Síntomas Más Comunes De Deficiencia De Vitamina D

La vitamina D es una vitamina liposoluble, que el organismo utiliza para el desarrollo y mantenimiento normal de los huesos y muchas otras funciones que han sido bien estudiadas.

De acuerdo a los expertos, esta vitamina es importante para el destacado desempeño del sistema musculoesquelético y cuando existen bajos niveles de la misma, pueden presentarse ciertas anomalías. Entre ellas destacan, dolor crónico muscular y los huesos, además de cansancio.

De este tema, que causa muchas polémicas voy a hablar a solicitud de Helen, una seguidora de Texas. Ella es una madre de familia de mediana edad, que a mediados del verano fue operada de cataratas.

De acuerdo al especialista, esta enfermedad se produjo en ella tempranamente y se requirió implantarle un lente intraocular.

Helen me comentó, que desde muy joven disfrutó en familia o con amigos de espacios abiertos, practicando senderismo y camping. Ella me dijo, que le encantaban los días soleados y cálidos.

No obstante, a raíz de la operación se sintió con mucho miedo de ser intervenida nuevamente, y decidió evitar sitios abiertos. De hecho, decidió comprar algunos equipos y ejercitar dentro de su casa.

Aunque a las pocas semanas de este entrenamiento casero, comenzó a sentir cansancio alternado con dolores musculares.

Por ello, decidió comunicarse conmigo y solicitar mi opinión sobre las posibles causas de estas molestias. Yo le comenté, que determinados tipos de cataratas son ocasionadas por exposición prolongada a la luz solar. Pero le resalté, que era importante no abandonar la exposición solar, pensando en la síntesis de vitamina D.

De hecho, le envié un dossier donde le detallé acerca de la importancia de la vitamina D para nuestro organismo, incluyendo el sistema musculoesquelético.

Dada la importancia de esta vitamina sobre diversas funciones corporales, consideré importante compartir esta información en mi página.

Generalidades acerca de la vitamina D

La vitamina D es conocida como la “vitamina del sol” dado que, es posible sintetizarla en nuestra piel al exponernos a la luz solar.

Por medio de esta vitamina la concentración de calcio sanguíneo se mantiene en niveles adecuados. De esta forma, es posible favorecer el correcto desempeño del sistema musculoesquelético.

En años recientes han surgido intensos debates sobre los niveles de vitamina D necesarios para una adecuada salud. Asimismo, se han suscitado muchas proposiciones acerca de cómo saber si obtenemos cantidades suficientes, un tema realmente difícil.

Afortunadamente existe consenso en cuanto la importancia de la vitamina D para la salud. Algo indiscutible, es que si no nos exponemos a la luz solar o ingerimos alimentos o suplementos con altos niveles de esta vitamina, tendremos déficit de la misma.

Eso ocasionaría diversos problemas, porque la deficiencia de vitamina D puede ser perjudicial para huesos y músculos. Últimamente se ha debatido sobre la cantidad de vitamina D que necesitamos para mantenernos sanos, y sobre cómo saber si obtenemos la cantidad suficiente, y la verdad es que es complicado. Pero una cosa en la que los expertos están de acuerdo es que la vitamina D es vital para nuestra salud.

La Fundación Nacional e Internacional de Osteoporosis, destaca la existencia de una deficiencia de vitamina D en sangre cuando ocurren niveles inferiores a 30 ng/mL (nanogramos sobre mililitros) de vitamina D.

A su vez, la Sociedad Endocrina sugiere que se mantenga en sangre un rango entre los 40 a 60 ng/mL. Para ello, recomienda la ingesta de:

• 400 a 1000 Unidades Internacionales (UI) diarias en niños menores de un año
• 600 a 1.000 UI diarias en niños y adolescentes de 1 a 18 años
• 500 a 2.000 UI en todos los adultos.

Algunas pinceladas acerca de la carencia de vitamina D

Es importante puntualizar, que niveles bajos de vitamina D y la deficiencia de la misma son dos procesos diferentes. Una deficiencia de vitamina D se produce cuando los niveles de esta vitamina son extremadamente bajos.

Ocasionalmente, los síntomas no son evidentes, aunque si no se realiza tratamiento podría desencadenar efectos negativos sobre la salud. A saber, dolores a nivel del sistema musculoesquelético, además de osteomalacia en adultos y raquitismo en los niños.

De acuerdo a la ciencia, una carencia de vitamina D podría acarrear consecuencias a lo largo de la vida. Para determinar la prevalencia verdadera sobre la falta de vitamina D debe definirse un nivel en sangre de esta vitamina considerado suficiente para el mantenimiento de una adecuada salud musculoesquelética.

Así, para el Instituto de Medicina, niveles de esta vitamina entre 20 a 50 ng/mL son suficientes. De hecho, este rango coincide en un alto porcentaje con la opinión de los científicos europeos.

No obstante, existen algunas sociedades profesionales estadounidenses que estiman que debe existir un nivel no menor 30 ng/ml para una salud óptima del sistema musculoesquelético.

Según los expertos, la deficiencia de vitamina D consiste en presentar cantidades inadecuadas de vitamina D en el organismo. Según ellos, esto puede acarrear problemas de salud como la presencia de fragilidad ósea y debilidad muscular.

En algunas ocasiones, los pacientes no presentan síntomas y muchos médicos no acostumbran a comprobar de forma habitual, los niveles de vitamina D.

Formas bioactivas de la vitamina D

Debemos resaltar, que en los seres humanos la masa ósea se incrementa debido a la calcificación de los huesos durante la infancia y juventud. Se ha observado, que la masa ósea máxima se alcanza entre los 25 y 35 años. Este efecto está influenciado directamente por los niveles de vitamina D, cantidad de calcio ingerido y actividad física.

Según los especialistas, la vitamina D se obtiene a partir de la síntesis endógena en la epidermis de la piel. La condición para que esto suceda es la exposición a la luz ultravioleta B (UVB). Cuando esta incide sobre la epidermis, se produce vitamina D3 o colecalciferol.

Las fuentes externas de vitamina D están constituidas por los alimentos de nuestra dieta. Así, los alimentos de origen vegetal aportan vitamina D2 (ergocalciferol) y los de origen animal aportan vitamina D3 (colecalciferol).

Según los especialistas de la Universidad de Oregón, el colecalciferol y ergocalciferol son precursores biológicamente inactivos de la vitamina D. Por esta razón deben ser transformados a formas biológicamente activas a nivel hepático y renal.

Cuando se ingieren los alimentos, o bien ocurre la síntesis de vitamina D a nivel de la piel, ambas formas de esta vitamina ingresan al torrente sanguíneo. Posteriormente son transportadas hasta el hígado, ayudados por una proteína de unión a la vitamina D.

Una vez en el hígado se produce una reacción bioquímica que forma 25-hidroxivitamina D, denominado también calcidiol. Este compuesto constituye la principal forma de vitamina D circulante.

Por ello, la sumatoria de los niveles de 25-hidroxivitamina D2 y 25-hidroxivitamina D3 sanguíneo, son empleados como un indicador del estatus nutricional de la vitamina D.

Factores que inciden sobre la síntesis de vitamina D en la piel

Los investigadores han logrado determinar, que diversos factores influyen sobre el proceso de síntesis cutánea de vitamina D. A saber:

Edad

Muchos estudios han logrado establecer, que los adultos mayores presentan menores niveles de 7-dehidrocolesterol en su piel. De esta forma, una persona mayor de setenta años cuando se expone a igual intensidad de luz solar que una de veinte años, produce un 75% menos de vitamina D.

Concentración de melanina

Las personas con la piel más oscura (mayor contenido de melanina), necesitan mayor cantidad de exposición solar para sintetizar la misma cantidad de colecalciferol que aquellas con menos melanina.

Este efecto se produce por la capacidad, que presenta la melanina de absorber los fotones de luz solar.

De hecho se sabe, que el color de la piel muy oscura proporciona un factor de protección solar (FPS) de 8 a 30 en aquellas personas que nunca se queman.

Por ello, requerirían un tiempo de exposición a la luz solar 5 a 10 veces mayor, que otra con poca cantidad de melanina para sintetizar cantidades similares de vitamina D3.

Hora

Según los expertos, la hora del día también posee un papel importante sobre la síntesis de la vitamina D3.

Durante las primeras horas de la mañana y las últimas de la tarde, el ángulo con el que ingresan los rayos solares sobre la superficie terrestre es más oblicuo. Por esta razón, es recomendable tomar el sol desde las 10:00 am hasta las 3:00 pm

Empleo de barreras protectoras y bloqueadores solares

Se ha logrado establecer, que los productos para uso tópico que contienen protector solar pueden absorber las radiaciones antes de que éstas logren penetrar en la piel.

Según los especialistas, los productos que poseen protectores solares con factores superiores a 8 pueden disminuir hasta en un 95% la capacidad de la piel para sintetizar vitamina D.

A su vez, un factor de protección de 15, reduce la de producción de vitamina D en más del 98%. Además de ello, el empleo de prendas de vestir con manga larga, al igual que los sombreros de ala ancha, pueden reducir la síntesis de esta importante vitamina.

Época del año

Según los expertos de la Universidad de Oregón en los Estados Unidos, la cantidad de vitamina D producida al exponerse a la luz solar entre noviembre y febrero es escasa. En esta época correspondiente al invierno, los rayos solares penetran en la tierra con un ángulo más oblicuo.

Muchas personas lo denominan el “invierno de la vitamina D”. Esto produce una mayor absorción de la luz por la capa de ozono. Una situación similar se produce en los países del hemisferio sur con cuatro estaciones entre junio y agosto.

Esta condición ocasiona un verdadero problema para quienes dependen de la luz solar para obtener vitamina D durante el invierno.

Se ha observado, que entre enero y febrero los niveles alcanzan su mínimo. A nivel del hemisferio sur esto ocurre en el mes de agosto. Según los expertos, en esta época ocurre una alta incidencia de enfermedades virales como resfriado y gripe.

Este efecto estacional, está muy correlacionado con la latitud. De acuerdo a las observaciones, en latitudes superiores a los 37º al norte y sur del Ecuador, especialmente en invierno, la cantidad de radiación UVB recibida es menor.

Podemos mencionar a manera de ejemplo a Dinamarca, un país situado a 56°de latitud norte. Allí, durante el verano (15 de abril a 14 de octubre), la principal fuente de vitamina D es endógena.

En invierno (15 de octubre al 14 de abril) esto no ocurre, siendo la fuente de vitamina D alimentos como pescados grasos (arenque, caballa y salmón).

Absorción de calcio y fósforo en los huesos

Sin la vitamina D no es posible, que el cuerpo absorba adecuadamente el calcio y el fósforo. Ambos elementos, son determinantes sobre la salud del sistema esquelético.

La carencia de estos minerales incrementa el riesgo de dolor de los huesos. Además de ello, se genera una mayor propensión al padecimiento de fracturas óseas, debilidad y dolor muscular.

Se ha observado, que en los adultos mayores una deficiencia grave de vitamina D (valores menores de 10 ng/mL) podría propiciar un elevado riesgo de caídas.

Como se sabe, la piel convierte la radiación ultravioleta B en vitamina D. Sin embargo, también puede obtenerse a partir de ciertos alimentos. Según los expertos, los alimentos que más aportan vitamina D, son los siguientes:

• Pescado
• Chuletas de cerdo
• Setas expuestas a la luz solar
• Tofu enriquecido
• Huevos.

¿Cuáles son los principales síntomas de falta de vitamina D?

De acuerdo a los expertos, una gran mayoría de personas que presentan deficiencias de vitamina D no perciben ninguna sintomatología. Sin embargo, hay quienes sienten algunos síntomas, que incluso pueden estar asociados a otras patologías. Dentro de ellos destacan:

• Debilidad, dolor muscular y en los huesos
• Cansancio y debilidad muscular en zonas del cuerpo cercanas al tronco (parte superior de los brazos y muslos)
• Temblores musculares
• Presencia ocasional de espasmos(calambres) en algunos músculos del cuerpo
• Mayor sensibilidad al dolor y sensación de hormigueo en las extremidades (manos y pies)
• Tetania (calambres musculares), suele ser una de las primeras manifestaciones de raquitismo infantil. Se ha establecido, que su causa obedece a una concentración muy baja de calcio en sangre. Dicho desequilibrio, es ocasionado directamente por una carencia grave de vitamina D
• Los niños y adolescentes con carencia de vitamina D sienten dolor al caminar
• En niños de uno a cuatro años de edad una deficiencia de vitamina D ocasiona alteraciones a nivel del desarrollo el sistema esquelético. Ello tiende a producir desviaciones de la columna vertebral (escoliosis), piernas arqueadas o rodilla valga (se tocan entre sí).
• En los adultos mayores con deficiencias de vitamina D el tejido óseo tiende a ser más débil, en especial a nivel de la pelvis, piernas y columna vertebral. Esto es una situación de alto riesgo, sobre todo porque una simpe caída puede provocar fracturas de cadera.

Concluyendo

De acuerdo a lo que se observó la carencia de vitamina D es una deficiencia vitamínica, que se presenta comúnmente.

Podría llegar a afectar a personas de todas las edades, ocasionando cansancio generalizado y dolor en los huesos. Sin embargo, es más común que afecte a personas mayores de 65 años y a quienes poseen mayor cantidad de melanina en la piel.

Existen otros factores, que también ocasionan carencias de esta vitamina. Dentro de estos destaca la época del año, latitud, hora del día, empleo de barreras protectoras y concentración de melanina en la piel.

Afortunadamente, es posible solventar su carencia mediante el consumo de ciertos alimentos como pescados grasos, chuletas de cerdo, leche enriquecida y setas expuestas a la luz solar, entre otros.

También, existen diversos suplementos que pueden proveer cantidades suficientes de esta vitamina. Un suplemento recomendado es mi fórmula especial VITAMIN D3 + K2.

Para Helen la información recibida, la cual comparto con vosotros en el post, fue muy oportuna. Ella me comentó, que luego de analizarla decidió retomar sus hobbies preferidos al aire libre, empleando protección en sus ojos.

Asimismo, decidió incorporar en su alimentación una mayor cantidad de alimentos con elevados niveles de vitamina D. De hecho, no pasó por alto la oportunidad de emplear mi fórmula especial de vitamina D.

“La deficiencia de vitamina D suele pasarse por alto en los entornos ambulatorios y hospitalarios (…) Entre las poblaciones de alto riesgo se encuentran los residentes de los asilos, pacientes de edad avanzada, mujeres con osteoporosis, individuos afroamericanos/hispanos, pacientes hospitalizados, pacientes con enfermedad renal crónica, enfermedad hepática y síndrome de malabsorción”

Dr. Omeed Sizar

Si te ha gustado este artículo y tienes un interés sincero en aprender cómo puedes vivir más sano, me gustaría regalarte una copia de mi último libro #Yo Puedo con la Dra. Cocó.

Sí la página te da un mensaje de error es porque no has entrado la dirección bien. Vuélvelo a intentar, asegurando no haber dejado ningún espacio antes, después o entre las letras de tu dirección.