Un ictus, o accidente cerebrovascular, es una condición médica de emergencia caracterizada por un compromiso agudo de la circulación cerebral. Se ha comprobado que la principal causa de los accidentes cerebrovasculares isquémicos es la hipertensión. En el caso de las personas jóvenes, puede suceder por trastorno de la coagulación y abuso de drogas ilícitas.
Este es un tema bien impactante y me motiva a hablar de acuerdo a un correo electrónico recibido de Teresa Cañas, oriunda de Colombia, con 20 años viviendo en Morristown, New Jersey. Ella tiene 58 años, madre y abuela, trabaja en una textilera como costurera.
Para Teresa, sufrir un Accidente Cerebro Vascular o ACV, estaba entre las últimas causas de muerte en su lista de posibles enfermedades fatales. Para ella, el cáncer de mama se presentaba como la primera.
Pero su compañera de trabajo Mercedes, un año mayor que ella y sin mayores problemas de salud, sufrió hace dos semanas un ACV. Mercedes falleció en el hospital dos horas después de ingresar de emergencia. Ver como de un momento a otro su compañera y amiga falleció por este mal, despertó en ella la necesidad de conocer sobre esta enfermedad y cómo evitarla.
Teresa es fumadora ocasional, pero últimamente estaba aumentando los números de cigarrillos diarios. Usaba como excusa el estrés causado por las numerosos producciones de pantalones de mezclilla. Come muchos embutidos y también es amante de las frituras. El médico le dijo que su alimentación y hábitos de vida la colocan en riesgo de sufrir un ACV que, si bien es más frecuente en los hombres, en las mujeres hay mayor riesgo de muerte.
Según las estadísticas, cada año el accidente cerebro vascular en mujeres causa el doble de muertes que el cáncer de seno. Aún cuando no es mortal, el ACV tiene consecuencias muy graves que pueden incapacitar física y mentalmente a quien lo padece.
Fue así como Teresa, viendo las redes y viendo mis podcast de Cómo Curar, ha adquirido conocimientos, pero no ha completado las acciones en relación a que un estilo de vida saludable, comprende el secreto de vivir más tiempo sin enfermarse.
De acuerdo a su relato, hace una semana comenzó el Reto #Yo Puedo, como un primer paso para desintoxicar su organismo y comenzar a cuidar su cuerpo. Pero, además, me ha escrito pidiendo que le cuente si corren las mujeres mayor riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares.
Ahora está asesorándose con su médico sobre los accidentes cerebrovasculares. Quiere controlarse y obtener cualquier información al respecto. La verdad es que Teresa comentó que nunca había pensado en que un ACV podría ser una posibilidad real.
¿Qué es un accidente cerebrovascular?
El accidente cerebrovascular o ACV, se presenta cuando el flujo de sangre a una zona del cerebro es interrumpido. Al no recibir oxígeno, las células del cerebro comienzan a morir. El ACV es una emergencia médica que exige recibir tratamiento de inmediato.
Existen dos tipos de ACV:
ACV isquémico
Si el accidente cerebro vascular es causado por un bloqueo en el flujo de la sangre hacia el cerebro, se le considera isquémico. Este es el que con más frecuencia se presenta. Puede ocurrir por trombosis, embolia o estenosis.
La primera, se refiere a la formación de un coagulo en un vaso sanguíneo del cuello o cerebro. El segundo es por el desplazamiento de un coagulo hacia el cerebro y el tercero se debe al estrechamiento peligroso de una arteria del cerebro o que lleve sangre al cerebro.
ACV cerebral hemorrágico
El accidente cerebro vascular que se presenta como una hemorragia cerebral, se le conoce como ataque cerebral hemorrágico.
Dependiendo del tipo de accidente cerebro vascular, se presentarán determinados síntomas y en ambos casos la rápida acción y atención es muy importante. Ten en cuenta que la demora del tratamiento aumenta el riesgo de daños al cerebro que pueden resultar permanentes, incluso el riesgo de muerte.
Síntomas de un ACV
Si observas que tú o alguien presenta estos síntomas, podría estar sufriendo un accidente cerebro vascular:
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Parálisis o entumecimiento de brazos, cara o piernas
Puede ser entumecimiento repentino, debilidad o parálisis, generalmente en un lado del cuerpo. Al tratar de levantar los brazos por encima de la cabeza, un brazo comienza a caer. Igualmente pasa con la boca, un lado cae cuando la persona afectada trata de sonreír.
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Dificultad para ver con uno o ambos ojos
Es posible que de pronto la persona tenga la visión borrosa o ennegrecida. Si es en ambos ojos, puede que vea doble.
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Dolor de cabeza
Este dolor de cabeza es repentino e intenso. Puede estar acompañado con mareos, vómitos o estado alterado de conciencia.
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Problemas para caminar
Presentar mareos repentinos, tropezar, perder el equilibrio o pérdida de coordinación puede ser un síntoma de AVC.
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Dificultad para hablar o entender
Cuando se le pide que hable, la persona con un ACV en progreso se le dificulta pronunciar cualquier palabra y se le complica comprender lo que se le indica o dice.
Ante dos o más de estos síntomas, es importante actuar rápido, acudiendo de inmediato a atención médica de emergencia.
¿Cómo prevenir un accidente cerebrovascular?
Los accidentes cerebro vasculares pueden prevenirse hasta en 80%, manteniendo las afecciones bajo control y cambiando tu estilo de vida. Te recomiendo tomar esto en cuenta:
1. Controlar la presión arterial
Es necesario mantener la presión arterial controlada, este es un factor de riesgo muy alto. Conservar además un estilo de vida saludable, llevar un control médico regular, evitar los fármacos y alimentos que se sabe que afectan la presión arterial.
La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mmHg). Hay dos cifras que participan en esta medición:
- Presión arterial sistólica: representa la cifra más alta y es la presión en los vasos sanguíneos o arterias cuando el corazón late
- Presión arterial diastólica: representa la cifra más baja y es la presión de los vasos sanguíneos o arterias entre los latidos, es decir cuando el corazón está en reposo
La presión arterial se considera:
- Normal cuando es menor o igual a 120/80 mmHg
- Alta cuando es igual o mayor a 130/80 mmHg
La presión arterial alta también denominada hipertensión, es llamada el “asesino silencioso”. Esto debido a que por lo general no presenta síntomas, pero es un factor de riesgo en la aparición de enfermedades cardiacas y accidentes cerebrovasculares. Por ello, su prevención y control es determinante para una buena salud.
De igual manera, para mantener la presión arterial en el rango, es necesario reducir el consumo de sal, frituras con aceites vegetales hidrogenados. De igual forma es recomendable realizar actividades físicas con frecuencia.
2. Mantener los niveles de triglicéridos en rango
Los triglicéridos son grasas que produce el cuerpo, se transportan en la sangre y le dan energía. Así mismo, se obtienen de la ingesta alimentaria, ya que la mayoría de las grasas que se consumen están en forma de trigliceridos. Cuando sus niveles se elevan, pueden aumentar riesgos de accidentes cerebrovasculares, ataque cardíaco, pancreatitis.
Esto sucede cuando se consumen calorías adicionales, azúcar, alcohol, alimentos procesados que se almacenan en las células grasas de todo el cuerpo. Al cambiar el estilo de vida y realizar un buen régimen alimenticio con los nutrientes adecuados, realizar actividades físicas y tener un sueño reparador, se pueden mantener los niveles de triglicéridos en un rango saludable.
Según las directrices del National Cholesterol Education Program Adult Treatment, estos son los valores de los trigliceridos en sangre:
Normal – menos de 150 miligramos por decilitro (deseable)
Limite: 150-199 miligramos por decilitro
Alto – 200-499 miligramos por decilitro
Muy alto – 500 miligramos por decilitro o más
Los niveles elevados de triglicéridos signfican un peligroso factor de riesgo de accidente cerebrovascular. Además de que pueden promover el desarrollo de aterosclerosis, condición en la cual se acumula placa en las arterias, la cual puede llegar a obstruir una arteria y provocar un accidente cerebrovascular.
Mantener los niveles de triglicéridos dentro de los valores normales es una parte importante de la prevención del accidente cerebro vascular.
3. Dejar de fumar
Se debe eliminar el hábito de fumar o no empezar a hacerlo. Fumar aumenta en gran medida el riesgo de padecer un ACV hemorrágico.
El consumo de tabaco lesiona el revestimiento de los vasos sanguineos, pudiendo provocar un accidente cerebrovascular, el cual se produce en el momento cuando el coágulo bloquea una arteria el cerebro.
El cigarrillo aumenta la presión arterial, ocasiona que se acumule grasa en la carótida, principal arteria que suministra sangre al cerebro. La persona absorbe monóxido de carbono, el cual disminuye la cantidad de oxigeno en la sangre y hace que la sangre sea más espesa, es decir más propensa a la coagulación.
4. Comer los nutrientes requerios
Elegir alimentos saludables, sobre todo bajos en sal y grasas trans para reducir la presión arterial. Aumenta el consumo de vegetales frescos, frutas y legumbres.
Se debe evitar el consumo de azúcar, siendo lo máximo diario la cantidad de 27 gramos. Es importante controlar las cantidades de azúcar consumidas, ya que los niveles altos de glucosa en la sangre afectan considerablemente el estado general del organismo, influyendo en el grado de severidad de un Accidente Cerebro Vascular.
5. Realizar ejercicios
La vida sedentaria es perjudicial para la salud en general. Haz ejercicios con regularidad, pues el sobrepeso aumenta el riesgo de sufrir accidentes cardiovasculares.
Las actividades físicas son sumamente importantes realizarlas consuetudinariamente. Estas pueden ayudar a disminuir el riesgo de contraer un accidente cerebro vascular y desarrollar condiciones como sobrepeso u obesidad y diabetes tipo2.
Es esencial tener presente dentro de un estilo de vida saludable, que el ejercicio, desde caminatas cortas hasta realizar ejercicios acorde con la edad, son de gran provecho para el organismo. De esta manera, se previenen los riesgos de enfermedades crónicas.
6. Dormir bien
Tener un sueño reparador es esencial como parte de un estilo de vida saludable y para prevenir accidentes cerebrovasculares.
El periodo de sueño ayuda a restaurar las células y los órganos. Por eso es necesario dormir por lo menos 7 u 8 horas diarias. Se ha recomendado en muchas oportunidades elaborar una rutina de sueño que permita poder acostarse y levantarse a la misma hora.
Dejar de dormir provoca cansancio, fatiga y otros factores determinantes que restan vitalidad y energía a las personas.
No dormir puede entre otros cosas;
- Elevar la presión arterial, alto factor de riesgo para provocar un ACV
- Incrementar el riesgo de formación de coágulos y pueden obstruir las arterias.
7. Realizar consulta con el médico especialista
Sin exagerar, es importante mantener control con el médico especialista para controlar el estado de salud en general. En el caso del Accidente Cerebrovascular, influye la edad y el historial médico familiar. Las enfermedades cardíacas y diabetes pueden ser influyentes en el riesgo de sufrir además un accidente cardio vascular, por ello es importante mantenerlas controladas.
8. Consumir vitamina D
La vitamina D es un nutriente fundamental beneficioso para muchas funciones corporales, ya que actúa como una hormona. Se ha estudiado que desempeña un rol en la prevención de accidentes cerebrovasculares.
De acuerdo a Estudios realizados, las personas que no consumen esta vitamina sufren mayores riesgos de sufrir un accidetne cerebrovascular. La vitamina D es antiinflamatoria además de ejercer funciones primordiales en el organismo.
Una de las formas de obtener vitamina D es a través de la exposición solar, y de algunos alimentos.
La Vitamina D3 con K2
En cuanto a la Vitamina D3 con K2, estudios de expertos y literatura médica afirman que la vitamina D3 puede contribuir a prevenir un accidente cerebrovascular.
Las personas con niveles bajos de vitamina D3 son más propensas a sufrirlo que quien tenga los niveles normales. La viamina D3 en forma de colecalciferol es la recomendada para consumir.
De igual manera la vitamina K2 contribuye a la absorción de calcio en los huesos, previniendo la acumulación de placas en las arterias.
¿Quiénes tienen mayor riesgo de sufrir ACV?
Ciertamente, los hombres tienen mayor riesgo de sufrir accidentes cerebro vasculares. Pero las mujeres, que tienen menor probabilidad de padecerlo, presentan mayor riesgo de muerte por ACV.
El tema étnico también parece tener influencia en las estadísticas de riesgo de sufrir estos accidentes. Entre la población hispana se presentan más casos que entre la blanca no hispana, asiática y africana.
En Estados Unidos los ACV son la cuarta causa principal de muerte entre la población hispana que reside en este país. De hecho, presentan factores de riesgo diferentes a otros grupos.
Los hispanos sufren accidentes cerebro vasculares a edades más tempranas. La edad promedio de las personas blancas no hispanas de sufrir un ACV es de 80 años, mientras que en los hispanos es de 67 años.
Las mujeres hispanas también son más propensas a sufrirlo que las mujeres blancas no hispanas. También presentan más riesgos de padecer las consecuencias, generalmente incapacidad motriz. En esta población, también se ha detectado una tasa más alta de diabetes, obesidad y presión arterial alta que en otros grupos.
Actualmente han crecido las alertas médicas y esfuerzos de prevención. Se ha tomado en cuenta la incidencia del consumo de cigarrillos, colesterol alto y diabetes. Esto trae como consecuencia el riesgo de sufrir un accidente cerebro vascular, pues se ha reportado un aumento de ACV en los últimos 10 años.
Importancia de una buena alimentación para prevenir los Accidentes Cerebrovasculares
Lo que comes y cómo lo comes, loss hábitos de vida, si incluyes en ellos o no el consumo de tabaco, alcohol y otras sustancias nocivas, sedentarismo, pocas horas de sueño y estados de estrés, son muy importantes para decidir si tus riesgos de sufrir un ACV son altos.
Es importante seguir estos sencillos consejos para mantener a raya los riesgos de sufrir un accidente cerebro vascular:
- Consumir grasas saludables como aceite de oliva, aceite de coco, frutos secos (nueces, almendras), pescados azules (atún, sardina, salmón), aceitunas y aguacate.
- Consumir frutas frescas, al menos dos veces al día.
- Consumir legumbres y vegetales frescos, dos veces al día.
- Optar por las carnes magras (aves, pescados azules).
- Consumir carbohidratos saludables .
- Beber al menos dos litros de agua al día.
Restringir el consumo de estos alimentos:
- Carnes de cordero, vaca y cerdo.
- Embutidos
- Sal o sodio. Evita agregar sal a las comidas preparadas y limita el consumo de alimentos que contengan exceso de sal como: quesos maduros, sopas y caldos deshidratados.
- Evitar los alimentos ricos en azúcares simples, como pasteles, gaseosas y golosinas.
Teresa, quien está sobre aviso con respecto a los riesgos de sufrir un accidente cerebro vascular, ya está tomando medidas para prevenirlo, mejorando su alimentación, eliminando el cigarrillo y manejando sus niveles de estrés.
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https://www.cdc.gov/stroke/docs/fs-hispanics-stroke-sp.pdf
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK430927/
https://edition.cnn.com/2017/01/11/health/stress-heart-attack-stroke-study/index.html