños o adolescentes, de acuerdo a la publicidad en el empaque, la televisión o internet. El estudio permitió establecer que el 17,5% de los alimentos evaluados, se comercializaron para esta población.

Es de destacar que el 97% de estos alimentos se consideraron insalubres. Esta consideración, se basó en el Modelo de Perfil de Nutrientes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS-MNP).

Un estudio que refleja la realidad mundial

De acuerdo a los investigadores del estudio realizado por la Universidad Miguel Hernández, se obtuvieron cifras muy precisas. Así, del total de alimentos evaluados, el 61,5% presentó niveles elevados de grasa, 58,5% en azúcares libres, 45,4% grasas saturadas y 45% en sodio.

Este estudio permitió descubrir, que muy pocos alimentos saludables se promocionan para niños o adolescentes. Esto incluyó la pasta, arroz, legumbres, hortalizas, frutos secos al natural, pescados y mariscos sin aditivos.

Vale destacar, que los resultados aportados por este estudio, son similares a otros realizados en diversos países. Incluye los Estados Unidos, Nueva Zelanda, Eslovenia. Canadá, Brasil y Uruguay. Por ello se afirma que, los alimentos con marketing dirigido a niños o adolescentes a nivel mundial, en su gran mayoría, no son recomendables desde el punto de vista nutricional.

Es de resaltar, que de acuerdo a estudios previos, se demostró que la mayoría de los alimentos que se venden a los niños se consideran poco saludables. Esto, en independencia del país donde se haya realizado el estudio, observándose resultados muy similares al obtenido por los investigadores españoles. Es decir, altos niveles de azúcar, grasas saturadas, sodio y grasas totales, en la gran mayoría de los alimentos evaluados.

Los resultados de numerosos estudios demuestran que la casi totalidad de los alimentos dirigidos a niños no son saludables. Lamentablemente, hasta ahora las medidas de carácter voluntario no son efectivas. Una de las recomendaciones de la OMS, para frenar este descalabro nutricional, es prohibir el marketing de alimentos no saludables dirigidos a niños.

La OMS sabe que la publicidad transmitida por televisión, influye en las preferencias alimenticias y en las pautas de consumo de la población infantil. Por ello, recalca que la regulación de este marketing debe ser prioritario para los gobiernos.

Estrategias de marketing detectadas por los investigadores españoles

• Productos que presenten una imagen de personajes con licencia, un tema de televisión o una película relacionada con niños o adolescentes
• Empaque del producto conteniendo cualquier otro diseño de caricaturas
• Empaque del producto conteniendo una promoción dirigida a niños o adolescentes (generalmente un juguete)
• El producto posee publicidad en la televisión o internet dirigida a niños o adolescentes
• El producto figura como “comida para niños” en el sitio web del fabricante
• Se presenta el alimento o producto en forma de caricatura, o cualquier otro diseño relacionado con niños o adolescentes
• Algunos productos de imitación emplean todas las estrategias antes descritas

Concluyendo

Es importante resaltar la labor encomiable realizada por organismos como la OMS y la OPS. Estas instituciones, al contar con el apoyo de la academia, pueden llegar a modificar la conducta de los consumidores.

Muchos años han transcurrido y las directrices originales pautadas por las reuniones internacionales, siguen sin respetarse. Y en medio de la indisciplina de quienes deben poner correctivos, se encuentra una población muy vulnerable.

Afortunadamente, los investigadores no bajan la guardia. Mediante este importante estudio realizado en España, se retrata la realidad de Europa y el resto del mundo. El consumo de comida no nutritiva, con exceso de calorías, podría decirse que es un fenómeno mundial. Lamentablemente esto pone en riesgo a la generación de relevo.

Ello es indicativo de que deben realizarse correctivos cuanto antes, impulsados por los gobiernos de cada país. Estudios exhaustivos como este, son pocos comunes, al igual que las iniciativas de bases de datos para guiar adecuadamente a los consumidores. Este estudio debe ser tomado como una alerta importante por los diversos sectores, a fin de evitar una catástrofe que puede inhabilitar la vida productiva de muchos seres humanos.

Para Fátima, mi seguidora, el material fue como una fotografía de la realidad de Portugal. Realmente me agradeció por el material recibido, el cual comparto en el post.  Ella me comenta, que gracias a lo que le envié, dejó a un lado la comodidad de la comida precocida y los productos con alto nivel de azúcares y grasas no saludables.

Durante todo el otoño ha estado alimentando adecuadamente a sus hijos y los resultados han sido increíbles. Me comenta que ya sus niños han rescatado la mayoría de su ropa favorita y ella se siente feliz. Realmente este pequeño aporte, me genera mucha felicidad. ¿Hay acaso algo más hermoso que la familia?

“Los resultados de un estudio que hemos realizado en la Universidad Miguel Hernández, con más de 3.000 alimentos disponibles en el mercado español, son altamente preocupantes. De los 563 alimentos dirigidos a niños o adolescentes, el 97% se clasificaron como no saludables. Además, el 62% de los productos eran ricos en grasas; el 59%, en azúcares libres; el 45%, en grasas saturadas y otro 45% en sodio/sal”

Ana Belén Ropero Lara

Profesora titular de Nutrición y Bromatología, Universidad Miguel Hernández

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