Los que vieron mi video introductorio sobre mi propuesta natural ORGANIC COCONUT OIL, hace poco en Facebook, desean que ahonde un poco más. Y en cierta forma, lo comprendo, porque tal como decía, son muchos los beneficios que pueden obtenerese.
El coco posee miles de años de uso. Su empleo, en países tropicales, gira en torno a sus componentes directos como la pulpa y el agua. Sin embargo, muchos son los beneficios obtenidos a partir de su leche y aceite.
Durante muchos siglos, este fruto, ha sido empleado como una fuente alimenticia importante. Estas tradiciones, se han extendido al mundo actual, donde su pulpa se emplea en diversidad de platos.
Y claro está el agua de coco, es cada día más valorada internacionalmente debido a sus reconocidos valores nutricionales. Esto ha venido ocurriendo también con el aceite de coco, a pesar de haber estado por muchos años, en medio de una guerra que pretendió desmerecer su importancia, debido a su alto contenido de ácidos grasos saturados.
Fueron muchas las personas que me enviaron mensajes, pero como lo dije recientemente en un live que realicé por Facebook, comparto también responsabilidades de madre y de esposa. Así, que honrando el deseo de muchas personas realizo este sencillo artículo. Pienso que es una forma sencilla, de comprender un poco más la importancia del empleo de productos naturales inigualables.
¿Qué es el aceite de coco?
Posiblemente, algunas personas no se han fijado, pero la pulpa blanca del coco forma parte del endospermo del fruto, es decir técnicamente corresponde a su semilla. Botánicamente, se puede clasificar el fruto del cocotero, como una drupa, al igual que ciertos frutos como la aceituna, la ciruela y el mango. Solo que el coco, es una de las más grandes que existe, pudiendo llegar a medir 25 cm de longitud y unos 16 cm de ancho.
En el interior del fruto, hay un líquido, que es el agua, la cual se presenta en abundancia en los frutos verdes. En la medida que el fruto madura, se va engrosando y formando lo que conocemos como la pulpa, que es esa carne blanca en su interior.
Pues bien, precisamente de esa pulpa se extrae el aceite de coco, la sustancia grasa formada básicamente por una serie de triglicéridos de cadena media. Se puede afirmar, que la composición única de ácidos grasos de cadena media del aceite de coco, es su sello distintivo. Ellos, se pueden extraer mediante una variedad de métodos.
Los principales métodos son: extracción por presión o prensado, extracción con solventes y extracción mixta. Se ha logrado determinar, que el aceite de coco, básicamente está conformado por un 99% de ácidos grasos saturados ligados a triglicéridos. En el grupo de ácidos grasos saturados se incluyen, entre otros, ácido palmítico, ácido caprílico, ácido láurico y ácido mirístico.
Posee además, pequeñas proporciones de ácido oleico, el mismo que posee el de oliva, el cual es monoinsaturado. También contiene, unos compuestos muy interesantes, que le distinguen del resto de los aceites. Estos compuestos son los ácidos grasos de cadena media. Se sabe que, en comparación con otros ácidos grasos, ellos poseen menor cantidad de calorías y son fácilmente digeribles.
Los incomparables ácidos grasos de cadena media y otros componentes bioactivos
Los ácidos láuricos, caproico, cáprico y caprílico son los ácidos grasos saturados de cadena media, que forman parte importante del aceite de coco. Precisamente estos ácidos grasos de cadena media son los que le dan al aceite sus cualidades extraordinarias. Ellos, constituyen del 60 al 71% de los compuestos del aceite de coco.
Muy pocos aceites, poseen esta interesante propiedad. Esto, les otorga la ventaja de aportar menos calorías y ser más fácilmente digeribles que los ácidos grasos de cadena larga. Pudiendo de esta forma, transitar rápidamente hasta el torrente sanguíneo y alcanzar el hígado. Allí son empleados para la obtención de energía, en una forma preferencial con respecto a otros tipos de grasas. Siendo utilizados completamente para la obtención de energía y no se almacenan en el organismo como otros tipos de lípidos.
Estos ácidos de cadena media, estimulan el metabolismo y ayudan al mantenimiento de la sensibilidad a la insulina. De hecho, en ciertos estudios, se ha logrado establecer que pueden favorecer la resistencia y el desempeño físico. Sobre todo, cuando se ingieren de forma regular.
Dentro de los ácidos grasos de cadena media, destaca el ácido láurico. El mismo ha sido muy bien investigado por sus incomparables propiedades, estando presente en alta proporción en el aceite de coco. El aceite de coco orgánico, contiene además tocoferoles, los cuales son antioxidantes naturales, pertenecientes a la vitamina E.
Una cucharada de aceite de coco orgánico entrega:
- 116 calorías
- 13,5 gramos de grasas totales
- 11,7 gramos de grasas saturadas
- 0,8 gramos de grasas monoinsaturadas
- 0,2 gramos de grasas poliinsaturadas.
Importancia del aceite de coco orgánico prensado en frío
Desde hace unos años, apoyada por un eficiente equipo de colaboradores científicos, he comprobado las ventajas del prensado en frió. Esto se ha corroborado mediante muchas pruebas comparativas, además de ello, lo afirman muchos estudios.
Vale destacar, que para poder realizar el prensado en frío, se requiere la utilización de cocos recién cosechados y no el uso de la copra o la pulpa deshidratada que emplean muchos fabricantes. Por lo general esta copra, ha pasado por un secado a altas temperaturas, donde la pulpa adquiere ciertas condiciones de olor y color muy diferente a la pulpa fresca.
Esto requiere realizar una serie de procesos posteriores sobre el aceite, extraído bajo esta metodología. Entre ellos, el refinado, el blanqueado y la desodorización. Por lo general, la copra tiende a ser menos costosa que la pulpa fresca. En contraste, el aceite obtenido del prensado en frío, preserva las características, beneficios y pureza natural del coco fresco. Es decir, el sabor es lo más parecido a su forma natural.
Otra de las ventajas que se incluye en el aceite orgánico prensado en frío, es que no se utilizan aditivos. Es decir, mediante un estricto proceso de filtrado, se separa la pulpa y el aceite se envasa directamente en envases de vidrio. Esto le permite mantener su pureza, de una forma completamente natural, sin sufrir alteraciones. Es decir, este proceso de extracción, permite considerar este aceite como virgen extra.
El proceso de extracción, le otorga la ventaja de conservar intactas todas sus propiedades, lo cual le hace apto para uso interno como externo. Es importante señalar, que mi propuesta, posee certificación orgánica por parte del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA Organic). Esto garantiza, que la materia prima utilizada, proviene de plantaciones orgánicas, sin el empleo de agroquímicos.
¿Cuáles beneficios se obtienen al utilizar el aceite de coco orgánico?
1. Puede mejorar la enfermedad de Alzheimer
De acuerdo a estudios realizados recientemente en la universidad de Oxford, se ha planteado que los pacientes con Alzheimer y demencia, podrían beneficiarse en estadios iniciales. De esta forma, mediante el empleo del aceite de coco orgánico, es posible obtener la energía que el cerebro necesita. Esto permitiría mejorar la función cognitiva, por los efectos adicionales de las cetonas.
Muchas de estas investigaciones, continúan ahondando en las teorías de la Dra. Mary Newport, quien logró estabilizar por más de doce años la salud de su esposo. Lamentablemente el sufrió una caída que lo lesionó fuertemente el año 2013, falleciendo posteriormente en 2016. La Dra. Newport, donó el cerebro de su esposo al Florida Brain Bank. Esto lo hizo, a los fines de apoyar estudios de investigación para la enfermedad de Alzheimer y otras demencias. En ese momento, se supo, que su esposo padecía además de Alzheimer, demencia de Lewis.
2. Previene los riesgos cardiovasculares
Los resultados de algunos estudios, han permitido demostrar el efecto potencial beneficiario del aceite de coco virgen. Recordemos que existen dos tipos de colesterol: lipoproteína de alta densidad (HDL), denominado colesterol bueno y lipoproteína de baja densidad (LDL), denominado colesterol malo. Se ha logrado observar, que el HDL favorece la reducción de los niveles de LDL.. Habiéndose observado por medio de diversas investigaciones, que el LDL protege del padecimiento de enfermedades cardiovasculares. De esta forma, los adecuados niveles de HDL, ayudan en la reducción de los niveles de lípidos en la sangre. Evitando la oxidación de LDL por oxidantes fisiológicos.
Muchas de estas propiedades, tienen que ver mucho con la presencia de compuestos bioactivos como los polifenoles. De acuerdo a otros estudios, donde participaron 116 pacientes coronarios, se encontró un efecto positivo al introducir aceite de coco en su dieta. Esto permitió corroborar una mejora significativa sobre los niveles de colesterol HDL. Además de ello, se verificó una reducción del perímetro de cintura. Este, es un claro indicador de la presencia de grasa visceral, asociado a factores de riesgo cardiovasculares y metabólicos.
3. Protege el organismo de ciertos patógenos y optimiza la salud de la piel
El ácido láurico, ingerido mediante el aceite de coco, se transforma en el cuerpo, en ácidos grasos libres y monoglicéridos. Entre ellos destaca, la monolaurina. Dicho compuesto, forma parte de la leche materna y posee importantes propiedades antimicrobianas. Ello, le permite combatir de una forma eficiente una serie de patógenos, a saber, bacterias, virus y protozoarios. Dentro de ellos, destacan: herpes, Helicobacter pylori, Listeria, Giardia, citomegalovirus, influenza y diversas bacterias.
De hecho, en la medicina Ayurvédica de la India, se emplea el aceite de coco orgánico de forma interna y externa, para combatir la candidiasis. Otro ácido graso de cadena media destacado, es el ácido caprílico. Y a pesar, de que se encuentra en menor proporción, presenta también excelentes propiedades antimicrobianas.
Se ha establecido, que el ácido láurico, constituye, casi el 57% del aceite de coco. Y a pesar de que no puede combatir todos los microorganismos, al igual que un antibiótico es selectivo y no altera la población bacteriana benéfica.
El aceite de coco orgánico prensado en frío, posee excelentes propiedades hidratantes. De hecho, posee centurias de utilización en la India, para el tratamiento y cuidado de la piel, incluyendo la recuperación de los tejidos que han experimentado quemaduras. Este singular aceite, es empleado de forma generalizada en la actualidad muchos productos faciales naturales. Y claro está, esto se debe a sus cualidades antibacterianas, antifúngicas, antivirales e hidratantes.
Aparte de los componentes mencionados, el aceite de coco, también contiene vitamina E, un potente antioxidante. Además de ello, muchos de sus componentes grasos saludables, estimulan la suavidad de la piel.
Este aceite, ha sido empleado exitosamente, en el tratamiento de diversas afecciones de la piel en niños y adultos. Entre ellas, dermatitis y xerosis. Incluso, se emplea también en las mascotas.
4. Coadyuva en la mejora digestiva, la tasa metabólica y la pérdida de peso
Gracias a su enorme facilidad de absorción, el aceite de coco orgánico, facilita los procesos digestivos y enzimáticos. Se ha observado, además, que optimiza la absorción de ciertos nutrientes. Dentro de ellos, se pueden mencionar, el magnesio y el calcio, además de ciertas vitaminas del complejo B. Claro está, se incluyen todas las vitaminas liposolubles, a saber, A, D, E y K, además de algunos aminoácidos y el calcio.
Esto hace por lo tanto del aceite de coco orgánico, un aliado para una mejor asimilación de diversos compuestos presentes en los alimentos. Los estudios han demostrado una mejora notable en las deficiencias de vitamina B y la absorción de calcio cuando se agrega aceite de coco a la dieta. Los ácidos grasos de cadena media, presentes en el aceite de coco orgánico, son capaces de reducir el apetito de una forma importante. Esto, podría conducir a una reducción del peso corporal a largo plazo.
Aparte de ello, ciertos estudios, han logrado demostrar, la importancia de ingerir raciones diarias de alimentos contentivos de aceite de coco orgánico, prensado en frío. Se ha observado, que por medio de ello, es posible incrementar la tasa metabólica, a lo largo de 24 horas. Este mecanismo, es muy importante para un adecuado desempeño y la mejora del rendimiento en los atletas.
De hecho, algunas pruebas, han permitido determinar, que el aceite de coco virgen, ayuda a disminuir los procesos adversos de la hipoglucemia, además de mitigar el hambre entre comida. Esto lo logra, gracias a la estabilización del índice glucémico.
Se ha observado que los diabéticos, con un control indebido de la enfermedad, son más vulnerables frente a la oxidación de las grasas. El aceite de coco orgánico, logra proteger dicha oxidación, por ello se considera una terapia inteligente para el manejo de la diabetes.
5. Favorece la salud ósea
De acuerdo a resultados obtenidos de estudios de laboratorio, recientemente finalizados, se lograron obtener hallazgos interesantes. El primero de ellos, es la protección en contra de los efectos de la degradación oxidativa. El segundo, es la reversión de la pérdida ósea.
Esto indica, que el consumo de aceite de coco prensado en frío, puede mejor de forma efectiva la estructura ósea y evitar la descalcificación. Esto probablemente se deba a la importante acción de los polifenoles presentes en el aceite de coco. Este estudio, podría, arrojar ciertos lineamientos, para prevenir la pérdida de tejido óseo. Sobre todo, en mujeres posmenopáusicas con presencia de osteoporosis.
6. Mejora la salud bucal
Hace un tiempo, les hablé del Oil pulling o enjuague bucal con aceite. Esta técnica, proviene de la medicina ayurvédica de la India y posee miles de años comprobada eficacia. Hoy en día, es empleada por muchas personas alrededor del mundo, debido a sus comprobados efectos benéficos.
Dentro de estos efectos, se mencionan el control de diversas bacterias que inducen la formación de placa y de gingivitis. Si se emplea con regularidad y disciplina, se puede llegar a evitar la enfermedad periodontal. Esta indeseable enfermedad, muchas veces puede causar la pérdida de piezas dentales.
Este enjuague con aceite de coco orgánico prensado en frío, también puede a ayudarte a combatir el mal aliento y a recobrar el color natural de tus dientes, eliminando el manchado. También, ayuda al fortalecimiento del tejido de las encías, lo cual favorece la salud integral de la dentadura.
7. Impulsa el alivio del estrés
Como se ha dicho en otras oportunidades, cuando se realiza ejercicio intenso, se presenta un alto consumo de oxígeno, debido al incremento del metabolismo. De igual forma, los niveles de estrés, pueden propiciar el mismo efecto en el organismo. Ello trae como consecuencia, que se generen muchos radicales libres. Y en especial se ha observado, que el estrés crónico, induce fuertes procesos oxidativos, lo cual puede llevar a causar daños neuronales y la muerte de las mismas.
Dada, la alta presencia de polifenoles, en el aceite orgánico de coco prensado en frío, se puede generar un incremento de los niveles de enzimas antioxidantes. Dichas enzimas pueden coadyuvar en la prevención de daño neuronal y evitar el agotamiento de las monoaminas, incluyendo la dopamina. La dopamina, es el neurotransmisor más importante del sistema nervioso central.
Concluyendo
Hablar del aceite de coco orgánico prensado en frío, es realmente un honor que me otorgan. Sobre todo, considerando que hemos puesto mi equipo científico y yo, un gran empeño en presentar un excelente producto. El mismo, está libre de pesticidas, con un certificado de USDA, siendo por tanto completamente natural y libre de agrotóxicos.
El aceite de coco prensado en frío o virgen, posee una serie de características que hacen que cada día, más países, investiguen sus propiedades. En muchos de ellos, se han dado cuenta, que el proceso de desodorizado, blanqueado y refinado, anula muchas de sus propiedades. Por ello, cada día se prefiere el empleo de aceite de coco orgánico prensado en frío.
El aceite obtenido de esta forma es mas estable, natural y exhibe todas sus características organolépticas originales. Como vimos, este notable aceite, de uso milenario, ha comenzado a ser justipreciado en los últimos años. Para nadie es un secreto, su incorporación en incontables productos de belleza para el cuerpo, rostro y cabello. Ello sin mencionar, que se están adelantando en la actualidad, muchos estudios para el tratamiento de pacientes inmunodeprimidos.
Dentro de ellos, destacan estudios acerca el VIH, donde se han observado respuestas positivas, mediante la ingesta de aceite de coco prensado en frío. De forma que, se destaca su importante papel en el control de peso, función cognitiva, salud ósea, digestiva y cardiovascular. Eso, sin perder de vista sus inmejorables virtudes para el tratamiento de afecciones en la piel y control de microbios.
Además, su inmejorable efecto sobre el cuidado y la belleza del rostro y el cabello. Nuevamente insisto, nunca el uso cultural de un producto es mantenido como una moda. Todo lo contrario, su permanencia en el tiempo a obedece a patrones vinculados con los elementos socioculturales.
“El aceite de coco orgánico prensado en frío es una bomba de salud, es algo que tu organismo va a agradecer”
Dra. Coco March
Si te ha gustado este artículo y tienes un interés sincero en aprender cómo puedes vivir más sano, me gustaría regalarte una copia de mi último libro #Yo Puedo con la Dra. Cocó.
Sí la página te da un mensaje de error es porque no has entrado la dirección bien. Vuélvelo a intentar, asegurando no haber dejado ningún espacio antes, después o entre las letras de tu dirección.
https://www.medicalnewstoday.com/articles/282857#nutrition
https://www.healthline.com/nutrition/top-10-evidence-based-health-benefits-of-coconut-oil
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4176590/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/26545671
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29163194
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4990724/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4247320/
https://healthyeating.sfgate.com/benefits-pure-coldpressed-coconut-oil-7169.html
https://www.thehindu.com/life-and-style/fitness/virgin-coconut-oil