☑️ ¿Qué Es La Piel De Crepé y Cómo Se Puede Evitar?

Cuando la piel presenta un aspecto fino, frágil y arrugado, se le llama piel de crepé, ya que es una apariencia semejante al a veces llamado “papel crepé”, ese papel que tantas veces usamos para realizar manualidades. La buena noticia es que la piel de crepé no es una condición ni una enfermedad. Se trata de la respuesta natural al paso de los años.

Cabe destacar, que el cuidado que se le de a la piel en la juventud, va a ser determinante en su manifestación. Pues la piel de crepé no está exclusivamente relacionada con la vejez. Por lo tanto, se puede evitar o retrasar la aparición de la misma manteniendo hábitos de cuidados desde la juventud.

Quiero desarrollar este tema debido a la solicitud de Margaret, una seguidora de Baltimore. Ella es una fisioterapeuta de 48 años de edad. Al realizar contacto conmingo, me comentó, que siempre la piel de sus manos ha sido muy seca. Por tal motivo continuamente estaba pendiente de hidratarla. Actualmente ve con asombro como sus manos lucen con la piel muy deshidratada, con muchas arrugas finas y envejecida.

Margaret cree que esto es consecuencia del uso constante de jabón, alcohol y gel antibacterial que utiliza como medida de bioseguridad . Sobre ese aspecto en sus manos, una amiga le dijo que esa apariencia recibía el nombre de piel de crepé.  Margaret al hablar conmigo, solicitó información sobre cómo recuperar la lozanía en la piel de sus manos. Además, de que hacer para contrarrestar el efecto de estos productos, que va a seguir utilizando para cuidar su salud y la de los suyos.

De inmediato y con todo gusto, recabé la información que Margaret me solicitó. Debido a la importancia de su contenido, la comparto con todos en mi post.      

Generalidades sobre la piel

Fuentes médicas indican que, a partir de los 30 años de edad la piel comienza a presentar cambios de forma natural, afectando así las funciones que realiza este órgano. Por ejemplo, la función de barrera protectora se va debilitando. También, el intercambio de oxígeno en las células se hace más lento. La epidermis, la capa más superficial de la piel, con la edad pierde humedad y su elasticidad disminuye.

Se estima que la piel presenta un adelgazamiento de un 10 a un 50 %, entre las edades de 30 a 80 años. Esto ocurre inclusive en zonas de la piel protegidas del sol. Por lo general se relaciona la piel de aspecto crepé con la vejez, pero no siempre es así. La genética y el tipo de piel pueden determinar si una persona podría tenerla. Esta puede aparecer luego de los 40 años de edad.

La Asociación Estadounidense de Dermatología afirma, que la exposición a la radiación ultravioleta (UV) es la causa más común de daño prematuro en la piel. También, es una de las causas por la que se puede manifestar la piel de crepé. Con el tiempo la exposición al sol rompe las fibras de elastina, estas le permiten a la piel estirarse y luego volver a su posición normal.

Las fibras de elastina pueden repararse, pero con el tiempo terminan perdiendo esta capacidad. Para ilustrar la imagen, piensa en una cinta elástica que con el uso se va volviendo más distendida. A la piel de crepé en algunas publicaciones la mencionan como piel de elefante o piel de papel.

La piel de crepé puede parecer arrugada, pero se diferencia de la piel arrugada por envejecimiento en que también tiene aspecto de papel.  Mientras que la piel arrugada por la edad, no parece “papel crepé”.

Señales visibles del envejecimiento en la piel

El envejecimiento de la piel es el resultado de los daños ocasionados por el sol. Pero también de otros factores como la genética, alimentación y el descanso, pueden retardar o acelerar el envejecimiento. Entre las señales visibles del envejecimiento están:

• Las arrugas: son el primer signo del envejecimiento. Las mismas pueden empezar a aparecer desde los 25 años, las primeras lo hacen en el área lateral de los ojos y generalmente son finas. Mientras en los pliegues de la nariz y la boca se observan unas de las más profundas, que aparecen en el rostro
• La pérdida de volumen: el mismo se manifiesta con una apariencia de piel descolgada, pérdida de contorno y un aspecto facial flácido
• Una menor densidad: esto genera una piel más delgada y débil. A diferencia de las descritas anteriormente, la pérdida de densidad no se observa en áreas faciales, esta afecta a todo el cuerpo por igual.

Estas son algunas de las señales más comunes de envejecimiento. La piel de crepé es una consecuencia de todas ellas, ya que en esta afección encontramos una epidermis frágil, arrugada, delgada y propensa a sufrir lesiones.                           

Causas por las que se genera la piel de crepé

La piel de crepé puede afectar grandes zonas de la piel haciéndola más fina, frágil y delicada.

Este daño en la piel puede presentarse por:

• La exposición al sol o al uso de camas bronceadoras: La radiación UV con el tiempo rompe las fibras de elastina de la piel. Estas son las que permiten que la piel se estire y luego vuelva a su posición normal. Aunque las fibras pueden restaurarse, una radiación prolongada de rayos UV, pueden provocar que las mismas no se reparen por completo. Las personas con tono de piel claro son más susceptibles de manifestar piel crepé, arrugas e incluso cáncer, producto de la exposición a la radiación UV.
• Perder o ganar una cantidad considerable de peso
• La falta de una adecuada hidratación de la piel
• El uso de algunos medicamentos como la prednisona (medicamento antiinflamatorio)
• Ambientes contaminados
• El hábito de fumar
• La falta de sueño
• Una inadecuada alimentación
• El envejecimiento natural.

Tratamientos que puedes aplicar en casa para mejorar la piel de crepé

Aunque la piel de crepé es una señal frecuente de envejecimiento, también puede presentarse por motivos diferentes no relacionados con la edad. Por lo que existen varias formas de mejorar el aspecto de la piel fina y arrugada. De forma que dependen en gran medida de la gravedad del deterioro presente, así como de la causa que lo generó y de la zona del cuerpo donde se encuentre.

Acudir al especialista dermatólogo es fundamental, pues recomendará la mejor opción para un tratamiento específico, según sea el caso.

Existen muchas formas de mejorar el aspecto de la piel de forma natural. Por ejemplo, aplicando productos caseros que contengan compuestos como vitamina E, C, aloe vera, aceite de aguacate, entre otros. También hay una gran variedad de productos tópicos de venta libre que pueden ayudar a tratar la piel de crepé.

Algunos de estos productos contienen retinoides, que no son más que regeneradores celulares elaborados a partir de la vitamina A. Que potencia el desarrollo de la elastina y colágeno al neutralizar los radicales libres. Brindando un “efecto relleno” a la apariencia de las líneas finas, arrugas y poros dilatados.

Es necesario utilizar estos productos siguiendo las indicaciones del envase, y dejar de usarlos si se observa alguna reacción desfavorable como picor o sensación de ardor. Así como limitar el número de productos a utilizar y esperar el tiempo necesario para que actúen. Debido a que algunos de estos productos pueden tardar varios meses para empezar a mostrar resultados.

Otros tratamientos son a base de vitamina C estabilizada o pura. Donde la misma es tratada con procesos biotecnológicos que permiten una penetración en la piel que ayuda a obtener sus beneficios. Entre los que se destacan, la reparación del ADN de las células dañadas por el sol y la disminución de arrugas.

Tratamientos aplicados por el dermatólogo

Radiofrecuencia, ultrasonido o láser

Para tratar la piel de crepé el dermatólogo cuenta con dispositivos de radiofrecuencia, ultrasonido y de luz pulsada. Este último mencionado, es el tratamiento con láser. Estos dispositivos ayudan a tratar la piel de crepé desde adentro hacia afuera.

Estos tratamientos al aplicarlos, calientan pequeñas zonas de la piel e introducen energía en lo más profundo de la misma. Lo que ayuda a restaurar el colágeno, dando como resultado una piel más tensa. Las áreas del cuerpo que mejor responden a este tratamiento son el rostro y el cuello.

Actualmente gracias a la actualización de la tecnología, estos tratamientos se pueden realizar sin necesidad de aplicar anestesia.

Rellenos

Los rellenos, como Radiesse, han demostrado ser un procedimiento eficiente para tratar la piel con arrugas. El procedimiento consiste en inyectar el relleno en la piel, el cual realiza un efecto voluminizador de la misma. Este es un tratamiento relativamente no invasivo.

El Radiesse es hidroxiapatita cálcica, un componente presente de forma natural en el organismo. Este compuesto actúa recuperando el volumen en zonas del cuerpo que por efecto de la edad o pérdida de peso están deprimidas.

Cirugía

Por lo general, la cirugía es practicada en personas que han perdido una gran cantidad de peso y quedan con un exceso de piel crepé. Por ello, el cirujano recomienda realizar la operación y eliminar la piel sobrante. Se recomienda que las personas que deseen realizar esta operación lo evalúen muy bien, pues la misma conlleva algunos riesgos.

Cómo prevenir la piel de crepé

Existen algunos criterios que favorecen la protección de nuestra piel. Con la ejecución de los mismos podrás retardar o disminuir el efecto del paso del tiempo sobre la piel. Así como el daño causado por los rayos UV.

• Protección contra los rayos UV

Una de las formas más eficiente de evitar el desarrollo de la piel de crepé es protegerla contra la exposición de las radiaciones UV. Esto lo puedes hacer usando ropa que te cubra y no exponga mucha piel al sol. También aplicando sobre la piel expuesta al, un protector solar con factor de protección (SPF) de 30 o más

• Rutina personal

Es esencial tener una rutina personal del cuidado de la piel. Después de los 40 años de edad, la piel no produce igual cantidad de grasa para protegerse de los productos químicos, que pueden causar inflamación e irritación

• Hidratación

La aplicación de cremas tópicas que contienen retinoides, ayudan a reconstruir la elasticidad de la piel y aumentar el colágeno. Esto podría disminuir la posibilidad de manifestar piel de crepé

• Nutrición

Mantener una alimentación equilibrada, rica en antioxidantes tales como carotenoides, tocoferoles y flavonoides, que también incluya las vitaminas A, C, D, E, las del grupo B y ácidos grasos omega-3. Estos nutrientes fortalecen la piel al aumentar la producción de colágeno. Esto se traduce en mayor flexibilidad y elasticidad de la piel

• Remedios caseros

Los remedios caseros pueden generar un efecto de armonía y equilibrio que disminuye el estrés, colaborando con el buen funcionamiento de todo el organismo. Estas acciones son masajes en cara, brazos y piernas. Así como hacer ejercicio físico y la aplicación de mascarillas faciales hidratantes, entre otras.

Concluyendo

El envejecimiento de la piel consiste en dos procesos independientes, el primero es el envejecimiento interno, el cual está influenciado por el tiempo. El segundo es el envejecimiento externo de la piel, que se produce por la influencia del medio ambiente, principalmente por la exposición a la radiación ultravioleta. Pero también influye la mala alimentación, tabaquismo, contaminación y privación del sueño.

La prevención es la forma más eficiente para enfrentar los efectos externos del envejecimiento. Por otro lado, la mejor estrategia contra los factores internos, que son los radicales libres, es un estilo de vida regulado. Que incluya ejercicio físico, restricción calórica y una dieta nutricional equilibrada, rica en antioxidantes.

Cuando la piel presenta un aspecto fino y arrugado, se le llama piel de crepé. Este aspecto se puede generar por la acción de las radiaciones UV. Aunque también por factores como la genética, tipo de piel, falta de hidratación, algunos medicamentos y falta de sueño.

Existen diferentes tratamientos para la piel de crepé, dependiendo de la gravedad que presente y de la causa que lo originó. Así como de la zona del cuerpo donde se presentó. Se pueden aplicar tratamientos caseros que contengan vitamina E, C, aloe vera o aceite de aguacate.

También, en el mercado, existen productos naturales de venta libre creados para tratar las arrugas. Los dermatólogos, por su parte, utilizan dispositivos de radiofrecuencia, ultrasonido o láser, para tratar esta afección.

Margaret, mi seguidora, se mostró muy complacida con la información suministrada. Me comentó, que está incluyendo en su dieta más alimentos antioxidantes, e incrementó la ingesta de líquidos. Además, comenzó a utilizar cremas y lociones, tanto caseras como comerciales. Esto le ha devuelto la hidratación a la piel de sus manos, que ya no se ven afectadas por la limpieza acentuada de estos últimos meses.

“La nutrición y el envejecimiento de la piel siguen siendo un tema controvertido y conflictivo. Una estrategia prometedora para mejorar la protección de la piel frente al estrés oxidativo consiste en apoyar el sistema antioxidante endógeno, con antioxidantes que contienen productos normalmente presentes en la piel”

Silke K. Schagen, PhD

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