La ciencia, en su constante búsqueda de alternativas naturales, indaga permanentemente acerca de ciertos compuestos de importancia nutricional. Muchas veces algunos de esos compuestos suelen encontrarse en los lugares menos pensados. Algunos pueden formar parte de la piel de una fruta, una semilla, incluso en la cáscara de los huevos.
De la cáscara del huevo hablo, debido a la solicitud realizada por una seguidora de Colombia. Mariel, hace dos meses fue diagnosticada con osteopenia y realmente quedó sorprendida. Me comentó, que recientemente alcanzó la premenopausia y nunca pensó en que iba a padecer deficiencia de calcio tan rápidamente. Ella sabe que la osteopenia es la antesala de la osteoporosis y le gustaría elevar naturalmente sus valores de calcio. Y acudió a mí a fin de buscar asesoría relacionada con una fuente natural de calcio.
Al considerar su solicitud, decidí hablarle acerca de una fuente de calcio, que posiblemente muchas personas no han empleado. Por ello, le hice llegar información acerca de las propiedades y beneficios de la cáscara de huevo. Además de ello, le mencioné también algunos ejemplos científicos que han permitido demostrar las bondades de su empleo. Y finalmente le mostré técnicas sencillas de como aprovechar las cáscaras de huevo que permanentemente se desechan. Las personas en algún momento pueden padecer déficit de calcio, por ello decidí compartir esta información en mi blog.
Conociendo las riquezas de la cáscara del huevo de gallina
Muchos supervivientes de ciertas enfermedades, además quienes buscan una vida saludable e infinidad de nutriólogos, se interesan en alternativas naturales. Dentro de dichas alternativas, desde hace un tiempo ha venido destacando el empleo de la cáscara de huevo.
Se ha determinado que la cáscara de huevo, puede ser fuente de algunos compuestos con interés biológico. Entre ellos destaca su alto contenido de calcio, que oscila alrededor del 98,2%, contiene además pequeñas cantidades de magnesio y de fósforo. Según los expertos, el calcio del cascarón de la cáscara de huevo es la mejor fuente natural de calcio. De hecho, se ha estimado que se absorbe en un 90%, cifra que supera otras fuentes de calcio como la piedra caliza y el calcio de coral. Esto posiblemente se deba, a la similitud de la composición de la cáscara de huevo con la de nuestros huesos. Además de ello, se ha comprobado que también posee glucosamina, condroitina y ácido hialurónico.
De acuerdo a la ciencia, la cáscara de huevo proveniente de un huevo mediano, puede producir una cucharadita de polvo. Esta proporción puede aportar de 750 a 800 mg de calcio. Por lo general, se recomienda que las personas que padecen de osteoporosis ingieran diariamente 400 a 500 mg de calcio.
¿Cuales son los factores desencadenantes de la osteopenia?
Es importante destacar que, existen una serie de enfermedades que no permiten una adecuada absorción de calcio por el tejido óseo. Dentro de ellas se pueden mencionar: los trastornos alimentarios, la enfermedad celíaca y la enfermedad inflamatoria intestinal. Esta última incluye la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. Dichas enfermedades impiden alcanzar una masa ósea adecuada, al igual que la predisposición genética, favoreciendo una baja densidad ósea.
Por lo general, las personas que poseen niveles adecuados de masa ósea, en especial las mujeres, tienden a presentar osteopenia en la etapa de la menopausia. En este caso, la pérdida de masa ósea se debe al efecto producido por la disminución de estrógenos.
Se ha comprobado que, tanto la osteopenia como la osteoporosis no causan ninguna dolencia perceptible. Por ello, no es sencillo advertir de su existencia. De forma práctica un síntoma general es la pérdida de altura. Así, se sabe que el envejecimiento ocasiona que se pierda un promedio de una pulgada con respecto a nuestra estatura máxima. Sin embargo, mas allá de esta medida puede ser indicativo de que existe una deficiencia a nivel del sistema óseo. Sin embargo, la presencia de fracturas es el indicador de mayor relevancia de que estamos en presencia de una enfermedad o anomalía de nuestro tejido óseo.
Vale destacar que, si una persona mayor de 50 años cae desde una altura que no representa riesgos para la mayoría y se fractura, es indicativo de deficiencia mineral. Esto amerita además del tratamiento de la fractura, realizar una prueba de densidad ósea. De hecho, una persona con osteopenia es también susceptible de sufrir procesos de fractura.
Recordando algunos elementos acerca de la osteopenia
De acuerdo a los especialistas, la osteopenia es un proceso asociado a una disminución de la masa del tejido óseo. Al ocurrir esto los huesos tienden a perder fortaleza y son más susceptibles de sufrir rupturas. Sin embargo, la osteopenia es una situación con un grado inferior de pérdida de densidad mineral, inferior a la osteoporosis. Podríamos decir que esta enfermedad afecta cerca del 50% de los estadounidenses que poseen más de 50 años.
De acuerdo a los especialistas, la osteopenia posee principalmente dos causas:
- Incapacidad de alcanzar la masa ósea máxima: esto se refiere a la cantidad máxima de tejido óseo que una persona puede construir a lo largo de su vida, en función de su programación genética
- Pérdida de hueso luego de haber alcanzado el punto máximo de densidad ósea: es importante destacar, que la masa ósea máxima, en forma general se alcanza en los hombres a la edad de veinte años y en las mujeres a los treinta años
Prevenir la osteopenia
No es sencillo lograr la prevención de la osteopenia, sobre todo cuando está condicionado por la predisposición genética. Sin embargo, es importante la suplencia de calcio en la dieta durante la infancia, la adolescencia y la etapa juvenil. Esto debe ir acompañado de una adecuada cantidad de ejercicio. Además de ello, se debe evitar consumir cigarrillos y alcohol, porque ambos están asociados con el debilitamiento del sistema óseo.
Es importante, para quienes ya alcanzaron su masa ósea máxima, de acuerdo a las edades estipuladas, no bajar la guardia. Esto significa, mantener una dieta saludable contentiva de cantidades adecuadas de calcio y magnesio. Además de ello, la realización permanentemente de ejercicios que implican movilidad y soporte, tales como levantar pesas, caminar y correr. Estos ejercicios aeróbicos permiten mantener un adecuado equilibrio y fortaleza del sistema musculoesquelético.
Vale destacar que hay que estar muy atentos al seguimiento de los resultados de las pruebas de densidad ósea. De esta forma se podrá manejar adecuadamente el proceso de osteopenia y evitar que se genere la osteoporosis. Los expertos, sugieren repetir las pruebas de densidad ósea al cabo de dos años, cuando estas indiquen osteopenia. Esto permitiría un monitoreo más cercano de la situación y la verificación de los resultados del tratamiento.
De acuerdo a la Clínica Mayo, los tratamientos para la osteoporosis funcionan bien para la osteopenia. La mayoría de las veces, se prescriben medicamentos denominados bisfosfonatos, los cuales logran atenuar el proceso de deterioro óseo. Estos se acompañan con suplementos de calcio y vitamina D.
¿Ha sido evaluado el aporte de calcio proveniente de la cáscara del huevo?
De acuerdo a muchos estudios, se ha logrado corroborar que la cáscara de huevo incrementa la densidad del tejido óseo en personas y animales con osteoporosis. Un estudio publicado el 2003, en International Journal of Clinical Pharmacology Research, mostró un hallazgo interesante. De acuerdo a los análisis, los investigadores lograron determinar que la cáscara de huevo puede aportar estroncio y flúor. Además de ello, se ha corroborado que posee y bajo contenido de metales pesados nocivos como plomo, cadmio y cromo.
Un estudio publicado en agosto de 2020, en Journal of Dairy Science, mostró las evaluaciones realizadas sobre pan enriquecido. En él, se adicionaron cáscaras de huevo micronizadas (partículas inferiores a 10 micras), lisina, vitamina D3 y vitamina K. Así, mediante el análisis en laboratorio, se evaluaron los efectos de los componentes mencionados sobre la biodisponibilidad del calcio. Se observó, que el aporte de la cáscara de huevo aumentó los niveles de calcio en 2,5 veces, respecto al control. Esto demostró que la cáscara de huevos, puede emplearse como un ingrediente biofuncional para quienes requieran calcio fácilmente disponible.
De acuerdo a ciertos estudios experimentales, se determinó que el polvo de cáscara de huevos posee efectos antirraquíticos. Incluso se observó el incremento de la densidad ósea en animales de laboratorio ovariectomizados (ovarios extirpados), con osteoporosis. Otros estudios de laboratorio demostraron además que el polvo de cáscara de huevo permite la estimulación de los condrocitos (células sintetizadoras de colágeno) y el crecimiento de los cartílagos. Estudios sobre biodisponibilidad del calcio de la cáscara de huevo, en alimentación de lechones, demostraron su superioridad. Esto en comparación con el carbonato de calcio purificado de grado alimentario empleado de forma frecuente en la cría de ganado porcino.
Evaluaciones clínicas en mujeres
Estudios clínicos y experimentales, han corroborado que la cáscara de huevo ejerce efectos positivos sobre huesos y cartílagos. Por ello, se considera adecuado en el tratamiento de la osteoporosis.
De acuerdo a estudios clínicos realizados en mujeres posmenopáusicas y mujeres con osteoporosis senil, mostraron ciertos efectos positivos. Demostrándose que la ingesta de polvo de cáscara de huevo, es capaz de reducir el dolor y disminuir la resorción. Como se mencionó en entregas anteriores, la resorción ósea es el proceso mediante el cual los osteoclastos (células especializadas presentes en los huesos) descomponen el tejido óseo. Así que, al producirse un incremento en la actividad de estas células, se puede generar osteoporosis y otras enfermedades asociadas.
Estudios realizados por Instituto Nacional de Enfermedades Reumáticas, determinaron que la cáscara de huevo reduce el dolor de la osteoartritis. Se verificó además, el incremento de movilidad y la interrupción de la pérdida de densidad ósea en mujeres posmenopáusicas.
Otros estudios, donde participaron mujeres postmenopáusicas con osteoporosis, mostraron resultados positivos con la ingesta de polvo de cáscara de huevo. Su efecto se complementó con la incorporación de vitamina D3 y magnesio. Esto permitió el incremento de la densidad ósea y el reforzamiento de los huesos. De hecho, el polvo de cáscara de huevo, se comporta de forma más eficaz que el carbonato de calcio purificado. Por lo tanto, podría constituirse en una herramienta de primera línea, para reducir los riesgos de osteoporosis.
Cierto estudio realizado en mujeres holandesas posmenopáusicas, demostró que el polvo de cáscara de huevo mejoró la densidad ósea cervical. Esto fue comparado con un placebo y con el carbonato de calcio purificado. Se demostró, que solo el polvo de cáscaras de huevo logró mejorías significativas a nivel del cuello.
¿Cómo utilizar las las cáscaras de huevo?
No es ningún secreto que los aportes nutricionales de la cáscara de huevo son inigualables. En especial en cuanto a su contenido de calcio. Sin embargo, el empleo de las cáscaras debe estar rodeado de una serie de precauciones. Por medio de ellas, podremos evitar la adquisición de ciertas enfermedades bacterianas como la salmonelosis. Es importante que hagas un esfuerzo y adquieras huevos de granja. Esto lo recalco, porque las gallinas criadas en granjas, no consumen alimentos transgénicos y se alimentan de pastos naturales. Vale destacar que una parte de la metodología que describo, proviene de la experiencia de una organización benéfica de Brasil denominada Pastoral de Criança. Ella se encarga de ofrecer ayuda a comunidades que poseen altos índices de desnutrición. Se incluyeron además las claves de una alimentación segura impulsada por la OMS. Este método permitirá obtener un producto limpio y sin bacterias patogénicas.
¿Cómo realizarlo?
- En la medida que se vayan utilizando los huevos, separar las cáscaras y lavarlas con agua corriente tibia
- Secarlas con una servilleta de papel y colocarlas en un contenedor con tapa que se mantendrá en el congelador
- Una vez que se tengan de ocho cáscaras en adelante, lavar las cáscaras en agua corriente y sumergirlas cinco minutos en una solución de hipoclorito de sodio al 1%
- Extraer las cáscaras de la solución y enjuagarlas con agua corriente tibia
- Agregar un litro y medio de agua filtrada en un recipiente mediano y cuando comience a hervir, añadir las cáscaras de huevo y dejar hervir por diez minutos a fuego lento
- Extraer las cáscaras y colocarlas en una bandeja para que se sequen
- Triturar las cáscaras para separar la membrana blanca
- Colocar estas cáscaras sin membrana en una bandeja y llevarla al horno diez minutos a una temperatura de 100ºC
- Moler estos fragmentos de cáscara en un molinillo de café
- Guardar el polvillo de la cáscara de huevo en un recipiente limpio, completamente seco y con tapa. Es importante mantenerlo en un lugar fresco
- Emplea este polvillo en batidos de frutas, yogurt natural, en cremas de hortalizas o añadido en algunas recetas horneadas.
Nota
Es importante tener las manos muy bien lavadas al manipular las cáscaras, es además importante mantener impecables todas las superficies que se empleen para preparar los alimentos.
Cada cucharadita de este polvillo proporciona de 750 a 800 mg de calcio. Esta porción diaria es suficiente para un adulto, pudiendo distribuirse perfectamente en tres subporciones a lo largo del día. Procurar por lo tanto, no exceder de una cucharadita al día de este polvillo de cáscara de huevo.
Concluyendo
Se ha podido corroborar nuevamente, como los científicos han demostrado que de las cosas más sencillas se pueden obtener grandes beneficios. Vale destacar, que este tema de la cáscara del huevo, posiblemente para algunas personas resulte algo insólito. Esta propuesta de las cáscaras de huevo, ha sido de gran apoyo en muchos países donde los niveles de desnutrición y suplencia de fuentes de calcio a veces son inaccesibles.
El empleo de cáscara de huevo ha surgido a gran velocidad durante los últimos años. Muchas empresas a nivel mundial, elaboran una gran cantidad de suplementos nutricionales realizados con este compuesto. Sin embargo, con un poco de paciencia, disciplina y disposición podremos lograr disfrutar de los beneficios de la cáscara de huevo en casa. Ella es una fuente de calcio asimilable en casi el 100%, pues su composición es parecida a la de nuestros huesos y dientes. Además de ello, aporta algunos microelementos y elementos importantes como el fósforo, el selenio y el flúor. Su empleo como vimos, no solo es importante en la etapa de la postmenopausia, sino en todas las etapas de la vida.
Para Mariel, mi seguidora de Colombia, la información que le compartí, fue recibida con mucho aprecio. Ella aún no está posmenopáusica, pues solo apenas inicia esta etapa importante en la vida de las mujeres. Para ella, el haber leído acerca de las investigaciones y el empleo de la cáscara de huevo le animaron muchísimo. De hecho, ya tiene más de un mes utilizando cáscaras huevo de la granja familiar y nunca para de experimentar. Me comenta que allá en Colombia, existe un delicioso pan llamado Pan de Bono. Pues bien, su madre lo prepara muy bien y se animó por sus consejos a enriquecerlo con la cáscara de huevo molida.
“Las cáscaras de huevo contienen calcio, que es vital para la salud de los huesos. El calcio de la cáscara de huevo es un calcio sano y equilibrado debido a los otros minerales que lo acompañan. Es la mejor fuente natural de calcio, siendo la de más fácil digestión y absorción para nuestro cuerpo”
Elizabeth Masaba
Nutricionista de Uganda
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