☑️ Todo Lo Que Deberías Saber Sobre El Agua Con Sabor

Cada día, la industria, en la búsqueda de evitar las discutidas calorías de las bebidas gaseosas, emplea otras estrategias. Gracias a ello, ciertas variantes se han vuelto muy populares, dentro de las que destaca el agua saborizada. Pienso que me darás la razón, cuando vayas de compras y observes que cada vez más se multiplican las opciones de este tipo de bebidas. Existen, una infinidad de marcas y tipos de agua saborizada, en muchas de ellas, la publicidad las colma de promesas. Hay las que afirman aumentar nuestra resistencia corporal, así como las que mencionan la prevención de enfermedades.

Esto de lo que hablo, se origina por un encuentro “casual” que tuve en uno de los pasillos de un supermercado al que suelo acudir con regularidad. Allí me encontré a unos vecinos, que, por lo general, suelen ser muy poco conversadores. Sin embargo, ese día, ellos que conocen a que me dedico, me preguntaron mi opinión acerca de consumir aguas saborizadas. Creo que, con ellos, drené un poco la molestia que me causa, el hecho de pretender engañar a las personas.

Y aquí me estoy refiriendo directamente a quienes fabrican este tipo de bebidas. Y precisamente por allí comencé mi intercambio con ellos, mientras nos acompañábamos en nuestro recorrido por el supermercado. Dentro de las ideas que intercambié con ellos, les ilustré un poco sobre la importancia del agua en nuestro organismo. También, les mencioné los componentes que poseen esas bebidas y sus consecuencias sobre nuestra salud.

Me atreví, incluso a realizarles algunas sugerencias de cómo preparar una bebida natural, con efectos hidratantes y sin consecuencias secundarias. Como siempre, buscando difundir información relevante, sencilla y de utilidad práctica, pongo a la disposición en mi blog, lo conversado con mis vecinos.

¿Cuáles son los principales beneficios del agua en la salud?

No cabe duda, que todos tenemos una noción acerca de la importancia el agua, sin embargo, nunca esta demás recordarlo. Por ello, cuando el agua irriga los tejidos corporales, logra beneficiarnos de muchas formas:

  • Protege cada uno de los tejidos del cuerpo, entre ellos: sangre, huesos, articulaciones, médula espinal y cerebro
  • Favorece la eliminación de los desechos y toxinas, a través de los sistemas digestivos, renales y epiteliales. De esta forma, ellos son eliminados de nuestro cuerpo en forma de heces, orina y sudor
  • Promueve los procesos digestivos: partiendo de que la digestión inicia en la boca, el agua juega un papel primordial por ser el elemento constituyente mayoritario de la saliva. A su vez, muchas enzimas digestivas dependen de la saliva, a fin de desdoblar los alimentos, además de disolver muchos minerales y otros nutrientes. Facilitando además la digestión de la fibra soluble y mejorando la consistencia de las heces fecales
  • Ayuda a mantener las mucosas y la piel turgentes y sanas: el agua, evita que los tejidos pierdan humedad. Por otro lado, todas las mucosas deben mantenerse hidratadas para su normal funcionamiento
  • Promueve el correcto desempeño de las funciones del sistema nervioso: de no estar correctamente hidratados, los receptores sensoriales ubicados en el hipotálamo, liberan de la hormona antidiurética. Esta hormona particular llega al riñón y mediante la activación de las acuaporinas, permite que la sangre retenga agua. Al estar deshidratados, los tejidos cerebrales se encogen y deben utilizar más energía para realizar sus tareas cotidianas. Esta contracción, se refleja también, en el líquido cefalorraquídeo, el cual rodea al cerebro y a la medula espinal..

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Aproximaciones al consumo de agua realizada por expertos internacionales

De acuerdo a ciertas revisiones, llevadas a cabo por equipos de investigación nutricional y fisiológica, aun no existe un consenso acerca de la cantidad de agua adecuada a ingerir. Sin embargo, se ha observado que es importante satisfacer las necesidades de agua en cada etapa de la vida. Esto permitió plasmar en una tabla dos visiones, la de la Autoridad de Seguridad Alimentaria Europea y la de la Academia Nacional de Medicina (USA).

Allí, se sugieren ciertos valores que cubren los requerimientos hídricos, en las diversas etapas de la vida. Claro está, se realizó, considerando que la persona está saludable, consume una dieta promedio y realiza una actividad física moderada. De forma que, se puede ejemplificar que un lactante menor de seis meses debe ingerir unos 700cc diarios de agua. Un hombre adulto unos 3,7 litros y una mujer, unos 2,7 litros.

Claro está este instrumento realizado por los expertos, incluye la los requerimientos de agua considerados de forma global. Es decir, la sumatoria del agua ingerida de forma pura, en las bebidas y la humedad de los alimentos. Un dato interesante se consiguió obtener, utilizando valores de la hormona conocida como Arginina Vasopresina. Esta hormona, tiene la responsabilidad de inducir la sed, en función de los niveles de sodio, cloro y bicarbonato presentes en la sangre.

Así de esta forma, se obtuvo un valor crítico de 1,8 litros, valor por debajo del cual podrían existir riesgos. Podrían mencionarse como ejemplo, riesgos metabólicos de índole disfuncional, así como la posibilidad de presentar enfermedades crónicas. Es decir que, si un adulto ingiere menos de esa cantidad al día, considerando la suma de todas las fuentes, podría llegar a existir riesgo de metabolismo disfuncional y enfermedades crónicas.

¿Es saludable el consumo de agua saborizada?

Algo fundamental a la hora de elegir una bebida para hidratarse, es conocer sus componentes. Muchas aguas saborizadas ofrecen vitaminas o hierbas. Incluso algunas de ellas, prometen ayudar con el desempeño durante todo el día en una variedad de actividades. Algunas marcas de estas bebidas, mencionan a través de la publicidad, que ayudan a relajarse, incrementar la resistencia o los niveles de energía e incluso prevenir enfermedades.

Se ha observado, que la gran mayoría de las aguas saborizadas promocionadas comercialmente, poseen un etiquetado deficiente, pues no colocan los componentes químicos y sus efectos sobre la salud. La gran mayoría de las veces, solo colocan términos ambiguos que pueden indicar cualquier cosa, como el caso de “edulcorantes artificiales”, “no contiene calorías”.

Todos sabemos, que ingerir agua es insustituible, vital y esencial. Sin embargo, de acuerdo al Wall Street Journal, existe alrededor de un 20% de estadounidenses que no son amigos de consumir agua pura. Y es precisamente dicho segmento de la población, donde se enfocan los fabricantes, para tratar de borrar un poco la mala reputación de las gaseosas, incluyendo las de bajas calorías.

Componentes dañinos presentes en las aguas saborizadas

1. Colorantes artificiales

Es importante tener en cuenta que, a pesar de su elegante presentación y sus llamativos colores, hay un peligro oculto detrás de las aguas saborizadas. Por ello, quienes piensen que se están hidratando de una forma saludable, deben saber que estas bebidas contienen colorantes artificiales. Se sabe que los mismos, podrían llegar a causar reacciones alérgicas e hiperactividad.

2. Compuestos potencialmente riesgosos

Es importante, que los adultos eviten que los niños ingieran bebidas que puedan contener además cafeína, vitaminas o compuestos herbales. Muchas marcas comerciales de estas bebidas, afirman contener vitaminas o algunas de las denominadas hierbas saludables. Hay que estar muy atentos, a la ingesta excesiva de vitamina B6, muy frecuente en este tipo de bebidas. Los efectos del consumo excesivo de vitamina B6, pueden incluir lesiones dermatológicas, fotosensibilidad y problemas gastrointestinales, tales como náuseas, vómitos y reflujo gastroesofágico.

Aparte de ello, la presencia de ácido cítrico añadido artificialmente puede ocasionar graves daños al esmalte dental al provocar una disminución importante del pH. Algunas de las esencias utilizadas, son en su mayoría cítricos. Según Edmond R. Hewlett, profesor de Odontología de la UCLA, ellas pueden causar una erosión significativa a nivel del esmalte, generando una hipersensibilidad dental y una mayor propensión a la caries.

3. EDTA

Es catalogado por la Agencia Ambiental de los Estados Unidos como un contaminante orgánico persistente. Este compuesto, es un agente nocivo que se encuentra en la mayoría de las aguas saborizadas. También se llama ácido edético. Es muy empleado como aditivo alimentario, conservante y saborizante. Es a su vez un compuesto quelante o secuestrante de los metales. Se sabe, que les impide que realicen procesos químicos que causen decoloraciones o perdida de sabor en los alimentos. Es tóxico para los humanos, pudiendo causar insuficiencia renal, arritmia, convulsiones, hipotensión y reacciones alérgicas leves.

4. Sacarina

En las aguas saborizadas, se ha encontrado también la presencia de sacarina. Este es un compuesto sintético, muy dañino con efectos peligrosos para la salud. Existen muchas controversias en relación con la sacarina y el riesgo de padecer cáncer de vejiga. Por ello, es importante no administrar en niños menores de siete años, o mujeres embarazadas o lactando. Esto se debe a que ella pertenece a un grupo químico denominado sulfonamidas, con comprobados efectos alérgicos.

Estos efectos, suelen presentarse como: dolores de cabeza, dificultades respiratorias, acidez estomacal, diarrea y problemas de la piel. Antes del año 2000, la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) requería que se colocara una etiqueta de advertencia en los productos que contienen sacarina sódica, debido a sus posibles riesgos para la salud. Sin embargo, el año 2010, la Agencia de Protección Ambiental eliminó la sacarina sódica de su lista de materiales peligrosos. No obstante, sus efectos secundarios, son innegables

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5. Aspartamo

Se ha establecido que este compuesto, puede ser neurotóxico cuando se realiza una exposición prolongada. Se obtiene combinando fenilalanina y ácido aspártico. Algunos estudios monitorearon a los participantes durante varios años, encontrando un vínculo entre un mayor peso corporal y circunferencia de la cintura y una ingesta regular de este edulcorante. Cuando el cuerpo procesa el aspartamo, una parte de él, se transforma en metanol.

El metanol es tóxico en grandes cantidades, sin embargo, las cantidades más pequeñas también pueden ser preocupantes cuando se combinan con metanol libre debido a la absorción mejorada. Además de ello, una revisión de 2017 encontró estudios, que mostraban los efectos del consumo frecuente de edulcorantes. Dentro de estos efectos, se encontraron el desarrollo de enfermedades cardíacas, la propensión a los derrames cerebrales y al padecimiento de diabetes.

6. Sucralosa

Es obtenida a partir de la modificación del azúcar, en presencia de cloro y gas fosgeno. Se considera biológicamente inerte, lo que significa que pasa a través del cuerpo humano sin ser metabolizada. Sin embargo, un artículo reciente publicado en el Journal of Toxicology and Environmental Health, mostró que una parte de este edulcorante si se metaboliza. Algunas pruebas de laboratorio han encontrado, que este compuesto, puede alterar la composición de los microbios benéficos del intestino. Además de ello, se cree, que la sucralosa al ser sometida a ciertas temperaturas, cuando forma parte de los alimentos, genera compuestos tóxicos, denominados cloro propanoles.

7. Azúcar

Por lo general, es frecuente encontrar azúcar en bebidas saborizadas. Sobre todo, las que no son cero calorías. Hasta donde se ha observado, poseen más de 13,5 g de azúcar por porción. Esto quiere decir que poseen altos niveles calóricos y todos los efectos asociados como el aumento de peso, la propensión a la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, la ingesta de azúcar recomendada por persona adulta al día es de veinticinco a veintiocho gramos. Quiere decir que, con una sola porción de esta bebida, estamos superando más de la mitad requerida en un día.

Concluyendo

La necesidad exacerbada de sabor dulce, por parte de algunas personas, ha provocado una alteración importante en la salud humana. Tal como se vio, se dice que al menos un 20% de los estadounidenses, no les gusta ingerir el agua pura. Por supuesto, que este grupo de la población, son el blanco original más fácil de la industria de gaseosas.

Es importante tomar en consideración, que los edulcorantes artificiales han estado bajo estudio, durante mucho tiempo por su fuerte composición química y su naturaleza sintética. Se pudo observar que aparte del azúcar, la mayoría de los edulcorantes que se utilizan, poseen consecuencias peligrosas para la salud. Muchas de ellas, provocan enfermedades cardiovasculares, diabetes y causan desequilibrios en el sistema digestivo. Las más utilizadas, son la sacarina, la sucralosa y el aspartamo.

Algo que ha venido ocurriendo, además, es que la FDA, posee una serie de estándares para las diversas fuentes de aguas utilizadas como bebida. No obstante, algunos tipos de agua, como las saborizadas o con vitaminas añadidas, se consideran propiamente refrescos. Por lo tanto, los estándares requeridos para estas últimas, son mucho menos rígidos, que los exigidos para el agua embotellada.

La pareja con la que compartí, lo que ahora les muestro en el post, no tardaron mucho en hacerse amigos de las aguas saborizadas, hechas en casa. Yo simplemente les di unas directrices muy sencillas y les enseñé a preparar una sencilla receta de lima, limón y pomelo rebanados y colocados en una jarra durante un par de horas en el refrigerador.  Pero a raíz de lo compartido, han aprendido a valorar el agua y las frutas frescas. Nuevamente reitero mi teoría, acerca de que no existen las casualidades, pues hace una semana me obsequiaron agua saborizada con mango, piña y papaya, aromatizada con hojas de menta.

“Qué tan saludable es una bebida depende de sus ingredientes. Todas las aguas aromatizadas se endulzan con algún tipo de azúcar (jarabe de maíz con alto contenido de fructosa, azúcar de caña, jarabe de agave) o con un edulcorante artificial (sucralosa, aspartamo). Independientemente del nombre, estas aguas carecen de una nutrición significativa.”

Dra. Anisha Shetty

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